Estoy aquí porque todos estamos aquí
I: Algo que decirte – KibaHina
Kiba estaba molesto. Muy molesto. ¿La razón?
Naruto.
Ese tonto… siempre intentando llamar la atención, siempre el favorito de todos, siempre el admirado… siempre a quien admiraba Hinata y siempre su favorito.
No es como si estuviera celoso… claro que no. Solo que… bueno si, estaba celoso.
A él le gustaba Hinata, la quería. Más que quererla, la amaba. Aunque le daba miedo hasta pensarlo, y admitirlo frente a alguien que no fuera el mismo sonara cursi, el la amaba.
No sabía exactamente que era ni porque. Simplemente era que al mirarla sentía que el mundo era un poquito mejor, que no todo era tan malo. Solo con ver su sonrisa notaba algo calido crecer en su interior y alojarse en su corazón… si que sonaba terriblemente cursi.
Estaba tendido en su cama, con las manos detrás de su nuca. Se incorporo y arrojo una almohada contra la pared, como si ella tuviera la culpa de todo.
Miro el reloj situado en la mesa de noche. Faltaba media hora para las seis de la tarde, hora en que Hinata le había dicho que se vieran ayer. Lo recordaba claramente.
- Etto… ¿Kiba-kun? – Llamó un poco nerviosa una chica de ojos blancos.
- ¿Qué pasa, Hinata? – Kiba se había ofrecido a llevar a la Hyuuga a su casa para "asegurarse que no le pasara nada malo, ya que era muy tarde."
- Yo… me preguntaba si… - Estaba levemente sonrojada, mientras jugaba con sus dedos. - … mañana… si no es molestia, ¿Me acompañarías a un lugar? Necesito hacer algo importante. – Dijo con una firmeza un tanto inusual en ella.
- ¿Algo importante?- Su mirada se ensombreció. Imaginaba que era ese algo. – ¿Tiene que ver con Naruto por casualidad?
- Uuumm… si. Por fin le diré algo que he querido decir hace mucho tiempo. – Confesó entusiasma, con una sonrisa.
- Ya veo. Entonces, ¿Necesitas que vaya para prestarte apoyo moral? – Fingió una sonrisa entusiasta.
- ¡Hai! Realmente apreciaría que tú vayas conmigo. Así que… ¡apoyame una vez mas, por favor! – Pidió ella, estaba toda sonrojada.
- Ay Hinata… sabes que siempre puedes contar conmigo. – Sonrió al tiempo que su mascota y amigo ladraba. – Oh si, y también con Akamaru. Te apoyaremos siempre. Claro que no esperes que nos vistamos de porristas o algo así…
Hinata rió suavemente, Kiba siempre era muy gracioso.
A Kiba le encantaba ver a Hinata reír.
- Entonces, ¿Mañana a las seis?
No podía decirle que no. No podía negarse a acompañarla. No podía decirle que no quería ver como se le declaraba al imbecil de Naruto. Así que iría con ella, pondría su mejor sonrisa y le diría palabras de aliento.
Siempre estaría ahí para ella.
Solo esperaba que ese tonto no se atreviera a rechazarla. Porque de ser así, el lo haría pagar.
A las seis en punto, estaba parado frente a la puerta de la mansión Hyuuga. El antisocial de Neji salio a abrirle.
- Oh… Inuzuka. – Lo miro con desconfianza.- Asi que es contigo con quien saldrá Hinata-sama.
- No es una cita si es lo que crees, Hyuuga. – Le aclaró con el ceño fruncido.
Intercambiaron miradas fulminantes largo rato, hasta que detrás de Neji, apareció Hinata.
- Ohayo Kiba-kun, lamento la demora.
- ¿Eh? Ah… si, no es nada… - Estaba medio atontado ante lo que estaba mirando. Ella simplemente hermosa.
Llevaba un kimono celeste con flores azules y un obi también azul.
- Oye Inuzuka, deberías limpiarte la baba. – Dijo Neji con una sonrisa maliciosa, lo cual hizo sonrojar a Hinata.
- ¡Neji-niisan! Por favor, n-no digas e-esas cosas… - Comenzó a jugar con sus dedos mientras miraba hacia abajo con una pequeña sonrisa.
- Déjalo Hinata, vamos. – Comenzó a caminar despacio para que ella lo alcanzará.
- Neji-niisan volveré por la noche, nos vemos. – Apresuró el paso para alcanzar a su amigo.
La despedida de Hinata no había pasado desapercibida para Kiba, por lo que se hallaba un poco confundido.
- Nee Hinata… Dijiste por la noche, ¿Planeas demorarte tanto?
La miro de reojo para ver como reaccionaba. Se había puesto bastante nerviosa y su miraba volvía a estar en el piso. No contesto rápidamente, sino que parecía meditar la respuesta.
- Es que… luego de hablar con Naruto-kun me gustaría que salgamos a caminar o a otro lugar… si tú quieres, claro. – Habló completamente serena y con una sonrisa.
Ahora si que no entendía nada. Si Hinata se le iba a declarar a Naruto, ¿Entonces por qué quería salir con él? No entendía a las mujeres.
- Claro que quiero.
Por fin llegaron a donde estaba Naruto. En Ichiraku, como no, era tan predecible.
- ¡Kiba, Hinata-chan! Hace mucho que no nos vemos. – Dijo con una sonrisa. Para Kiba sería siempre un misterio como se las arreglaba para hablar y comer cantidades exorbitantes de ramen.
- Ohayo Naruto-kun.
- Si, hola.
- No pareces muy feliz Kiba teme. - Y repentinamente cambio su cara de desconcierto a una de sus típicas sonrisas zorrunas. – Nee te ves muy linda Hinata-chan… ¿Acaso el teme y tu tienen una cita?
- ¿A quien le dices teme, idiota?
- Etto… Naruto-kun yo… quería hablar contigo.
- Voy a pasear un poco con Akamaru. – Dijo Kiba en plan "les daré privacidad". Lo que en realidad pasaba era que no quería presenciarlo.
Kiba espero afuera. Un par de minutos después Hinata salió del lugar. Por lo poco que duro su charla, el joven pensó que el baka de Naruto la había rechazado. Ya estaba alistando sus puños cuando vio a Hinata sonreír.
- ¿Hinata? ¿Qué sucedió? – Realmente confundido y preocupado se acerco a ella.- ¿Te le declaraste o no?
- ¿De-declararme? – Bajo la mirada apenada.- C-claro que no… Yo solo quería decirle a Naruto-kun… que lo felicitaba por su noviazgo con Sakura-chan… y que él siempre será la persona que mas admiro.
- ¿La persona que mas admiras? Pero si… ¡Si a ti te gusta Naruto! –Exclamo el chico-perro.
- T-te e-equivocas. Por fin me he dado cuenta que Naruto-kun es solo eso, la persona que mas admiro. –Dijo sin titubear.
Kiba no podía creerlo. Si Hinata decía la verdad quería decir que tenía esperanzas. Miro su rostro tratando de encontrar algún rastro de mentira o confusión. Nada.
- Me alegro mucho, Hinata. Francamente, habría que estar falto de neuronas para que te gustara un baka como Naruto… Tú tienes mejor gusto, Hinata.
- No digas eso de Naruto-kun onegai… Además… la persona que me gusta ahora mismo se parece mucho a él.
- ¡¿Qué?! ¡¿Quién es?! ¡Pero si no hay nadie tan baka como Naruto por aquí! ¡Con uno ya tenemos suficiente!
- Tú no eres ningún baka Kiba-kun. – Sonrió y tomo su mano con timidez.- ¿T-te p-parece si empezamos con la cita, Kiba-kun?
Fin
Fan Fic dedicado a Kamira, se que no es una de las parejas raras que te gustan pero va para vos XD