Es molesta, ruidosa, entrometida, insistente. Bridgette es insoportable. Si se fuera, todo, estaría en paz; estaría más tranquilo.
"¿Por qué? ¿Por qué no me quieres ahora que sabes que soy Ladybug? ¡Gato tonto!"
Ladybug no es como se la había imaginado. No es como aparentaba, no, no y no. Es Bridgette.
"¡Me odias! ¡Me odias! ¡Me dijiste que me amabas! ¿Por qué no lo haces?"
Es... es... es una molestia.
"Si me voy... ¿Me extrañarías?"
No contestó. No supó que decir, ella siempre estuvo ahí. Siempre ¿Cómo iba a saber lo que va a sentir si se va?
...
Félix se encuentra mirando el cielo desde la azotea del alto edificio. Bridgette esta detrás de él observando su espalda.
— Me voy a ir...
Félix no responde. Ella siempre dice lo mismo, dice que se va, pero ella vuelve. Vuelve por los ciudadanos y vuelve por él.
"Mentira"
— He ganado una beca por ganar un concurso al presentar mis diseños.
"Está mintiendo" Sigue diciendo aunque todo parece tan verídico.
— Me mudare a Estados unidos, creo que es lo mejor...
Félix lucha por querer darse la vuelta.
— He dejado mi Miraculous al Maestro Fu, me dijo que encontrara a una Ladybug para que me reemplace...
En eso siente que la puerta se cierra...
Se fue.
Aun Félix sigue luchando para darse la vuelta.
Se fue.
Repite su mente ¿De verdad? ¿Ya no estaría más? No escucharía su voz, su risa. No vería esa linda sonrisa hecha únicamente para él...
— ¡Bridgette! —Grita dándose la vuelta tan rápido ya planeando al segundo echarse a correr. Deteniéndose casi al instante, al verla parada junto a la puerta, sobresaltada por el reciente grito.
— ¿Por qué aun estas aqui?
— Estaba esperándote por si me decías algo...
— Pero... el sonido de la puerta...
— Estaba abierta y creí que era mejor cerrarla... —Explicó— ¿Me ibas a detener? —Y sus ojos brillaron por esa posibilidad.
— ¡Eres una tonta! —Grita sin fundamento. Enfadado y rojo por la vergüenza.
— ¿Me ibas a perseguir? —Continuó sin dejarlo hablar— Si es así, podemos volver a hacerlo —Dice emocionada— Yo esta vez me iré, siéntete libre de perseguirme...
— ¡Claro que no!
— ¿Me amas? ¿Verdad? ¿Lo haces? ¿No es así? —Sus ojos comenzaban a cristalizarse con esperanza de que fuera así— Por eso gritaste mi nombre...
Félix se acercó a pasos seguros, ya nada ganaba en desmentirlo. Al momento de pensar que no estaría más, su cuerpo, su corazón y su alma querían detenerla.
— Te vas a quedar —Aseguró a centímetro de su rostro— Por los ciudadanos y por mí... —Continuó con voz amenazante que indicaba su inseguridad que sentía si ella se iba— Sobre todo por mí y Bridgette...—Llamó ganando que sus hermosos ojos azules no aparten la vista de él— Que te quede claro que no te voy a dejar ir.
La tomó de los hombros, sin ser fuerte. Sin lastimarla, pero aferrándola. Ella sonrió, acercando su cara hacia él.
— Si me voy, sé que me perseguirás.
Al acabar de decir eso, dio unos pasos hacia atrás, liberándose del agarre y se echó a correr con todo mientras Félix pasmado se ponía en marcha para perseguirla.
— ¡Vuelve! ¡Vuelve, estúpida Bridgette!
Ella reía mientras corría.
"¡Atrápame!" "¡Atrápame!"
Entretanto Félix se proponía mentalmente a que cuando la atrape con sus brazos. No la iba a dejar ir. Ni siquiera a otro continente y mucho menos de su vida.
