Soy una mala persona u.u. Ya verán él porque.
Disclaimer: Ni Naruto ni sus personajes me pertencen.
Drabble: Soledad
Palabras: 355
La soledad la abruma de nuevo. Está rodeada de gente, pero se siente sola, como si las demás personas estuvieran pintadas y ella fuera la única persona real. Sólo ella y al tumba enfrente. A Naruto se le caen las lágrimas, Kakashi se mantiene serio y ella está… Triste. Dolida. Perdida. Destrozada.
Todos están en silencio, ella llora por dentro. Su imagen es la de una mujer vacía, con los orbes verdes perdidos en algún punto de la nada y con el alma muerta, justo al lado del cadáver.
Porque su alma se va con él, sin importarle que su corazón ya no late.
Kakashi la jala con suavidad, acercándola a la lapida. Ella aferra la rosa en sus manos y los pocos pedazos de su corazón se parte en partes más minúsculas cuando llega a leer la inscripción.
"Por ser ninja, amigo, esposo y padre"
Sasuke Uchiha
Siempre en nuestros corazones.
—Un padre que nunca conocerá a su hijo. —susurra para sí misma, sin poder evitar que las lágrimas bajen por sus mejillas. Se siente morir, y otra vez una ola de locura la ataca de improvisto. Se arroja hacia la lapida, provocando un golpe seco. No puede aceptarlo, simplemente no puede. Su Sasuke-kun está vivo, él jamás la dejaría sola.
—Sakura-chan, por favor…—escucha que murmura Naruto con la voz rota, agachándose para alejarla. No entiende nada, al igual que los demás. No entiende nada de lo que ella siente, ni lo que de verdad piensa. Su amigo no sabe toda la tristeza y desolación que puede embargar un corazón.
—¡No!¡No! —grita, aferrándose con uñas y dientes. Su voz desgarra el aire. —No puede estar muerto Naruto, ¡¿Es qué no lo entiendes?!¡No me puede dejar sola! —Ya ni siquiera tiene fuerzas para luchar, solo se deja llevar.
—No estás sola Sakura-chan… —Una sonrisa triste cruza la cara del rubio. —Nosotros siempre estaremos contigo. —Poca importancia les dio a esas palabras, ella se sentía sola y vacía. Porque ahí, en esa lapida se queda su amor, su vida, su alma y su mundo.
