Holaa! Bueno pues aunque tengo un fic pendiente, este prologo estaba desde hace demasiado en mi ordenador y no se como ni porque pero me decidí a subirlo ( y que sea lo que los dioses quieran).

Disclaimer: Inazuma Eleven y sus personajes no me pertencen, yo solamente los uso a mi antojo

Aviso de que es un pequeño prólogo, el fic, si gusta, lo empezaré a subir en unos días.

Difrutad!


Prólogo

— No, ya está, se acabo. Estoy harto de los caprichitos de la niña — Dijo un furioso chico de pelo castaño con una banda naranja.

— Pensaba que la querías — argumentó su compañero rubio sentado en la mesa desde donde veía a su amigo dar vueltas y más vueltas.

— ¡Tú no te metas, Goenji! — Exclamó apuntándole de manera amenazadora.

El rubio solo pudo mirar hacia su derecha donde le esperaba la mirada de Kazemaru disculpando actitud de Endo. Goenji suspiró resignado, al fin y al cabo eran demasiados años siendo amigos de ese loco del futbol como para tomarse a mal la contestación.

— Endo, no es por nada, pero si estamos aquí es para ayudarte — Empezó el peliazul a pesar de la mirada amenazante de su amigo — así que estaría bien que nos escuchases. A parte, Goenji tiene razón.

Endo se sentó por fin enfurruñado entre Kido y Kazemaru, algo dispuesto a escuchar a sus amigos, aunque mas dispuesto a hacer lo que le diese la gana.

— Venga, chico emo, ayúdame— Dijo picando a Kazemaru.

— Primero, los insultos y/o agresiones verbales hacia tus amigos no van a conseguir mas que estos se levanten y te dejen — le respondió tranquilamente este sin importarle la broma — Segundo, lo que ha pasado tampoco es motivo para ponerse hecho una fiera. Tercero, deja las tonterías a un lado, piensa por una vez en tu vida y lo veras todo mas claro. Y ya está.

— Hay que ver lo diplomático que te has vuelto desde que estudias psicología — le dijo Goenji.

— Hay que ver lo idiota que se ha vuelto desde que estudia psicología—Le picó Endo, molesto por la evidente razón que tenia Kazemaru.

— Gracias Goenji, eso y la meditación me ayudan a soportar a ese. Endo te repito que los descalificativos no consiguen nada.

— Tu discursito tampoco.

— Aunque esta bien que canalices tus emociones y no las reprimas, creo que estas siendo un poco... ¿idiota?

— Menos mal que eras tú el diplomático.

— Nadie ha dicho que la paciencia fuese infinita.

Kido y Goenji observaban esa especial pelea como si fuese algo normal. Aunque la verdad es que lo era. Normalmente cuando Endo tenía alguna pelea con Natsumi o simplemente se frustraba por algo de la universidad, primero daba vueltas por la habitación, acto seguido Kazemaru intentaba razonar con él sin éxito, Endo maldecía y picaba a Kazemaru, nuevamente intentaban razonar y por ultimo empezaban a picase mutuamente. Al principio Kido y Goenji solían apostar por quién ganaría pero al ser siempre el peliazul el ganador había perdido la emoción.

— Kido, 10 a Endo.

— Ya se que te sobra el dinero pero tampoco es para que lo tires.

— Hoy ganará. Esta enfadado. Si quieres apostamos algo más.

— ¿Como que?

—10 y me presentas a una chica de tu clase — Respondió rápidamente el rubio— Morena, algo alta y...

— Vale, vale ya me dirás. A cambio ¿5 balonazos a quien yo quiera?

— Hecho.

Cerraron la apuesta justo a tiempo para prestar atención a las últimas frases de la pelea.

— Al menos a mi no me confunden con la chica de la relación — Le recriminó Endo a Kazemaru.

— Al menos yo tengo una relación.

Jaque mate. Endo desvía la mirada y por fin el enfado se le va. Kido solamente extiende la mano hacia Goenji quien le entrega el dinero, pensando en la oportunidad que acaba de desaprovechar.

— Siento haber sido tan cortante pero lo necesitabas para bajar a la realidad — Dijo Kazemaru apoyando la mano en el hombro de Endo.

— Soy idiota — responde este con la cabeza gacha.

— No. Bueno puede que un poco.

— A eso le llamo yo ser un buen amigo —bromeó Kido riéndose — De todas formas, Endo ¿nos puedes explicar que ha pasado?

— Bueno pues…

Una chica de pelo azul esperaba nerviosamente a que la dueña de la casa, una de sus mejores amigas, le abriese la puerta. Había quedado hacía media hora y si no llega a ser por Kogure hubiera llegado a tiempo. "Demonio de chico, seguro que Natsumi esta enfadadísima" pensó la chica. El malhumor de su amiga era bastante famoso. No es que fuese mala persona, simplemente era una de esas personas a las que no debes enfadar. La puerta se abrió lentamente y a la chica le pareció la puerta de una vieja casa encantada desde la que saldría algo peligroso para matarla. En cierto modo era eso lo que se estaba asomando por la puerta. Natsumi más enfadada que nunca, con la mirada dura como el hielo y el ceño fruncido.

— Jeje ¿Hola? — dijo Haruna nerviosa, esperaba que al menos le dejase hablar por última vez con su hermano.

— Hola, Haruna — respondió Natsumi con voz de ultratumba diciendo su nombre despacio — Tal vez quieras pasar ahora que por fin has llegado. Tarde.

— Perdón, perdón, perdón. Fue Kogure, lo juro — se disculpó la peliazul entrando rápidamente a la casa, para tomar precauciones — Aki ¡ayuda! Esta vez me mata — Rogó a la chica castaña que estaba en el salón de Natsumi.

Aki se limito a dejar su taza en la mesa y poner los ojos en blanco.

— Natsu, no asustes a la niña — dijo pesadamente — Haruna, ven a la hora.

— Ay que sí, que sí, os digo que fue por culpa de Kogure. — respondió Haruna, empezando a hablar mucho y muy rápido mientras se sentaba al lado de Aki — Verás, es que se le ocurrió la idea de ir a la feria. ¿A quien se le ocurre ir con este tiempo? Si al menos me hubiera avisado. El caso, ya sabéis como es, y claro tuvo que ir a todos los puestos y…

— Y eso fue vuestra cita que nos dirás mas adelante. Ahora, por favor, atended a la dueña de la casa.

— ¡No fue una cita! — Exclamó haciendo un puchero Haruna-

— He dicho atended a la dueña de la casa — Respondió Natsumi otra vez con voz de ultratumba.

— Solo intento aclarar el malentendido. Además, no creo que sea tan importante lo que te haya pasado.

— Haruna… — empezó a decir Aki pero fue interrumpida por Natsumi.

— Déjame a mi, querida — dijo mientras se inclinaba hacia Haruna, con cara de homicida — Del mensaje "He roto con Mamoru. Venid a mi casa a las 5", aparte de la hora ¿¡Qué parte no entiendes y te parece poco importante!

— Ah, que habéis roto, vaya jeje — La verdad es que la chica no había leído muy bien el mensaje, y por eso se había metido ahora en ese lío. — ¿Puedo preguntar que pasó?

— Eso es precisamente lo que te iba a decir. Pasó que discutimos

— Eso lo entendimos todas.

Natsumi las fulminó a ambas con la mirada. Estaban hablando como si fuese fácil decir el motivo por el que ella y Endo habían roto. Era cierto que desde hacía tiempo se llevaban a matar, aunque siempre se habían llevado algo mal. Y esa situación habían empeorado desde que habían dejado el instituto. Entre los estudios, los trabajos, exámenes de la universidad y demás tenían poco tiempo para verse y cuando se veían, discutían. Pero ella nunca había pensado que llegarían a romper. Cualquier pareja normal tenía alguna pelea, algún caso de celos, o cualquier cosa. Pero lo de ese día había sido demasiado.


Y ya! Si os dejo con la intriga ( bueno, tampoco es tanta intriga) de que fue lo que pasó, pero así es el prólogo.

Como siempre, acepto reviews, críticas, a poder ser constructivas, recomendaciones... En fin que me digais si os gustó o no.

Matta nee!