Los personajes de Candy Candy no me pertenecen a kyoko mizuki / Yumiko Igarashi, la historia es originalmente de mi imaginación es decir completamente mía.

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Solamente Tú

Albert sentía que el corazón le estallaría, no sabía si de alegría o de coraje, era una total confusión de sentimientos encontrados, pero que podía hacer si ya estaba decidido. La cabeza le daba vueltas, así que decidió tomar un poco de whisky para relajarse un poco. Se lo tomo de golpe sintiendo un ligero ardor en la garganta, ese líquido recorriendo en su garganta le hacía sentirse satisfecho o eso suponía en momentos de tensión como este. Así con una media sonrisa dibujada en el rostro se dejó caer en el sofá de su despacho. Cerró los ojos, aspiro profundamente para calmar el nerviosismo que inundaba todo su ser en este momento y se quedó profundamente dormido.

Estaba profundamente dormido, no sabía por cuanto tiempo había estado así pero sabía que era hora de despertar y lo sabía por qué escuchaba dulces vocecitas gritando su nombre una y otra vez, así que con toda la tranquilidad abrió los ojos y se puso de pie para dirigirse a abrir la puerta del despacho para ser recibido con un enorme y efusivo abrazo devolviéndole un poco de la alegría que hace un par de horas le fue quitada.- tio, tio albert! – el rubio sonrió a sus pequeños sobrinos y se puso en cuclillas para estar a su altura- se puede saber pequeños tornaditos por qué tanta emoción- los pequeñitos solo atinaron a reír fuerte y dinámicamente, así que el mayor de ellos con una sonrisa en el rostro le respondió- tio te tenemos una gran noticia- el rubio curioso alzo una ceja- enserio? Y se puede saber cuál es esa gran noticia? Me imagino que debe ser una muy buena para ponerlos en ese estado- tio albert! La tía candy llega en 3 semanas – gritaron los tres pequeños dando pequeños saltitos por todo el despacho, dejando a un albert pálido y sorprendido sin poder emitir palabra alguna y sin poder moverse. –tio acaso no te alegras de que la tía candy vuelva?- pregunto Anthony el más pequeño de sus sobrinos- el rubio con la voz temblorosa solo atino a responder- chicos hablaremos de eso más tarde, porque mejor no van a jugar al jardín- los tres chicos muy alegres salieron del despacho corriendo por todo el pasillo, estaban muy felices por la noticia que la tía abuela elroy les había dado esta mañana.

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Rosemary y la tía elroy tomaban él te amenamente en una pequeña palapa del jardín mientras los pequeños jugaban.

-los niños están muy felices! No los había visto tan alegres desde hace mucho

-sí, la noticia les ha caído muy bien, ellos quieren mucho a candy y sufrieron mucho cuando ella se fue y ahora que saben que regresa eso los ha puesto como unos torbellinos, están muy contentos (dijo la rubia con una enorme sonrisa mientras miraba a los pequeñitos rodar por el césped)

-estoy muy feliz que candy regrese pero al parecer alguien no está muy contento que digamos (expreso la tía haciendo señas a Rosemary para que volteara a ver a la persona que se dirigía hacia ellas)

Albert quería corroborar que lo que habían dicho sus sobrinos era verdad. Después de que salieron del despacho se había quedado a analizar la situación y llego a la conclusión que a lo mejor todo era producto de la imaginación de sus pequeños sobrinos o bueno de eso quería convencerse así mismo. Así que decidió hablar con su tía y su hermana para salir de dudas. Salió al jardín donde las dos se encontraban tomando el té y con pasos agigantados se encamino hacia ellas, quería verse tranquilo pero la verdad es que no podía estarlo, no sabiendo que candy regresaría, el solo hecho de imaginarlo sentía que todo su auto control se iba a la basura.

-se puede saber que broma es esa, de que candy volverá? – Refunfuño el rubio poniendo ambas manos fuertemente sobre la mesa-

-buenos días William! si, estamos muy bien –le dijo sarcástica la tía elroy dando un sorbo a su taza de té- y con respecto a tu pregunta… no sé por qué te sorprende tanto, si no mal recuerdo ella es tu mejor amiga o no? – le pregunto un poco burlona la tía ya que ella sabía el amor que ese par se tenía antes de que ella se marchara, pero los dos eran tan… tan ciegos que ninguno pudo ver más allá de aquella amistad, pero todos lo sabían y se daban cuentan en sus actitudes, expresiones entre ellos… hasta los pequeños "archie, Anthony y stear" se habían dado cuenta y es por eso que comenzaron a llamarla "TIA CANDY" estaban ilusionados en que algún día su tio y ella pudieran ser novios y casarse pero la decepción de ellos llego cuando ella se mudó a Londres, estaban devastados, los niños dejaron de sonreír y hasta de jugar por tres semanas hasta que llego aquella carta que les devolvió su sonrisa, aunque nadie sabe el contenido de aquella carta, nadie sabe qué fue lo que les escribió que les devolvió el ánimo de golpe por que los 3 pequeños la habían guardado en un cofrecito bajo llave y decían "La tía candy nos encargó esta gran misión" algo que nadie en su más sano juicio entendía- la tía dio una pequeña sonrisita recordando aquella vez que intentaron abrir el cofrecito para leer aquella carta que les causaba tanta curiosidad y como de algún modo terminaron llenos de harina y con olor a zorrillo.

- tía que es tan gracioso? Acaso le parece graciosa mi pregunta? –pregunto un rubio enfadado sacándola de sus pensamientos

-William no sigas con esta tontería, no sé por qué te sorprende mejor debes preocuparte en tu NOVIECITA –le dijo la tía enmarcando esas palabras-

-tía… Alice no tiene nada que ver en esto

-claro que si además creo que te busca -le dijo señalando a la joven que caminaba hacia ellos sonriente y elegantemente, haciendo voltear a su sobrino- será mejor que dejemos este tema por finalizado.

Albert mientras veía acercarse a su novia Alice -una joven alta, de piel dorada, ojos cafés dorados, con una larga cabellera castaña y con un cuerpo de modelo- no podía entender por qué le afectaba tanto saber que candy regresaría, si él amaba a su hermosa novia, quien le había devuelto la esperanza en el amor y le había enseñado otra manera de ser feliz además que ser la mujer ejemplar para cualquier hombre, y que decir de sus gustos ellos compartían los mismos, así como también algunos de sus pasatiempos, habían encajado tan bien que fue inevitable que el amor floreciera entre ambos. Pero por que ahora su pasado tenía que venir a arruinar todo –pensaba el rubio-

-buenos días señora elroy, Rosemary… -haciendo una pequeña venia ante las damas quien respondieron de la misma forma-

-princesa buen día! Que alegría que estés aquí –le dijo albert dándole un pequeño beso en los labios y ofreciéndole asiento as u lado-

Alice estaba por contestar cuando los 3 pequeñines llegaron efusivamente a abrazar a su tio interponiéndose entre la pareja y diciendo una y mil cosas –tio vamos a jugar, tio te gustara… tio ven… tio candy estará… tio cuando…. Tio, tio y tio esto y tio lo otro- sin darle tiempo al rubio de contestar, pero una perspicaz Alice escucho aquel nombre, aquel nombre que desato curiosidad en ella.

-quien es candy? –Pregunto mirando fijamente a su novio, esperando la respuesta-

-es… -estaba por contestarle cuando su sobrino archie se adelantó a decir- candy es nuestra tía!

-Alice un poco más aliviada pregunto- entonces es tu pariente, porque no me habías dicho que tendrías visita- insistió la castaña

-no! La tía candy es una amiga de mi tio albert y si me lo preguntas son muy pero muy, muy amigos – dijo el pequeño stear guiñándoles un ojo a su primo y hermano, mientras a la NOVIECITA de su tio se le borraba la sonrisa del rostro- Alice al darse cuenta de su reacción se recompuso y sonrió tratando de disimular su enojo, se levantó y tomo del brazo a albert en señal de que necesitaba hablar con él, mientras Rosemary y la tía elroy se mordían la lengua para no soltar las carcajadas. Cuando ellos se alejaron lo suficiente no evitaron reírse un poco por la broma de los pequeñines.- stear no debiste decir eso, tu tio albert se enojara mucho contigo- dijo rose retando a su sobrino- tía tenía que hacerlo es mi misión- dijo un sonriente stear mientras su hermano y primo le hacían señas de que había hablado de más.

La tía elroy y Rosemary se regalaron una mirada y ahora comprendían las palabras de los pequeños y se imaginaban un poco del contenido de la carta que tanto cuidaban… así que dada la situación no hicieron nada por castigarlos por su mal comportamiento con la novia de su tio albert ya que ni ellas mismas la soportaban, en verdad era muy bella pero muy superficial, además todos sabían que albert no la amaba como el mismo se hacía creer, todos sabían que su corazón era ocupado por una rubia pecosa a la que todos querían por su forma de ser, era tan alegre, sencilla, honesta e infinidad de cosas con las que se ganaba a todas las personas que la conocían.

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Alice estaba al borde del descontrol sus ojos irradiaban furia al escuchar lo que albert le decía – crees que solo fue un mal entendido? Tu sobrinito querido lo dejo muy en claro tú y ella son muy amigos, como quieres que me tome eso William? explícame por qué no logro entender, además tus sobrinos me odian desde que me los presentaste he sido víctima de infinidad de bromas y travesuras de ellos- albert rodo los ojos sentía que Alice estaba exagerando- Alice stear solo lo dijo de broma, además ellos son traviesos con todo mundo, ellos solo están celosos de que les quiten a su tio, ellos te adoran- la tomo por la cintura con ambas manos mirando sus bellos ojos cafés dorados para tranquilizarla ya que no quería entrar en detalles de las travesuras de sus sobrinos que parecía no les agradaba ni una pizca su novia- está bien, pero William porque nunca la mencionaste?- le dijo Alice mientras enredaba sus brazos en el cuello de el- porque para mí no tiene importancia es… es algo del pasado solo es… fue mi mejor amiga, mis sobrinos se encariñaron con ella y miraron fantasmas donde no había nada más que una amistad- le dijo el rubio tratando de sonar convincente tanto para Alice como para el- Alice un poco más tranquila le dio un suave beso en los labios- te amo William- aferrándose al fuerte pecho de su novio – yo también te amo Alice- Alice suspiro y le dijo- William cuando le diremos a nuestras familias de nuestro compromiso ya no quiero seguir ocultando el anillo que me diste- le decía mientras l miraba fijamente a los ojos – Alice muy pronto solo necesito tiempo- le dijo el rubio mientras ante sus ojos pasaban rápidamente escenas del pasado que un día compartió con candy!

continuara...