Summary: Huyendo de una mujer encontró a otra, no sabia absolutamente nada de ella, solo que tenia la voz mas hermosa que había escuchado, y de que ella, era lo que tanto estaba buscando. [AU]

Disclaimer: Los personajes de Twilight son propiedad de Stephanie Meyer.

Nota: La falta de que hacer y un golpe repentino de "inspiración" me traen de vuelto por aquí, espero que esta nueva historia sea de su agrado, sin nada mas importante que decir, las dejo para que lean.


MI MUJER PERFECTA

By. Yurika Mustang

Capitulo Uno

-*-

Definitivamente comienzo a detestar a mis amigos, todo esto es su culpa, no se porque les hice caso y me fui a meter con una mujer como ella, tal vez fue por la presión o simplemente quería algo de compañía, no estoy seguro, pero lo que si tengo absolutamente seguro, es que ya estoy cansado de ella, llevamos dos meses saliendo y ya pienso terminar con esta absurda relación. Y es que, no se en que demonios estaba pensando cuando decidí empezar a salir con Tanya Denali, aunque tengo que admitir que es una mujer guapa, esta bien, completamente despampanante, no es mi tipo de mujer, alguien tan controlador, egoísta y superficial no es definitivamente el perfil de mujer ideal para mi.

Y así es como me encuentro en estos momentos, huyendo de ella, escondiéndome de la que se supone es mi "novia" solo porque no la soporto, mucho menos si piensa que voy a salir en una cita doble con la insoportable de su amiga Jessica Stanly y su novio Mike Newton. Me encuentro vagando por los lugares de la universidad donde estoy seguro a ella jamás se le ocurriría buscarme, es mas, ni yo me he pasado por estos lugares antes, y es que aunque me encanta la música, el bloque de artes esta totalmente lejos del de medicina.

Caminaba mas tranquilo al pensar que Tanya estaría buscándome en cualquier lado menos este, cuando llegue al final del pasillo empecé a escuchar música, nada raro estando en el bloque en el que estaba, pero lo que me llamo la atención fue la voz, una hermosa y melodiosa voz estaba cantando acompañada de las notas de un piano, una canción que me identificaba bastante con el tema del amor. Y ¿Si fuera ella? de Alejandro Sanz. Sin pensarlo dos veces, di media vuelta y regrese por el pasillo, buscando el salón en donde esa perfecta voz estaba interpretando una de sus canciones preferidas, tenia que saber quien era la chica que estaba cantando, sin saber el motivo, tenia unas ganas irrefutables de conocer a la persona a quien pertenecía esa voz tan angelical.

Camine unos cuantos metros más, hasta dar con el salón donde se producía el sonido, la canción ya estaba finalizando, pero cuando puse la mano en el pomo de la puerta, la agonía llego a mi, al escuchar esa otra voz que tanto escalofrió me causaba.

— ¡Eddy! Ahí estas mi amor, te he estado buscando desde hace una hora ¿Qué haces aquí? —la misma pregunta tendría que hacerle a ella, estaba a punto de responder cuando la puerta donde estaba la hermosa voz se abrió.

Luego sintió como alguien se chocaba estrepitosamente contra él, perdiendo el equilibrio por el golpe, antes de que cayera, él reacciono y la tomo en brazos, una descarga le recorrió el cuerpo cuando toco a dicha persona sin saber el porque.

— ¡Lo siento! No pensé que había alguien al otro lado de la puerta —dijo dicha persona mirando al piso.

¡Ella era! Pensó Edward, esa era la dueña de esa angelical voz. Lentamente la chica levanto el rostro y Edward se quedo estupefacto, era la mujer mas hermosa que había visto en la vida, tenia los ojos mas preciosos que tuvo el agrado de apreciar, eran de un chocolate profundo, mostraban una inocencia casi imposible de imaginar en una mujer hoy en día, su rostro tenia forma de corazón y sus mejillas estaban sonrojadas, dándole un toque de niña espectacular, su cabello del mismo color que sus ojos, le caía suavemente por el rostro dándole un toque perfecto. Se dio cuenta de que aun la tenia abrazada y de que sentía como su hubiera nacido para estar siempre ahí, entre sus brazos, tenia que conocerla como fuera.

— ¿Estas bien? — logro articular después de la inspección a ese ser perfecto y de aunque contra su voluntad soltarla del abrazo, ella lo miraba algo perdida

— Si, perdón, ¿esta usted bien? — le pregunto ella algo nerviosa

— Estoy bien, no hay problema, ¿como te lla…? —

— ¡Deberías tener mas cuidado niña estúpida! Casi lastimas a mi Eddy — Edward bufo, odiaba ese estúpido apodo, además sabia que el comentario de Tanya había sido mal intencionado, siempre lo eran

— Yo… lo siento… no era mi… — empezó a balbucear la chica perfecta, poniéndose mas roja de lo que estaba, yo iba a interferir cuando alguien salió del salón nuevamente y nos interrumpió

— ¡Aquí estas! ¿Qué paso con los apuntes? ¿Los trajiste? — pregunto un chico con apariencia de unos dieciséis o diecisiete años cuando mucho

— ¡Hay Seth lo siento! Es que me tropecé con este chico y bueno, ya sabes como soy — explico algo apenada. El chigo sonrió negando con la cabeza, nos miro como disculpándose el también por el accidente y luego le volvió a hablar a ella

— Tú nunca vas a cambiar, no hay problema, en todo caso ya es tarde, deberíamos irnos ya o la duende se va a enojar otra vez — ella asintió y se giro hacia nosotros quienes mirábamos la charla en silencio, aunque Tanya tenia un claro signo de irritación

— Nuevamente discúlpenme, no era mi intención incomodar — dijo eso mirando a Tanya

— No hay problema, ya te dije — le respondí yo con una sonrisa, la cual ella respondió y con la cual me deslumbro, algo mas para apuntar a su perfección, pensé ¡tenia una sonrisa sumamente hermosa! Tanya se pego a mi brazo en cuanto vio que ambos nos sonreíamos

— Eddy vámonos, aun estamos a tiempo para nuestra cita — ¿Tenia que hablar de eso justo delante de ella? ¡Rayos!

— Con permiso, buenas tardes — dijo ella arrastrando al chico con ella, el cual solo nos saludo con una cabezadita y no me dio ni tiempo de responder

— ¿Tienes que ser tan cortante con la gente? ¿Siempre tienes que ser tan maleducada? — le dije irritado, la chica había salido casi huyendo ante la arrogancia de Tanya

— ¡Oh vamos mi amor! Es solo una estúpida aparecida, no veo porque darle importancia —

— Es que no es solo por ella, siempre eres así con todo el mundo, no sabes lo irritante que es estar contigo cuando por de bajeas a medio mundo — fruncí el ceño

— ¡Eddy no te enojes! Vamos amor, aun estamos a tiempo para nuestra cita, puedo llamar a Jessica justo ahora y pedirle que nos espere —

— ¡No! No vamos a ir a ningún lado — casi le grite — no pienso ir a ninguna parte contigo Tanya, ¡se acabo! —

— ¡¿Qué?! ¿Qué quieres decir Eddy? —

— ¡No me digas Eddy, odio ese estúpido apodo! Y quiero decir que ¡terminamos! A partir de ahora, eres libre para insultar al mundo entero si lo deseas, no pienso salir mas contigo — y sin darle tiempo a responder, me gire y me fui, se que no es de caballeros dejar a una mujer con la palabra en la boca, ¡pero estaba cansado! Acabo con mi paciencia, además de que no me gusto que le dijera a la chica de la voz perfecta que tenia una cita con ella, no se porque, pero no me gustaba que ella creyera que yo tenia algo con Tanya, pero gracias a Dios, ya todo termino y podía respirar tranquilo y tratar de buscar a la chica otra vez, tenia que verla nuevamente. Salí del bloque, pero no tenia la menor idea de por donde se habían ido, aparte el lugar estaba casi desierto, resignado, me fui al estacionamiento a buscar mi Volvo para irme a casa.

-*-

Después de ese día anduve por el bloque de artes todas las tardes, merodeando por el salón donde la había visto por primera vez, con la esperanza de verla de nuevo, pero Dios no se puso de mi parte y no me permitió encontrármela de nuevo. Suspire resignado, era el cuarto día que pasaba por el mismo lugar y de la chica perfecta ni rastro, mire mi reloj y me di cuenta de que era la hora del almuerzo, resignado me dirigía a la cafetería de la universidad a buscar a mis amigos y comer algo, tal vez debería dejar de buscarla, me estaba creando una obsesión con esa chica, no podía apartarla de mi cabeza ni una sola vez desde que la vi. Entre a la cafetería y pude ver a mis amigos en la mesa acostumbrada.

— ¡Edward! Por fin apareces ¿Dónde estabas? — me pregunto mi amigo Emmet McCarty, un chico bastante agradable, siempre de buen humor y con bromas a la orden del día, aunque su complexión musculosa le daba un aire de hombre malo, cuando lo conoces es totalmente diferente

— Por ahí — fue mi simple respuesta

— Últimamente siempre andas "por ahí" — comento dándome una mirada de desconfianza mí amigo Jasper Hale, a veces pienso que es imposible esconderle algo a Jasper, es demasiado persuasivo. Yo solté un bufido — ¿será que estabas buscando a la "chica de la voz perfecta" de la que tanto hablas y por la cual terminaste con Tanya? — Emmet soltó una risotada

— ¡Yo no deje a Tanya por eso! ya se los dije, desde hace rato venían dándole vueltas al asunto, es solo que ese día me irrito tanto que agoto mi paciencia — me defendí

— Di lo que quieras hermano, pero no puedes negar que andas obsesionado con alguien de quien ni siquiera sabes su nombre — volvió a comentar Jasper

— ¡Cállate! — Emmet nuevamente soltó una carcajada

— Vamos Edward, no te puedes enojar, tienes que reconocerlo, desde que la conociste, no haces otra cosa que buscarla como un tonto, no creas que no nos hemos dado cuenta — comento Emmet, estaba a punto de refutarle cuando un teléfono nos interrumpió, era el celular de Jasper, al ver quien era, los ojos se le iluminaron y contesto con la sonrisa mas estúpida que jamás se haya conocido, se retiro para hablar mas tranquilo y luego de unos segundos regreso

— ¿Te burlas de mi, y tú no vez la cara de imbécil que pones cada vez que te llama Alice? — Emmet nuevamente rio fuerte

— Jamás lo he negado, a diferencia de ti, yo si reconozco que estoy loco por ella —

— ¿Estaba con mi Rose? — pregunto Emmet, al igual que Jasper su cara también tenia una sonrisa estúpida ¿Tendría yo esa sonrisa algún día? No lo sabía

— Si, mi hermana y ella están muy ocupadas por el desfile que van a hacer las de diseño el fin de semana, es el cierre del semestre, así que no la veré hasta pasado mañana, cuando por fin llegue el día —

— Si, Rosalie también me lo dijo, es una lastima toda la semana se la ha pasado correteando de un lado al otro, a duras penas hemos hablado por teléfono —

— ¡Dios mío! Creo que mejor me voy a la biblioteca un rato, tanto amor empalaga —

No es que yo fuera del tipo de persona, con la cual no se puede hablar sobre esos temas, pero a veces me sentía algo incomodo y tengo que reconocer que hasta celoso, pues ambos tienen una relación estable desde hace algún tiempo y yo aun ando vagabundeando solo por el mundo, bien, tal vez eso sonó algo extremista, pero de que estoy solo, lo estoy. Ambos me dieron una sonrisa de disculpa, pues se que aunque jamás se los he dicho con palabras, no hace falta hacerlo para que me entiendan, por algo son mis dos únicos amigos.

Me dirigí a la biblioteca, lo mas seguro es que estuviera desierta, aunque estuviéramos a finales de semestre, la mayoría no se pasaban por aquí en horas de descanso, ni aunque tuvieran que hacer los informes finales. Y en efecto, estaba casi vacía, había pocas personas, solo se destacaba un grupito de tres personas sentados en una esquina de la biblioteca y con una gran pila de libros sobre la mesa, tendrían que ser de literatura o filosofía, eran las únicas carreras en las que ponían tal cantidad de libros para los trabajos. Me pasee al otro lado de la biblioteca frente a ellos, tome algún ejemplar, sin ni siquiera mirar el titulo y me senté en la primera mesa que encontré a mi lado. Leí la primera página e iba a pasar la hoja, aun sin haber prestado mucha atención al contenido del libro, cuando levante la cabeza por reflejo al abrirse la puerta de la biblioteca, me quede sin aliento, como un ángel que hace su aparición de manera deslumbrante, entro la mujer que tenia mi cabeza hecha un lio los últimos cuatro días, se acerco al grupo de chicos en el que había reparado anteriormente, y se sentó con ellos, al parecer dio unas cuantas disculpas, me imagino que por su llegada tarde, tomo un libro y empezó a leerlo.

No volví a mirar mi libro otra vez, tenia mis ojos puestos en ella, ahora que la podía apreciar con mayor discreción, podía notar que era una chica frágil, se notaba que era una mujer de complexión delgada, aunque no al extremo, la blusa negra y el jean azul dejaban ver unas cuantas curvas muy bien puestas, el cabello lo tenia a media espalda, lizo y crespo en las puntas. Observe sus movimientos y gestos, era algo tímida, pero se notaba que hablaba con tranquilidad con las personas con las que estaba, de vez en cuando, se mordía el labio inferior cuando estaba pensando, gesto que me deshizo por completo, me inundaron unas ganas terribles de probar sus labios.

Ahora que lo pensaba bien, ¿Qué hacia ella ahí? ¿No era ella del área de arte? Definitivamente me tenía confundido, quería acercarme a ella y saludarla, pero ¿Qué le podría decir? ¡Hola! ¿Te acuerdas de mí? Soy el chico con el que te chocaste la vez pasada, solo quería preguntarte, ¿Qué haces aquí en la biblioteca haciendo trabajos de literatura? ¿No eres del área de arte? Es que te he estado buscando como un loco obsesivo todos estos días y no te había vuelto a ver por allá y ahora te encuentro acá y no puedo dejar de mirarte.

¡No! absolutamente no se podía acercar a ella, al menos, no hasta que no tuviera un buen argumento para hablar. Sin darse cuenta del tiempo que transcurrió, en la mesa de la chica se empezaron a levantar y recogieron los libros para marcharse, ella dejo caer un libro al suelo, haciendo que resonara el golpe por toda la biblioteca, rápidamente se agacho a tomarlo y se sonrojo violentamente, mientras daba una risita avergonzada a una de sus compañeras, la cual le sonreía restándole importancia al asunto. Esa mujer me tenia loco, sus gestos me hacia querer conocerla mas, quería saberlo todo de ella, saber hasta lo mas insignificante de su vida.

Cuando salieron, me levante rápidamente y los seguí, ella se había desviado del resto junto a la otra chica que la acompañaba, tomaron la dirección del bloque de literatura y filosofía, yo a una distancia prudente las seguía, me sentía como un psicópata o un cazador buscando a su presa, pero no lo podía evitar, quería saber todo de ella. Ambas se detuvieron a mitad del pasillo cuando se encontraron con un profesor, intercambiaron unas palabras y luego le entregaron el trabajo que habían hecho en la biblioteca, caminaron junto a profesor hasta un salón al final del pasillo y entraron en el, yo preferí quedarme donde estaba y esperar a que salieran.

Pero habían pasado diez minutos y no salían, así que discretamente retome el camino, y que sorpresa me lleve al ver el salón desierto, había otra puerta de salida al otro lado del salón, dando paso al otro pasillo, lo mas seguro es que habían ido por ahí. Sintiéndome como el idiota mas grande del mundo, no solo por estar siguiendo a alguien que no conozco, si no porque encima no lo hago bien, preferí dejar todo hasta ahí y regresar a mi bloque, pronto empezaría mi siguiente clase. Dejaría de perseguirla como un imbécil, no iba a buscarla mas, esa mujer no tenia la menor idea de mi existencia, ni siquiera se debía acordar un poquito de mi, así que, no tenia caso, ese asunto lo daba por terminado en ese mismo instante.

-*-

— Oye Edward, ¿vas a acompañarnos al desfile mañana? — ya estábamos a viernes y hoy finalizaba el semestre

— No, gracias Jasper, yo no quiero exhibirme ante toda la universidad — las endemoniadas novias de mis amigos, los habían obligado a hacer parte de su desfile, modelando la ropa masculina que ellas habían diseñado, ambos intentaron por todos los medios el que yo los acompañara, pero como es lógico me negué, estar pasando frente a toda la universidad, los cuales te miran como si fueras un animal en un zoológico no es lo mío

— ¡No seas imbécil! — Dijo Emmet — solo te estamos invitando a ver, ya sabemos que tu no vas a ayudar — el tono que uso, fue medio en reclamo, medio en desilusión, a ellos tampoco se les hacia muy grata la idea, pero igual habían aceptado ¿Quién le negaría algo a su novia? Especialmente si son como las de mis amigos, cada una se cargaba un carácter de miedo y de una forma u otra, siempre conseguían lo que querían, eran de temer

— Claro, Emmet tiene razón, solo te invitamos a que te distraigas un poco, hace mucho que no sales con nosotros, además no te vamos a dejar mucho tiempo solo, el desfile de ropa masculina es al comienzo, luego vamos a poder acompañarte el tiempo que dure el resto desfile —

— Esta bien Jasper, iré, ¡pero ni se les ocurra tenderme una trampa para que los acompañe a hacer el ridículo! — Ambos rieron cómplices — ¡Hey! Es en serio —

— Okey, tranquilo, solo era una broma, no hemos pensado nada Edward — dijo Emmet riendo

— Tú harías una pareja perfecta con la amiga de Alice — acoto Jasper

— ¿Con quien? —

— Veras Edward, Alice tiene una amiga, no he tenido el gusto de conocerla, pues las veces en las que la ha invitado a salir con nosotros, o esta muy ocupada con los trabajos de la universidad, o simplemente no quiere, pero Alice habla maravillas de ella, aunque las maravillas se acaban, cada vez que trata de convencerla para que participe en uno de sus desfiles, según ella, es tremendamente terca y es sorprendente que ni siquiera Alice con lo persuasiva que es, la haya hecho participar de modelo, lo mas lejos que ha llegado con ella, es llevarla de compras, vestirla y arreglarla para alguna ocasión especial, pero nada de desfiles —

— Es una mujer sensata entonces — dije divertido, ambos rieron conmigo

— Te llevarías bien con ella, ambos tienen personalidades muy similares, por lo que Alice me ha podido contar, se nota que son compatibles —

— ¡No! Ni siquiera se te ocurra pensarlo Jasper, no te hagas el casamentero otra vez, por favor, no se te da bien, con la última vez, creo que quede curado para siempre — le dije con cara de horror

— Bueno, Edward, creo que con Tanya se me pasó un poquito la mano — dijo Jasper dando una sonrisa de nervios

— Pero hombre, llevabas tanto tiempo solo que ya nos estábamos preocupando, teníamos que probar lo que fuera — comento Emmet

— Pues les agradecería que no se preocuparan tanto, si los resultados van a ser esos, prefiero estar solo toda la vida — los tres rompimos a reír

-*-

El sábado por fin llego, hoy seria el dichoso desfile, me levante casi al medio día, no es que fuera perezoso para despertar temprano, pero, no tenia nada mas que hacer, todos los trabajos de la universidad los había entregado y no había nada mas en que ocupar mi tiempo, así que preferí dormir tranquilo y reponer algunas horas de sueño que me habían robado la universidad y la chica perfecta, si, me quedaba desvelado pensando en ella, ¡demonios! Otra vez hablando de ella, tendría que ocupar mí tiempo en algo. Así que, me pondría a arreglar mi apartamento, el desfile de Alice y Rose seria hasta las cuatro de la tarde, todavía tenia muchas horas libres.

A las dos de la tarde ya tenía todo listo, nunca había sido muy desordenado por lo que no tenía mucho que arreglar, como ultima opción, opte por tocar el piano, después de un rato, la inspiración me invadió y empecé a componer, hacia muchísimo que no lo hacia, y tenia que reconocer que lo extrañaba, era algo que realmente me apasionaba, por un tiempo, tenia la música abandona, mi pasión se había apagado, pero desde el día que escuche a la chica perfecta con esa voz perfecta, mi inspiración volvió, las ganas de tocar y componer me llenaron, quería hacer algo para ella, componerle una canción, y luego tocarla para ella, añoraba desesperadamente, que ella también cantara para mi, que me diera el privilegio de escuchar su voz, solo a mi, como envidiaba al chico que estaba con ella, él podía escucharla cantar, podía estar junto a ella, sabia su nombre y quien sabe cuantas cosas mas ¿serian pareja? ¿Tendría ella alguna relación? ¡Demonios! No había pensado en eso, pero de todos modos ya no importaba, total, ya había tomado la decisión de no pensar más en ella ¿Seria eso posible?

El timbre lo saco de su cavilación, se levanto lentamente, el timbre seguía sonando sin parar, abrió la puerta para encontrarse con sus amigos

— ¡¿Qué haces aun con pijama?! — regaño Emmet. Ante el comentario, mire el reloj y eran las tres y media de la tarde, siempre que componía las horas pasaban volando

— ¡Rayos, se me paso el tiempo! —

— Eso veo, ¿Qué estabas haciendo? — pregunto Jasper

— Estaba tocando un poco el piano y se me paso el tiempo volando —

— Bien, pues apresúrate a volar y dúchate rápido porque no queremos llegar tarde, somos de los primeros y no se que me haría mi Rose si no llego a tiempo — la cara de ambos se puso pálida al pensar en las consecuencias de llegar tarde. Aunque no tenía muchas ganas de ir, tampoco podía hacer que mis amigos sufrieran, así que rápidamente me duche y arregle en quince minutos, cinco minutos después estábamos en la universidad, por lo menos vivía cerca, así que era una ventaja

— ¡Al fin llegan! ¿Dónde demonios estaban? ¿Ya vieron la hora? — empezó a regañarlos Rosalie

— Perdón fue mi culpa — trate de calmarla, milagrosamente Alice no estaba, así que por lo menos no seria tan terrible lidiar con las dos

— ¡Bien! Se salvaron solo porque no tenemos tiempo, deben cambiarse ¡ahora! — y sin dar más explicaciones, los jalo a ambos hacia los vestidores improvisados para el desfile

Yo salí lo mas rápido posible del lugar, no quería que luego me obligaran a mi a participar como castigo, el lugar estaba repleto de gente, no me gustaba mucho los sitios así, pero ya estaba ahí, no podía dejar abandonados a mis amigos, y menos, luego de prometerles que me quedaría, busque un buen lugar para ver el desfile, aunque no era mi tipo de evento, no podía negar que moría por ver a ese par desfilar, la cara de ambos seria todo un poema, no podía perderme eso, tendría que haber traído una cámara. Analice con la mirada el lugar, y cuando encontré un sitio perfecto me gire, pero choque con alguien, instintivamente agarre a ese alguien para que no cayera, sentí descargas eléctricas por todo el cuerpo, esa sensación me recordó a… ¡por el amor a todo lo sagrado! ¿No podía ser…? Baje mi mirada y ¡oh si!, si era, la mujer perfecta estaba nuevamente entre mis brazos

— ¡Perdón, no me fije por donde iba! — comento, parándose rápidamente pero mirando al suelo

— No hay problema, yo también estaba algo distraído, pero es idea mía o ¿tienes una tendencia a chocarte conmigo siempre que nos cruzamos? — le pregunte divertido, en cuanto me escucho, no se si fue porque reconoció quien era, pero sus ojos se enfrentaron a los míos y el rubor inundo su rostro

— ¡Lo siento! Nuevamente nos encontramos y siempre es porque me estrello contigo, perdón, pero es que en serio, tengo dos pies izquierdos — explico atropelladamente

— Tranquila, ya te dije que no hay problema, soy Edward Cullen — le dije tendiéndole la mano, esta vez si iba a saber su nombre

— Isabella Swan, aunque prefiero que me digan Bella — dándome la mano

— Bella — repetí, hasta su nombre era perfecto, era tan acorde a ella. Bella me regalo una sonrisa — ¿Vas a ver el desfile? — dije soltándole la mano, aunque no muy contento por eso

— Si, aunque primero tengo que buscar a una amiga, quede de ver el desfile con ella, pero mientras huía de alguien me tropecé contigo — comento sonrojada, yo solo reí. ¿Huía de alguien?

— ¿Si quieres puedo ayudarte a buscarla? — ella me miro dubitativa, abrió los perfectos labios para responder, pero fue interrumpida

— ¡Bella! — me gire hacia la voz y la reconocí como la chica que la acompaño en la biblioteca — ¡por fin te encuentro! El desfile ya va a comenzar, vamos — cuando noto mi presencia, se avergonzó por el monologo y me saludo — Perdón, no sabia que estabas ocupada — yo negué restándole importancia

— Bueno, entonces me voy, que tengas buen día Edward nos vemos después — mi corazón latió rápidamente de felicidad, mi nombre en sus labios sonaba tan bien

— Lo mismo para ti Bella, espero nos veamos luego — ella sonrió y salió con su amiga, la cual se despidió de mi con una tenue sonrisa, le respondí de igual forma, las observe hasta perderlas de vista, esa mujer me tenia loco, ahora que cruce algunas palabras con ella y que se por fin su nombre, no iba a dejar de buscarla, ¡al diablo con eso! Yo quería conocerla más.

Me dirigí al lugar el cual había visto antes de chocarme con Bella. Bella, que bien se sentía saber su nombre. Okey, me dirigí al lugar para ver el desfile, me acomode un poco alejado de tanta multitud, aunque era perfecto para apreciar el espectáculo, mire nuevamente por el lugar, para ver si encontraba a Bella sentada en algún lado, pero había tanta gente que me fue imposible encontrarla.

Cinco minutos después el desfile comenzó y empezaron a salir los modelos, cuando aprecie a mis amigos, no pude evitar soltar una carcajada, las endemoniadas de sus novias habían hecho con ellos lo que quisieron, ambos estaban modelando ¡ropa interior! Jasper tenia la cara absolutamente roja como una fresa y sonreía tímidamente a las estudiantes que le lanzaban silbidos y decían comentarios poco apropiados para una dama, Emmet por su parte se lo tomo mas a broma y reía tontamente mientras posaba y lanzaba besos, ya le vería la cara mas tarde cuando Rosalie lo pusiera en su lugar por eso, ¡en serio, debí traer una cámara!... luego de la ropa interior, pasaron a ropa deportiva, ropa informal y luego ropa casual, tenia que reconocer que en cuanto a los diseños Alice y Rose se habían lucido completamente, se notaba que esa era definitivamente la carrera ideal para ambas. Cuando los hombres terminaron, empezaron a salir las mujeres, igualmente modelando en el mismo orden que los hombres, el tipo de ropa diseñada, se sorprendió mucho el ver a Tanya entre las modelos, hasta donde tenia conocimiento, Rosalie y Alice la detestaban, tenían que estar muy desesperadas por modelos, desde que la hubieran utilizado.

Segundos después mis amigos hicieron aparición a mi lado, no pude evitarlo y me burle todo lo que pude, tenia que aprovechar la oportunidad, siempre era yo la victima de sus burlas, pero me reí mucho mas, cuando una de las chicas sentadas cerca suyo, empezaron a lanzarles piropos bastantes obscenos, definitivamente, haber ido había sido la mejor opción, hacia mucho no me reía tanto. Desfilaron otra tanda mas de ropa, al parecer los diseños de mujeres eran muchos mas que los de los hombres, la propia Alice y Rose desfilaron un par de veces, luego al cierre del evento ambas salieron a agradecer la asistencia, como toda buena diseñadora, luego rifaron unas cuantas prendas y dieron por finalizado el desfile.

— ¡Bien! Vamos, a felicitar a las chicas — comento Emmet, Jasper y yo nos levantamos para seguirlo

— Oye Edward, queríamos invitarte esta noche, vamos a hacer una pequeña celebración en el apartamento de Alice, para festejar el éxito del desfile ¿nos acompañas? —pregunto Jasper

— No lo se, sabes que no me agradan mucho las fiestas —

— ¡Oh vamos hermano! Además no va a ser la gran cosa, seremos muy pocas personas, diviértete hombre, sal al menos con nosotros una vez — comento Emmet

— Claro, Emmet tiene razón, además, si le haces un desplante a Alice, ya sabes como se pone — sonreí nervioso al pensar en eso, ese pequeño duende era capaz de hacerme cualquier cosa, además hoy había sido un buen día, salir un poco no me haría daño

— Esta bien, iré — ambos sonrieron complacidos, llegamos a los bastidores del desfile, en cuanto Alice vio a Jasper se lanzo a sus brazos, Emmet se perdió en busca de Rose

— ¡Felicidades! Todo salió como esperabas — le comento Jasper a su novia

— ¡Gracias, la verdad es que Rose y yo estamos muy felices por eso! — yo me acerque igualmente a saludarla

— Te felicito Alice, todo estuvo muy bien, especialmente el desfile en ropa interior masculina, jamás olvidare el rostro de este par — ella rio abiertamente y Jasper se sonrojo

— ¡Gracias Edward! Aunque tu te me escapaste, la próxima hare que desfiles, no se como, pero lo hare — sentencio, yo sentí un frio recorrer mi cuerpo, esa mujer era capaz de hacerlo y yo no dudaba de ello — ¿Vendrás a festejar con nosotros? Ni se te ocurra hacerme un desplante — me miro amenazante

— Claro que no Alice, jamás haría algo así —

— Eso esta muy bien, mira que la otra vez… — fue interrumpida

— ¡Alice! — ¡oh por Dios, esa voz! Me gire hacia donde provenía y solo alcance a ver a Bella, lanzándose a los brazos de Alice y ambas girando en círculos, mientras Bella la llenaba de felicitaciones

— ¡Amiga te felicito, todo les salió como planearon! —

— Gracias Bella, no podríamos estar más felices por eso, aunque hubiera sido muchísimo mejor, si hubieras aceptado participar en el desfile, mira que tuvimos que pedirle ayuda a Tanya ¡a Tanya! Dios mío, si que estábamos desesperadas — el comentario de Alice, me hizo comprender dos cosas, primero, yo tenia razón en cuanto a lo de Tanya y segundo, Bella era la amiga de Alice de la cual Jasper me había hablado

— Oh vamos Alice, no fue tan malo, yo jamás me prestare para ese tipo de cosas, y lo sabes, suficiente tengo con jugar a tu Barbie cada que se te da la gana — le reclamo Bella, Jasper y yo mirábamos la escena algo divertidos

— En fin, a ti también te obligare algún día, ya veras, pero dime ¿vas a ir esta noche? —

— Si Alice, ya te dije que si — comento Bella al parecer cansada de la misma pregunta, Alice chillo fuertemente

— ¡Que bien!... Hay pero que descuidada soy — comento al recordar nuestra presencia — Bella, ellos son, mi adorado Jasper — dijo señalando a su novio — y uno de sus mejores amigos, Edward — comento ahora señalándome a mi, cuando ella reparo en mi presencia nuevamente, me dio una sonrisa preciosa — chicos, ella es Bella, una de mis mejores amigas — comento Alice, ahora señalándola a ella. Jasper le dio la mano

— Por fin te conozco, Alice siempre habla de ti — ella se ruborizo

— Mucho gusto, Alice siempre habla también todo el tiempo de ti, creo que te conozco mejor de lo que piensas — comento en son de broma, luego se acerco a mi — Hola Edward, nuevamente nos encontramos — yo le sonreí

—Si y es un alivio que esta vez, no sea porque te tropieces conmigo — ella nuevamente se sonrojo, yo solo reí, Alice y Jasper nos miraban algo confundidos

— ¿Se conocen? — pregunto la duende

— Si, creo que, me he empeñado en chocarme con él siempre que lo veo — explico Bella y luego sonrió aun sonrojada

— ¿Chocarse? Por Dios, porque no me extraña ¿Cuántas veces te lo has llevado por delante? — pregunto nuevamente Alice en son de broma

— Solo dos — le respondí yo, restándole importancia, aunque también en broma, lo que menos quería, es que se pusiera incomoda

— Una vez, fuera del salón de música de Seth y otra hoy en el desfile — explico ella, Jasper inmediatamente me miro, eso fue suficiente para que comprendiera, que ella, era "la chica de la voz perfecta"

— ¡¿Así que tu eres esa chica?! — comento Jasper, yo inmediatamente lo fulmine con la mirada

— ¿Cómo? — pregunto Bella

— Si, mi amigo no deja de hablar de ti, desde que te vio por primera vez — ahora si lo mataría ¡¿Cómo se le ocurre decirle eso?! Ella lo miro extrañada

— ¿A que te refieres con…?— Dios mío, si Alice empezaba con las preguntas, todo se iría a la mismísima mierda, ella y Jasper se encargarían de acabar conmigo

— ¡Hola! — grito Emmet efusivo, cortando a Alice, jamás había estado tan feliz de verlo, venia con Rose de la mano, nuevamente Bella se lanzo en brazos de Rosalie para felicitarla, cruzaron palabras y después de un rato Alice hablo

— ¡Bueno es hora! Vamos a mi apartamento, ¡hay que celebrar! — Alice siempre con esa energía, a veces era agotador solo verla

— ¿Bella? — llamo Rosalie

— ¿Si? —

— ¿Ángela y Seth? —

— Ángela, fue a buscar a Ben, dijo que luego llegarían donde Alice y Seth recibió una llamada cuando finalizo el desfile, tuvo que irse, pero me dijo que estaría puntual — Rose simplemente asintió

Partimos en dirección al apartamento de Alice. Emmet y Rose, conmigo en mi Volvo y Jasper y Bella, con Alice en su Porshe. La verdad es que si éramos pocos, aparte de nosotros, llego la chica que acompañaba a Bella en la biblioteca, que se presento como Ángela, su novio Ben y mas tarde el chico del salón de música, Seth, nadie mas. Ángela y Bella, se habían ido a la cocina a preparar bocadillos, Alice y Rose las siguieron pero no las dejaron hacer nada, pues eran las "festejadas" Ben y Seth preparaban bebidas, así que Jasper no perdió la oportunidad para contarle a Emmet que la famosa "chica de la voz perfecta" era Bella, la amiga de sus novias, Emmet soltó un estrepitoso "!¿Que?!" y una carcajada sonora, estuvieron haciéndome bromas por un rato, hasta que los calle cuando vi que las chicas volvían. Hablamos, de nuestras carreras y bromeamos entre todos un rato mas, pude ver que Seth no podía ser novio de Bella, al parecer era un buen amigo de todas, pues las trataba por igual y de la misma forma.

— ¡La verdad es que es un milagro! Es la primera vez que logramos reunirlos a todos — comento Rose

— Es cierto, cuando no es el uno, es el otro, pero aquí los que mas se esconden son Bella y Edward, ustedes son los antisociales del grupo — nos señalo Alice, Bella se sonrojo

— Yo no me escondo Alice, entre el orfanato y la universidad no me queda tiempo — ¿orfanato?

— ¿orfanato? — al parecer Jasper me leyó la mente

— Si, Bella esta inscrita en el proyecto de la universidad, donde algunos alumnos están ayudando lugares como ese, el proyecto que el director formo hace algún tiempo — informo Alice, ahora sabia exactamente de que hablaba

— ¡Vaya! Realmente ustedes dos me sorprenden — comento Jasper hablando de Bella y yo — Edward se inscribió en ese mismo proyecto la semana pasada — Bella lo miro algo sorprendida

— ¿En serio? — me pregunto

— Si, comienzo a partir del lunes, aunque no se que lugar me asignaron — ella me regalo una hermosa sonrisa, al parecer estaba alegre de saber que yo al igual que ella estaba ayudando en el proyecto. Pude ver que Alice nos dedicaba una mirada extraña, pasaba sus ojos de Bella a mí, luego miro a Jasper, este le sonrió, volvió a mirarnos y una sonrisa que no me gusto nada, se formo en sus labios ¿en que demonios estaba pensando esa mujer?

— Edward — me llamo luego de sonreír

— Dime Alice —

— ¿Tienes novia? — yo fruncí el seño ¿Qué tenia eso que ver? Sorprendentemente Bella me miro algo ¿interesada? ¿Ella quería saber si yo tenía novia?

— No, ¿Por qué? —Bella frunció el seño ¿Por qué? ¡Ah rayos! Ella piensa que yo tengo algo con Tanya

— Yo tenía entendido y según palabras de la propia Tanya que tú tenias algo con ella — explico Alice. Jasper noto la expresión de Bella y como el estaba al tanto del incidente le explico

— No Alice, creo que yo soy el culpable de eso — Alice lo miro extrañada — prácticamente lo obligue a que saliera con ella — me señalo, yo hice cara de fastidio, con solo recordarlo, Emmet soltó una gran carcajada

— El pobre de Edward, no sabia como sacársela de encima, lo acosaba todos los días, lo llevo al punto de correr y esconderse, una vez se metió en el bloque de música, nada más para huir de ella, pero dio con tan mala suerte de que lo encontró, al menos pudo librarse de ella completamente y esta solo como una ostra otra vez — dijo Emmet y rio más fuerte, los demás lo siguieron, Bella me miro algo divertida al comprender el motivo por el cual estuviera en ese lugar, y ahora que lo pensaba yo no sabia porque estaba ella, allá

— No me digas que ¿por eso te encontrabas al frente de mi salón ese día? — pregunto Seth, el chico me había caído muy bien. Yo reí y asentí

— Estaba a punto de entrar en tu salón cuando ella me encontró, por cierto, discúlpame Bella, ese día Tanya se porto muy mal contigo — ella negó suavemente

— No te preocupes, ya estoy acostumbrada, lo hace siempre — yo la mire extrañado

— ¿Siempre? ¿Acaso la conoces? — pregunte yo. Ángela hablo por primera vez

— ¿Qué si la conoce? En cuanto Bella y yo ponemos un pie en el bloque de diseño, comienza a lanzar indirectas y hacer comentarios poco agradables — dijo algo ofendida. Rosalie bufo

— Es solo una pobre estúpida, no sabes la rabia que le dio, porque no fue escogida para enseñar sus "diseños" en el desfile, por eso queríamos que Bella modelara en vez de ella, habría reventado de la cólera —

— Dios me libre de semejante lio Rose, ya tengo suficiente con sus comentarios diarios, ¿Te imaginas si le quito el puesto de modelo? — comento Bella horrorizada, todos reímos al ver su cara, esta mujer cada vez me gustaba mas, un momento ¿me gustaba? ¿Yo había dicho eso? Si, y lo peor es que era verdad, ¡me encantaba! Estaba loco por ella.

Platicamos un rato mas, los primeros en marcharse fueron Ángela y Ben, pues el segundo tenía que madrugar a hacer un trabajo. Seguidos por Emmet y Rose que partieron en el Porshe de Alice, Jasper pasaría la noche con ella.

— Bueno, será mejor que yo también me vaya — comento Seth — ¿Vienes Bella? —

— Si, muero de sueño — respondió ella — ¿trajiste tu auto? —

— No, ¿recuerdas que esta en el taller? Yo pensé que habías venido en tu dinosaurio — Bella le dedico una mirada asesina

— No, mi preciada camioneta esta en casa, vine con Alice —

— Pues tomaremos un taxi —

— ¡Esperen! Yo los llevo — me ofrecí

— No tienes porque molestarte Edward — me comento Seth, Bella asintió a sus palabras

— Tranquilos, no es ninguna molestia, yo los llevo, vamos —

Nos despedimos de Alice y Jasper, bajamos al estacionamiento y subimos a mi Volvo, ambos me indicaron la dirección de cada uno, llevaría a Seth primero, pues estaba mas cerca y luego a Bella. Íbamos conversando, definitivamente Jasper tenía razón, Bella y yo teníamos mucho en común, en especial, la música y los libros. Bella iba sentada a mi lado y Seht atrás, de repente Bella pego un grito.

— ¡¿Estas loco?! ¡Vas a ciento cuarenta! — al parecer estaba entretenida en la charla y no había notado el velocímetro, yo descendí a cien, no quería que se asustara

— Lo siento, me gusta conducir algo rápido — ella suspiro aliviada al ver nuevamente el velocímetro y Seht rio abiertamente

— Es solo que, el dinosaurio que conduce Bella, no pasa de ochenta, comparado con ese vejestorio, todo es demasiado rápido — volvió a reír, ella lo fulmino con la mirada

— ¡Mas respeto a tus mayores Seth! — ambos reímos ante ese comentario

— Gira a la izquierda — argumento el chico, yo hice lo que me dijo — Puedes dejarme aquí… muchas gracias Edward — dijo en cuanto me detuve — que pases buena noche, adiós Bells —

— No hay problema, buenas noches — dije yo, ella lo despidió con la mano. Luego gire a la derecha para tomar el camino a casa de Bella

— Disculpa que hayas tenido que venir tan lejos a dejarnos —

— No te preocupes, en realidad es Alice la que vive algo lejos, tú y yo vivimos cerca —

— ¿En serio? ¿Qué tan cerca? —

— Unos cinco minutos más o menos — ella me miro sorprendida

— Vaya, y ¿es cierto que estas en el proyecto? —

— Si, te dije que empiezo el lunes, ¿Por qué? —

— Son pocos los que han decidido participar, no todos quieren "desperdiciar" su tiempo ayudando a los demás, si te soy sincera yo te veía como otro tipo de persona, hoy has cambiado totalmente mi perspectiva de ti — eso si no me lo esperaba

— ¿A si? ¿Y que tipo de persona aparento ser? — ella se sonrojo

— No creo que te guste saberlo — yo reí

— Vamos, ¿que tan malo puede ser? — Ella me miro con cara de circunstancia — no te preocupes, no me voy a disgustar, anda dime —

— Pues la primera vez que nos encontramos, bueno que te atropelle — rio con gracia al corregirse — cuando te vi con Tanya, pues pensé que eras de ese tipo de chicos que ella frecuenta —

— ¿Cómo son los tipos que frecuenta? —

— Pues… superficiales, ególatras, engreídos, déspotas, el tipo de personas que encajan con ella, muy hermosos por fuera, pero estúpidos por dentro — al parecer el ultimo comentario no tenia porque hacerlo y se sonrojo, ¿yo le parecía hermoso? Sonreí ante el comentario ella me miro extrañada — ¿No te disgusta que haya pensado todo eso de ti? —

— ¿Quién se puede disgustar luego de que le dicen hermoso? — comente con gracia, ella se puso roja como una fresa, otra vez

— No me refería a… — yo la corte

— Tranquila, solo era un chiste, pero no, no me disgusta, es lógico que pensaras eso si me vez al lado de alguien como Tanya, yo en tu lugar, hubiera llegado a la misma conclusión, pero es bueno saber que ya no piensas eso — ella asintió — ¿Qué piensas ahora de mi? — no pude evitar preguntarlo, ella pareció dudar

— Bueno… pues… eres todo lo contrario a lo que dije recientemente, se nota que eres alguien inteligente y responsable, incluso me atrevo a decir que eres bondadoso — jugaba con los dedos de sus manos mientras hablaba, es idea mía o ¿estaba nerviosa?

— Vaya, creo que es mas de lo que en verdad soy — Ella solo sonrió

— No lo creo, aunque soy torpe y distraída, se interpretar quien es bueno y quien es malo, y definitivamente yo no te veo como malo — no pude evitar sonreír abiertamente — para en la siguiente calle por favor, en el edificio blanco — me pidió viendo por la ventana, yo me detuve donde me dijo

— ¿Ahí vives? — le pregunte cuando le abrí la puerta del auto, ella me miro sorprendida, tal vez no estaba acostumbrada a esos tratos

— Si, en el segundo piso — respondió sonriéndome — muchas gracias por traerme — luego hizo algo que me dejo sorprendido, me dio un beso en la mejilla, murmuro un "buenas noches" y se perdió dentro del edificio, me subí al auto con la mano en la mejilla y el corazón acelerado, era definitivito, esta mujer me volvería loco.

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