Odio que ATLA no me pertenezca. Es más, odio más al taradito de S.(como se llame) por querer seguir la segunda parte de la peli, y por querer cambiar cosas de Toph. No sé, lo digo porque me enojé y le empecé a contar como loca mis quejas a mi madre (la cual me miraba como si tuviera monos en la cara).
edit 11/02/2016: Esta historia está exclusivamente publicada en FF . net, si estás leyéndolo en otra página es porque ha sido plagiado. Ve a mi perfil para saber más.
Linduras, escribo esto porque caminando por los pasillos de mi cole, agarrada del brazo de mi hermanita, se me ocurrió. No sé, pero es un drabble que me encantó escribir :3 (y encontré, que en un drabble hay 600 palabras Cx)
Y avisooooo, el 4 de febrerito cumplo añitos. Si quieren darme a Toph cumpliendo 15, háganlo. Cumpliré lo mismo xD. Y sin más blah, lean c:
Lo más incómodo.
By, Nieve Taisho.
—¡Espíritus, Toph! Lo siento, lo siento, me voy, me voy… lo siento… perdón…
—¿Eh?
Sokka acababa de abrir la puerta del cuarto de Toph, en su hospedaje en la casa de Iroh.
Buscaba a su amiguita Toph, para hablarle de algo más importante que nada. Bueno, era técnicamente una conversación delicada sobre el beso que le dio "accidentalmente", hace tres días; en su tienda de tierra antes de llegar donde Iroh.
Tenía que admitirlo; estaba aún con Suki, y besar a Toph fue como atacar a Azula por detrás. Traducido como: el acto más valiente y genial de tu vida.
Y es que Toph era tan…
No, waaait. Si lo pensaba, era justo como lo estaba viviendo ahora. Lo que veía ahora.
Entró sin avisar a su cuarto, en dónde Toph se cambiaba por el calor.
Fue hermoso, la encontró levantándose la camisa; hasta el cuello.
Y ella, sin saber una mierda. Y sin nada debajo.
—¿Qué dices?
Sokka comenzó a disculparse tan rápidamente, que el sudor, el fuerte calor de su cara (de todo su cuerpo, más bien) y el temblor que sentía no era normal.
Pero, lo que era peor: Toph ya no era una señorita; tenía dieciséis, y Sokka le estaba viendo lo que según Katara, le había faltado.
Toph soltó las solapas de la camisa, dejando de levantarla. Leyó las descontroladas vibraciones de Sokka y analizó lo que había pasado.
—Oh…—una sonrisa maliciosa atravesó la cara de Toph—. ¿Qué pasa? ¿Te gustó lo que viste?—preguntó, riendo.
Sokka tragó. Un nudo enorme en su garganta se volvió a formar.
—¿Q-Qué? ¡N-No! Es que… ¡Por Kuruk! ¿No te pones… nada… abajo?—preguntó, sonrojado y bajando la cabeza. Evitando ver eso.
Toph sonrió. Sí, ella tampoco olvidó el suceso de hace tres días.
—¿Sabes qué? Me pondré algo cómodo. Esta camisa se me pega.
—Toph…
—Es que hace calor… ¿no tienes calor?
—…
Sokka retrocedió un paso. Ella se sentó en la cama y buscó un top. Sokka retrocedió dos pasos. Cinco pasos más y sales, Sokka. Cinco más, cinco más, cinco… más…
Sin darse cuenta, Toph se estaba cambiando detrás de él.
Un paso más.
Se puso un top. Otro paso. En total: faltan 3.
Huye Sokka. Huye, huye, huye, huyeeeee…
—¿Y ahora qué pasa, señor autocontrol?
Mierda.
—Toph… yo…
—Talla 38B.
Silencio súper incómodo.
—¿Qué dijiste?
—Katara dice que soy esa talla. Ahora miden el busto. Y dicen que esa talla es la más grande. Genial, ¿no?—sarcasmo.
Sokka huyó del cuarto, haciendo reír a Toph.
Lo más incómodo que Sokka no superará jamás es haber visto el busto de Toph. Y hasta ahora, que son minutos después, él jamás querrá olvidar la información que ella le dio.
La usará en su contra muy seguido.
Esto de escribir drabbles no es lo mío. Me voy al lado del oneshot. Pero mis amigas dicen que lo detestan porque las deja con el suspenso o la angustia (les gustan las historias largas, y saben que yo no soy de esas).
Véanlo como viñeta.
Estoy hablando mucho, o escribiendo. Ñeh. Estoy aburrida y quiero chocolate.
Escribiré sobre eso :3
Bye, sexys bitches x3
Nie, la que escribe mucho y actualiza poco ;3
