TIEMPO EXTRA
-Bueno, debido a los inconvenientes de hoy… la boda se realizara hasta que podamos organizarla bien.
Soun Tendo hablaba con los chicos sobre la ya tan prevista boda fallida.
-Esto no hubiera pasado si tu no…
Akane trataba de reclamar a Ranma pero este la interrumpió
-¡Fue tu culpa!
Así que de aquí en adelante seria TIEMPO EXTRA.
/ - /
-Tiempo extra, tiempo extra, como si yo pensara si quiera en volver a decir que si me casare con ese tonto.
Akane se encontraba muy molesta después de todo lo que paso, y como no estarlo ella al fin había aceptado la bosa, se había puesto ese hermoso vestido de novia, para que a la mera hora el tonto de Ranma le dijera que no eran verdad esas palabras que escucho cuando casi moría en Jusendou. Y también todo el gran alboroto que se había realizado en la boda gracias a su queridísima hermana Nabiki, la tenían de muy mal humor.
Akane entro a su cuarto, en la cama estaba extendido el vestido de novia limpio y reluciente como si nunca lo hubiera usado, cosa que le extraño a la peli azul, ya que tras todo el desastre el vestido había terminado sucio y manchado. Akane simplemente se quedó mirándolo.
-Es muy hermoso ¿verdad?
-Eh ¿Qué? Ah eres tu Kasumi, me asustaste.
-Oh lo siento Akane solo vine a traer esto, lo lave y vine a guardarlo.
Kasumi traía en las manos el velo de novia. Akane lo observo con algo de tristeza y un poco de coraje al recordar todo lo ocurrido.
-¿Puedes llevártelo de aquí Kasumi?-
Dijo Akane señalando el vestido.
-¿Por qué?, ya está limpio.
-Es solo que no lo quiero,… No es como si de verdad algún día me casaré con Ranma, ni siquiera sentimos nada el uno por el otro y cuando al fin me resigne a estar con él solo por ayudarle con el Nannichuan. Él dijo ¿Bueno, y si yo no quiero?
Mientras la escuchaba Kasumi guardaba en el closet el vestido.
-Pero es un lindo recuerdo, realmente te veías hermosa en ese vestido.
Solo con algunas palabras de su hermana Akane perdía todo ese coraje que sentía y es que su hermana era tan optimista que contagiaba.
-Está bien lo guardare, gracias Kasumi.
-Ya es tarde Akane tenemos que descansar, mañana Ranma y tu tienen que ir a la preparatoria.
Kasumi le puso en las manos el velo a Akane y le sonrió.
-Que descanses, y cuídalo tal vez puedas volver a usarlo.
Akane se quedó observando la puerta por donde salió su hermana y suspiro mientras acariciaba el velo. Se sentó en la cama y se dejó caer en ella. En ese momento alguien todo su ventana. Se levantó y dejó el velo en la cama.
-¿Qué es lo que quieres Ranma?
Dijo mientras abría la ventana.
-¿Cómo supiste que era yo?
-¿Crees que Kasumi, Nabiki o acaso mi papá vienen a tocarme la ventana?
-Oh,… cierto.
-Dime ¿Qué pasa?
-¿Puedo pasar?
Akane se hizo a un lado y haciéndole una señal con la mano le permitió al chico entrar. Ranma observo en la cama el velo, Akane al darse cuenta se puso un poco sonrojada, corrió a tomarlo y lo arrojo al closet.
-Kasumi lo lavo y recién me lo trajo, ni creas que lo quería conservar, pero sabes bien como es ella e insistió en que lo guardara.
-Si lo imagino.
-Bien, dime para que querías verme.
-Emm… es solo que… yo… me quería disculpar.
-¿Por qué?
-Por lo que te hice pasar
El chico bajo la voz y jugaba con sus dedos al pronunciar esas palabras.
-Tú sabes que lo hice,… para que obtuvieras al fin la cura de tu maldición.
-Lo se… no es como si te quisieras casar conmigo o yo contigo… claro está.
Akane comenzó a tensarse por las palabras del chico y a cerrar sus manos en un puño.
-Exacto, quien querría casarse con un fenómeno como tú.
-O con un marimacho como tú.
Ranma se reía mientras acariciaba su nuca con la mano.
-Ranma no baka!
Akane saco su maso y le propino un golpe en la cabeza al pobre Ojiazul.
-Oye ¿qué te pasa marimacho?
-¿Qué acabas de decir Ranma?
La pobre chica ya tenía una venita resaltando en su cabeza
-No, no, nada solo que no tenías que golpearme así.
-Y tú no tenías que insultarme.
-Tú fuiste quien comenzó, ¿acaso quieres pelea?
Ranma tomo posición de combate.
-¿Solo querías verme para esto?
-No, es solo que (suspiro) ya te dije me quería disculpar, por todo, y por haberme negado… a…
-A casarte conmigo.
-Sí, tu solo aceptaste para ayudarme y me porte amm…
-Grosero, egoísta, egocéntrico, antipático…
-Oye espera, no tienes que ponerte así… ¿aun estas, enojada?
-No, ya te lo dije solo lo hice por ti.
-¿Qué?
Akane se dio cuenta de lo que dijo y se puso muy colorada y un poco nerviosa. Se sintió un silencio incomodo por unos segundos, que para ellos fueron eternos.
-Me… me refiero a que te pudieras curar, eso, ¿es lo que más quieres? ¿No?
-Sí, tienes razón. Gracias, por estar dispuesta a sacrificarte por mí.
-No es para tanto Ranma.
-¿Sabes? Justo a esta hora estaríamos casados, de no ser por todo lo que paso, claro.
Con las palabras del chico el corazón de ambos comenzó a latir fuertemente.
-Ranma…
-¿eh?
-¿Qué hubiera pasado? Si te hubieras casado conmigo, ¿Estarías arrepentido?
-Claro que no
Ambos se miraron a los ojos y se sonrojaron volteando inmediatamente cada quien al lado contrario, Ranma trago saliva para continuar hablando.
-¿Tú lo estarías?
-No, es decir después de todo… no te odio, ni es como si fueran tan insoportable como Tatewaki.
-O como Kodachi, además hemos pasado por muchas cosas y viviendo juntos creo que podríamos aguantarlo.
-Si tienes razón.
-¿Recuerdas cuando llegue aquí?
-Sí, convertido en chica, cargada por tío Genma convertido en panda, realmente nos asustaron a todos.
-Sí, jajaja lo imagino, ese día fuiste amable conmigo, aunque después me reventaste una mesa en la cabeza.
-Te lo merecías por pervertido, al no decirnos pensé que en verdad eras chica, por eso… amm entre al baño.
Akane comenzó a ponerse roja al recordar ese primer encuentro con Ranma y el de igual forma se sonrojo y se puso algo nervioso, más aun de lo que ya se encontraba, ambos continuaron hablando mirando al suelo.
-Bueno y a partir de ahí hemos vivido un sinfín de cosas ¿no crees?
- Tienes razón se volvió una completa aventura casa día, porque después de tu llegada comenzaron a llegar los demás.
Ranma y Akane recordaron todos los momentos que vivieron desde que él chico llego al Dojo Tendo y era verdad que desde que llego todo se volvió una gran aventura, sin saber que esperar al día siguiente, duraron un par de horas platicando de todas las aventuras vividas.
-Ranma crep que ya es muy tarde, deberíamos dormir, mañana tenemos que ir a la preparatoria.
-Es verdad, con todo lo que paso de Azafrán y el viaje a china, la pelea, olvide por completo que tenía que seguir estudiando.
-Lo imagino, pero así tiene que ser, estamos ya pronto a concluir la preparatoria, que no podemos faltar.
-Si está bien ya me voy.
Ranma subió al marco de la ventana para salir y antes de saltar volteo a ver a Akane.
-Sabes Akane, no hubiera sido tan malo estar casados, después de todo eres linda cuando sonríes.
Y salto al patio, Akane corrió a la ventana y miro hacia abajo pero Ranma ya no estaba, solo miro al cielo y en su rostro se dibujó una sonrisa.
-Ranma (dijo en casi un susurro), bueno tenemos tiempo extra.
Y cerró la ventana.
