CAPITULO UNO

Ya había pasado un mes después de que Kagome se había ido de la época antigua a la que pertenecía InuYasha, esa dolorosa situación no podía borrarse de la cabeza del hombre mitad bestia que en ese momento se encontraba acostado en la rama de un árbol observando a Kikyou quien había notado su presencia pero decidió no demostrarlo.

"Son tan parecidas, pero tan diferentes…" pensaba al mismo tiempo que recordaba la ultima discusión.

Todo había comenzado por un comentario desubicado de Miroku hacia Kagome, del cual InuYasha salio en defensa de la mujer.

-Oye Miroku!! u.u quien te crees que eres eh?

-Bueno InuYasha solo fue un simple comentario, no peleemos u

En eso unos sollozos comenzaron a escucharse, era Kagome

-Ya la hiciste llorar, monje idiota!!

-Señorita Kagome, no fue mi intención, lo juro, usted sabe como soy yo…

-Miroku –dijo Sango poniendo su mano en el hombro de Kagome –no creo que llore por ti

-Es verdad –dijo Shippo sobre el hombro de InuYasha – toda esta ultima semana Kagome estuvo llorando y de animos muy caídos

InuYasha afirmo eso, recordando que en las noches cuando el regresaba de ver a Kikyou, Kagome solo daba vueltas en su bolsa de dormir, como si no pudiera conciliar el sueño.

-Kagome, que sucede – preguntó Sango

-No soporto mas esto!!, no es por ustedes pero no puedo soportar que dia tras dia me lastimen ciertas personas con algunos actos y a veces me siento sola, lejos de mi familia de mis amigas, siento que estar aquí es una perdida de tiempo…

-¿Perdida de tiempo? – Gritó InuYasha –Esto te parece una perdida de tiempo!! Perdida de tiempo es lo que haces vos, en tu estupido mundo…

-Será estupido, pero por lo menos ahí hay gente que me quiere y me respeta…

-¿Qué acaso… nosotros… no te hacemos sentir bien Kagome? –Pregunto Sango

- No, no es eso… es que… lo siento –dijo al mismo tiempo que se echaba a correr en direccion hacia el pozo que conectaba ambos mundos

-Eres un idiota InuYasha!!! –grito Shippo

-¿Y ahora que hice? –dijo con la mirada de un inocente

-Y encima lo preguntas

-Monje, si mal no lo recuerdo, todo empezó por culpa tuya!!

-InuYasha no le heches la culpa a los que no la tienen es obvio que ella está mal porque estás volviendo a ver a Kikyou…

-¿Quién dijo que yo estoy volviendo a ver a Kikyou? –dijo sorprendido

-Pues, vos mismo, todas las noches cuando te vas… uff no seremos como vos, pero no somos idiotas…

-QUE ESPERAS!! Ve a disculparte InuYasha o la volveremos a perder…

-Feh! No tengo de que disculparme ¬¬, soy libre de hacer lo que quiero…

-Ufff InuYasha, que no te das cuenta que está celosa y dolida… porque no vas y le preguntas que le sucede… -repitío Sango

-Solo voy porque no quiero perder mas tiempo - e InuYasha se marcho atrás de Kagome, cuando llego al pozo ella estaba a punto de saltar, pero el hombre mitad bestia la tomo del brazo jalándola hacia él mismo quedando semi-abrazados haciendo que ambas mejillas tomaran un color rosado.

- Kagome no… no te vallas…

-¿Que sentido tiene que me quede? –dijo sonriendo al mismo tiempo que bajaba la cabeza…

Bueno, en ese momento InuYasha podría haberle dicho muchas cosas mejores que..

-Es que necesitamos tu ayuda para encontrar los fragmentos, sabes que sin vos eso es imposible…

--u

-Ufff InuYasha!! ABAJO!! -esto hizo que él quede aplastado en el suelo- Te odio, juro que te odio!!

-Kagome –dijo comenzando a levantarse – porque haces esto..

-¿Qué porque hago esto?, Que descaro de tu parte preguntármelo!! –gritándole, como siempre suele hacerle y el se incorpora también..

-Tendrías que explicarme que es lo que te sucede, de esa forma te entendería mucho mejor no crees!!!

-Es que no soporto que veas a Kikyou!!! – "ups..." Kagome se sonrojó, no debió haber dicho eso…

-¿Que? ¿Estás celosa de Kikyou?... Pero… porque

-Ya está todo demasiado claro no lo crees InuYasha?, No puedo verte con otra mujer, me hace mal... se que prefieres estar con ella antes que conmigo y lo entiendo…

-No no es eso –corrigió rápidamente InuYasha – Kagome tu sabes la promesa que le hice

-InuYasha no podré convivir contigo sabiendo que no eres para mi –dijo saltando al pozo, el hombre mitad bestia la siguió sin pensarlo pero por alguna extraña razón no pudo cruzar a la época moderna, los días comenzaron a pasar y no hubo dia que él no intentara pasar por el pozo, pero al parecer habia algo que no permitía cruzar hacia la época de Kagome, y fue asi que paso un mes.

Y ahí se encontraba observando a Kikyou,

Kagome no está, eso lo sé
Y no la encontraré en tu piel
Es enfermizo sabes que no quisiera
Besarte a ti pensando en ella

sabiendo que en ella no encontraría a la mujer que estaba buscando… a Kagome,

Unas horas jugaré a quererte,
Pero cuando vuelva a amanecer
Me perderás para siempre

pero si pudo en este último mes refugiarse en sus abrazos, sus besos, sus caricias

Si me enredo en tu cuerpo
Sabrás que sólo Kagome es dueña de mi amor
No encontraré en tu abrazo
El sabor de los besos que
Kagome me robó, me robó

y viendo en los ojos de ella una gran envidia a la mujer que él esperaba encontrar,

Y tú que sí estás, preguntas ¿Por que
La amo a pesar de las heridas?
Lo ocupa todo su recuerdo
No consigo olvidar
El peso de su cuerpo

ya que Kikyou siempre supo que en este momento no era ella la que le quitaba los suspiros a InuYasha, pero el también pensaba que era de la vida de Kagome en ese momento… ¿Lo seguía amando como decía que lo hacía?…

Kagome quizá ya me olvidó
Y otro gozó su corazón
Y yo sólo sé decir su nombre
No recuerdo ni siquiera el mío