Más allá de la vista


Disclaimer: Digimon y sus personajes es propiedad de Akiyoshi Hongo.

Anuncio: Este fic participa en la actividad "Escribe a partir de una imagen" del foro "Proyecto 1-8".


Capítulo 1: Día soleado

Imagen: Bici yendo rápido.

Propuesta: Nats28.

Pareja: Hikari y Koushiro.

Género: Romance.


A Hikari le gustaban los días soleados por eso cuando vio el sol desde la ventana de su habitación decidió salir y dar un recorrido con su bicicleta. Dio un vistazo a la pila de cuadernos sobre su escritorio, toda la tarea que le habían dejado estaba finalizada por lo que consideraba que podría salir sin ningún tipo de remordimiento.

A pesar de que a Hikari le gustaba admirar el paisaje cuando andaba en su bicicleta en esa ocasión se desplazaba con velocidad. No era solo el hecho de que tenía prisa, disfrutaba sentir el viento chocar contra su cara. En cuanto llegó a la casa de Koushiro se detuvo, antes de salir lo había llamado para avisarle que pasaría por allí, pocas veces sus horarios libres coincidían.

Cuando tocó la puerta fue recibida por la madre de Koushiro. Yoshie Izumi la invitó a pasar sin darle tiempo para explicarle el motivo por el que se encontraba allí, para el matrimonio Izumi ella era parte de la familia. Hikari se limitó a sonreír y dejarse llevar por la mujer, a pesar del tiempo no se terminaba de acostumbrar a la efusividad de su suegra.

—¿Quieres unas galletas? —le preguntó Yoshie —. Estoy horneando unas con chispas de chocolate. Llévale unas a Koushiro, debe estar hambriento, no ha querido salir de su habitación durante todo el día.

Hikari asintió y Yoshie se dirigió a la cocina en busca de las mismas. No le extrañaba el que Koushiro se encerrara en su habitación durante horas, ella sabía de sus deseos por convertirse en investigador del Digimundo, incluso lo había acompañado a varias de sus excursiones. Yoshie y Masami también lo sabían y aunque apoyaban sus planes les preocupaba que se exigiera demasiado.

Yoshie no se demoró en regresar con las galletas que le había ofrecido. Hikari no puedo resistirse a tomar una, tenían un buen olor. Cuando las probó confirmó que también tenían buen sabor. Tomó la bandeja y se dirigió al cuarto de Koushiro, antes de golpear la puerta las dejó sobre una mesita al lado de la puerta y tomó su cámara fotográfica, había algo que quería hacer.

Cuando Koushiro abrió le tomó una fotografía. De las fotografías que había tomado sus favoritas era las que obtenía de esa forma pues las sentía más naturales y espontaneas, además le divertía las reacciones de sus amigos al sentirse capturados, en especial las de su novio, él le parecía tan tierno e inocente.

—Lamento haberte hecho esperar —Koushiro estaba sonrojado y eso a Hikari le pareció tierno.

—No te preocupes, acabo de llegar —Hikari le ofreció una de las galletas. Él se las comió con una rapidez propia de quien ha pasado un largo tiempo sin consumir alimentos.

—Iré por mi bicicleta —fue la respuesta de Koushiro mientras cerraba su computadora portátil.

Ni Yoshie ni Masami disimularon la felicidad que les provocaba aquellas palabras. Estaban orgullosos de su hijo y de todos los logros que había alcanzado a su joven edad pero en ocasiones deseaban que actuara más despreocupado y que se divirtiera con sus amigos más seguido.

Hikari no esperó a Koushiro. En cuanto subió a su bicicleta se apresuró a pedalear y dejar atrás a su novio. Sabía que la alcanzaría, ella misma le había enseñado cómo hacerlo. No pudo evitar reír ante el recuerdo. Eso había ocurrido años atrás, cuando solo eran amigos, Izumi no le había dicho sus motivos, recordaba que Miyako había dicho que era una excusa para pasar tiempo con ella, Hikari creía que fue Yoshie quien le obsequió la bicicleta y que Koushiro no quiso defraudarla.

Les tomaron varias semanas de práctica quitar las ruedas de entrenamiento. Koushiro era un genio en la informática, poseía grandes conocimientos en lenguajes de programación pero si se trataba de actividades físicas se quedaba muy atrás. A Hikari no le molestó eso, al contrario, le parecía divertido poder pasar tiempo junto a Koushiro haciendo algo que ambos disfrutaban.

Cuando las ruedas de entrenamiento se volvieron innecesarias el progreso de Koushiro aumentó de manera considerable por lo que el portador del emblema del conocimiento decidió hacer un pequeño trato con ella, si lograba alcanzarla aceptaría salir con él a comer helado. Aquello no era necesario, Hikari hubiera aceptado aunque no lo hubiera logrado pero quería motivar a su, en aquel entonces, amigo.

Cuando logró alcanzarla Hikari se sintió orgullosa y un tanto deprimida, había disfrutado tanto de esos momentos que no deseaba que terminaran. Mentalmente se reclamó por el rumbo que estaba tomando sus pensamientos y se dijo que podrían los dos salir a dar esos paseos e incluso acompañarlo al Digimundo para recolectar información, estaba segura de que Tailmon estaría contenta de verla.

Cuando fueron a la heladería notó que Koushiro estaba nervioso. Varias veces dejó caer el menú y le esquivaba la mirada, Hikari pensaba que Izumi no había considerado el que pudiera alcanzar la velocidad con la que Hikari conducía su bicicleta, ciertamente se le hacía muy tierna su actitud cuando pensaba en ello.

No fue durante esa visita a la heladería que le pidió que fuera su novia sino cuando terminó. El pelirrojo apenas pudo comer la ensalada de frutas que había pedido pues sus nervios no se lo permitían. Fue hasta que lo acompañó hasta su casa que tuvo el valor para hacerlo. Si bien era cierto que lo común era que fuera el hombre quien acompañara a la mujer, Hikari quería asegurarse de que la bicicleta no le causara problemas a Koushiro y estaba convencida de que eso no era una cita.

Hikari redujo la velocidad con la que pedaleaba lo suficiente para que Koushiro pudiera alcanzarla. Sabía que no era necesario pero quería hacerlo. Si ambos habían salido a dar un paseo consideraba que lo mejor era tomárselo con calma y poder disfrutar de ese momento. Por lo que pudo ver su novio opinaba lo mismo, para muchos, en especial sus compañeros de investigación, era extraño verlo tan despreocupado, normalmente cuando empezaba un proyecto lo llevaba hasta el final y cuando encontraba problemas recurría a su té favorito para tener energías y poder continuar trabajando.

Ambos se detuvieron y comieron el resto de las galletas que Yoshie les había obsequiado. Algunas se habían roto pero aun conservaban su sabor, la forma era lo único que habían perdido pero no era algo que les molestara. "Después de un largo paseo en bicicleta nada como un refrigerio y un descanso", era lo que Hikari pensaba. Una melodía interrumpió sus pensamientos.

—Lo siento, Hikari —le dijo Koushiro después de revisar su teléfono celular —. Taichi me ha llamado y al parecer ha habido un cambio de planes, la charla que teníamos que dar para fomentar la paz entre humanos y Digimons ha sido adelantada.

—No hay problema —respondió Hikari con una cálida sonrisa —. Has lo mejor, tú y Taichi pueden hacer de este un mejor lugar para todos.

—Espérame, Hikari, cuando regrese tengo algo que decirte.