Toris despertaba en medio de la noche siempre. Era casi una rutina. Despertaba pero tardaba mucho en animarse a mirar a su lado porque sabía lo que le esperaba. Iba a estirar los brazos esperando rozar con sus dedos esa delicada piel de princesa y no lo iba hacer. Iba a girarse a ver esperando encontrar su rostro tapado por sus cabellos dorados y no lo iba a hacer.
Deseaba con toda su alma ver aquella dulce y particular sonrisa que tan linda le quedaba a su hermoso rostro... deseaba ver esos ojos color esmeralda cuando recién se abrían en la mañana. Deseaba llevarle el desayuno a la cama y que el riera infantilmente por ese gesto.
-Feliks- Susurraba incorporándose en la cama, mirando hacia la ventana abierta por la cual entraba el fresco viento de la mañana de Vilna.
Cuando tu día se haga largo
Y la noche
Tu noche sea solitaria
Cuando estés segura que ya has vivido suficiente
Bien, espera.
No podía hacer nada. Polonia sabía a la perfección que no se podía hacer nada y por eso lloraba cada noche y cada mañana. Extrañaba el olor de esas flores de olor raro que el lituano solía regalarle. Extrañaba el suave y dulce olor de sus cabellos castaños, verlo desordenado. Le gustaba mucho verlo afeitarse y ahora no podía hacerlo.
Se mordía los labios con tristeza, pura tristeza. Había tirado todos sus vestidos, ya no tenían sentido sin Liet, solo los usaba para lucirlos con él. Muchas noches, se quedaba mirando la luna en silencio y preguntándose si él también lo estaría haciendo desde alguna ventana de la casa de ese ruso malvado que los separó.
Pero lo peor de todo eran sus sueños. Veía ese momento en el que lo había dejado ir, ese momento en el que no lo ayudó, en el que no se levantó del suelo sin saber que se arrepentiría por el resto de su vida.
No te deprimas
Porque todo el mundo llora
Y todo el mundo sufre
A veces...
Un día no soportó mas.
Un día no soportó mas.
Tomo el teléfono, y sin importarle el que lo viera Iván, marcó el numero.
Tomo el teléfono, y sin importarle el que lo atendiera Iván, marcó el numero.
Numero ocupado.
Numero ocupado.
Unas lagrimas cayeron por las mejillas del lituano. Un día mas sin saber nada de él. Un día mas lloraría hasta dormirse. Porque Feliks, para él, lo era todo, porque necesitaba escuchar su chillona voz, porque extrañaba ese dialecto de colegiala, porque... porque lo amaba.
Se dejó caer de rodillas al suelo intentando contenerse pero de golpe el teléfono sonó.
Entonces.. aguanta, aguanta
Aguanta, aguanta
Aguanta, aguanta
Aguanta, aguanta
Porque no estas solo
-Hola, Liet?-
Era su voz, su voz, su hermosa voz del otro lado de la linea. Lo amaba mas que a nada.
Creo que esta fue una de las peores mierdas que escribí en toda mi vida... Tipo como que estoy totalmente jodida!
Solo lo subí porque esta pareja es tan hermosa que debería tener mas fics que el GerIta! xD
Okaa xD Espero no lo hayan odiado tanto... Bye! Besos y abrazos para todo el mundo!
