DIME QUE ME QUIERES

Amor. Son sólo cuatro letras. Letras nada más, y las letras no pueden expresar todo lo que el sentimiento encierra.

Te amo. Es tan solo una letra más. Ni cuatro ni cinco resumen la emoción. ¿No son los actos los que demuestran los sentimientos? Entonces que más da; lo demás son sólo palabras.

Mierda. Sólo dos palabras y me haría feliz; pero no, él no puede decírmelas. Ya sé que no fue educado para ir proclamando sus sentimientos, y ya sé que creció bajo un dogma cuyo lema principal es: EL AMOR ES DEBILIDAD.

Yo ya sé que me quiere. Tendría que ser muy tonto para no saberlo. Lo que sus labios nunca pronuncian, lo dicen sus actos. Como cuando se sienta en nuestra mesa (lo cual hace a menudo) y actúa como si no le importaran las miradas asesinas de su propia casa. O como cuando me ayuda de un modo u otro con la poción que toque ese día. Desde que estamos juntos, Sevy, (Dios, si se entera de esto me mata -pero no es mi culpa, Draco siempre lo llama así-) su "amado" padrino, se dio cuenta que ya no podía torturarme –¿qué clase de tortura es pasar una clase entera con tu chico?-, y decidió ponerme con Neville. Y si yo tengo poca idea de pociones, ese chico es punto y aparte. Así que en mis "adoradas y añoradas" clases de pociones, lo único que me salva el culo es Draco que de un modo u otro, siempre encuentra la manera de indicarnos que paso viene a continuación, o pararnos antes de que explote el caldero.

O como cuando dejó de insultar a mis amigos. Curioso, pero el odio que les tenia eran más celos que otra cosa. Mi dragoncito estaba celoso. Celoso, porque los había escogido a ellos, y le había rechazado a él. Jeje, y luego dice que tengo un ego enorme. ¿Y quien no si supiera algo así?

Nunca creí que fuera posible, pero Draco y Hermione se complementan perfectamente. El sangre pura y la sangre sucia (–perdón, palabra fea-), parecen cortados por el mismo patrón. Como cuando nadie sabe la respuesta a una pregunta especialmente puñetera, bueno, nadie excepto ellos. O esa maldita manía de hacer los deberes según los mandan, aunque haya unas vacaciones de por medio. Oh, y no te metas con uno de ellos, que rápidamente, el otro te salta al cuello. Es bastante cómico sabiendo su pasado.

Draco y Ron también se llevan bien. Al principio no se podía decir que estuvieran muy cómodos, pero ahora creo que Draco es un Weasley más. Esa familia no hace más que crecer. Mi rubio y yo somos como otros dos miembros, lo único que nos falta es el pelo rojo.

No todas las familias son así. Una de las mayores pruebas de amor de Draco. Estar conmigo le costó su nombre y su familia. Un día llegó una carta y así terminó; ¿cómo puedes deshacerte de un hijo con un trozo de papel?
Su familia le considera un traidor. No porque se negara a aceptar la marca oscura (que también lo hizo); es un traidor por estar conmigo. Él siempre dice que esa traición es lo mejor que le ha pasado en la vida, pero no puedo evitar sentirme culpable.

Si los actos son amor, realmente Draco me ama. Como cuando acepto mi apellido, o como cuando me entregó su "valiosa virtud" (extraña tradición pura sangre de llegar virgen al matrimonio).

Vaya, todo lo que hemos pasado, y el cabezota no me ha dicho ni una sola vez que me quiere.

Ya sé que no debería importarme, pero a veces me pregunto como sonaran esas palabras de sus labios.

Un momento... el sombrero me dijo que era un poco Slytherin ¿no?... Ummm... si mi pequeño dragón no puede confesar voluntariamente su amor por mí, quizá yo pueda ayudarle... muajajaja (risa malvada) --''

Veamos... Puedo encerrarle en el dormitorio y no darle comida hasta que confiese... o.O ¿de donde ha venido eso?... demasiado tiempo con Snape... además no quiero quedarme viudo tan pronto.
También puedo echarle a Pansy encima. Una de las pocas Slytherin que aún la habla. Pobre tonta, cree que puede conquistarlo. Draco es MIO. A sonado un poco posesivo ¿no? Bueno, es la verdad.
Podría llevarle a nuestra habitación, atarle a la cama y hacerle el amor hasta que lo único que pueda pronunciar sea "te amo" una y otra vez. Ummm... me gusta. Debería probarlo esta misma noche.

PAFF

Oh, Dios, que golpe. Mierda ¿qué ha pasado?

No, no, no. De todas las personas que hay en el colegio (y que no son pocas que digamos), me he tenido que chocar con Snape. Dios ¿qué te he hecho?

-No ha ido a graduarse la vista últimamente, Potter. Si sigue así va a quedarse ciego.

Tranquilo, respira hondo, ignorale, cuenta hasta diez. Ya sabes como es. Más agrio que morder un limón. Y desde que estoy con Draco peor, es como mi suegra (iiiiiuuuuu mala imagen mental). Además, me lo tengo merecido. La mayoría de la gente piensa sin necesidad de abstraerse del mundo circundante... que en mi caso ha tenido que ser Snape, de entre todas las personas del castillo...

-Potter, ni me voy a molestar en castigarle. Si lo hiciera el castigo sería para mí. Con tenerle en clase ya tengo bastante.

¿Eso es bueno o malo? No me ha castigado, pero...

Ala, y se va así, sin más.

No puedo verme la expresión pero debe de ser algo cómico, al menos por como me mirar Draco, Hermione y Ron. Serán... ¿por qué no me avisaron que iba derecho contra ese hombre con un aceitero por pelo?

-No deberías enfadar a Sevy. Así nunca vas a ganártelo, y te recuerdo que es lo más parecido a un padre que tengo- Y encima con ganas de cachondeo. La fuente de mis desvelos y encima se ríe de mí.

-Draco, vamos a llegar tarde, date prisa.
-Voy Hermi. Me voy que tengo clase. Pórtate bien ¿vale?- ¿Me está tratando como si tuviera cinco años? A veces me pregunto como le soporto.

Pero está extraño... no sé... parece nervioso, inseguro...

-Harry, que tú y yo tenemos entrenamiento. Venga- Ron y su delicadeza...

Me doy la vuelta y empiezo a ir hacia Ron, que ya sale por las grandes puertas, cuando oigo que mi dragón me llama. Me doy la vuelta confundido y él se acerca a mí corriendo. Me mira a los ojos y de forma insegura me abraza. Esto es muuuuuy raro.

-Te amo- me susurra al oído.

Dios, o Draco puede leer la mente o es un jodido puñetero que... Oh, Dios. Me lo ha dicho. Me lo ha dicho.

Sé que debo tener los ojos como platos y la mandíbula debe alcanzar el suelo, pero no me importa. Me lo ha dicho.

Lo miro, y veo que se muerde el labio inferior nervioso. Le beso, con la misma emoción del primer beso y con un sentimiento que no hace más que crecer cada día que pasa.

-Yo también te- no me deja acabar y me pone un dedo en los labios para impedirlo.

-Lo sé. Sólo quería que me oyeras decirlo- Y me mira con unos ojos como pocas veces los he visto, con una sinceridad que atemoriza.

-Te amo tanto Harry- me besa y se va corriendo, aunque se vuelve varias veces para sonreírme tímidamente, y yo aún sigo petrificado al suelo frente al gran salón.

Me. Lo. Ha. Dicho.

Y a sido lo mejor que nunca he oido. Voy a llegar tarde al entrenamiento pero no me importa. Me. Lo. Ha. Dicho.

Creo que voy a cambiar un poco los planes... Esta noche le voy a llevar a nuestra habitación, y le voy a hacer el amor hasta el amanecer, hablándole de mi amor con cada beso, y de los días que aún nos quedan de pasar juntos, con cada caricia.

Me ha dicho que me quiere.

Pequeño controlador. Me lo ha dicho cuando a él se le ha antojado, pero tengo que reconocer que a sido lo mejor que me a pasado.

N/A: Este es mi primer fic. Bueno, para ser sincera, esta es la primera vez que escribo algo. Haced vuestra pequeña obra de caridad del día, jijiji, y decidme que os ha parecido¿oki? Así sabré lo que tengo que mejorar o si os gustado. ;-D