Recién termino y vuelvo a empezar (sudando) que digo en mi defensa...¡ quizás no tarde tanto en actualizar!
d. gray man no me pertenece ni pertenecerá ( gracias a dios o me acomplejaría con ellos y n°6) T.T
advertencias: um...si son fanes de lavi temo decirles que lo hare sufrir Maujajaja *O*
Notas: este fic esta dividido en dos el antes que ya paso pero esta como recuerdo y el después, la actualidad. sin mas lean m.m
ANTES Y DESPUES
0.1.-Antes: Planes a futuro.
Había amanecido y el sol no se molestaba con dejarlo claro a todos, sus rayos dorados atravesaron verjas y ventanas. Un par de ellos de manera juguetona se abrieron paso al rostro adormilado de un chico, quien sin vacilación abrió sus orbes platinadas con cierto sueño aun presente. El chico se froto los ojos con insistencia, girando en sí mismo para quedar de cara a su acompañante aun dormido. Le sonrió con ternura depositando un tierno y casto beso en sus labios. Por lo mismo su compañero de cama despertó encantado de recibir aquel dulce despertar. El chico pelirrojo sonrió con amplitud regresando el gesto.
-Buenos días-musito el peli café
-Umm, muy buenos-correspondió el pelirrojo inclinándose otra vez alargando la muestra afectiva
-um, Lavi, ya es de día…podrías…
-Otro rato-susurro separándose apenas un centímetro rosando su nariz con la contraria, luego volvió aumentando la intensidad-Quedémonos-se le oyó
-Lavi…aum…otra vez…ya lo hicimos a-ayer-alcanzo a decir entre jadeos
-Ya lo sé-dijo entre caricias lacisivas-Pero quiero tomarte otra vez…
-s-se nos hará…tarde
-Pueden esperarnos-susurro a su oreja
-Pe-pero tengo que …¡Ah!
-Lo vez-sonrió-pueden esperar
Alargo la mano cubriéndolos con las mantas.
o-o-o-o-o-o—oo-
El chico pelirrojo bajo las escaleras, poniéndose una camisa con una toalla colgando de su cuello.
-¿Qué hay de desayunar?-cuestiono a un chico sentado en un escritorio redactando
-No lo sé señor impaciente-exclamo con el seño fruncido-Por qué no "calientas" algo
El chico de ojos esmeraldas bajo hasta posicionarse a su lado luego de oír la clara indirecta que le era dirigida con enfado.
-¿aun estas enojado?
-no ¿tú crees?-escribió-¿de dónde sacaste esa idea?
El pelirrojo se recargo sobre el respaldo
- Allen
-Por tu culpa falte-exclamo sin dejar de escribir
-Cálmate-logro cerrar sus brazos por su espalda al estomago, recargándose en su hombro haciéndole detenerse-puedes arreglar el papeleo mañana
-y que pasa si el asistente no viene con mis datos…-susurro con aire depresivo
-No digas eso-lo apretó-deberías dejar de portarte tan pesimista, mañana será un gran día
-Eso mismo dijiste el día que tu…-musito sonrojándose y mirando a otro lado
-Pero igual fue genial-lanzo una carcajada-fue el primer día que te vi tan rojo
-¡Lavi!-exclamo enrojeciendo con rapidez
-Pero mañana será diferente-sonrió de oreja a oreja-¿Adivina qué?-cambio el tono soltándole-mañana será oficial-exclamo inclinándose frente a el
-E-enserio?-su tono tembloroso parecía respaldado por su mirada sorprendida
-Aja
Saco algo de su bolsillo y tomo sus manos. Era una cajita pequeña de terciopelo rojo. Le abrió con cuidado descubriendo su contenido. Había ahí un pequeño anillo dorado cuyas hebras doradas sin enlazar daban forma a un corazón a medio cerrar, en el centro un diminuto rubí le daba vida.
Allen sintió que lloraría de la emoción, y en efecto un par de lágrimas se deslizaron de sus ojos.
-Mañana pediré tu mano en la cena
Los ojos del chico pelirrojo brillaban ante la mención con suma felicidad, encantado de decirlo las veces que fueran necesarias. El pelicafe ya no podía ocultar sus lágrimas de felicidad, había terminado por cubrirse la boca para no dejar salir sollozos, su novio sonrió y deposito un fino beso en sus labios.
-Guarda esa lagrimas-limpiaba sus ojos-se supone que es una sorpresa no solo para tus padres también para ti
-Lavi-susurro con ternura-Te amo
-Yo te amo mas-recargo su frente en la suya-hasta el final de los tiempos…
Lentamente unieron sus labios, un beso suave que poco a poco se fue trasformando a pasional, ya se oían un par de jadeos y la ropa estorbaba; el pelirrojo pasó a su cuello tomándolo como suyo.
-L-lavi…e-espera-jadeaba suavemente sin soltar aun la pluma
-que haces…hum
-una…carta-gimió-para mis p-padres-se detuvo un rato y le susurro a la oreja…
-pensé que caeríamos de improvisto-lamio su oreja
-s-si um…es la que h-ago a final d-de mes-jadeo-pa-para contarles t-todo
-Envíala luego-se colaba en su camisa-mañana les veras
-p-pero ¡ah! Lavi!
-Podemos ocupar el tiempo en otra cosa…
-N-no empieces-lo empujo todo rojo-t-tengo que terminar, no sabes cómo se ponen mis padres si no reciben la carta
-aum-hizo un puchero-otro rato
-Todavía tengo mucho que hacer-se puso en pie para no quedar acorralado- a esos no puedo faltar-tenia las mejillas rojas pero intentaba esconderlas
-Solo será un rato-Se puso en pie atrapándole por la espalda
-Espera a que llegue-Se agacho zafándose del agarre-deja la linfonania un rato
-ah no tiene nada de malo
-Como tú no te la pasas adolorido por un fin de semana entero-susurro inflando las mejillas con un débil sonrojó
-¡ah pero si te gusto Allen!
-Ca-callate!
Se dio la vuelta pasándole de largo, tomo sobre donde puso el papel y fue a la percha por su chaqueta e abrió la puerta.
-vuelvo en un rato, si es que aun tengo ganas de volver sabiendo como "estas"
-Ah vamos sabes que solo estaba jugando-exclamo tirándose en un sillón
-Fmm-bufo y cerro tras de si
-¿eh?-subió las manos al respaldo, con una rodeo su boca-¡eso fue un sí o un no!
-Tonto-se escucho del otro lado, Lavi sonrió
-entonces si-susurro por lo bajo
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
En una sala un chico pelirrojo vestido solo con pantalones cafés y una camiseta verde veía la televisión recostado en el gran sofá, y mirando cada dos por tres el teléfono. Tras un rato se incorporo de un brinco.
-Ah…parece que si se enojo-se puso en pie-las cinco y ni una llamada
Miro el teléfono con detenimiento volviendo al sofá, desde el mismo regresó la vista (ya que el aparato estaba a espaldas del mismo) colgándose del respaldo con el rostro apachurrado contra el tapiz crema.
-De seguro está ocupado con todo otra vez-resoplo-y perdiendo la paciencia más rápido…¡goum!- torció la expresión y sus ojos fueron remplazados por líneas irregulares-si viene de ese humor no habrá nada esta noche…¿uh?-se le prendió el foco-Ya se!-se levanto de un brinco y corrió a la pequeña cocina del departamento
A veces una comida es la mejor disculpa.
o-o-o-o-o-o-o-o-o-l-o-o-o—o-
La pequeña vela se apago dejando de tres ahora solo una prendida. El pelirrojo suspiro recargado en su mano sobre la mesa. Quizás debió prenderlas después.
Bostezo y en ese momento la puerta se abrió, dejando ver a un chico de pelo café visiblemente fatigado, que murmuraba por lo bajo.
-¿Por qué tan tarde?-pronuncio poniéndose en pie
-…ese maldito, que cree que tengo cuatro brazos y puedo con todo, un poco mas y le…-decía con la vista gacha y el ceño fruncido
-Allen-se inclino poniendo su cara justo enfrente-¿Estás aquí o te traigo de allá?
-¿eh?-se detuvo-Ah perdón Lavi-le dio un pequeño beso-solo estoy algo atareado por la oficina, de verdad no puedo creerlo-hizo ojos de gato-Solo soy un practicante y ya me tratan como asistente sin paga, espero que la universidad no sea así…
-Llegaste tarde-recalco-Te pusieron a hacer el inventario de la cinta adhesiva o…
-El inventario, terminar el reporte del que no vino, traer el café de todo el equipo, pasear al doberman del jefe-movía los dedos con ansiedad-y no es ni la mitad-se llevo una mano a la cabeza-me quiere dar una jaqueca de solo recordar…
-Uh…por eso te dije que no hicieras absolutamente todo el primer día- negó-un día tenias que cansarte de todo eso-suspiro-mejor comes y me cuentas después con más calma
-No gracias Lavi-fue a sentido contrario-aun debo escribir el último reporte para que me den el certificado…
-Lo harás más tarde, mejor come o se terminara de enfriar
-Luego-decía masajeándose las sienes-ahora no tengo hambre
-…-Se detuvo-¿seguro estas bien?-se le puso enfrente
-solo tengo algo de sueño-confeso
-…y fiebre-remarco tocando su frente
-No es nada-quito su mano-aun tengo que hacer el papeleo, las firmas, la documentación de los pasaportes y registrar las maletas…
-Woou, te estás adelantando mucho-otra vez se le puso enfrente-Nos iremos a Francia en una semana, mañana vamos a casa de tus padres. Te estás acelerando mucho…
-Pero si salen mal las cosas y el viaje se cancela y si se me olvida llevarme algo y…
-Allen-le sostuvo de los brazos-Todo eso lo haremos ambos, no quieras cagar al mundo tu solo, aun no estamos allá; si estas cansado descansa-acaricio su mejilla-Mañana nos levantaremos temprano e iremos a la estación, sorprenderemos a tus padres, pediré tu mano y…-beso su mejilla-lo demás será pan comido-sonrió-Ve a dormir un rato
-…-sonrió-Esta bien-le beso-Gracias Lavi
-Te subiré algo para bajarte la fiebre-acaricio sus cabellos, sonrió pícaramente-No querrás pescar un resfriado mañana
-Eso nunca-sonrió con dulzura dándole un último beso-Oyasumi
-Oyasumi
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-l-o
El sol le dio en la cara con fuerza y el solo se removió con molestia. Pero tras un rato dejo de huirle, ahora que recordaba tenía mucho que hacer ese día. Abrió los ojos y giro hacia el reloj que marcaban las diez cincuenta, arqueo la ceja con extrañeza, debía estar mal. A esa hora ya debían de estar terminando de almorzar para no perder el tren. Saco de un cajón un reloj de muñeca corroborando que casi eran las once; pero eso no era posible, Allen siempre le despertaba a las siete pese a que lloviera o relampagueara.
Se giro dispuesto a ir a buscarle en la casa y para su sorpresa estaba a su lado. Sonrió. El pobre en verdad ayer estaba cansado. Movió su hombro con la mayor suavidad posible.
-Allen, ya es de mañana, Vamos se nos hará tarde y…
Se detuvo, no había respuestas, no le oía quejarse o reaccionar, nada.
-¿Allen? ¿Estas…Allen!
Le giro dándose cuenta que respiraba con agitación, el sudor perlaba su frente y se sujetaba con fuerza de las sabanas con los ojos fuertemente cerrados haciéndose daño; toco su frente alarmándose
-¡dios esta hirviendo!
Corrió al teléfono y llamo a al doctor del piso de abajo más calmado, pues solo era fiebre… solo eso.
1.-Despues: Despertando
Lo primero que supo, era que el aire se sentía helado. Abrió los ojos al sentir los rayos del sol como todas las mañanas, olvidando el sentimiento de que se le había hecho tarde, pues de inmediato noto algo extraño…no se podía mover.
No solo eso, no estaba en su habitación, con el techo pintado en color durazno, este era por completo blanco, el olor a desinfectante y alcohol le inundo. Entonces fue capaz de ver la habitación, en efecto, de un blanco inmaculado; tanto las paredes como el piso, este ultimo de mármol, perlado que se extendía desde su cama pasando por otras, de un extremo al otro de esa larga habitación.
Se preocupo al notar sueros intravenosos en su antebrazo derecho y en el izquierdo varios cables que iban a una maquina hecha para medir los latidos del corazón, lo cual le decía que estaba en un hospital.
Podía escuchar las sirenas de las ambulancias y el sonido de las camillas al ser arrastradas por los pasillos, todo al son de muchas maquinas iguales a la suya, mascarillas de oxigenación y charolas metálicas llenas de instrumentos quirúrgicos siendo transportados a sus respectivas salas de operación.
Estaba totalmente desubicado, podía oír a las enfermeras pasar frente a las puertas dobles del pabellón charlando, debía llamarles, preguntar ¿Qué hacía allí?
Tan pronto abrió la boca un sonido bajo y ronco salió, se asusto al oír lo que ahora era su voz, casi un jadeo agonizante de un estrangulado. Quiso llevar su mano a la garganta pero le era imposible, no podía mover nada más bajo la barbilla. Trato de tranquilizarse para no acabar desmayado a poco de haberse levantado, pero un movimiento de su cabeza dejo a vista un mechón de cabellos canos; cabello completamente blanco y largo, quince centímetros nuevos y eran suyos, pasaban de su coronilla, frente, rostro, cuello y terminaban en el pecho.
Podía sentir los latidos de su corazón y oír como la maquina a su lado daba un salto para emitir un ruido agudo que iba en aumento, la sangre se le había agolpado, sentía que se quedaba sin aire, y más pronto de lo esperado, perdió por completo el sentido.
o-o-o-o-o-o—o-o-o-o-o-o—o-o-o-o
-Pe-pero estoy segura doctor
-Pues yo le veo igual, si hubiera ocurrido un cambio señorita…
-Lou fa, escúcheme doctor Wong yo sé lo que vi, el paciente despertó
-señorita Lou fa, la maquina no me registra ninguna lectura sobresaliente
-¡Eso es porque se las han llevado hace un rato!
-Baje la vos señorita, este es un hospital
-P-Perdón doctor
-Cuando haya pruebas solidas llámeme, mientras tanto salga de aquí, los estudiantes no tienen permitido chismosear. Shifu, Rikei lleven a su compañera a descansar
-Si señor Wong
-chicos por favor créanme, el se movió, lo vi
-Para empezar no debías estar aquí
-Tenemos que apegarnos a las reglas, este es uno de los hospitales más respetables, debemos acoplarnos a los horarios…
De solo oír hospital por segunda vez supo que aquello no había sido un sueño. Abrió los ojos con lentitud, esperando que le pudieran aclarar todo.
-¡miren se mueve!-la voz de chica
-como se va a mover si esta en… ¡se mueve!-el segundo
-De-debemos llamar a alguien-el tercero
-A un doctor, no mejor a una enfermera!
Las tres siluetas salieron de vista, una cuarta se hizo presente con las anteriores. Le costaba trabajo enfocar su entorno, todo se veía borroso y opaco.
-Lo ve-exclamo la primera voz
-¡Madre de dios!-una voz grave de mujer, pasos-Que uno llame al doctor Wong de inmediato
-Si-mas pasos
-Y que hacemos nosotros
-salgan-con voz autoritaria-no deben estar aquí
-Pero nosotros…
-Que se vallan-vos de ultratumba-Molestan a los pacientes
-¡S-Si!-chillidos aterrados, dos siluetas desaparecen
-Puede oírme, si es así hágamelo saber-sentía una mano arrugada en su brazo
Tenía miedo de no oír su voz, así que se limito a asentir.
-No puedo creerlo-decía la voz en tono bajo-Es un milagro
-¡Si esto es una broma usted y sus compañeros serán-
-Ha despertado doctor
-Oh…-mas pasos-permítame enfermera-otros dedos, igual de arrugados pero más gruesos-¿Puede hablar?
Intento negar, pero sentía el cuello engarrotado.
-Intente emitir una palabra, un sonido-insistió
-…Faw…-sonó al menos no tan ronco como antes
-Muy bien, muy bien-Sonreía un hombre mayor con las cejas muy pobladas, barba y bigote del mismo color; blanco-¿Puede ver?
Una luz brillante se puso obligándole cerrar los ojos, pestaño dos veces y unos gruesos dedos forzaron a sus parpados seguir abiertos
-Trate de mantener los ojos abiertos, bien.
La luz causo que la reciente sala enfocada se viera borrosa y los rostros se difuminaran, incluso cuando le fue retirado le costó distinguir los rostros frente a sí.
-Sorprendente…-decía el hombre mayor
-Debemos notificar esto-decía la enfermera mayor
-Fui por los registros-soltó el chico de pelo negro que todavía estaba ahí-Tenemos el número y dirección de quien le interno
-Denle aviso-el doctor se dio vuelta mientras el chico salía-Señora jefa de enfermeras tráigame material básico de revisión
-Si doctor-y ella también salió
-Bueno, a todo esto, sea bienvenido de vuelta, joven Walker
o-o-o-o-o-o—o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
Toda la mañana le hicieron pruebas, en ese tiempo pudo recuperar la voz, pero no el movimiento, su cuerpo parecía muy resentido. A consejo del médico quien vio su frustración al no poder mover la mano en una indicación, comenzó a concentrarse en sus dedos; así de poco a poco consiguió recuperar el movimiento de la mano derecha hasta el antebrazo. El doctor hizo más exámenes, tiempo que aprovecho para mover también la mano izquierda un poco.
-Bien-decía anotando todo-Está perfectamente
-Doctor-llamo dudando con la voz un poco ronca al no hacerlo antes
-Si dígame
-Podría decirme que hago yo aquí
Por lo que veía el doctor de alguna manera esperaba esa pregunta, guardo la pluma y le miro con seriedad.
-Usted, sufre una enfermedad-abordo sin rodeos
-Enfermedad-repitió con voz temblorosa-¿Cuál?
-Desafortunadamente, hasta la fecha lo desconocemos, creemos que es nueva, porque usted joven Walker es el único con tales síntomas
-N-no sabe…-susurro apenas con voz débil
-Vino aquí con lo que parecía una simple fiebre alta, pero conforme paso el tiempo descubrimos mas, y desde que llego usted ya tenía un síntoma, quizás el principal de esta enfermedad; usted se "durmió" no un sueño normal y corriente. Este era distinto, una fase del sueño REM se profundizo mas de lo normal, y al mismo tiempo surgió un no REM que llamamos sueños ortodoxo y…-Noto que el chico no entendía que decía-bueno resumiendo y poniéndolo en términos entendibles, su sueño se torno demasiado profundo, cosa que según sus archivos usted no poseía, según dicen usted no experimento el sueño Rem en su vida, pues cualquier ruido le despierta.
-Los doctores me dijeron que no había problema con ello si me sentía bien y mi cuerpo no presentaba efectos secundarios-se apuro a decir recordando los análisis que le hicieron a los seis
-Porque ellos no hicieron suficientes pruebas, claro que habían efectos secundarios-leía una tabla-usted señor Walker no dormía demasiado, estaba siempre agitado dando el cien en cada actividad aun si era trivial, su cuerpo reaccionaba como una maquina no pedía descanso, estaba en la cumbre de la eficiencia, su cuerpo se adapto a ese ritmo. Sus primeros quince años los vivió en la edad perfecta, en la cima de la vitalidad, pero por supuesto en algún momento tenía que parar. El sueño profundo es necesario señor Walker ya que de él dependen muchas funciones.-le miro-después de quince años en actividad masiva su cuerpo no pudo mas, la fiebre fue solo la alarma, y su cuerpo a ordenes del sub consiente adopto la fase del sueño profundo que requería.-hizo una pausa-Usted ha estado en fase de sueño por los quince años de actividad, joven Walker, usted lleva dos años dormido
-…¿Qué?...
-usted, lleva dos años dormido-repitió con cuidado
-Me…dormí dos…
Sentía que se desmayaría, que desfallecería en aquel momento. Dos años dormido, debía ser mentira, una de pésimo gusto. Estaba seguro que hasta hace unas horas-el día anterior-se había ido a dormir con dolor de cabeza, y ahora estaba ahí, en una cama de hospital y tocando un mechón de cabellos canos.
-Oh sobre su cabello…
El hombre hojeo unos documentos, quizás creyendo que su preocupación residía en ese hecho, que errado estaba.
-Como le había dicho sus células trabajaron tiempo extra, es decir que sus pigmentadores naturales se acabaron, seguramente tenía un tono muy oscuro al nacer y noto que con el paso de los años encarecía, pues bien esas células agotaron su reserva de vida, así que aunque debieron de durarle más no aguantaron mas allá de sus 16 años. No se preocupe- agrego quizás innecesariamente-aunque lo parezca solo fueron dos años y no más. A decir verdad tuvo mucha suerte, no era como estar en coma pero se le parecía mucho y las personas en coma no suelen despertar, debe agradecer estar despierto por el momento…
-A que se refiere doctor-esa última frase no le había agradado nada
El hombre mayor no dijo nada, tomo la tabla anotando cosas sin sentido, garabateando para liberar algo de la tensión de las que fueron sus siguientes palabras.
-Como ya le había dicho joven Walker, desconocemos esta nueva enfermedad-decía lento- así como las razones o causas que la originan y por consiguiente que tan mortal llegue a ser, podría volver a quedarse dormido, quizás cuatro o diez años, o…o no despertar del sueño profundo jamás
Sus ojos se abrieron de par en par, esas palabras, esas palabras no podían ser ciertas ¿verdad? le miro fijo esperando que en cualquier momento le dijera que era solo una broma; pero el rostro madura y lleno de arrugas mantenía aquella mueca de quien ya no podía hacer nada mas, susurrando un quedo "lo siento tanto" que le provoco una desagradable sensación. Sentía que se ahogaba con el aire mismo, eso no debía de estar pasando, debía ser únicamente un mal sueño.
Pero era real, todo era real, lo sabía porque le costaba respirar, porque le dolía el cuerpo si lograba moverlo aunque sea un poco, por las agujas en su brazo y el escozor que le provocaban los cables y el ardor de su garganta seca, pues no había bebido ningún liquido en mucho tiempo.
El médico continuaba hablando pero ya no le escuchaba mas, había llegado a entender que, si cerraba los ojos en cualquier instante, sin importar la hora o el momento ya no los abriría mas, quedaría atrapado en su cuerpo, hasta el día que sus pulmones o corazón dejaran de funcionar.
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o.-o
Miraba el techo, con aire ausente casi sin parpadear, no estaba seguro del tiempo que había pasado, si eran horas o quizás días, desde aquel momento en el que la angustia le invadió, una preocupación tan clara y fuerte que fue incapaz de darse cuenta de las nulas visitas. Solo veía enfermeras entrar y salir, administrando medicamentos, cambiando sueros e llevándose cómodos usados; pero él no notaba ni eso, estaba al borde de la histeria, controlaba con cada gramo de fuerza y voluntad cada respiro para no hacerlos largos e aletargarse con ellos, ni demasiado cortos causándole cansancio. Ninguna cosa que le llevara a dormir. Aparte de la respiración no era consciente de nada mas, se quedaba inmóvil cada minuto e instante con los brazos echados a los lados. El doctor no le hacía preguntas desde que el shock inicio. El solo quería olvidarse un rato, distraerse, pero de inmediato esas palabras volvían retumbando en sus oídos, enloquecería de seguir así.
Después pudo asimilarlo un poco, si se había dormido luego de quince años quizás sería igual, quizás tendría otros quince antes de que volviera a pasar; sin embargo las teorías del doctor lo mantenían alerta, podría ser menos tiempo, ese pensamiento le produjo escalofríos.
Poco apoco logro distanciar sus pensamientos de aquel tema. Concentrándose en el "día anterior" cuyas imágenes difusas y borrosas se le escapaban entre los dedos, no podía creer que aquello se tornaba como recuerdo lejano. Se enfoco en esa tarea ignorando lo demás, cada segundo del día desde los rayos del sol en su cara hasta el humor colorido de su novio: Lavi.
Sentía que su rostro enrojecía al recordar ciertas cosas y noto, casi al momento que de todo ese tiempo que llevaba ahí no había visto ni una vez a su novio.
Llevo su vista al par de portezuelas, esperando que, en cualquier instante de esos el pelirrojo apareciera con esa sonrisa tan característica, una que comenzaba a extrañar. No despego su vista de ahí, aun cuando la luna remplazo al sol u otro día inicio; cada vez que veía las puertas abrirse sentía su corazón dos segundos en los cuales estiraba el cuello y apretaba las sabanas con contenida emoción, pero, tan pronto veía que era solo una enfermara mas, la decepción y tristeza se apoderaban de su ser, estrujando su corazón. Y más pronto de lo esperado volvía a mirar la puerta creyendo que le vería en cualquier momento.
Otra vez el sol y la luna desfilaron, y otra vez esperaba. Continúo haciéndolo. Aunque llego el momento en el que el cansancio se apodero de él, le costaba mantener ambos ojos abiertos y la cabeza erguida, veía el reloj a una hora y un instante después ya habían pasado tres. Todo se volvió monótono. A veces pasaban días enteros sin que lo notase.
Una tarde, mientras veía fijamente el segundero, lo oyó, oyó a voz que tanto había esperado.
-Apenas oí la contestadora. Me podrían decir que es lo que…
-Señor en estos casos, lo mejor es ver las cosas
-Pero si no me dicen cómo voy a saber para que me llamaron, estoy…
Había contenido la respiración en cuanto las puertas se abrieron, Lavi estaba como el día anterior excepción de que su cabellera rojiza había crecido un par de centímetros, y un par de músculos en los brazos e pecho que daban a ver sus ya 20 años.
El pelirrojo se había interrumpido tan pronto las puertas se abrieron reflejando una notable sorpresa y una mueca extraña que no recordaba haber visto nunca y por tanto no podía identificar.
El corazón de Allen había dado un vuelco, para luego latir de forma rápida, su rostro comenzó a humedecerse, las lágrimas de felicidad resbalaban lentas cayendo en la bata azulada que usaba.
-La…vi-susurro con suavidad con la voz temblorosa
Quería que se acercara, que le abrazara con fuerza y luego tomara su rostro para besarle hasta dejarle sin aire: anhelaba sentir su piel, cada partícula y gramo de él, de verdad que lo necesitaba ahora más que nunca. El pelirrojo se acerco conforme el continuaba susurrando su nombre, la enfermera les sonrió y salió para darles su espacio. Cuando estuvo cerca de la cama levanto la mano temblorosa, quería sentir la calidez de su rostro, logro rozarla un poco apenas, pues casi como reflejo el ojiverde le abrazo con mucha suavidad, como si creyera que de hacerlo más fuerte se rompería. Allen se acomodo en su hombro apretando fuertemente su camisa sollozando sin dejar de decir su nombre una y otra vez feliz. No podía estar más dichoso.
-Lavi te amo
En el momento que pronuncio esas palabras le sintió tensarse. Se le hizo extraño no recibir la usual contestación, pero olvidó ello cuando el abrazo se deshizo y el pelirrojo le tomo del mentón. Eso necesitaba aquella caricia, pero Lavi no le beso, solo le miro, y suspiro pesadamente.
-¿Lavi?
-…Allen…bueno yo…-le desvió la vista-tengo un asunto que atender y…-le soltó
-¿Ya te vas?-su voz tenia la decepción palpable
-Sí, tengo algo importante que…-miro a otro lado frunciendo un poco el ceño-bueno no me dijeron porque…y supuse que sería algo rápido y…
-¿Y cuando vuelves?-Pregunto algo preocupado por el hecho de que parecía evadir la pregunta-¿Qué tienes que hacer Lavi?
El pelirrojo cerró los ojos y negó.
-Yo no voy a volver
-…¿Qué?...Lavi que estas-intento tocar su mano pero le aparto al acto, le miraba de manera vacilante, sus palabras salían atropelladas y algo cortadas pero el tono era firme
-Yo…yo te espere, en verdad lo hice, pero-entrecerró los ojos-No despertabas-elevo un poco la voz, en intervalos irregulares- no sabes cómo fue, cuánto tiempo…y de verdad de verdad creí que tu-le miro fijo con aquella mueca del principio-Creí que no ibas a despertar mas. Lo lamento, pero ya he visto enfrente y he hecho mi vida, lo siento Allen pero esto…nosotros ya no…esto hace mucho que se acabo.
Se quedo paralizado.
-No es…esto no es gracioso Lavi-las lagrimas volvieron, quizás por ello el desvió la mirada-Y-ya deja de j-juagar conmigo así
-Perdón Allen- negó viéndole fijo de aquella manera-Pero yo ya estoy casado
-N-no es c-cierto
-Tengo mucho trabajo y…
-N-no por favor no
-…y no puedo seguir, es mejor que lo sepas ya, hace mucho que no pierdo el tiempo aquí, hace mucho que yo deje de amar…
-¡Cállate!
Cerro con fuerza los ojos, llorando tanto que su cuerpo se estremecía, no quería ver esa mirada esmeralda, donde aquella mueca, aquella lastima le era dirigida. No quería escuchar eso, era solo una mentira, la peor que le habían dicho desde que despertó, una mentira que le desgarraba el corazón.
-Allen perdona-susurraba la voz culpable del pelirrojo-Espero…que te recuperes pronto
La puerta se cerró, abrió los ojos anegados en lágrimas y supo que aquello no era una mentira, tan solo la cruel realidad. Había perdido para siempre su relación con quien se suponía compartiría su vida, el resto de sus días.
Agacho el rostro mientras los sollozos aumentaban haciendo temblar su cuerpo. Ahora solo deseaba una cosa: dormir, dormir y no despertar, esperar en sueños un mañana dulce y feliz que jamás llegaría. Uno que ya no le pertenecía, donde la persona que más quería estaba a su lado y todo era perfecto, tan perfecto que era irreal, era totalmente falso en aquel futuro truqueado por sí mismo.
Se quedo dormido, con el rostro húmedo y el cuerpo sacudiéndose apenas por los débiles hipos del llanto.
Solo esperaba no despertar ya más.
Niko: Buaaaaaaaaaaaaa!
(Musiquita de fondo de lágrimas)
Niko: ¡apágala, apágala!
(Cambio a música de batalla)
Niko: ¡pero no tan cambiada! Mira que apenas salgo del Shock, ese maldito Lavi mira que ser tan cruel
X: pero si tu lo escribiste, TU lo hiciste hacerlo
Niko; ya cállate TwT, o te golpeo tipo KOF
X: mejor cambio la música U
