HOLA ... ES MI PRIMER FIC Y LA VERDAD ES QUE LO TENIA EN MI CABEZA DESDE HACE MUCHO ESPERO Y NO ME LINCHEN POR SER PRIMERIZA Y TAMBIEN ESPERO QUE LES AGRADE... NO PIENSO ABANDONARLO TAL VEZ ME TARDE (AUNQUE NO CREO) EN ACTUALIZAR OJALA LES GUSTE.
PD. ES G!P SI NO LES GUSTA NO LEAN, NO TENGO CONOCIMIENTO MEDICO NO ME MATEN SI LA RIEGO PLIS BESOS
DESCARGO GLEE NO ES MIO Y SI LO FUERA JAMAS HABRIA TERMINADO BRITTANA Y HABRIA FABERRY HASTA EN LAS PAREDES :D
ENJOY
Capitulo 1 Escalofríos y adiós
Pequeños rayos de luz se colaban por la ventana, logrando que Rachel abriera perezosamente uno de sus ojos, se encontraba despierta desde hacía unos minutos pero no quería enfrentar ese día, tenía mucho miedo de lo que pasaría a partir de ese momento, y más aun no quería sentirse sola, el simple hecho de levantarse y recordar que en unas horas su casa y su vida cambiaria radical y dramáticamente como ella pensaba o creía, la hacía no querer levantarse jamás.
Amaba a su hermana y el simple hecho de saber que no la vería en un largo tiempo, hacían que su corazón se apachurrara.
Estaba inmersa en sus pensamientos, en su tristeza inconsolable cuando un torbellino moreno abrió la puerta de su recamara y de un brinco sin previo aviso se le echo encima
-Santana no! - trataba de defenderse inútilmente de un ataque masivo de cosquillas
-Es hora de levantarse enana, hoy es el gran día! – decía entusiasmada mientras se quitaba de arriba de su hermana
-No, no quiero yo hoy me rehúso a afrontar la realidad! – dramatizo Rachel poniendo una mano en su frente tirándose en el colchón luego de levantarse brevemente
-anda levántate – le decía su hermana pero la morena solo gruñía bajo las sabanas - vamos Rachel que hoy es mi gran día, anda levanta tu trasero – decía esto último mientras se acomodaba y daba una palmada en el trasero de la chica
- no – dijo rotundamente – no quiero, me niego, me rehúso a que te vayas – la voz sonaba ronca y un poco quebrada, hecho que no paso desapercibido por su hermana
- hey gnomito tranquila, volveré en vacaciones de navidad y pascuas… spring break – trataba de descubrirla pero Rachel solo se aferraba más a las cobijas
- pero para diciembre aun falta demasiado son como 4 o muchos meses entiendes? – Por fin se descubría y se sentaba en la cama para quedar de frente a su hermana – ¡CUATRO O MAS MESES! – unos minutos en silencio pasaban Santana no sabía si era prudente hacer una broma al dramatismo de su hermana o quedarse en silencio - ¿que voy a hacer si no estás aquí? – lagrimas rodaban en la mejillas de Rachel – te voy a extrañar demasiado – al momento de decir esto último se aferraba a su hermana que devolvía el abrazo pero se separaba de ella pesadamente había cambiado de decisión, no podía arriesgar a su hermana
- Rachel no me gusta la actitud que estas tomando, así que lo mejor será que no valla… – Santana se levantaba de la cama y caminaba perezosamente a la puerta
-¿Qué? – Rachel se levantaba de la cama de un brinco, se había quedado muda con esa respuesta definitivamente era algo que no esperaba – San espera no no espera como que no vas – tomaba a la chica por el brazo y la hacía girar hacia ella
- dije que no voy Rachel – la más alta la miraba segura y en su tono de voz se podía sentir el dolor de aquella decisión – no puedo irme con la conciencia tranquila sabiendo que te vas a quedar toda deprimida… Rachel yo no podría vivir con la culpa de cualquier cosa y si por mi ausencia decidieras hacer alguna estupidez? – Santana conocía perfectamente el estado de depresión al que podía llegar su hermana y también las tendencias de esta, de solo pensar en lo que podía hacer Rachel en algún extremo se le estremecía el esqueleto
- perdóname San – había sentido vergüenza con lo último que le había dicho la chica – tú tienes que ir, lamento haberme portado egoísta – hablaba con sinceridad se había dado cuenta de la actitud infantil que había tenido desde hacía varias semanas ahora se sentía apenada por su comportamiento hacia una oportunidad buena para su hermana – no renuncies ahora y menos por berrinches como los míos yo sé que es tu sueño Santana has luchado mucho para eso – Rachel sabía que no había nada material que su hermana quisiera más que eso había peleado con medio mundo para conseguir esa oportunidad – tú debes ir y enseñarles quien es Santana López Berry – dijo convencida
- no confió en ti Rachel - soltó ya que solo había pensado en lo que la pequeña dramática podría hacer
- pues exijo que confíes en mi – tomaba el rostro de su hermana entre sus manos – te juro que no hare nada y no me deprimiré… mucho… a menos que me digas que serás infeliz al ir ahí – Santana negó con el rostro y la morocha sonrió ampliamente y le dio un beso en cada mejilla
- Rachel joder con tu nariz casi me picas un ojo – dijo entre risas y la morena solo alcanzo a pegarle en el brazo – hay calma salvaje – apenas se podría cubrir de todos los peluches que le eran aventados ya que el pequeño golpe se había convertido en un ataque masivo hacia su persona y como defensa y único acto reflejo solo se acerco lo suficiente a su hermana y con un simple movimiento de la mano dio un manotazo con la parte exterior de su mano en su entrepierna de la chica en el momento en que el golpe fue completado la más pequeña detuvo el ataque en el acto mientras se incaba y ponía sus manos en la zona afectada
- maldita – Rachel se aferraba fuerte a la cama con una mano mientras con la otra seguía cubriéndose – te has de descuidar y te daré tan duro que te quitare lo virgen
- perderás tu tiempo intentando quitármelo – Santana se reía mientras se acostaba en la cama boca arriba pero con ambas manos cubriendo a su amiguito
- las atenciones de Manuela no cuentan hermanita – Rachel se ponía a su lado, mantenía una expresión de burla hasta que vio la sonrisa orgullosa de su hermana – no te creo… por qué no me lo dijiste antes? Con quien lo hiciste? – Rachel se colocaba de manera correcta para ver a Santana
- con quien más… con ella – se tenso ante el recuerdo y Rachel pudo notarlo
- que le diste hermana "toloache"? – trataba de calmar el ambiente
- nop… amor así que muérete de la envidia hermanita, mi pequeño gran amigo ya conoció a alguien más que a la Manuela esa que tanto te cae bien
- estabas muy enamorada? – Rachel sentía una gran curiosidad e ignoro el último comentario
- mucho – se limitó a responder Santana – y sigo enamorada
- y que pasaría si allá donde vas te enamoras de nuevo San? – la pequeña pregunto con algo de miedo sabia lo delicado que era ese tema para su hermana
- no yo no voy a volver a volver a enamorar jamás – santana sonaba segura de sus palabras y se limitaba a mirar al techo tenia la mirada dolorosamente triste – no podría
- San yo creo que tal vez es tiempo de que avances, de que la dejes ir… - no pudo continuar no encontraba las palabras correctas
- no puedo Rach – sintió como guardo silencio su hermana – cada vez que cierro los ojos ella está ahí – cerraba sus ojos para gustosa comprobar lo dicho – es como un fantasma que está pegado a mi… me lastima pero yo siento que si desaparece moriré – pequeñas lagrimas amenazaban con salir de sus ojos, cada vez que la recordaba pasaba lo mismo – sabes yo… yo aun escribo cada lunes sin falta, tengo fe en que reciba mis cartas – hablaba cada vez más bajo parecía más bien que trataba de convencerse a sí misma
- lo siento San – y en verdad lo hacía le partía el alma ver a su hermana así -pero, no has pensado quizá que ella no recibió nunca nada… que… que ella no recibió el boleto – pensó bien en lo que iba a decir probablemente se lamentaría pero tendría que intentarlo – o tal vez digo solo tal vez ella no era quien decía ser… tal vez ella no era tu – fue interrumpida por Santana que bruscamente se sentaba y secaba sus lagrimas
- no Rachel yo sé lo que sentí y vi en sus ojos lo que ella sentía y no era ninguna mentira se que ella fue, es y será el amor de mi vida, yo no imagine nada ni vi cosas donde no eran – Santana se acercaba a su hermana y miraba suplicante de comprensión mientras tomaba las manos de la chica entre sus manos – yo se Rach que voy a volver a ella porque mi destino está ahí lo sé desde que sentí ese escalofrió recorrer mi cuerpo cuando nuestras pieles se rosaron por primera vez – Santana hablaba con pasión mirando hacia los ojos de su hermana – desde ese simple rose mi cuerpo y mi alma se volvieron de su propiedad… cuando realmente te enamores entenderás de lo que hablo – hablaba segura de sus palabras por qué sabia que aunque nunca la encontrara nunca tendría un amor igual
- yo te creo San jamás eh dudado de tu palabra y mucho menos de tus sentimientos hacia la chica, pero como sabes que la persona de la que te enamoraste es ella en realidad al fin y al cabo solo estuvieron juntas 8 semanas y en ese tiempo no se puede conocer a nadie a fondo – Rachel le creí cada palabra a su hermana pero la repentina desaparición de la susodicha hacia que sospechara que solo la había utilizado para algo pasajero
- tiene nombre Rach no lo olvides – Santana se había relajado un poco ya que el tono que había utilizado su hermana al final era más ameno
- hay no me vengas con eso si ni te acuerdas de su apellido y con tu mala memoria la verdad dudaría que no hasta el nombre le hayas cambiado – Rachel se burlaba de su hermana que al pedirle el apellido siempre tartamudeaba, hasta sus padres le hacían burla por esa causa
- se llama Brittany ok – sonaba segura la muchacha
- Brittany que?- Rachel amaba mofarse con ese motivo
- Pie… Piern… Piernón… Piernas… y que piernas! – había desviado sus pensamientos pensando en ella
- Brittany Piernas? Te cae? - la morena dudaba que alguien con ese nombre existiera
- pues el apellido en ese caso le quedaría muy bien y bueno tal vez era Pierce o Piercing pero comenzaba con P y en mi defensa solo diré que ella me dijo su apellido UNA sola vez – no hay que negarlo era un buen punto
- se nota el amor profesado, hermana si siendo el amor de tu vida no recuerdas su nombre no quiero pensar si solo hubiera sido un free – Rachel decía en un tono un tanto irónico mientras ambas terminaban de tender la cama
- ok lo primero que hare cuando lo vea será preguntarle su nombre completo – Santana comenzaba a fastidiarse de solo tener el nombre de la chica
Ssssssssssssssssssssssssssssssssssssss espacio de tiempo sssssssssssss
Rachel y Santana habían compartido útero en el vientre de su madre durante unos largos nueve meses, pero al nacer sorprendieron a su padre con lo diferentes que eran. Santana al crecer era más alta y un poco mas morena además tenía el cabello negro azabache, Rachel en cambio era pequeña, apenas un tono más clara que su hermana y su cabello era castaño oscuro. Al momento de nacer todo mundo pensó que eran varones pero con el tiempo y después de un diagnostico temprano varios doctores habían coincidido que era un caso severo de intersexualidad ya que ambas eran mujeres pero poseían aparato reproductor masculino todo gracias al hecho de que compartieron útero, los padres se negaron rotundamente a cualquier intervención quirúrgica y criaron a sus hijas como dos niñas normales pero siempre explicándoles que eran "especiales". Se tuvieron que mudar muchas veces por la poca aceptación de la gente y los insultos que propinaban a su familia pero al final se habían instalado en Salt Lake City, ahí todos parecían no tener problema con la sexualidad de sus hijas que desde niñas habían demostrado el gusto por las de su mismo sexo.
-¡Rachel y Santana a desayunar, se hará tarde! – gritaba una morena desde la cocina de la casa
- Ya voy mamá – dijeron las dos chicas al unisonó mientras terminaban de arreglarse
ssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss sssssssssssssssssss
- hay mi amor te voy a extrañar tanto – decía la mujer mientras agarraba los cachetes se Santana
- ya mamá tranquila por dios – intentaba soltarse de su madre pero esta la agarraba ahora por la cabeza aprovechando que estaba sentada – yo también te voy a extrañar enserio – imposible soltarse de una llave como esa
- escúchame bien Santana López Berry quiero que te comportes en esa casa ¿entiendes? Vas a estar ahí durante un año y lo último que quiero es que se queden con una mala impresión de esta familia – miraba duramente a su hija que solo asentía suavemente como esperando ese discurso
- no te preocupes ma´no creo estar mucho tiempo en esa casa – sonreía maliciosa – dicen que en Londres los antros son lo máximo – le guiñaba un ojo a su hermana que sonreía cómplice – auch – dijo al tiempo que se sobaba el cráneo, Shelby la miraba de manera amenazadora y tenía un cucharon de madera en la mano mientras Rachel reía al tiempo que comía el cereal
- si embarazas a alguien Santana antes de siquiera entrar a la universidad juro que te castro – tenía el cucharon peligrosamente alzado y de repente miro a Rachel que cayó en el acto – y lo mismo va para ti señorita - se dirigió a ella con el arma en la mano – ¿entienden ambas? – se dirigía a la dos moviendo el artefacto de madera de una hacia la otra ambas asintieron efusivamente y Shelby volteo hacia la estufa con una sonrisa triunfante en sus labios producida por la cara de espanto de ambas
- buenos días mujeres de mi alma – Hiram entraba en la cocina y saludaba a las hermanas con un beso en la cabeza y a su esposa con uno en los labios
- ya lista San? – se dirigió a la morena a la vez que tomaba una taza de café en sus manos
- si padre todo en orden – asentía lentamente pero ausente su madre le había puesto nerviosa
- bien mi vida solo espero que te diviertas mucho – Hiram miraba animadamente a su hija quien discretamente levanto la mirada y vio a su madre con el arma de madera empuñada en las manos articulando "castrada"
- pues no se pa' tal vez solo me concentre en mis estudios
- si tal vez yo haga lo mismo este año – Rachel se unía a la plática haciéndose cómplice de su hermana
- bueno como quieran par de aburridas – daba un sorbo a su café – yo recuerdo que su madre y yo nos la vivíamos en los an… auch – un cucharon habia golpeado sin previo aviso la cabeza del hombre
- es mejor que nos vallamos querido- Shelby se adelantaba a cualquier reproche de su marido
Aeropuerto media hora más tarde
Rachel estaba en la sala de llegadas con un gran cartel que decía "Quinn Fabray" ya que después de un chin cham pu, había sido ella la elegida para esperar a la que por 1 año sería la acompañante que ocuparía el lugar de su hermana, o bueno solo su cuarto porque nadie podía remplazar a Santana
- hola – una voz suave la saco de sus pensamientos y entonces los vio… unos hermosos ojos verdes la miraban expectantes, se detuvo un momento a verla con más detenimiento, era hermosa completamente hermosa, en toda la extensión de la palabra, Rachel no sabía cómo responder se habia quedado como idiotizada por la chica, que al ver el mutismo de la morena se decidió a hablar
- soy Quinn… Fabray, tú debes de ser Santana no? - Rachel reacciono al escuchar el nombre de su hermana
- ehhh no… no yo soy no… - muy mala primera impresión pensó, sintió los ojos secos y cayó en la cuenta de que no habia parpadeado así que lo hiso y finalmente respondió – no yo soy su hermana Rachel López Berry mucho gusto – extendió la mano y fue correspondida, pero lo que paso después de ese primer roce no fue algo común… una ligera descarga eléctrica atravesó su piel erizándola, por su parte Quinn sintió un extraño escalofrió recorrerle toda la espina dorsal, pero ninguna dijo nada al respecto
- un gusto Rachel – Quinn estaba un poco confundida y nerviosa, nunca habia sentido nada igual, pero al levantar la mirada un par de ojos marrones muy bellos de repente y como por arte de magia se tranquilizo
- será mejor que vallamos con mi padres para que los conozcas y también a Santana, aunque con ella no vas a interactuar mucho – todo esto lo dijo mientras que con ambas manos tomaba el equipaje de la rubia
- ohh déjame ayudarte es muy pesado – se quejo Quinn
- no está bien no te preocupes – y la verdad era que si pesaba pero no como para no caminar – vamos, es por haya
Caminaron un poco y al llegar con sus padres hicieron una introducción rápida, así como Quinn le habia explicado un par de cosas a Santana para cuando llegara a su casa, luego de eso y de una húmeda despedida Santana subió al avión.
Ssssssssssssssssssssssssssssssssss espacio de tiempo ssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
Santana estaba sentada en el avión, ya habían pasado 7 horas desde habia conocido a Quinn, subido al avión, se habia despedido de sus padres, y también desde que habia llorado al despedirse de su hermana y sobre todo de desearle suerte, Quinn le habia comentado algunas cosas básicas para su llegada, para que no se sintiera como una extraña en la casa y también le informo que probablemente compartiría habitación con Susan una prima que vivía con ellas y que tenía su misma edad con quien ella también compartía cuarto, y no es que no tuvieran habitaciones, si no que ninguna tenia cama.
El avión estaba a punto de aterrizar y Santana estaba nerviosa, compartiría su vida y su persona con gente que ella no conocía, tenía miedo de conocer a los Fabray, tenía miedo de no caerles bien y tener que vivir en ese martirio todo un año, su último año de preparatoria y todo eso con una familia que te odiara, definitivamente no era lo mejor que le podía pasar.
Y ahí estaban, una pareja de rubios sonrientes sostenían un cartel que decía "Srta. López Berry", sonrió de lado y se acerco haciendo un ligero gesto con la mano que fue correspondido efusivamente
- hola – dijo finalmente no pudo decir mas por que la mujer ya la abrazaba efusivamente "demasiado amor" pensó
- hola linda, yo soy Judy Fabray y este es mi esposo Russel… Fabray claro – dijo alegremente la señora al soltarla mientras que el hombre solo le sonreía y le estrechaba la mano
- Mucho gusto señores Fabray – Santana sentía que un peso bajaba de sus hombros, la familia parecía agradable tal vez demasiado efusiva pero todo parecía indicar que habia salido bien aunque aun le faltaba una integrante
- como te fue en vuelo linda? – preguntaban mientras la ayudaban a esperar su equipaje
- pues fue cansado – dijo pesadamente recordando un poco – son esas – dijo mientras señalaba un grupo de maletas negras
- no te dormiste? – pregunto Russel mientras tomaba una a una las maletas
- no la verdad me fue imposible, el hombre de al lado roncaba muy fuerte
- jaja si a veces los hombre son así querida – Judy se acercaba a ella y ahora cada uno tenía una maleta
- ohh Judy me pones en mal enfrente de nuestra invitada – el ambiente se tornaba más cálido conforme hablaban realmente parecían buenas personas
- estoy segura que hay más personas en la casa que me apoyarían – dijo sonriente
- ah claro Quinn menciono a su prima – Santana por fin veía la forma de traerla a colación, aunque por alguna razón el gesto de Russel se endureció al momento en que la menciono
- ohh si Susan, pues bueno querida ella es un poco antisocial últimamente pero estoy segura que eso cambiara en cuanto te instales en la casa veras que se llevaran bien no te preocupes – dijo mientras la tomaba cariñosamente de la cintura y comenzaban a caminar fuera del aeropuerto, esta Susan le causaba una curiosidad tremenda.
El camino habia sido corto y ahora Santana hablaba animadamente con los Fabray pero solo con los señores ya que la misteriosa prima no habia bajado a comer por que según Judy "estaba ocupada".
- bueno Santana nosotros nos vamos a descansar y si quieres claro tal vez será mejor que subas a arreglar tus cosas y a descansar fue un viaje largo y seguro estas cansada, nosotros estamos en la única habitación aquí abajo pero si algo se te ofrece lo que sea no dudes en decirnos está bien? – Russel hablaba con autoridad y Santana pensó que sería mejor hacer lo que le decían
- seguro yo les digo si algo sucede, hasta mañana – dijo levantándose ayudando a Judy a recoger lo que quedaba en la mesa, siempre hacia lo mismo con su madre y justo al acabar y cuando estaba a punto de subir las escaleras una voz la interrumpió
- Santana – dijo Russel
- mande – respondió la otra
- es la habitación del fondo – Santana se cacheteo mentalmente por querer subir a su habitación sin siquiera saber cual era y al final solo se limito a sonreír y asentir.
Comenzaba a subir las escaleras con lentitud, al estar recogiendo la mesa habia recordado su casa y su familia, apenas habían pasado una horas y ya los extrañaba demasiado, estaba sumergida en sus pensamientos cuando un ruido la paró en seco, se quedo estática unos segundo esperarlo oírlo de nuevo pero al no volver a escucharlo siguió subiendo pensando que lo habia imaginado. Cuando estuvo frente a la puerta correcta toco dos veces, como respuesta simplemente le abrieron, al momento de entrar la vio, una rubia alta estaba de espaldas a ella y acomodaba algo en la cama que no pudo ver de primer momento.
- Hola – dijo tímidamente - tú debes de ser Susan – la chica al oír su voz se irguió rápidamente, se quedo tiesa unos minutos en los cuales Santana no atino a decir nada, la rubia volvió al mundo cuando escucho la puerta cerrándose y de nuevo esa voz.
- ¿Estás bien? ¿Yo dije algo malo? – Santana se preocupaba por la reacción de la chica ya que habia sentido el ambiente tenso desde que le hablo por primera vez. Esta vez la chica de cabello rubio no lo pensó dos veces y volteo a verla, en el momento en que lo hiso supo que no se habia equivocado, esa voz la conocía hasta dormida, pero esta vez no fue ella la que se quedo tiesa, definitivamente no esperaba eso, pero al verla solo una silaba coherente se formo en su cabeza y pudo salir de su garganta
- Britt?
