Hola, soy nueva en esto del fanfic pero espero que tengan comprensión y piedad de mi.

Este fic es de kuroshitsuji NO YAOI, no soy homofóbica, incluso respetos a las personas gays, pero no me gusta que siempre anden haciendo parejas gays de otros animes ( dragon ball, yu gi oh, code gueass etc) aun así respeto las ideas de los demás.

Bien este fic de Kuroshitsuji se basa en la linea temporal de la primera temporada, pero no con ese final. La segunda temporada no cuenta para mi en esta historia, pero si la tercera y algunos acontecimientos del manga.

Pues sin perder tiempo, comencemos esta historia.

EL CUERVO Y LA LECHUZA.

Capitulo 1 Destrozos

El sol iluminaba los jardines de la mansión Phantomhive, dando inicio a un nuevo día de trabajo en esta casa, donde los destrozos y descuidos provocados por los sirvientes se hacían presentes desde temprano y un mayordomo intentando no perder la paciencia trataba de reparar dichos destrozos.

-Perdóneme señor Sebastían- dijo Finnian. El cual había destrozado las rosas blancas con un poderoso insecticida.

-No me regañe señor Sebastían – dijo Maylene. La cual había roto la nueva bajilla de porcelana traída de la India.

-¿Cree que use mucho fuego? - dijo Bard . Él cual había quemado otra vez la cocina.

Sebastían ya estaba hasta el tope de sus lloriqueos, y hasta mas de una ocasión le vinieron las ganas de mastarlos a sangre fría, pero tenia que recordar que no podía hacerlo ya que se vería mal en un mayordomo.

Asísi que quito la hierva muerta del jardín y planto nuevas semillas, luego ordeno una nueva bajilla, y por ultimo reparo la cocina y preparo el desayuno que consistía en huevos con tocino, pay de limón y jugo de naranja con mandarina recién exprimido.

Después de terminar o más bien dicho arregla destrozos, Sebastian reviso la hora y vio que ya era tiempo de ir a despertar a cierta persona.

Subio las escaleras y se dirijo a una habitación con una puerta de color café claro, entro a la habitación con silencio ya quien la habitaba seguía durmiendo. Fue directo a la ventana para abrir las cortinas y dejar entrar la luz, pero en el viaje callo al suelo.

-Maldito peluche- dijo Sebastian en silencio mientras quitaba un conejo con un parche de su camino. Se levanto con mucho cuidado y corrio las cortinas.

Dio media vuelta cuando una almohada golpeo su rostro y unas risillas sonaron por la habitación.

-"Maldito niño" - dijo en su mente

En la habitación se podía ver una cama vacía con las cobijas hechas jirones y varios juguetes regados a su alrededor, se podía apreciar que era una habitación de un niño de tres años.

-Joven – dijo Sebastian – Necesita arreglarse.

-No – dijo un niño pequeño de piel clara, cabello café y ojos verdes, podemos decir que un mini Ciel.

-No le pregunte, es una orden.

-Haber si me atapas.

El pequeño niño comenzo a correr por toda la habitación, mientras que Sebastian solo se limito a observarlo y en un movimiento rápido atrapo al niño y lo sento en la cama.

-¿Qué? - dijo el pequeño niño sorprendido

-Bien – dijo Sebastian – Ya que gane el juego, es hora de ponerle su traje.

-¡No!

-No se mueva

Sebastian desvistió al niño e intento ponerle un trajecito azul marino, pero el niño no se paraba de mover. Aun así Sebastian no dejaba que el niño le ganara.

-Joven amo – dijo Sebastian ajustándole el saco– Las cosas serian más rápidas si se quedara quieto.

-¡Ya me quiero ir! - exclamo el niño

-Si me permite, ya casi termino

Sebastian ya se había enojado y el niño impacientado, así que al pequeño se le ocurrio una idea y dijo:

-Sebastian ¿qué es eso? ( señalo a la nada)

-¿Ehh, a qué se refiere? - dijo este mirando.

-Eso, lo de ahí.

-Ahí no hay nada- Sebastian volteo al niño y se sorprendio porque ya no estaba ahí. - ¿Qué diablos?

Recorrio el cuarto con sus ojos y noto que la puerta estaba abierta "Lo matare en uno de estos días "

Salio del cuarto y busco la presencia del niño, la cual ya estaba en el comedor. Así que sin mas remedio iría a atender a los amos en el comedor.

-¡Sebatian! -grito una niña de tres años que corrio a abrazar su pierna.

La niña tenia tez blanca, cabello rubio, ojos azules y además vestía con un lindo vestido de color verde.

-Señorita Rachel, ¿me haría el favor de soltarme? - dijo Sebastian lo más calmado que pudo.

-Perdón – dijo la niña mientras lo soltaba.

-La llevare al comedor junto con su hermano Vincent.

-Esta bien – dijo la pequeña con una sonrisa.

Al llegar al comedor Sebastian ayudo a la pequeña a sentarse y después aparecio Elizabeth.

-Buenos días Sebastian- dijo ella, mientras iba a su asiento.

Todos ya estaban en el comedor excepto la cabeza de la familia, dicha persona entro al comedor con un aire de cansado. Tenia ojeras en los ojos, cabellos desarreglado al igual que su ropa.

-¿No durmió bien amo? - Pregunto Sebastian

-¿Parece? - dijo Ciel con ironía mientras se sentaba a lado de Lizzy.

POV. SEBASTIAN.

¿Se preguntaran quienes son eso niños y que hace la señorita Elizabeth en la mansión del amo? Yo les explico.

El joven amo al cumplir 17 años contrajo matrimonio con la señorita Elizabeth y la trajo a vivir a la mansión y formaron una familia con dos "molestias" es decir con "lindos" gemelos aunque no lo parezcan : Vincent y Rachel. Nombres que pertenecieron a los padres de mi amo, y fue sugerencia de la Señorita Elizabeth ponerles a las criaturas.

En cuanto a mi, sigo sirviendo al joven amo, soportando las ganas de asesinar a los sirvientes incompetentes y ahora debo de encárgame de los niños.

El amo todavía tiene la sed de venganza, que ha aumentado en estos años. Nunca creí que el amo siguiera con la obsecion de venganza, y para ser sincero yo pensaba que con su familia olvidaría la venganza como otros humanos, pero fue lo contrario con el amo.

Aun así, yo seguiré aumentado esa sed para darme el mejor festín de mi larga vida demoniaca. Sin embargo yo tengo ahora que encárgame de los niños y de otros deberes.

POV. NARRADOR

-Señores Phantomhive – dijo Maylene entrando al comedor.

-¿Qué necesitas? - pregunto Ciel

- No se como decirlo, han sido buenos conmigo en especial usted joven amo y no es que los odie pero...

-¡Ve al grano!

- Necesito que me permita dos semanas libres.

-¿Por qué esta petición de repente?

-Bueno...¿cómo se lo digo?Habrá una convención de libros en Italia y estarán unos de mis autores favoritos.

-No veo cual es el problema, tienes permiso.

-¡Muchas gracias joven amo!

-Puedes irte ahora mismo. Sebastian ayúdala para partir.

-Como ordene – dijo Sebastian haciendo reverencia y acompañando a Maylene fuera del comedor.

-¡Eres muy amable Ciel -dijo Lizzy dándole un beso en la mejilla.

Bueno este es el capitulo 1, como verán no trae mucho de interesante, pero es la introducción al tema.

Lo mejor vendrá más adelante, si tienen alguna queja, sugerencia, opiniones o ideas para este fic, los acepto con mucho gusto.

Por cierto, posiblemente me tarde en actualizar este fic ya que acabo de empezar los estudios y ya saben que consume todo el tiempo, sean pacientes porque no pienso dejar este fic.