Capitulo 1: Sueño

Era una noche un tanto fría y lluviosa de invierno, de Enero para ser exactos, una chica de 16 años de cabellos largos y negros que caían hasta detrás de su trasero, de ojos negros azabache, ocultos por unas gafas, estaba observando la lluvia desde su habitación muy pensativa, como si estuviera esperando a algo o a alguien en el jardín de su casa, pero…niega con la cabeza y empieza a ponerse su camisón rosa pálido y apaga la luz para acostarse…

-¿A qué esperas frente a tu propio jardín, Kurumi…? no encontrarás nada…- Se decía ella misma antes de conciliar el sueño…

Cuando la joven Kurumi se duerme, no se percata de que…en su cuarto, entraba alguien desde su ventana…ella no lo notaba por el profundo sueño que estaba teniendo en esos momentos, pero…mientras dormía, notaba una serie de escalofríos que se notaban en su cara…es más…notaba una especie de aire frío en sus labios…algo rozaba sus labios y, por el simple roce, la joven se despierta lentamente y ve poco a poco como el origen de aquel roce, era de un extraño chico, que estaba sobre ella besándola…lo más curioso, no es que se asustara, sino que no sentía calor ni sentimiento en aquel roce…Al final pudo ver quien la besaba: Era un chico de unos 18 años de cabellos negros y cortos, de ojos azules. El chico se percató de que Kurumi se había despertado, pero, aún así, no cesó el hecho de besarla, cada vez con más ganas y, en un breve instante, metió su lengua dentro de la boca de la joven, rozándolas e intensificando el beso, dejándola casi sin aliento y se separa de ella porque iba a matarla…

-Apetitosa…- Decía el joven de cabellos negros a lo lejos mientras se relamía los labios de auténtica lujuria y el ver a la pobre Kurumi desconcertada y algo asfixiada, se acerca a ella y la toma de la mano. –Eres la joven más apetitosa que he visto en estos últimos años, estás llena de vitalidad y…por cómo era tu sabor…eres virgen y pura…y eso…te hace muy especial para mí…no te preocupes, querida, tengo planes especiales para ti…-

Cuando el joven terminó de hablar, Kurumi se sobresalta de su cama, despertándose, al parecer…todo había sido un sueño…

-¿Ummm?, que raro…juraría que había cerrado la ventana…- La joven va hacia la ventana y la cierra para luego acostarse, sin saber que estaba siendo observada a lo lejos…

-Inocente, pura, llena de vida…los ingredientes necesarios…para que ella pueda prosperar nuestro clan…- Dicho esto, aquella figura misteriosa que apareció en el sueño de Kurumi, desaparece en el manto de la noche.