Notas de la autora: Hola nuevamente a todos! he vuelto con otra historia, que esta vez, es mucho más larga... que es digamos, mi manera de ver la continuacion de la serie. Eso si, se supone que no hay spoiler de la pelicula, puesto que ni siquiera yo la he visto aun... aun asi, es una historia con su pizca de drama, problemas, situaciones sin resolver y mucho llanto (sobretodo eso ultimo)... solo espero que no les aburra...
Disclamer: FMA no me pertenece, escribo todo esto por gusto y... por que me dio un ataque de escritora compulsiva...(comprendanme, por favor!)
ADVERTENCIA: Y nuevamente este es un Fic con una pizca de Shonen ai, a mi manera. Eso si, apesar de que en este episodio no hay demaciado (a parte de algunos pensamientos por ahi), a medida de que avance la historia, el contenido de Yaoi ira aunmentando tambien (si, lo se, soy mala... pero asi disfruto mas escribir... y que viva el Yaoi!)... y lo mas importante (si, soy una niña muy distraida...)esta es una historia Ed x Al para quien no sepa (que ademas, son mis favoritas).
Y por ultimo tenemos la simbología el texto! (se dice simbología?... oh, definitivamente estudiar con mapas en la clase de historia, le hace mal a mi cabeza)
Cursiva: pensamiento
Negrita: conversación
Normal: Narración
y finalmente, las barritas son cambios de escena... espero que les quedase claro... y que lo disfruten! wi wi!
°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°
Deseo de llorar
Inmensa, infinita y cerrada. Así era, una puerta realmente enorme que conducía a pocas como a muchas partes. Era tan solo la Puerta que los separaba. Era la puerta donde todo había comenzado. Era la puerta donde todo había terminado. Era simplemente aquel sitio, que pedía tanto para poder cruzar, y que ahora se encontraba abierta de par en par solo para que él pudiese pasar. Había pagado aquel precio. Podría volver después de tanto tiempo. Finalmente podría volver.
Y no fueron solo unos días, ni semanas, ni meses, fueron tortuosos y largos años los que pasaron para que el esperado encuentro ocurriera… después de tanta búsqueda de parte de ambos, al fin estaban uno frente al otro. Al fin, sus miradas de dulces colores se volvían a encontrar.
Tanto tiempo y ahora se encontraban a tan pocos pasos de distancia, por lo que lo primero que obviamente ocurrió, fue la reacción del mayor de los dos chicos, que se encontraba emocionado a tal punto, que creía que se le saldría el corazón de su pecho. Y era verdad, ya que no podía dejar de pensar en lo cerca, en lo tan cerca que se encontraban, como en tantos sueños que tenia sin terminar, que en aquel mundo frió, extraño y cruel, tenia tan a menudo, donde recordaba a aquella persona tan bien como se le fuese posible.
Si, aquella persona que extrañamente ahora tenía abrazada, quizás solo por reacción, quizás por sus fantasías olvidadas, quizás… tan solo quizás, por que aquel momento lo ameritaba.
Juntos, al fin juntos- Se repetía una y otra vez, mientras lo abrazaba con mayor fuerza, como si se tratara de un sueño del que odiase despertar, como si al soltarlo por un instante, desapareciese de sus manos para siempre. Eso, realmente lo aterraba.
Niisan…- El más pequeño tenia una mirada brillante de color pardo. Se sentía de manera maravillosa, por que comenzaba a sentir el calor de aquel abrazo. Se sentía protegido. Se sentía completo. Se sentía inmensamente feliz, a pesar de que en aquel momento, no sabia que más decir.
Al… mi pequeño Al- Fueron las primeras palabras del otro chico, por las que el joven de ojos pardos, sonrojo al notar la pequeña y expresiva palabra "mi" en aquella corta oración- No te alejes jamás de mi- Continuo lentamente.
El chico de ojos pardos solamente continúo el abrazo. Ahora estaba con su hermano mayor, por el que había buscado por tanto tiempo. Quizás, no necesitaba palabras para describir aquello que sentía en el momento… no necesitaba pensar en aquellas palabras.
Niisan…- volvió a repetir- tu tampoco me dejes… no me quiero sentirme solo nuevamente… no quiero…- mientras que seguía, ahora era el menor de los dos chicos el que abrazaba al otro con fuerza, con cierto miedo. Solo recordaba cada palabra que le habían dicho con insistencia cada día, desde que había comenzado su búsqueda…
"ríndete, te estas haciendo mal juntando tantas falsas ilusiones, él jamás regresará, por que lo que hizo, lo hizo por ti. Lo sabes bien, él jamás regresara. Jamás…"- aquellas palabras se las decían muy habitualmente, de la misma manera en la que pasaban por su mente con frecuencia.
Ahora él esta aquí, conmigo- pensaba, mientras se reía en cierto modo de si mismo, cada vez en que llego a pensar, a causa de la desesperación, en desistir de su búsqueda. Ahora solo sonreía de eterna felicidad. Ahora estaba con él.
El tiempo había pasado rápido, al menos para ellos. Ahora se encontraban sentados uno al lado del otro, junto a un tronco de un pequeño árbol cercano. El más pequeño entre ellos, estaba apoyando su cabeza en el hombro del mayor, sin decir ninguna palabra, solo con una linda sonrisa en el rostro- Niisan…-dijo de pronto con sus delicados labios. Él otro solo sonrió de manera amplia y plena.
Al… por favor…- Decía con mayor lentitud cada vez, en aquel paisaje que les rodeaba solo de hojas y cielo- vuelve a decirlo… y no pares… no calles… no sabes cuanto he esperado para oír nuevamente tu dulce voz… cuantos sueños he tenido en los que tú te alejabas de mi… tantos, tantos sueños, en los que no he…-se detuvo un momento, retractándose de una idea, pequeña y sencilla que con la misma fugacidad con la que apareció, intento borrar de su mente… sin éxito, solo para continuar diciendo- …en los que no he…podido oírte.
El otro chico se sonrojo un poco. Estaba clara la razón del por que, pero aun así, acepto la petición de su hermano- Niisan… Niisan… Niisan…- Repitió una y otra vez, lenta y constantemente.
Ya era de noche, una bella luna llena y un hermoso manto de infinitas estrellas los cubría a ambos. El chico de dorada mirada, tenía su atención en su pequeño hermano más que nunca, que ahora dormía recostado en sus brazos. Desde el atardecer que se encontraban en aquella posición, ya que el más pequeño se encontraba ya exhausto con tantas emociones repartidas en una palabra… pero sobre todo, infinitamente feliz.
El chico de ojos dorados, aun no podía creer que después de tanto, al fin se encontraban juntos, como siempre debió haber sido. Asimismo, había algo que lo molestaba, algo que no lo dejaría en paz hasta encontrar una solución. Y ese algo, era tan solo una pregunta que el mismo se había formulado.
Se preguntaba, quizás de manera algo tortuosa el por que, de su anterior pensamiento, aquel pensamiento que no se atrevió a expresar a su querido hermano, a aquel inocente persona por la que lo daría todo una y otra vez si era necesario, a aquel persona a quien tenia puesta firmemente toda su confianza. Y aun así, en aquel momento no se atrevió a decírselo- por que…- se preguntaba, solo buscaba el por que había pensado en aquello tan… pecaminoso?-tantos sueños…en los que no he… podido besarte…- se repetía aquella sensación- por que estoy pensando en esto?-se preguntaba para si mismo- por que? Si es tan solo mi hermano, mi pequeño hermano, por lo que debo protegerlo… y cuidarlo…
Luego de eso, detuvo sus pensamientos nuevamente. Su hermano tenia lo que parecía una pesadilla, su respiración estaba agitada, y se movía repentinamente- Nii…Niisan… no… te vayas… no me… dejes… por… favor…-Decía el pequeño aun entre sueños-No me dejes… Niisan…-
El mayor lo contemplo un poco con su mirada, luego de que le saliera una pequeña risita al notar que a pesar de todo el tiempo que había pasado, su pequeño hermano tenia aun aquella costumbre de hablar entre sueños. Por lo mismo, y para no tener que seguir viéndolo entre palabras y desesperaciones, decidió finalmente en despertarlo, pensando antes para sus adentros-Mi querido Al, sin importar el tiempo que transcurra, me he dado cuentas que sigues siendo el mismo chico tierno del que yo… del que yo…por el que yo siento tanto aprecio, y aun que vaya en contra de todo lo que siempre he soñado y anhelado, no voy a quitarte lo que más me gusta de ti… tu inocencia…tu pureza… y tu bella sonrisa- acto seguido, meció ligeramente a su hermanito dormido, hasta que finalmente abrió sus ojos lentamente, y después de darse cuenta de encontrarse nuevamente en la realidad, como le era acostumbrado cuando aun ambos eran pequeños, el menor de los dos hermanos se lanzo a los brazos del otro sin querer soltarlo, entre lagrimas que recorrían rápidamente sus suaves mejillas.
Aquella fue una larga noche, entre palabras y llantos, en especial los del pequeño Alphonse, quien había reprimido aquel deseo de llorar hacia mucho tiempo. Había prometido no llorar hasta encontrar a su hermano, había prometido ser fuerte hasta que le encontrase, lo había prometido a pesar de todo lo que necesitaba llorar de vez en cuanto, a pesar de que en aquel entonces, en aquel transcurso de su búsqueda, ya se le permitía "sentir", pero el mismo no se lo permitía, no quería, si su hermano no estaba ahí. Ahora si estaba, junto a él, consolándolo mientras acariciaba sus cabellos, tratando de calmar su llanto desesperado.
Así fue casi toda la noche, entre llantos que comenzaron a surgir de ambos. Lo único que querían era que jamás terminase aquel momento, en que después de tantos tormentos, después de tanta soledad, después de tanto, al fin podrían estar juntos y felices... aparentemente.
A la mañana siguiente, el cielo se encontraba completamente despejado. El primero en despertar fue el hermano menor. Se movió lentamente haciendo todo lo que estuviese a su alcance para no despertar a su querido hermano mayor. A pesar de que aun sentía su rostro ligeramente húmedo a causa de todo lo dicho la noche anterior, se quedo sentado frente al chico de dorada mirada, observándolo una y otra vez. Aun se encontraba dormido. - como se nota que entre los dos, sigo siendo más débil…- pensaba mientras lo seguía observando- tu no llorarías tanto como yo, verdad?... no, tú eres fuerte, muy a diferencia de mi…-nuevas lagrimas aparecieron de sus mejillas mientras pensaba en aquel secreto que muy en el fondo deseaba transmitir, que realmente deseaba compartir- debería decírtelo, verdad? pero… tengo miedo, mucho miedo de decírtelo y que tu me odies por ello… y que te alejes por siempre de mi… por no ser… por no ser…el chico que tu esperabas…-mientras se destrozaba por dentro, sin darse cuenta de nada, solo pronuncio- y que… me odies… por no ser a quien buscabas…-fue cuando se dio cuenta de que su querido hermano mayor ya había despertado, y se encontraba frente a él con una profunda sensación de tristeza en el rostro, sus ojos llorando lentamente como los suyos, y en silencio, esperando… solo, esperando.
No pasó mucho tiempo hasta que el más joven entre los dos chicos se levantara de su lugar, antes de que el otro alcanzase a decir la mas minima palabra, el chico de pardos ojos comenzó a correr verdaderamente aterrado.
Si, lo sabia, su hermano se lo preguntaría… su hermano le exigiría una razón por lo que había dicho… su hermano… pero sentía que las palabras que saldrían de los labios de su hermano mayor, tendrían la capacidad de matarlo… si la respuesta era lo que el creía finalmente,de seguro serian palabras capaces de acabar con su vida… al menos él lo sentía así.
No había alcanzado a correr demasiado cuando sintió la mano de él, de su hermano, que le impedía el paso. Intento zafarse, pero le fue imposible. Estaba realmente desesperado, lo único que deseaba en aquel momento era escapar de aquel lugar, de aquella persona, de aquella pregunta que no quería formular- Me odiaras?... si te lo pregunto, estoy seguro que mentiras, por que detestas verme llorar casi tanto como me duele hacerte daño a ti… pero si no te pregunto… si no lo hago, me quedare con esta sensación en el alma por siempre… pero no me importa si así no se que me odiarías por no ser lo que esperabas… al menos así jamás sabría que me odias…-y así, mientras inútilmente trataba de escapar de aquella persona que busco por tanto tiempo, pensaba en aquellas palabras que le aterraba preguntar.
Mientras tanto el otro chico, solo lo sostenía con su brazo derecho, algo confundido-"y que… me odies… por no ser a quien buscabas"-resonaban aquellas palabras casi inaudibles en su cabeza-a que te referías?... por que huyes de mi!-dijo finalmente algo alterado.
…- El otro chico solo detuvo su intento de escape, pero no dijo nada.
Al! Respóndeme!- Su paciencia se estaba agotando, no soportaría más con esta interrogante. A que se refería, era lo único en lo que podía pensar, y el ambiente se hacia cada vez más intenso, casi insoportable.-Respóndeme!.
…-El chico de ojos pardos no se atrevió a pronunciar palabra alguna. Por cada palabra que salía de boca de su hermano mayor, su corazón ardía con mayor intensidad… con más miedo… con más terror de aquella respuesta a la que estaba seguro, su corazón no estaría dispuesto a recibir. Por lo que tampoco se atrevía a mirarlo fijamente a los ojos.
Una respuesta, es todo lo que te pido… por favor…-se había dado cuenta que estaba gritando, y que la escena le recordaba de pronto algo que él ya había vivido, algo que había querido olvidar, pero que no había podido.Aquella ocasión donde él era el no se atrevía a preguntar, algo que lo quemaba por dentro, que lo hacia sufrir cada noche y cada día. Sin contar el hecho de que no quería vivir semejante experiencia nuevamente, y sentir que en cualquier momento perdería para siempre a su querido hermano menor.
Y así, sin querer, se perdió momentáneamente en aquel recuerdo, en aquella sensación. Al mismo tiempo en que quizás, por accidente, soltó la mano de su hermano menor, dejándolo libre para escapar, cosa que para tristeza del mayor, este hizo.
°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°
Notas de la autora 2° parte: he aqui el 1° capitulo de esta historia... en fin, a que no adivinan cual es el secreto del pobre Alphonse... je, je, les dejare un rato en suspenso haber si alguien lo descubre (aun que lo mas seguro es que ya muchos lo sepan... creo)... aun asi, no les dare pistas tampoco, por que lo sabran más exactamente en los siguientes capitulos...
Bueno, eso, espero que hasta ahora les gustase mi pequeña historia de reencuentro (la cual espero continuar lo antes posible... siempre y cuando las tareas, los trabajos y los objetos voladores no identificados me lo permitan)... asi que... hasta la proxima!
Por cierto... muchas gracias a la gente que vio mi anterior y muy cortita historia de Alphonse, me hicieron tan feliz de saber que alguien la leyo...
En esta ocacion, si el tiempo les alcaza y la buena voluntad se apodera de ustedes, les pediria consejos, sugerencia y demases, para ver que tal les parecio este capitulo y así saber que mejorar para el proximo capitulo... así que, Reviews por favor! por una buena causa!
