Hola fans de la mejor pareja del mundo: ¡IchiRuki! Aquí está otra vez yo, Anita la loquita dejándoles un fic corto debido a que ya podemos ver Fade to black. Desearía verla "raw" pero mejor soy paciente y espero los subs.
En honor a eso, decidí subir este fic hace meses estaba rodando por mi cabeza pero no sabía cómo plantearlo. Bueno ya no sigo espero que les guste. El titulo de este fic es en latin que significa "sin cuidado".
Disclaimer: Bleach no me pertenece,sino a Kubo- sensei ,ni siquiera el CD de Nirvana de ese nombre.
***
Como un día cualquiera empezaban las clases en el instituto de Karakura, era de esos días rutinarios, las mismas clases, los mismos saludos, las mismas batallas contra hollows, las cosas ya se tornaban algo monótonas.
La hora del almuerzo había llegado y un grupo de chicos se dirigió a la azotea eran: Keigo, Mizuiro, Chad, Ichigo, Uryu y por ultimo pero no menos importante Rukia. La shinigami quería compartir el almuerzo con las chicas pero recordó que su comida la tenía Ichigo por eso decidió acompañar a los chicos para el agrado de Asano.
-¡La hermosa Kuchiki-san nos está acompañando, nada me hace más feliz!- gritó ya saben quién.
-Podrías calmarte, es solo Rukia- respondió con ciertos celos el peli naranjo.
-Puedes emocionarte todo lo que quieras, Keigo- le dijo Rukia con su tono melindroso- me encanta que te agrade mi compañía… a diferencia de otros.
La pelinegra le lanzó una mirada amenazadora a Ichigo, quien desvió su mirada fingiendo indiferencia.
-¡Oh no puede ser! ¡Soy tan feliz me llamaste por mi nombre! ¿Puedo decirte Rukia-chan entonces?- el tan hiperactivo castaño no cabía de la felicidad.
-Claro que si no hay prob…
-¡Podrían callarse los dos!- gritó exasperado Ichigo.
Asano estaba algo asustado, Rukia molesta, Mizuiro tranquilo, Chad callado y un Uryu sonriente tocándose los lentes como siempre. De la nada alguien empezó a cantar:
-"Estos celos me hacen daño me enloquecen…" (1)
Todos los jóvenes presentes quedaron sorprendidos porque Chad estaba cantando una canción y de la nada.
-….ah Chad… ¿Por qué empezaste a cantar?- le preguntó Ichigo.
-No…- después de seis segundos terminó de responder- se.
-¡QUE!
-Simplemente como siempre digo "mmm" o alguna otra cosa extraña pues quería decir algo diferente.
-Y por eso cantaste ¿verdad?- le aseveró Uryu.
-Así es- en efecto, Chad no hablaba mucho pero cuando abría la boca decía algo muy importante y la canción decía mucho.
- Sin embargo, esa canción tiene algo que ver con cierta persona- comentó Mizuiro.
Todos miraron a Ichigo, quien ante la mirada de todos se levantó del lugar molesto para irse:
-¡Déjenme en paz quieren!
Luego se fue dejando a los jóvenes muertos de risa no obstante la shinigami suspiró indignada, definitivamente Ichigo ya estaba de mal humor.
….
Malditos idiotas, como se les ocurre decir que estoy celoso. ¿Cómo podría estar celoso de Rukia? Es solamente Rukia…
Mientras caminaba por los pasillos, el joven Kurosaki pensaba y cavilaba acerca de sus "celos".
-¡Ichigo!- de inmediato reconoció la culpable de sus pensamientos, dejó de caminar pero no volteó a verla.
-¿Qué quieres? ¿Vienes a molestarme también?
-Claro que no tonto, todo te lo tomas a mal. Además tienes que estar acostumbrado, no es la primera vez que dicen esas cosas sobre nosotros. No sé porque te inquieta tanto.- esto último lo dijo con un tono suave y calmado.
Muy en el fondo Rukia sentía que quizás Ichigo le resultaba desagradable su presencia.
Ichigo sintió que estaba actuando muy mal, ella no se merecía ese trato; estaba dispuesto a disculparse pero un grupo de chicos lo interrumpieron.
-Kurosaki y Kuchiki, esta noche hay una fiesta en mi casa a las ocho. Están invitados.- este era Mikami Shishio un tipo de cabello negro semi-largo, era conocido por su rebeldía y sus fiestas locas. Muchas chicas en el instituto se morían por él, también se decía que tenía un repertorio por salir con las chicas más bonitas del instituto y las consideraba como premios por acostarse con ellas: un mujeriego total. Ichigo pudo notar como el tipo no apartaba sus ojos de Rukia cuando hablaba.
-Guarda tus palabras Mikami, no iremos- le dijo el shinigami molesto.
-Si tu no vas no es necesario, en cuanto a ti Kuchiki, tu presencia en la fiesta será placentera.- Mikami se estaba acercando demasiado a Rukia quien ante su rara distracción respondió.
-Claro no hay problema, ahí estaré.- le sonrió ella.
Debido a la respuesta de la chica, Kurosaki estaba en ascuas con el deseo de asesinar a Mikami y llevarse lejos a Rukia.
-Está bien nos veremos, Kuchiki Rukia. Adiós Kurosaki- el tipo y sus amigos se marcharon del lugar.
-¿No pensaras ir o sí?- tuvo que preguntarle, acaso ella era tan ingenua, que no notó la mirada de Shishio.
-Claro, suena divertido- le sonrió- ahora ya veo porque casi no tienes amigos, le respondes mal a la gente. Él vino personalmente a invitarnos y tú como siempre de descortés.
-No sabes lo que estás diciendo, tú no conoces a ese tipo….
Rukia lo interrumpió debido a que ya estaba harta:
-¡De todas maneras haré lo que yo quiera!- se alejó de él, mas enfada no podía estar.
- ¡Ah sí pues bien haz lo que quieras idiota! ¡Yo te lo advertí!
Los dos testarudos caminaron en pasillos opuestos, definitivamente la ingenuidad de ella y la sobreprotección de él, los estaba cansando.
…………….
Ya el ciclo escolar había terminado, siendo viernes todo joven solo piensa en una cosa: divertirse, (o descansar en mi caso, siempre termino matada XD) máxime la fiesta de Mikami estaba en la agenda de todos los estudiantes.
Rukia caminaba sola a casa, no quería ver a ese tonto cabeza de zanahoria. Es un metido, obcecado…ah…lo seguiría insultando pero no terminaría. Me doy cuenta que es un aburrido y amargado…lo invitan a eso que le llaman "fiesta" y no va. Pensándolo bien yo nunca he ido a una fiesta de jóvenes humanos…tal vez sea como las de Matsumoto. Jajaja Creo que no…tal vez los jóvenes se divierten sanamente. No sé porque se preocupa demasiado ese idiota…. Yo puedo cuidarme sola.
Si en realidad la pequeña shinigami no tenía idea de cómo eran las fiestas de los jóvenes en el mundo de los vivos. Los acontecimientos que vendrán serán un golpe mortal que cambiarán su perspectiva y su corazón.
……
-¡Hora de la cena!- anunciaba Yuzu con su delantal a la familia más pendenciera de Karakura. Ya en el comedor, cada quien disfrutaba de la deliciosa comida, cuando estaban a punto de terminar, Rukia le habló a Isshin.
-Kurosaki- san, ¿puedo ir a una fiesta hoy?- usó otra vez su tono de niñita buena- es que me invitaron cordialmente y….
-¡No sigas Rukia-chan! Puedes ir por mí no hay problema, no tienes que pedirme permiso solo avísame para no preocuparme.- le contestó alegremente.
-¡Vas a dejarla ir!- este era Ichigo quien estaba sorprendido por la respuesta de su alocado padre y también por su reacción.
Todos los que estaban presentes notaron el comportamiento extraño del pelinaranja, parecía un padre amargado y autoritario.
-Ay Ichi-nii mejor te hubieses quedado callado- le susurró Karin.
-¡Pero qué hijo más estúpido el que tengo! ¡Claro que tú también vas a ir para cuidarla! – el papá "peligro" se levantó abruptamente apuntándolo con un dedo.
Cuando el joven estuvo a punto de responderle, la ojivioleta exclamó:
-¡No será necesario! Tengo unos amigos que estarán ahí y me acompañaran- suspiró para luego irse- bien iré a vestirme, con su permiso.
Isshin estaba molesto con su hijo pero no siguió molestándolo ya que Ichigo se dirigía hacía el segundo piso.
Kurosaki Ichigo era tan testarudo y orgulloso que no fue capaz de pedirle otra vez a Rukia no asistir a la fiesta, estaba acostado en su cama con sus brazos cruzados bajo su cabeza. Se levantó al escuchar a su hermana Yuzu elogiar a la morena en el pasillo. Lentamente, abrió un poco su puerta sin que ellas lo notaran, pudo ver lo bonita que lucía su compañera de peleas.
-¡Que bonito te queda ese vestido!- la elogió Yuzu- el color azul resalta tus ojos.
-Gracias, Yuzu-chan.
Yuzu tenía razón, Rukia usaba un vestido azul turquesa que no era tan ajustado a su cuerpo pero tampoco tan holgado. Le quedaba unos centímetros arriba de la rodilla, tenía escote redondo y mangas cortas. Para lucir casual y ligera su calzado eran unas sandalias blancas muy finas.
De lo frustrado que se encontraba el tonto de Ichigo se volvió acostar, de que se preocupaba si Rukia sabía cuidarse sola, bueno eso es lo que su mente creía pero no su corazón. Enana tonta. Pudo conciliar el sueño con ese último pensamiento.
.....
La casa era muy grande llena de muchos adolescentes bailando música electrónica a todo dar, el ambiente era agradable a la vista de Kuchiki, quien cada vez se sorprendía de la euforia de los jóvenes. De lo que se pierde Ichigo.
-¡Ah Kuchiki! ¡Que bien que viniste, te vez linda esta noche!- Mikami la saludó mientras rodeaba su brazo alrededor de ella.
-¡Muchas gracias!- Rukia pensaba que ese gesto del pelinegro era como un saludo, pero todos en el lugar sabían que ella era la siguiente conquista de Mikami.
-Ven hay un lugar que te quiero mostrar está en el jardín.
Rukia lo siguió sin pensarlo, estaba tan emocionada de estar ahí que no notó la mirada picaresca del muchacho que la acompañaba.
Keigo y Mizuiro se encontraban ahí también pero al ver a Rukia con el mujeriego del instituto se alarmaron. Keigo corrió con todas su fuerzas para llevarse a la morena consigo; no obstante, un amigo de Mikami lo noqueó y después lo encerró en un armario.
-Escucha Kojima- le habló un bravucón- si no quieres que te pase lo mismo que a tu amigo, sugiero que te alejes de Mikami y de Kuchiki.
El joven menudo se alejó del idiota que lo amenazó, una vez que estaba fuera de vista, sacó su celular para llamar a Ichigo. Al marcar el número espero que le contestara pero aparecía el correo de voz, Kurosaki tenía el celular apagado. Pensó en llamar a la casa de este pero eran casi las once de la noche, consideraba que era falta de respeto llamar a esas horas. Él no era tan fuerte como para ayudar a Rukia, lo único que le quedaba era ir personalmente a la casa de Ichigo.
..........
En el jardín había una enorme piscina y muchas mesas rodeándola, en una de ellas se encontraban Mikami y Rukia.
-¿Quieres algo de tomar?- le preguntó galantemente a la hermosa morena.
-Si, por favor- en verdad tenía mucha sed y no podía negarse a la oferta del joven.
De inmediato le llevaron el refresco que lo tomó ansiosamente para calmar su sed.
-¡Vaya! Si que estabas sedienta, pero eso no te hace ver menos glamorosa.
-Creo que estoy recibiendo demasiado cumplidos esta noche.
-Pero si te los mereces… sabes vamos a bailar para que entres en ambiente.
La shinigami iba a responderle que sí pero un sonido de su celular la detuvo, lo sacó de su pequeño bolsillo pensando que era un hollow, en realidad era la alarma para irse a casa. Las once y media, ya es hora que me vaya.
-¿Qué pasa? ¿Ahora eres cenicienta?
-No sé quien es ella pero en realidad tengo que irme, muchas gracias por invitarme.- le sonrió amablemente pero de repente sintió un horrible vértigo que la hizo tambalearse. Mikami corrió para auxiliarla y la sostuvo entre sus brazos.
- Descuida preciosa- le besó en la mejilla- yo haré que te sientas mejor.
Rukia se sentía muy mareada que escuchaba las voces muy lejanas y no se daba cuenta hacia donde era llevada.
Shishio abrió la puerta de la habitación principal, depositó delicadamente a la joven en la cama. El joven lujurioso se acostó encima de ella para besarla y tocarla sin recato alguno.
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Mizuiro corría a todo galope hacia la clínica Kurosaki aunque le faltaba aire en los pulmones. Ishida Uryu lo siguió también ya que lo notó preocupado. Los dos llegaron a su destino muy agotados.
-¿Qué…sucede…Kojima?- le preguntó cansado el "sexy" cuatro ojos.
-Después… te…explico….pri…primero…. tengo…que…hablar…con Ichigo-dijo finalmente.
-¡Rukia!- el shinigami sustituto se levantó abruptamente al tener un presentimiento extraño y los ruidos en su ventana.
Cuando la abrió, una piedra le pegó en la cabeza.
-¡Que mierda! ¡Qué les pasa a los dos, estas no son horas para estar tirando piedras a lo estúpido!
-¡Podrás insultarnos lo que quieras pero no hay tiempo!- le respondió Mizuiro- ¡Mikami está con Kuchiki-san! ¡Ven conmigo o será demasiado tarde!
Si pensarlo dos veces, Ichigo buscó sus zapatos y una camisa. ¡Qué estúpido he sido! Sabía que algo malo iba a pasar.
Los tres chicos pagaron un taxi para ir lo más rápido posible a la fiesta.
-Kurosaki, ¿por qué demonios no fuiste con Kuchiki-san? ¡Ella no sabía qué tipo de fiesta era, tú… tu debiste acompañarla!- le reprendió Ishida.
-¡No me sermonees, imbécil!
El taxista les habló amablemente pero con una pisca de sarcasmo:
-Chicos no se peleen o me distraerán. Ya verán que salvaran a su amiga por ende soy un gran conductor.
Kojima lo pudo notar, el taxista había pasado cinco semáforos en rojo. Quiero ayudar a Kuchiki-san….pero también quiero vivir.
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Me siento mal, siento asco, siento un terrible dolor de cabeza. Tengo frío y a la vez calor, siento que estoy con alguien…no puedo abrir mis ojos…Ichigo… ¿donde estas?
Mikami Shishio había despojado a la morena de su vestido dejándola en su ropa interior blanca.
-Que cuerpo tan fino tiene y su piel es suave, se nota que nadie la ha tocado. Eres un tanto ingenua Kuchiki Rukia… esta noche serás mía.
-…Ichigo.
El chico arqueó su ceja y se paralizó por completo, aun en su delirio la chica petisa mencionó el nombre de ese tipo.
-¿Qué? ¿Cómo puedes mencionar a ese idiota si estás conmigo? Di Shishio…Shishio- se inclinó para besarla lujuriosamente mientras se quitaba sus pantalones.
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¡Ichigo apúrate! Si que soy mala, lo siento, nunca pensé dejar las cosas en la mejor parte. Este fic está basado en un hecho real.
Si notaron usé una frase de una canción de Vicente Fernández "Estos celos", no soy muchos con las rancheras, pero recordé que Chad es de origen mexicano…creo que quedó bien.
Bueno dejen un review… son mi aliento para que siga con este fic descabellado. Por cierto cuando salga la peli ichiruki con sub en español me avisan para verla o bajarla.
Muchas gracias por su tiempo, acepto cualquier critica constructiva, comentario o sugerencia.
