Mi vida
-Fue un accidente grave, si ella vuelve a caer no garantizo que su rodilla aguante-dijo un hombre de bata blanca frente a los tres chicos
-Sakura no volverás a montar en patineta-dijo severo el chico de cabello rubio
-No, No me puedes quitar eso, eso es mi vida-decía entre lágrimas la chica
-¡Las cosas son como son Sakura y tú no volverás a montar una patineta!-grito enojado
-¡Si mama y papa estuvieran aquí ellos me apoyarían!-grito recibiendo una cachetada por parte del rubio
-Pero no lo están-dijo enojado dando media vuelta para irse
…
El ruido del despertador comenzó a sonar por toda la habitación obligándome a abrir mis ojos-Un sueño-susurre mirando a mi alrededor-como odio ese sueño-murmure levantándome, dirigí una de mis manos a la mesa apagando el despertador y me dirigí hacia el baño, después de una buena ducha me cambie y me puse mi uniforme que constaba de una falda azul oscura una camisa blanca y un abrigo el cual siempre me amarraba en la cintura, agarre mi cabello en una coleta alta como siempre y Salí de la habitación, camine hasta la cocina y vi un pequeño papel sobre la mesa.
"Sakura el café esta echo, prepárate algo para desayunar, nos vemos en la tarde adiós"
Decía la pequeña nota, mire el reloj notando que me quedaban 10 minutos-No tengo tiempo para esto-murmure sacando un pan para luego agarrar las llaves, mi patineta y salir del apartamento.
….
Mi nombre es Sakura tengo 16 años y estudio en el instituto de Konoha este es mi segundo año, vivo con mis dos hermanos mayores Karin Uzumaki de 26 años y Naruto Uzumaki de 23, nosotros no somos hermanos de sangre pues yo soy adoptada, los padres de ellos me adoptaron a mis seis años, y ambos murieron cuando yo tenía 12 años, mi vida siempre ha girado en torno al Skateboarding desde que lo conocí a mis 10 años, mis padres siempre me apoyaron en eso igual que mis hermanos pero después de la muerte de mis padres y del accidente que tuve un año después mi hermano me prohibió volver a montar en patineta no volví a participar en una competencia, tuve que dejar lo que más amaba hacer por las personas a quien yo más amaba pero las cosas no salieron como esperaba el tiempo paso y la vida nos cambió, nosotros cambiamos y ¿maduramos? Hace ya dos años que mis hermanos se concentrara en sus propias vidas, le dedicaron todo a su trabajo y a sus respectivas parejas yo por otra parte volví a lo que hacía y me volví una de las mejores Skateboarding de todo Japón he sido la campeona de la competencia anual de Skate durante estos dos años y ahora voy por mi tercer trofeo, y creo que hasta ahora lo único que me desanima es el hecho que ninguno de mis dos hermanos saben de eso pero supongo que eso realmente ya no importa, deje de darle importancia a eso hace tiempo, ya no era una niña y podía tomar decisiones por mí misma.
….
El ruido del timbre resonó por todo el instituto-Muy bien chicos daremos comienzo a las clases-comento un hombre alto de cabello gris el cual tenía un tapabocas-a ver ¿Yuko?
-Presente-contesto una chica
El profesor siguió llamando a todos los presentes-y finalmente Sakura-llamo mirando por todo el salón notando que no estaba
-¡Aquí estoy!-grito una pelirrosa entrando en el salón, su respiración era agitada y de su boca colgaba un pedazo de pan
-Mm, como siempre-comento el hombre-toma asiento Sakura-dijo el hombre girándose hacia el tablero y escribiendo algunas cosas
La pelirrosa suspiro entrando en el salón mientras terminaba de comerse el pan que traía, miro a un grupo de chicas que la miraban y solo se burlaban, siguió su camino sin prestarles atención-Casi no la logras Sakura-chan-comento un chico de cabello blanco y ojos morados
-Pero lo logre Suigetsu, con eso me basta-contesto la pelirrosa mientras se sentaba al lado de este, bostezo acomodándose en su asiento
-¿No dormiste bien?-pregunto el chico
-Me quede hasta tarde jugando un nuevo juego que compre-contesto la pelirrosa
-Tú no te cansas de eso verdad rosada-comento el chico que se sentaba frente a ellos de cabello negro y ojos negros girándose para verla de frente
-Eso no se pregunta Uchiha-contesto la chica
-Tú no tienes remedio-comento el otro chico frente a ellos, este también era pelinegro pero tenía una coleta alta
-Tú ni hables mucho Shikamaru-contesto la pelirrosa-por lo menos mi fetiche no es dormir-se burlo
-Es cierto tú no puedes hablar mucho Shikamaru-comento un castaño que estaba al lado de estos
-Tu tampoco Kiba así que calla-contesto el pelinegro
-Bueno a callar todos, tengo sueño y esta es la única clase en la que puedo dormir así que no molesten-dijo la pelirrosa recostándose en su mesa, miro hacia un lado notando las penetrantes miradas de las mujeres sobre ella, llenas de furia y celos, una de ellas movió los labios-estúpida-fue lo que dijo, la pelirrosa se giró y cerró los ojos ignorándolas de nuevo.
…..
Estúpida, inepta, metida, rara eso era lo que siempre me decían, ¿Por qué? Eso era fácil de responder eso era porque simplemente no me adaptaba, siempre buscaba algo que llamara mi atención, siempre me metía en problemas, era una Gamer y Otaku amante de las patinetas y que la mayor parte de mi tiempo me la pasaba con hombres, jamás me la lleve con las mujeres, jamás me adapte a ellas, jamás llegue a pertenecer a su pequeño círculo.
También hay otras cualidades de mi apariencia que me hacía atraer aquellas palabras y eso era mi cabello de su extraño color rosa, mis ojos verdes y el hecho de que siempre me ha gustado vestir con ropa holgada.
Las chicas de mi instituto al pasar el tiempo comenzaron a tenerme bronca por el hecho de que siempre ando con los hombres, si eso no les agrada pero en fin, he aprendido a ignorarlas a la final no es como si sus comentarios pudiesen afectarme, me gusta la vida que llevo, me gusta ser como soy y me gusta tener a los amigos que tengo.
….
-¡Vamos Sakura tu puedes!-grito el chico de cabello blanco Suigetsu
-¡Tú puedes rosita!-grito el pelinegro Uchiha
Se podía ver a una pelirrosa saltar diferentes obstáculos con su patineta mientras era animada por varios chicos-Va la última-susurro la pelirrosa patinando con más velocidad hacia las escaleras o más específicamente hacia la barra de metal de la escalera por la cual pensaba deslizarse, la chica se agacho tomando impulso y de un salto llego hasta la barra deslizándose por esta pero antes de poder llegar al final de la barra una lata de gaseosa impacto contra su cabeza haciéndola perder el equilibrio y haciéndola caer estrepitosamente al suelo.
-¡Sakura!-gritaron alarmados los chicos corriendo hacia ella-¿estás bien?-pregunto uno de ellos
-Sí, sí estoy bien no se preocupe solo fue un accidente-contesto la pelirrosa levantándose y dejando ver en su frente una herida la cual comenzaba a sangrar
-¡A ver quién fue!-grito uno de los chicos enojados a lo que los demás también comenzaron a preguntar y exclamar enojados.
-Ya déjenlo-dijo la pelirrosa poniéndose un trapo en la frente-Fu un accidente, no hagan un lio de esto
-pero Sakura-trato de replicar el chico de cabello blanco
-Suigetsu no importa-contesto ella-iré a la enfermería, nos vemos después-dijo la pelirrosa antes de irse
-Deberías de dejar de hacer cosas tan peligrosas Sakurita-comento una chica rubia de ojos azules claros en tono burlón
-Y tu deberías dejar de tomar gaseosa no vaya y te engorde, Ino-comento la pelirrosa sonriendo de lado al ver la cara de enfado que le dedicaba la rubia
La pelirrosa siguió su camino hasta la enfermería-Hinata-san necesito tu ayuda-dijo la pelirrosa tocando la puerta
-Pasa Sakura-contesto la tierna voz desde adentro
Abrió la puerta encontrándose con una mujer alta de grandes pechos, tenía el cabello azul oscuro y ojos color perla-Hola Hinata-san-saludo la pelirrosa sonriendo mientras sostenía el pequeño pañuelo lleno de sangre sobre su frente
-Hay por Dios Sakura ¿Qué te paso?-pregunto un poco angustiada la mujer sentándola en la camilla y buscando todos sus implementos
-No nada no te preocupes solo yo, mi patineta una lata en mi cabeza después mi cabeza en el piso nada más-contesto la pelirrosa
-Haber poniéndolo en palabras sencillas estabas patinando, una lata te dio en la cabeza y caíste al suelo, conclusión fue Ino-dijo la ojiperla untando un algodón de algo y poniéndoselo en la herida
-Auch, y si lo dedujiste bastante bien Hinata-san- contesto la pelirrosa sonriendo
-Bueno no es tan difícil, además has estado demasiado aquí y si no es por una lata es por algo más-comento la mujer
-Sí, los accidentes pasan-contesto ella-Y dime ¿Cómo vas con mi hermano?-pregunto la pelirrosa
-Bien, sabes el me invito a cenar en tu casa mañana-contesto la mujer sonriendo
-¿Si? No lo sabía-contesto la pelirrosa
-Listo Sakura ya termine, te puedes ir a tus clases y nos vemos mañana-comento la mujer
-Sí, nos vemos adiós-dijo la pelirrosa saliendo del lugar
….
La enfermera Hinata Hyuga de 22 años, novia de mi hermano se conocieron en la universidad y han estado juntos desde hace cinco años, ella es una buena persona y ambos están muy enamorados.
Ya todos estaban en clases así que me dio pereza ir a mi salón, camine por el largo pasillo hasta llegar a las escaleras, subí por ellas y llegue a la terraza, me gustaba estar en ese lugar porque hay casi nadie subía y podía estar tranquila, me subí en el techo de la escalera por si acaso y me recosté.
El tiempo paso lento escuchaba los timbres de cambio de hora ¿Cuántos habían sido? ¿Dos tres?-Sabía que estarías aquí-dijo una voz desde abajo, me gire encontrándome con un chico alto de cabello castaño largo y ojos color perla
-Neji ¿Qué haces aquí?-pregunte asomándome
-Me entere de tu pequeño accidente y al no verte en tu salón supuse que estabas aquí-contesto el
-Pero aún no respondes mi pregunta ¿Qué haces aquí?-volví a preguntar
-Quería verte ¿No puedo?-esta vez pregunto el
-Yo no dije eso-conteste volviendo a acostarme sobre el techo, lo vi subirse y acostarse a mi lado
-Oye Sakura ¿participaras en la competencia de Skate de este año?-me pregunto
-Pues claro que lo hare, voy por mi tercer trofeo-conteste sonriendo
-Ya veo y ¿No se lo dirás a tus hermanos?-pregunto
-Sabes lo que pasa cada que intento decírselos, a ellos eso no les importa así que ¿Para qué?-conteste
-Ya veo-contesto mirando hacia el cielo
-¿No deberías volver a clases? Un chico de tercer año tan juicioso, respetuoso como Neji Hyuga no debería de estarse saltando las clases, puede ser un mal ejemplo para chicas inocentes como yo de segundo año-dije burlona
-¿Ha si? Pues supongo que soy una mala influencia para ti entonces-me contesto-pero yo por lo menos no llegaría tarde a mi trabajo, claro si tuviera-me contesto
Mire mi reloj faltaban 10 para las 5:00-¿Cuando sonó el timbre?-pregunte alarmada parándome de prisa-me tengo que ir nos vemos mañana Neji ¡Adiós!-grite bajando del techo y corriendo por las escaleras
Neji Hyuga 18 años, el primo de Hinata, mi mejor amigo y el chico al cual amo desde hace dos años él está en tercero de instituto, nosotros nos conocimos hace cuatro años cuando Hinata y mi hermano comenzaron a salir al principio ni siquiera nos hablábamos pero después de ciertas circunstancias nos volvimos buenos amigos y fue el quien me ayudo a abrirme un poco más a las personas aunque esas personas solo fueran hombres, al pasar tanto tiempo con él fu lo que hizo que lo conociera y me enamorara perdidamente de él, aunque jamás se lo dije, ¿Por qué? Porque sabía que él no sentía lo mismo por mí, lo quería mucho y no lo quería perder confesarle mis sentimientos era algo que no podía hacer.
Respire agitada al estar frente a mi trabajo, abrí la puerta despacio-¡Sakura!-escuche el grito de mi jefa
-Hola Jefa-salude sonriendo
-¡Llegas tarde de nuevo!-grito enojada
-Lo siento, en verdad lo siento mucho-dije mientras me inclinaba
Ella suspiro-No hay tiempo para esto después te regaño por ahora muévete y lleva estos encargos rápido-me dijo mientras me daba unas cinco cajas de pizza
-Como ordene-dije para salir
-¡Pero antes ponte el uniforme!-me grito
-Si-dije sacando de mi maleta el abrigo y la gorra para luego subirme a la bicicleta e irme del lugar, si por si se lo preguntan mi trabajo es de repartidora de pizzas mi jefa la gruñona Anko ella es la que administra el lugar y ordena a los trabajadores, acelere mi bicicleta tenía que entregar rápido las pizzas o si no yo las tendrá que pagar y eso no estaba en mis planes.
El tiempo se pasó rápido de la pizzería a las diferentes casas, por una parte me gustaba este trabajo pues era un buen ejercicio pero por otro era algo agotador andar por toda la ciudad en bicicleta, me baje de mi bicicleta y la encadene en la parte de atrás-Ya llegue-anuncie entrando en la pizzería
-Ha Sakura ¿ya terminaste?-me pregunto Konan, ella es una de las encargadas de hacer las pizzas, ella es una mujer muy hermosa de cabello azul y ojos color café
-Si ya acabe-conteste sentándome-¿Y el resto?-pregunte recostándome sobre la mesa
-Aquí estamos-dijeron dos voces tras de mí, me gire encontrándome con Deidara el otro cocinero y lee el otro repartidor
-Ha chicos ¿Dónde andaban?-pregunte
-Cambiándonos para irnos-contesto Deidara
-Así que no te preocupes por nosotros mi cerezo-dijo dramático lee, ese chico había estado enamorado de mi desde que comencé a trabajar con él, era realmente loco pero buena persona
-Sí, claro-respondí mientras escuchaba las risas de Konan y Deidara
Oye Sakura por cierto ¿Qué te paso en la frente?-me pregunto Konan
-Ha, un pequeño accidente con mi patineta-conteste
-Ya veo-contesto ella
-Bueno yo también ya me voy, nos vemos mañana chicos-dije para agarrar mi maleta y mi patineta
-Sakura espera-escuche a Konan, me gire y ella me extendió una bolsa-ten, llévate esta-me dijo mientras me sonreía
-Gracias Konan-dije-bueno ahora si adiós-dije para salir
Si adiós Sakura-escuche decir
Patine despacio por las oscuras calles no tenía afán de llegar a casa, aun traía la camisa y la gorra del trabajo, baje de mi patineta y entre en la casa, todo estaba oscuro ya mis hermanos debían estar durmiendo, abrí la nevera y saque un poco de jugo destape la bolsa y me senté en la mesa a comerme el pedazo de pizza que me había regalado Konan, después de comer me quite mis dos uniformes y los lave para luego irme a mi cuarto, mire el reloj las 10 Pm, mis días siempre eran iguales, mi vida simplemente seguía un curso, vivir era lo único que podía hacer, no me quejaba realmente me parecía que no podría pedir una vida mejor.
Hola, pues aquí he traído el primer capítulo de esta historia espero os guste.