"...tan retorcida puede llegar a ser la mente humana. Te pueden tirar del pelo valles abajo y montañas arriba, y si alguien pregunta qué ocurre, puedes llegar a contestar encantado: ¡Me tiran del pelo! Y si preguntan: ¿No quieres que te libere?, respondes: No. Y si preguntan: ¿Puedes soportarlo?, respondes: Sí, lo soporto, porque amo la mano que me tira..."
Aquel solo pequeño texto hizo que la joven que sostenía el libro frunciera su nariz levemente; -estúpido- fue lo primero que paso por su cabeza, concordó con el autor "retorcido" era el adjetivo perfecto, cerro el libro con fuerza tirándolo en alguna parte entre sus pergaminos y textos, paso sus manos por su cabello tratando de despejarse , dirigió su mirada enfrente y suspiro, era una grandísima estúpida , si realmente estúpida por que sabia que aquella pequeña frase había sido un K.O a su orgullo.
Recordó que aquel día Naruto salió junto con Jiraiya para entrenar, oh y claro le prometió que se haría fuerte, que haría regresar a Sasuke a la aldea, que los tres iban a ser el mismo equipo 7; mierda- susurro por lo bajo la peli rosa
–le hubiera dicho que sasuke le importa un rábano que se quedara, que no la dejara sola como ahora se sentía- No es que se hubiera rendido acerca de su compañero pero desde que naruto se fue lo único que hacia era esconderse tras las fuertes y espartanas enseñanzas de su maestra, en los momento que descansaba (que por cierto eran casi escasos) se había vuelto fuerte si, pero no lo suficiente.
Una fuerte ráfaga de viento azoto su cara haciéndola abandonar sus pensamientos, respiro profundamente una, dos, tres veces. Tomo impulso y se levanto decidida a salir de su casa, aquel era su único día libre del mes que por más que su ánimo estuviera por debajo de los suelos no podía permitirse pasarlo dentro de su cuarto leyendo cuanta cosa apareciera a su alcance. Se coloco un vestido que le había regalado su madre hace poco era de un azul profundo completamente suelto perfecto para aquellos días de calor.
Sus ojos brillaron levemente y antes de salir se dedico una sonrisa frente al espejo de su casa, volvió a retomar su charla mental anterior y comprendió que deprimirse no la iba a ayudar a que naruto volviera o algo de su pasado cambiara, en esta ocasión simplemente se bufo a si misma, retoco un poco su cabello y guardo entre sus piernas un porta Kunai y con paso decidido salió de su casa, camino un poco…recorrió con despacio las calles de Konoha casi saboreando los sonidos tan comunes que habían en las calles todos eran tan animados, los transeúntes pasaban con calma, con una leve sonrisa impresas en sus caras y un leve barullo de charlas se podía apreciar si se era atento….Sakura sonrió para si misma y con renovadas energías , decidió cambiar un poco su rutina, con paso rápido llego hasta la torre de la Hokage, recorrió casi corriendo su ultimo tramo y al final de este vio a Shizune con el ceño levemente fruncido a una montaña de papeles en su escritorio…
La pequeña y cálida risa de Sakura hizo que Shizune levantar su cabeza y sus ojos brillaran levemente, pero Sakura no iba a pecar por inocente –Ni en broma llevare esos papeles a Tsunade-sama -Se escucho la voz de sakura fuerte y con una chispa de diversión….Shizune solo miro a sakura como si le hubiera dicho que Orochimaru decidió que se casaría con ella miro la montaña de papeles resignada y haciendo acopio de su fuerza, e hinchando su pecho de valentía entro por la puerta, Sakura simplemente espero afuera
Los primeros dos minutos fueron de total silencio y Sakura supo en ese momento que a Shizune se le había acabado las ideas para despertar "de buena manera" a la rubia. Seguido de su pensamiento un fuerte golpe hizo que las paredes temblaran, pero todavía no iba a entrar, oh no seguían el grito….y no cualquier grito si no los de Tsunade-sama la mujer con mas pulmón en toda Konoha y efectivamente siguieron las estridentes quejas de Tsunade y su cada vez mas creciente pila de trabajo
Sakura giro su cabeza hacia el picaporte e imitando a Shizune tomo aire para llenarse de valentía y entrar….-Buenos días Tsunade-sama-La voz de Sakura hizo que Tsunade se dejara de quejar y la mirara de malas maneras –Tu, ¿Que carajos haces aquí? Si así vas a utilizar tu día libre puedo mandarte al hospital en este mismo momento- Un escalofrió paso por toda la espalda de Sakura y mirando temerosamente a su maestra entre lazo sus manos y miro hacia abajo –Tsunade-sama quería pedirle un permiso para dejarme salir de Konoha- Dos pares de ojos la miraron con incredulidad, Tsunade solo chasqueo su boca con fastidio y con un simple gesto de aprobación miro a con sus ojos refulgentes de rabia Sakura –Vete antes de que te mande a curar la epidemia de sarampión que hay en el hospital- La peli rosada no pudo haber salido mas rápido aun si estuviera con el trasero en llamas y con esa misma prisa salió llego como un torbellino. A las puertas de su aldea natal, Con una sonrisa se despidió de los dos vigilantes.
Sin saber que esta seria la ultima vez que los vería en un largo tiempo….
