¡Hola! Soy Yuko-96 y he llegado a esta fandom ha traerles algunas de mis locuras :3 Hace tiempo que tenia ganas de escribir sobre la hermosa familia que tendrían Natsu y Gray *u* y... salio esto :D Espero que les guste~

Los personajes de Fairy Tail no me pertenecen, son propiedad de Hiro Mashima.

Capitulo I

Suspiro pesadamente, no aguantaba las náuseas, hace unas semanas se la pasaba con puras carreras al baño con el fin de vomitar absolutamente todo lo que consumía. ¿Ha que se debía eso? Pues… Lucy hizo memoria y luego esbozo una sonrisa divertida, todo había comenzado hace más de un mes…

Flash Back.

Lucy conversaba animadamente con su novio, Natsu Dragneel. La rubia sonrío divertida, le causaba bastante gracia las anécdotas que su pareja le contaba.

La puerta del gremio se abrió de golpe, todos los integrantes dirigieron su mirada hasta esta, encontrándose con Gray, quien sonreía de manera orgullosa, mientras que a su espalda estaba Juvia bastante avergonzada y con una dulce sonrisa en su cara.

—¡Atención! ¡Vamos a celebrar, yo Gray Fullbuster voy a ser padre! —Ante el anuncio que hizo el peli-azul todos guardaron silencio, no era por que fuera una mala noticia, sino que se sorprendieron, ya que venía de la pareja que menos se lo esperaban. Pasado unos segundos y habiendo asimilado la información, todos comenzaron con sus felicitaciones y dándole ánimos a la pareja; ahora todos estaban muy emocionados, después de todo un bebé no llega todos los días al gremio, pero… había alguien que no estaba muy feliz, no era porque no le agradaba la idea de un pequeño que pronto nacería, sino porque no iba a permitir que Gray le ganara en eso.

—¡Gray bastardo! ¡¿Cómo puede ser posible que vayas a ser padre antes que yo?! ¡Apuesto a que te cansaste de que te ganara en las batallas y decidiste vencerme en esto, pero no lo lograras! ¡Lucy! —El peli-rosa miro fijamente a la chica rubia, haciendo que a esta le recorriera un escalofrió en la espalda, conociéndolo sabía perfectamente que era lo que planeaba. —¡Vamos a tener un bebé! —Dicho eso Natsu sujeto de la mano a su novia y en un dos por tres ambos desaparecieron del gremio, dejando a todos bastante confundidos y en un silencio sepulcral.

—¡Bien! ¡Vamos todos a brindar por el futuro integrante de Fairy Tail! — Y gracias a ese ánimo de Cana, todos siguieron felicitando a la pareja y celebrando felizmente.

Fin Flash Back.

Y a eso se debían aquellos malestares que la rubia tenia, pues el plan de Natsu había funcionado y en estos momentos ella se encontraba embarazada, pero Natsu aún no lo sabía, ya que recién hoy la rubia se había enterado y su novio estaba en un trabajo, aunque bastante sencillo así que lo más probable es que pronto llegaría.

A decir verdad ella estaba bastante feliz, ni siquiera le molestaba el hecho de que esto haya empezado como una competencia, porque sabía perfectamente que Natsu no lo hacía por eso, si no que a él le hacía mucha ilusión el saber que una pequeña criaturita puede ser su más preciado tesoro y que lo criaría a su semejanza, al pensar eso una gota resbalo por la sien de la chica, tener un mini Natsu haciendo destrozos por ahí no sonaba muy lindo, pero eso no importaba, iba a ser madre y eso le hacía bastante ilusión.

—Lucy-san.— La voz tras ella hizo que dejara sus pensamientos de lado y le prestara atención a quien le llamaba. Juvia la miraba algo avergonzada y nerviosa, Lucy fijo su vista en la pequeña curva del estómago de la peli-azul y sonrío para sí misma, Juvia ya tenía 3 meses de embarazo y su abdomen ya había comenzado a tomar forma. Suspiro ilusionada, pronto su barriga también crecería y por ende su bebé también lo haría.

—¿Pasa algo, Juvia?

—Pues… Gray-sama se fue a un trabajo con Natsu-san… entonces… Juvia quería pedirte que la acompañaras de compras…

—¿Eh? Claro, me encantaría ir de compras contigo.

Las dos chicas salieron animadamente del gremio, Juvia le comento a la rubia que deseaba comprarle un bonito trajecito al bebé, a pesar de estar recién en estado, ella quería darle la sorpresa a Gray de que su bebé ya tenía su primera ropita. A Lucy le pareció una acción bastante tierna y gracias a eso se le ocurrió una manera de darle la feliz noticia a Natsu.

Ambas entraron a una tienda exclusiva para infantes, quedando maravilladas ante todo lo que había en aquel lugar. Comenzaron a mirar todas las bellezas que había ahí, hasta que cada una se detuvo frente a un lugar en específico.

—¡Mira esto! —Exclamaron las dos al mismo tiempo con un conjunto de ropa en la mano cada una. Lucy tenía en sus manos un hermoso pantaloncito de algodón de color azul, a juego tenía una hermosa sudadera también de color azul, pero esta tenía en el gorro unas hermosas orejitas de gato. Por su parte, Juvia tenía en sus manos un hermoso vestido color rosa suave estilo campana, con varios moños adornándolo de color negro, y sobre el vestido había un hermoso bolero con mangas de color crema.

—Muy lindo vestido, Juvia.—Lucy admiraba aquel pequeño vestido que la maga de agua tenía en sus manos. —Pero… ¿Sera niña tu bebé?

—Aún no lo sé, pero Juvia siente que será una niña. A propósito… ¿Por qué tienes eso en las manos?

—¡A-Ah! Pues… esto… yo…

—¿Sera qué Lucy-san esta…?

—Pues… así es. —Lucy sonrió ante la cara que puso Juvia, sabía lo que pensaba la chica y eso era que ella no sería la única que sufriera en esta etapa de su vida, sino que la rubia experimentaría lo mismo.

—Felicidades. —Juvia le sonrió sinceramente, los días como "rivales en el amor" terminaron y ahora eran muy buenas amigas.

—Muchas gracias. —Lucy volvió a mirar ese trajecito azul que tenía en sus manos y sonrío aún más, compraría ese conjunto y le daría una sorpresa a su novio, sí, eso es lo que iba a hacer. —Bien, yo me llevare esto.

—Pues… yo comprare este vestido, espero que de verdad lo pueda usar.

—Tranquila, ya verás que sí.

Y así ambas chicas compraron lo que les gustaba y se marcharon cada una a su casa.

Lucy iba animadamente, sabía perfectamente que el primer lugar al que iría Natsu cuando llegara seria su casa, bueno, no tan así, el primer lugar seria el gremio, pero su casa seria antes que la propia de Natsu, siempre era así, incluso desde mucho antes de que fueran novios.

Abrió la puerta y noto que no había nadie en su casa, de seguro su pareja aún no llegaba. Saco el contenido de la bolsa y lo puso estirado sobre su cama, primero se daría un baño y luego tendría tiempo de arreglar todo para darle la sorpresa al chico.

…

Un peli-rosa caminaba animadamente por las calles de Magnolia, había terminado su trabajo con éxito, aunque no haya sido la gran cosa a él le daba gusto terminar todo bien. No había ido al gremio, no quería perder tiempo, tenía que ir lo antes posible con su novia y dejar descendencia, pero primero debía hacer que su amigo azul comiera hasta llenarse y durmiera profundamente, si, ese era el plan perfecto.

Entro por la ventana de la casa de la chica, quedando justo sobre la cama, miro para todas partes y no encontró a su compañera, pero antes de bajarse de la cama noto algo suave bajo sus manos. Tomo aquello entre sus manos y lo miro fijamente.

—Natsu, ¿Qué pasa? —Happy se puso a su lado mirando lo que el mago tenía entre sus manos, luego miro a este y vio la sonrisa divertida que el chico puso.

Lucy salio de la tina y se observó en el espejo, miro su abdomen completamente plano, pero que pronto comenzaría a mostrar el crecimiento de su pequeño crio. Tomo una toalla con la que se envolvió el cuerpo y salio del baño, levanto la vista hasta su cama y observo lo que sucedía.

—Natsu… ¡¿Qué demonios crees que haces?!

—¿Qué no ves? Le pongo su traje a Happy.

—¡Aye!

—¡No seas idiota, eso no es para Happy!

—¿No?¿Entonces?

—Pues… Esto… Natsu… Va-Vamos a ser padres— Lucy bajo la mirada avergonzada, esperando que el mago de fuego dijera algo, pero no obtuvo respuesta, así que levanto la vista para saber qué era lo que sucedía.

—Lu-Lucy…—Una sonrisa se formó en sus labios, mientras que sus ojos se cristalizaban y se abalanzaba a abrazar a la maga celestial. —¡Muchas gracias! ¡De verdad!

—Lo conseguimos, Natsu.

—¿Entonces esto no es para mí? — La voz del gato azul hizo que ambos se separaran y observaran al felino con aquel trajecito puesto. —Ni se nota que llevo puesto algo.

—Es cierto, Lucy si le ponemos eso al bebé lo confundiríamos con Happy ¿no crees?

—¿E-Eh? —La rubia se dio cuenta de que aquello era verdad, un traje completamente azul y con orejas de gato, pues obviamente era idéntico a Happy. —Creo que he fallado en mi primera compra como madre…

—No te desanimes Lucy, echando a perder se aprende.

—¡Eso no me ayuda en nada!

—Pero bueno, lo importante es que vamos a ser padres…—Natsu poso suavemente una mano sobre el vientre de Lucy, para luego sonreír alegremente, ante eso la rubia se sonrojo y sonrío de igual manera, sabía perfectamente que su novio estaba muy entusiasmado con la noticia al igual que ella. Este sería el comienzo de un largo camino que les esperaba para poder ver a su hijo, y ambos estando consientes de todos los altos y bajos que vendrían, ya tenían planeado un modo para tratar de superarlos y vivir felizmente los días hasta el momento en que su criaturita quisiera mostrarse al mundo.

…

Gray llegaba a su casa, la cual compartía con su novia. Hace un tiempo que ya vivían juntos y aunque a veces Juvia lo desesperaba, no cambiaría por nada la compañía que esa chica le hacía. Abrió la puerta de la casa e hizo una cuenta regresiva, justo en el momento en que dijo uno, Juvia se abalanzo sobre él.

—¡Gray-sama! ¡Juvia te extraño tanto!

—Oe Juvia, debes tener cuidado, no puedes tomarte todo a la ligera, recuerda que ahora estas esperando a mi hijo.

—Lo siento mucho. —La peli-azul se puso de pie y miro a Gray, en ese instante recordó la compra que había hecho el día de hoy, así que sin decir nada más corrió a buscar la prenda, llegando junto a su novio a los segundos después. —Gray-sama ¡Mira!

—¿Eh? ¿Un vestido? —El peli-azul observo el vestido sorprendido, no creía que a tan poquito tiempo Juvia ya supiera el sexo del bebé, era ilógico. —¿Crees que será niña?

—Juvia tiene ese presentimiento…—Al decir eso Juvia agacho la cabeza avergonzada, tal vez el mago de hielo la tomara por loca al decir eso.

—Bien, entonces creeré en tu presentimiento. —Al escuchar eso la chica levanto la cabeza sorprendida, pudiendo notar la hermosa sonrisa que su pareja le estaba dedicando. Al igual que Natsu, Gray estaba bastante entusiasmado por su futura paternidad, y tanto él como Juvia no hallaban el momento en que su hijo o según la peli-azul hija, naciera.

Eso fue todo, ojala que haya sido de sus agrados, espero que me dejen sus opiniones para saber si vale la pena continuarla o no ^^ ¡Gracias por leer!