Nota: Los personajes de esta historia no me pertenecen, son propiedad de Tite Kubo c:
-No me hables más…- Dolía mucho pero era lo correcto.
-Pídeme todo menos eso… Sabes que eres alguien muy importante para mí- Y él lo era para mí, pero yo no era importante en su vida de la forma que quería.
-Lo sé, pero no puedo seguir así- Dije decidida.
-Ya no tengas sentimientos por mí- Dijo él. Claro como si fuera tan fácil... -Eso me gustaría- contesté. Hubo un silencio que parecía interminable, parecía que el suelo nos mostraba algo interesante porque no quitábamos la vista de él.
-Entonces, ¿seamos novios?- Cuantas veces había hecho él esa pregunta, y cuantas veces mi respuesta había sido no… Su propuesta perdió seriedad cuando vi su rostro, claramente me decía que no era lo que él quería.
-No es lo que quieres ya, y por más que yo quiera no te puedo obligar… Lamento darme cuenta tan tarde de lo que siento por ti-
-Karin... lamento todo esto-
Eso fue lo último que dijo, ya no había más que hacer. Durante todo ese tiempo había sido lindo con ella, la había hecho sentir especial y él quería que fueran algo más que amigos pero ella por dudas no aceptó, tuvo miedo a sufrir, nunca pensó que de todos modos llegaría el día en que le doliera tanto haberle dicho que no. Él había puesto los ojos en otra chica y todo el amor que un día sintió por ella se había evaporado. Sólo quedaban los sentimientos de amistad y ella no estaba segura de querer nada más eso. Ella le había hecho daño, rechazándolo más de 3 veces y ahora que él no estaba a su lado sentía su ausencia, quería despertar de ese mal sueño.
Que él le hablara de ella había sido como estar en el infierno mismo. Sintió que alguien tomo su corazón y lo apretó hasta dejarlo de una manera irreconocible. ¿Qué iba a hacer? ¿Cómo iba a llenar aquel gran vacío que dejaba en ella? Sabía que lo correcto era olvidarlo, dejar de sentir cosas por él, pero convivir a diario con él, ver esa sonrisa en su rostro y automáticamente pensar "Qué lindo" no ayudaba mucho. Por eso pidió que no le volviera a hablar. No encontraba otra solución y se arriesgó, insistió y él cedió…
Pasaban los días, sus amigos lograban distraer el vacío que sentía en su corazón. Ella sabía que no le volvería a hablar. Seguramente él tendría otros asuntos que atender con su novia.
Antes de pelear, en una noche de desvelo él le había dicho "-Si me dieran a elegir, te elegiría a ti antes que a ella-" Y eso la había hecho sentir feliz pero el hecho de que pasaran más de tres días y él no le hubiera tratado de hablar le había demostrado que él no haría nada por volver a esa "amistad", que le había mentido por primera vez en su vida… La había olvidado, él no la había escogido.
No le quedaba más que llorar su perdida, resignarse y seguir adelante. Tarde o temprano tendría que volver a ser feliz. Y esta vez, definitivamente, no dudaría…
Pues como dice en el summary, escribí esto en un día de nostalgia. Espero que les agrade aunque sea un poquito c':
¡Saludos, nos leemos!
