N/A: Pues aquí estoy con mi segundo fic de Juego de Tronos. Esta vez hablando de una teoría de la que yo personalmente creo que es la correcta, y si no lo es, pues así es como podría haber sucedido.
Disclaimer: Aunque soy lenta con mis actualizaciones, creo que soy más rápida que George, y no tengo un mente tan retorcida.
Aviso: Este fic participa en el Rero#41 se acerca el invierno del foro Alas negras, palabras negras.
Las piernas le temblaban de tal forma que le era imposible mantenerse en pie. Pero no tenía prisa por levantarse.
Estaba sudando, notaba el pelo que se le había escapado del improvisado peinado que le habían hecho cuando empezó a retorcerse de dolor. También tenía frío, y estaba cansada. Pero había valido la pena. Todo el dolor, el miedo, la angustia y la sangre habían pasado a un segundo plano cuando escuchó el llanto a pleno pulmón de aquello que había llevado en su vientre durante nueve meses.
Los ojos se le cerraban del cansancio, pero cuando escuchó los pasos de la comadrona hizo un esfuerzo sobrehumano por abrirlos.
-Es un niño.
Estiró sus temblorosos brazos y dejó que le dieran al bebé. Era más pequeño de lo que imaginaba, de piel clara y con el pelo negro.
-Hola Jon-la voz de Lyanna denotaba cansancio, pero también alegría. Le cogió la mano y la acarició.
¿Tomates? ¿Cuchillazos? ¿Eso es una navaja o una espada? ¿¡Reviews!?
Mitsuki Sakurai.
