Los personajes pertenecen a Masashi Kishimito. La historia es de mi completa autoría.

Disfruten este pequeño y picante drabble.

-¿Esto te gusta, Sakura?

-mmm…-Prácticamente ronroneo-Me encanta, Sasuke.

Embestida.

-¿Te excita qué te lo meta en un probador, eh?

Sakura meneo el culo al ritmo de las embestidas de Sasuke.

-Eres una sucia.

Embestida.

-Es tu culpa, Sasuke-kun.

Embestida.

-No. Es tu culpa, Sakura…-Gruñido-Por tener un culo tan tentador.

Embestida. Gemido.

-Ah, Ah… Sasuke-kun.

-Guarda silencio, Sakura.

-Ah…-Gimió con el dedo Sasuke invadiendo su boca-Ah, ah ¡Sasuke-Kun!

-¿Te gusta qué te lo meta fuerte?-Preguntó, sujetándola de las caderas, embistiendo como animal.

-Ah

-Dímelo, Sakura, no te oí.

Embestida.

-Me, me gus… ah-Gemía, mientras una de las manos de Sasuke buscaba su centro-Me gusta que me la metas fuerte.

¡Embestida!¡Gruñido!

-Eres tan malditamente estrecha-Nalgada.

-Ah, por favor-Rogó.

-¿Por fav...?-¡Embestida!-¿Por favor, qué?

-Ah, Sasuke-Imploró-Me corro.

Sasuke presiono su centro, las paredes de Sakura lo aprisionaban en una deliciosa tortuta.

¡Embestida, embestida, embestida!

Sakura suspiro satisfecha, sintiendo el semen de su novio llenarla.

Sasuke se inclinó, pegando su pecho a la espalda de ella-Eres increíble, Molestia-Susurro en su oreja, viendo directamente los grandes ojos verdes de Sakura mediante del espejo.

-Yo también te quiero, Sasuke-Kun.

-No logro entenderlo-Dijo Sai, mirando a Ino.

-¿Qué cosa, querido?

-La feita no es de las que se tomen su tiempo comprando ropa, y Sasuke no parece ser de los que se queden esperando en una tienda llena de ropa rosa-Razonó

-Espera-Dijo Ino, que no salía del estupor inicial-¿La frentezota y Sasuke-Kun van a comprar ropa juntos?

-Así es-Respondió Sai-Naruto no hace más que quejarse porque Sasuke se la pasa comprando ropa con Sakura.

-No lo puedo creer-Murmuro Ino, con las mejillas sonrojadas-¡Esa maldita frente!

Por supuesto que ella, como que era la reina de la sensualidad, no perdería contra Sakura, no en las artes amatorias. Tomo la mano de Sai y lo llevo a rastras.

-Sai, voy a comprar ropa, tú te vienes conmigo.

Sai sonrió satisfecho, por supuesto que sabía lo que hacían la feita y el vengador, Naruto era el único idiota que no se enteraba. Y ahora que había despertado el lado competitivo de Ino, él también conseguiría lo que quería. A veces el idiota de Sasuke tenía muy buenas ideas.