No puedo creer que ya vayas a ser parte de Mckinley – dijo Kurt abrazando a Blaine

Si lo sé – dijo sin prestarle mucha atención

Últimamente Blaine estaba un poco distante, las cosas con Kurt no estaban muy bien que digamos, él siempre había sido una persona libre, pero ahora que estaba con Kurt tenía que ser más discreto. Kurt era cómo un niño, ellos nunca habían estado ni cerca de tener nada más… intimo, por así decirlo. Siempre que intentaban llegar a algo Kurt lo alejaba. Y bueno, Blaine ya se había resignado, prefería alejarse y dejar de hablar de ese tema. Lo que había formado, cierta barrera entre ellos.

¡Blaine!

¿Eh? – contestó desorientado

Estabas ido, ¿estás bien? – le preguntó Kurt

Sí, claro, un poco nervioso

Nuestra primera clase es química – le dijo entregándole su horario

¿Tenemos todas las clases juntos?

No, desafortunadamente sólo tenemos unas 3 clases juntas – dijo Kurt decepcionado

Está bien – dijo Blaine mirando a la nada

Pero no estarás sólo, los chicos, ¿los recuerdas?

Ah, sí. Espero que me hablen – dijo riendo

Lo harán, tenlo por seguro

Y los dos chicos caminaron hacia su primera clase. Entraron juntos, y juntos se sentaron también. Kurt aprovechaba cualquier momento para hacerle comentarios para que se fuera familiarizando con la escuela. Las chicas no podían dejar de mirar a Blaine. El chico era bastante bien parecido. Por lo que Kurt no dudaba en no despegarse de él para marcar territorio. La situación estaba volviendo loco a Blaine, quería a Kurt, pero en ocasiones como esta, quería estar solo, quería respirar. Por eso dio gracias a Dios cuando dieron el timbre hacia la otra clase.

Kurt le indicó a Blaine donde era su próxima clase. Blaine asintió y se alejó de él. Se paró en frente del salón y en cuanto entró comenzaron a escucharse los cuchicheos de las chicas, todas hablaban de "el chico nuevo".

Blaine sonrió a todo el salón y se presentó, por orden de la maestra.

Puedes sentarte donde quieras – indicó la maestra

Gracias – dijo el chico cortésmente

Blaine recorrió el salón con la mirada buscando el lugar correcto donde sentarse. Y mientras recorrió el salón se encontró con la mirada de una morena, que lo miraba fijamente, ojos grandes y castaños. Cuando ella se dio cuenta de que él también la miraba bajó la mirada rápidamente. Blaine decidió sentarse junto a ella.

¿Rachel? – preguntó, esperando no estarse equivocando

No sabía que me recordabas – dijo levantando la mirada, y ahí estaban, esos grandes ojos castaños. ¿cómo iban a ser normales esos ojos castaños que lo miraban fijamente?

¿Cómo habría de olvidarte? – dijo mintiendo, la morena no le había pasado por la cabeza nunca antes, nunca antes le había llamado la atención tan hermosa chica, nunca antes había visto fijamente esos ojos castaños, nunca antes se había dado cuenta de la existencia de esa chica, bueno, al menos de lo que provocaba en él.

Los chicos conversaban cuando escucharon que alguien les hablaba

Berry, Anderson, veo que están congeniando muy bien juntos, por lo mismo, harán un número, de lo que sea. – dijo la maestra de música molesta por que no le estaban prestando atención

Pero…pero – alcanzó a decir Rachel

Y si no lo hacen, les bajaré 2 puntos – dijo autosuficientemente mientras el timbre sonaba. Rachel suspiró. Nunca antes la habían castigado, y ¡Por Dios! ¿en música? Deberían de estar bromeando.

Blaine notó la intranquilidad de Rachel y le habló

Hey calma, esto será fácil

Lo sé, es sólo, que jamás me habían castigado – dijo mirando a la nada

Entonces eres una nerd – dijo riendo

¡Heeey!, claro que no – dijo riendo

¡Entonces relájate!, todo saldrá bien – calmó a Rachel

Rachel miró el reloj.

Creo que no tenemos todas las clases juntos, así que te dejo, se me hace tarde, fue un placer, señor Anderson – dijo riendo

Lo mismo digo, señorita Berry

Rachel caminó hacia su próxima clase. Blaine se quedó ido mirándola. Dios ¿Qué le pasaba?... ¿estaba mirando su trasero? Él jamás había hecho algo así, le parecía impropio. Pero simplemente no lo podía evitar. Sacudió su cabeza y se decidió a ir a su siguiente clase.

Las clases siguieron, veía caras conocidas, ahí estaban las dos porristas amigas de Kurt, pero no quiso hablarles, se sentiría estúpido si no lo reconocían. No hubo momento en que las chicas no le sonrieran o le coquetearan, cosa que comenzaba a hacerlo sentir incómodo. Gracias a Dios ya era hora del almuerzo. Caminó hacia la cafetería, buscando a Kurt con la mirada. Finalmente lo encontró. En cuanto llegó hacia él comenzó a contarle de su día. Ambos chicos buscaron un lugar donde sentarse.

Rachel estaba sentada en una mesa con Finn.

Así que estás castigada ¿eh? – se burló Finn

No te burles- rió Rachel

¿Y cómo fue? ¿Qué hizo la nueva y malvada Rachel Berry para que la castigaran?

Es Blaine, el amigo de Kurt, está en música conmigo, estuvimos platicando y nos cachó la maestra – dijo sonrojándose

¿Ya pensaste que cantarás? ¿Necesitas ayuda? – se ofreció Finn

No y no. tiene que ser con Blaine, ambos estamos castigados

Jajaja, buen comienzo tuvo el chico eh – rió

Jajaja lo sé, me odiará por el resto de su vida – se sonrojó

Eso es imposible – dijo Finn mirándola fijamente, con deseos de besar los labios de su amiga. No sabía porque Rachel no lo notaba, el hacía lo que la morena le pedía, siempre. Trataba de ser lo mejor del mundo para que Rachel lo mirara al menos cómo algo más que un amigo. Pero simplemente las cosas no cedían.

Rachel se quedó mirando a Finn. Ella sabía, como todo el mundo, que Finn tenía sentimientos hacia ella. Pero ella no lograba verla cómo algo más que un gran amigo.

Mientras buscaban una mesa, Blaine se encontró de nuevo con esos ojos castaños inmensos, hermosos. Pero esta vez esos ojos no lo miraban a él, estaban fijos en el chico alto que tenía en frente, el chico que le arrancaba carcajadas. La escena le pareció muy bella, tan solo por el hecho de ver a Rachel reír tan enérgicamente. Blaine sonrió y le dijo a Kurt:

Hey, allá está Rachel – dijo haciendo un gesto con la cabeza que indicaba el lugar donde se encontraba la chica

Oh si - dijo mirando el lugar - ¿quieres ir? – dijo riendo

Sí, claro, tenemos que hablar de la tarea – dijo Blaine riendo

Ella te hará trizas, ¿sabías?- rió Kurt

Estás hablando con Blaine Anderson, nadie me hace trizas – bromeó el chico

Es enserio, ella tiene una voz hermosa, cualquiera que la escuchara diría que su voz es digna de Broadway.

Calla, que me estás asustando

Jajaja, mi piel se eriza cuando la escucho cantar – dijo Kurt suspirando

Pues vamos ¿Qué estamos esperando? – dijo Blaine mientras caminaban hacia los chicos que tenían prácticamente en frente

Kurt saludó a los chicos quiénes se levantaron para abrazarlo.

¡Hey tú! ¡Tanto tiempo sin verte! – dijo Rachel abrazando a Kurt

Hola chicos – saludó Finn abrazando a Kurt también – Tú debes ser el famoso Blaine – dijo Finn mirando de pies a cabeza al moreno

¿Ya nos conocíamos, no? – preguntó un poco desconcertado

Jajaja, sí, pero siempre había querido decir eso – levantó los hombros

Rachel rió y abrazó a Finn

¡Al fin! Pensé que nunca le darías el sí Rachel – dijo Kurt lo que hizo que los chicos se sonrojaran

No… nosotros no – dijo Rachel sonrojada. Finn se había quedado paralizado, ojalá y eso hiciera que la morena abriera los ojos.

Oh, disculpen – dijo riendo

Kurt, siempre haces lo mismo – lo regañó Blaine. ¿sería cierto?, ¿esos ojos hermosos le pertenecían a Finn Hudson?