Hola!
Bienvenidos a esta viñeta! Es un intento un poco extraño de hablar sobre Luna...
Alzas los dedos y tocas el aire. Trepas por las nubes que cubren el cielo. No hay nada, pero lo ves todo.
La transparencia es equilibro, es realidad.
Las cosas más pequeñas esconden verdades que solo tú puedes ver.
El resto no mira y no entiende, a pesar de que observa. Miran sin ver. Oyen sin escuchar. Tú aplicas tus sentidos. Conoces y razonas. Aprendes. Hay muchas formas de valor, muchas clases de inteligencia.
Nadie dijo que había que ser de una manera para ser feliz.
Te miran al pasar, y tú no dices nada. Tu cabeza cabila ideas más profundas que mirar a la gente. Porque te miran para verte por fuera; nadie lo hará por dentro. Y es dentro donde estás realmente.
Los límites de la piel no te impiden concebir cómo es realmente el tejido que forja las almas de los demás. Algunos son ásperos y duros. Otros fríos y escamosos. Los hay suaves y aterciopelados, o quizá crispados.
Por eso sabes que no hay nadie totalmente bueno, o totalmente malo.
Por eso sabes que Draco Malfoy es Slytherin de corazón, pero que nunca reconocerá que hay otra posibilidad.
Por eso sabes que solo Neville es más valiente que todos los demás, porque tiene un solo motivo con el que destruir el mundo.
Por eso sabes que Ginny admira, idealiza, pero no envidia a los demás. Porque tiene de dónde aprender. Y sabe que sólo siendo ella misma será feliz.
Por eso sabes cosas que nadie verá nunca.
Draco Malfoy nunca pensó hacer lo que está haciendo. Todo era hablar. Todo era oír. Pero no escuchar. No decir. Y sabe que tú lo sabes. Porque le miras y le traspasas. Y siente que no es nada si nada conoce.
Neville supo que las cosas no eran justas cuando dijo su primera palabra. Que llegaría el día en el que realizaría sus sueños, y podría dormir en paz. Porque no es el segundo. No es la alternativa. Es quien es por sí mismo. Y se encargará de recordárselo a quien lo olvidó. Sabe qué significa ser como tú, y jamás dudó.
Ginny aprenderá, conocerá, y se librará de la carga de la herencia. Superará sus miedos, y sus penas, y sacará lo bueno de ello. Y sabe que si estás ahí, será más fácil. Porque te ve y sabe qué significas. Aunque no te comprenda.
Tú eres volátil.
Crees en cosas que nadie ve. En cosas que nadie apuesta.
El aire susurra en tu oído secretos que nadie conoce. La luna te cuenta historias que nadie escuchó. Y así será siempre. Quien tiene que creerte ya lo hace.
Vuela, vuela, vuela…
Sé que es corto, pero lo tenía en la cabeza y no me lo podía quitar.
Me cuesta escribir sobre Luna, pero ésto es sobre ella, para ella.
Espero que el hecho de estar escrito en segunda persona no lo haya hecho un adefesio...
Puedes quejarte todo lo que quieras!
Nicole
