Ya habían pasado dos años desde que el Nido se cristalizase para evitar que todo el planeta y sus habitantes explotasen contra la corteza de la extensa tierra que era Grand Paals. El grupo de los ex L'cie no tuvieron que preocuparse de cómo rescatar a sus compañeras nativas de allí de su encierro pues con la salvación del hogar de las "víboras" ya habían cumplido su misión y Etro tuvo a bien liberarlas para siempre del cristal y su destino. Los nuevos habitantes en aquella peligrosa tierra desconocida decidieron asentarse en las ruinas de Oerba donde pudieron edificar lo necesario para la preservación de la humanidad. El ejército tomó el control de las acciones de salvación los primeros meses y tiempo más tarde se designó a un mandatario para organizar de nuevo la sociedad, aunque la gran mayoría decidió trasladarse a diferentes puntos del planeta con la intención de vivir de su propio esfuerzo a diferencia de su vida anterior bajo el mando de los Fal'cies.

Lightning Farron volvió a alistarse a las filas del nuevo cuerpo de guardianes obteniendo el mismo puesto que ya tenía, no deseaba nada más pues así podría cuidar de su hermana y esta vez con la decisión de disfrutar de su tiempo libre a su lado. La boda entre Serah y Snow en realidad no difirió de cómo había sido su aventura antes de rescatarla pues muchas veces el novio había sido golpeado por su, ahora sí, cuñada, aunque esta vez Serah se lo tomaba con bastante humor, ya no había nada más de lo que preocuparse salvo de llevar una vida sana al lado de su marido. Hope retomó los estudios y vive junto a su padre que formaba parte del nuevo equipo de gobierno, tomando las decisiones lógicas ante cualquier situación. Sazh había conseguido trabajo como transportista y su hijo acudía a la escuela con muchos otros niños de allí. Vanille y Fang por su parte, a pesar de la reticencia de algunos operarios del ejército al tener todavía miedo de cualquier cosa proveniente de Grand Paals consiguieron asentarse con el resto de personas del Nido y fueron uno de los pilares de la recuperación al enseñarle a todos ellos cualquier secreto de esa tierra. Al final Vanille se dedicó a enseñar a los niños lo que debían y no debían hacer en su territorio pues para ellos algo así era muy peligroso, ella les enseñaba como a ella le habían enseñado todos y cada uno de los miembros de su familia hace ya más de 500 años. Fang fue contratada para colaborar con las acciones de los guardianes a la hora de patrullar la estepa y defender el pueblo de todo ataque, sorprendió a todos ellos con su capacidad de combate y rápidamente se ganó el respeto de todos los reclutas, nuevos y veteranos. La mayor parte de las veces esta acompañaba a Claire y a su grupo en las misiones y algunos días eran misiones de varios días donde necesitaban acampar a la peligrosa noche.

Gracias a eso ambas chicas empezaron a tener más confianza entre ellas y su eficiencia en combate era mucho mayor las dos juntas que si lo hicieran una a una.

-"dime Fang, ¿qué tal tu última misión con Light?".-preguntaba una Vanille curiosa mientras añadían algún que otro alimento al plato que estaba preparando. Les habían dejado su anterior hogar para vivir, cosa que agradecieron de todo corazón y ambas nativas vivían tranquilamente como hacía mucho que no recordaban.

-"a un inteligente recluta se le ocurrió la brillante idea de jugar con una cría de Ochu y la atacó sin querer, ¿tú cómo crees que fue?"-Fang se sentó rápidamente en el sofá suspirando cansada después del largo día que había tenido.

-"una batalla sin cuartel y un recluta... ¿Muerto?".-se aventuró a preguntar la chica de pelo anaranjado poniendo un tono de preocupación en la última palabra.

-"Sobra la batalla, si, sobre lo de muerto, afortunadamente no, pero está con varias heridas descansando en el hospital, Lightning y yo fuimos las que nos ocupamos del Ochu ya que nadie podía derrotarle".-recordó el arduo combate que habían tenido y extrañamente sonrió algo contenta.

-"Tú y Light os compenetráis muy bien, solo actuabas tan bien en equipo conmigo y... No, solo conmigo que yo recuerde, y no es que yo pudiera seguir tu ritmo fácilmente".-se llevó un dedo a la barbilla pensando en todos los momentos que había quedado agotada en combate mientras que Fang aún seguía teniendo energías hasta para derrotar a un Bégimo.

-"recuerdo perfectamente que yo tuve que adaptarme a tu ritmo para que no desfallecieras, no es que formáramos tan buen equipo, solo que eras con quien más a gusto me sentía.. Y eras la más pesada... Así que tu eres Fang, ¡seamos amigas!. ¿Porque no vamos a cazar tu y yo?. ¿Fang? ¿Fang?".-ponía tono de burla mientras se hacía pasar por su amiga de la infancia.

-"no te metas conmigo, estaba sola y quería una amiga, y me parecías la más interesante de todos..."-la chica se dio la vuelta ofendida y fue a por la comida que acababa de terminar.

-"vale, vale, lo siento."-Fang se rió divertida y tan pronto como vio la comida llegar a la mesa se lanzó a comer directamente.

El día siguiente amaneció bastante soleado, al fin habían llegado los días de descanso que Fang tanto ansiaba después de varios días trabajando duro con el cuerpo de guardianes. Les gustaba realmente ir de caza con todos ellos pero también adoraba pasarse días sin hacer nada más que entrenar y disfrutar con sus amigos. Despertó a una hora que a ella le pareció bastante tarde pero no tardó en darse cuenta de que no era para nada lo que pensaba, la luz del sol estaba empezando a salir y en la litera de abajo aún estaba Vanille acurrucada, con el rostro sonriente, debido seguramente a la tranquilidad con la que llevaban viviendo todo este tiempo, hacía mucho que deseaba ver a su "hermana" de ese modo y la morena sonrió divertida. De un salto cayó con el mayor silencio que pudo al suelo y se estiró disfrutando de los primeros rayos de sol golpeando contra su cuerpo que ahora llevaba una simple camiseta y unos shorts negros, cortesía de la hermana menor Farron que, a pesar de lo que le habían hecho, les agradeció todo lo que hicieron ellas para proteger su tierra y a su familia.

Lentamente se dirigió a la ventana pues ya no estaba demasiado desvelada,ñapa rece ser que todo este tiempo de trabajo rompió con el horario natural de su cuerpo a la hora de dormir así que tendría que ir acostumbrándose poco a poco a uno normal.

Respiró el aire limpio y puro de su tierra, aunque ahora algo cambiada, disfrutando del ambiente tranquilo en el que vivía. Cuando despertó en el Nido nada consiguió hacerle sentir así, demasiadas máquinas y el aire cargado de las ciudades no ayudaba, podía disfrutar de cuatro días en la Estapa pero ni uno solo en una ciudad.

Su ojos se abrieron de golpe al notar la presencia de su ya bien conocida compañera de pelo rosado que era Lightning. Ella ya estaba con pantalón de vaqueros, unos tenis y una sudadera, sinónimo de que ya se había despertado hace un buen rato, realmente era la primera vez que veía a su amiga sin nadie más a su alrededor. La joven estaba de pie en al borde de la plaza mientras observaba la salida del sol en una especie de trance.

-"es precioso ¿verdad?."-preguntó Fang al llegar a su lado haciendo que Lightning se asustase ligeramente, no esperaba encontrarse a nadie más.

-"si... Hacía mucho que no veía salir el sol, me recuerda a Bodhum."-explicó la chica de pelo rosa que sonrió ligeramente al verla.

-"eh, seguro que aquí es mucho más bonito."-la morena se apoyó en el muro de piedra admirando también el paisaje que echaba tanto de menos.

-"no te lo creas tanto anda."-soltó una risita graciosa ante la "modestia" de su amiga

De repente se quedaron en completo silencio mientras observaban como el sol terminaba de salir en el horizonte, iluminando todos y cada uno de los rincones del pueblo y de los rostros de las chicas que empezaron a sentir la calidez del sol en su piel. En ese momento Fang desvió la mirada para posar los ojos en su compañera, su sonrisa se desvaneció un poco pasando a ser... Admiración. El rostro de Claire Farron estaba extremadamente tranquilo, sus ojos azules brillaban ante el solo como si fuera directamente el agua del mar abrazando el sol, y su piel pálida, ahora incluso algo más, hacía que pareciese una muñeca perfectamente tallada, como si Lindzey hubiera puesto más esfuerzo en crearla a ella en comparación al resto de las personas del mundo.

Mientras más se quedaba observándola poco se daba cuenta de que Lightning desviaba la mirada del paisaje y se quedaba mirándola a los ojos sin decir nada, en el momento en que los dos pares de ojos se encontraron pocos minutos hicieron falta antes de que los azules se desviasen a cualquier lugar que no fuera el verde bosque de Fang que se levantó poniéndose las manos en las caderas, su pose habitual.

-"oye... Me estaba preguntando.. ¿Te apetecería acompañarme esta noche a la estepa? Me gustaría ir a un sitio y... Podrías acompañarme."- se tragó el "querría que me acompañases" que le habría gustado decir.

-"No creo que vaya a poder, ya he quedado esta tarde con Rydgei."-dijo simplemente empezando a encaminarse hacia su casa de nuevo al tiempo que dejaba a la chica morena sin poder dejar de mirarla. Realmente esa noticia no se la esperaba, bien sabía que aquel chico que había sido uno de los que ella había utilizado como encontrar a Vanille y se había liberado de la pesadilla de ser Cieth al haber cumplido ellas su misión estaba cada vez más cercano a la chica soldado y cada vez que lo recordaba su corazón sufría un especie de dolor, como si le atravesasen con un cuchillo. Zarandeó la cabeza obligándose a olvidar ese sentimiento, era solo su amiga, así que ella también volvió a su casa encontrándose con la joven pelirroja recién levantada, con cara de haber dormido poco, era una chica que daba igual lo que durmiese, siempre se despertaba así.

-"buenos días, qué precioso rostro tienes hoy Vanille."-aprovechó para reírse un poco de ella a pesar de que no le hizo mucho caso mientras se sentaba a desayunar.

-"casi nadie se levanta tan fresca como tu todos los días..."-incluso su voz sonaba como si estuviera cayéndose de sueño

-"parece ser que yo y Lightning tenemos esa habilidad."-Fang cogió un bollo de pan mientras se sentaba al lado de Vanille. Justo en ese momento una especie de energía extraña entró en el cuerpo de la más joven y su rostro se iluminó curiosa

-"¿cuándo has visto a Light?."- preguntó con voz sospechosamente animada.

-"em... Me desperté demasiado temprano y la vi en la plaza, nos quedamos viendo el amanecer."- quería mucho a su "hermana" pero cuando veía esa cara en ella un poco de miedo entraba en su interior porque sabía lo que significaba.

-"¡qué romántico¡"-Vanille saltó de golpe juntando sus manos al tiempo que sus ojos empezaron a brillar con un fulgor mucho mayor que el del sol

-"no, Vanille, no es romántico, no lo era cuando lo hacíamos tú y yo, no lo va a ser ahora."- la morena suspiró cansada al tiempo que intentaba explicarse

-"lo nuestra también era romántico."-respondió algo molesta la chica poniendo las manos en las caderas.

-"lo sería para ti cuando te lanzaste hacia mi tirándome al suelo mientras tu boca me tapaba la respiración..."- le recordó poniendo algo de mala cara.

-"creí que sentías lo mismo por mi..."- la joven de pelo rojo bajó la mirada algo avergonzada

-"estaba siempre contigo porque los otros chicos se metían contigo y no quería verte pasándolo mal, ¡no parabas de llorar!"-explicó alzando la mano algo exasperada

-"bueno, bueno, eso ya pasó hace mucho tiempo. Siguiendo con el tema, ¿porqué no es romántico con Light? He visto cómo la miras, así que no intentes decirme que no te gusta porque no me lo voy a creer."-Vanille frunció el ceño mirando a Fang directamente a los ojos.

-"siempre hay que mirar ambas partes para eso y está claro que ella no siente lo mismo por mi. La he invitado a ir a Paddra conmigo y me ha dicho que ya había quedado con... Rydgei..."- la voz de La morena empezaba a soñar bastante molesta y afectada con eso

-"¿quién es ese?... ¡Da igual! Se puede saber ¿porqué Oerba Yun Fang no lucha para ganarse el amor de la chica soldado?, ¿dónde demonios está toda esa confianza que te caracteriza?."-Vanille le recriminó haciendo que Fang empezara a sentirse algo incómoda.

-"el chico de la Caballería... Y no hay mucha confianza en mí desde que se que prefiere ir con ese antes que conmigo."

-"oh, vaya, la Fang que con su sonrisa podía conquistar a cualquier mujer, la que con cualquier movimiento podía hacer que cualquiera chica suspirara por su piel, no tiene confianza para intentar conquistar a una. Jamás creí que oiría eso."-realmente el rostro de Vanille demostraba que estaba muy sorprendida.

-"no es "una", es Claire..."-justo en ese momento es cuando un ligero enrojecimiento se mostró en la cara de la morena.

-"Dios mío... No solo te gusta... ¡Estas enamorada! ¡No es "una", la consideras la única!."-la voz de la joven había subido dos tonos y se puso de rodillas sobre el sofá observando a su compañera cada vez más nerviosa.

-"Vanille.. Por favor..."-estuvo a punto de decir algo cuando fue desconsideramente interrumpida

-"tengo un plan."-la sonrisa de la más joven se ensanchó y una maldad que jamás había visto en sus ojos mostró que esto iba a ser malo, muy malo

Lightning esperaba pacientemente en la nueva cafetería construída para la compañera del equipo de NORA de Snow, Lebreau, que disfrutaba escuchando las historias de todos y cada uno de los que pasaban por allí, era casi un bar de ambiente, de muy buen ambiente de hecho, pocas personas causaban problemas allí y era el centro de reunión de muchos de por allí e incluso de muchos de fuera de aquella nueva ciudad. Ella miraba de vez en cuando el reloj que llevaba a la muñeca, una de las cosas que le molestaba era tener que esperar por alguien cuando habían quedado a una hora concreta y esta persona llegaba tarde, y Rydgei llegaba veinte minutos tarde. Suspirando siguió mirando el reloj cuando vio aparecer unos claveles justo delante de sus ojos haciendo que soltase un gemido de sorpresa.

-"perdona, me ha costado un poco encontrar estas flores."-el chico sonrió alegremente mientras le tendió las flores con cuidado, no debía dar ningún paso en falso si quería que su tarde-noche con Lightning Farron fuera un éxito.

-"no importa... Gracias."-dijo algo incómoda, no estaba acostumbrada a algo así, y cogió los claveles dejándolos a un lado de la mesa.

-"no hay de que. ¿Cómo fue el día?"-preguntó simplemente el chico sentándose frente a ella

-"bien... Bueno, me he pasado la mañana entrenando."-puso una mano bajo la barbilla apoyándose en ella

-"como no, el sargento Lightning Farron debe mantenerse en forma para mantener su fama."-eso hizo reír un poco a la chica soldado, eso le había causado mucha gracia.

-"no es fama lo que busco precisamente, solo quiero mantenerme en forma."-explicó de manera simple mientras notaba algunas miradas sobre ella

-"está claro que lo haces bien, no hay muchos que te quiten los ojos de encima."- Rydgei sabía muy bien eso pues él mismo y todo su equipo casi al completo no hacían más que desear pasar algún momento con ella, para todos su belleza superaba la de cualquiera. Aunque estaban divididos en ella y su amiga Fang, esa belleza salvaje y misteriosa era muy interesante.

-"tampoco es eso lo que pretendo causar."-en verdad eso la dejó un poco más incómoda y su sonrisa se había borrado, se dio cuenta en ese momento de que eso era lo que pretendía el chico, su fama y su cuerpo era lo que le interesaba a los demás, Claire Farron no existía para ellos, aunque realmente era culpa suya, ella misma había echado a un lado esa parte débil y emocional y se había convertido en algo que todo el mundo adoraba, pero era una farsa.

-"Bueno.. Y... Dime, ¿hay algo en especial que quieras hacer hoy o-

-"¡Lightning!"-una voz exótica que ella bien conocía sonó algo a las afueras del local interrumpiendo las palabras de su acompañante haciendo que ambos dirigiesen su mirada hacia el foco de esa voz.-"no esperaba verte aquí"

Fang había llegado ahí acompañada por el brazo de su querida compañera Vanille que sonreía alegremente mientras la abrazaba y saludaba enérgicamente a la chica de pelo rosado, ahora ya bastante más incómoda.

-"¡Fang! Hace mucho que no te veo."- a pesar de lo amistoso de su voz se notaba algo de molestia, no tenía ninguna gana de que en su cita con la mayor Farron aparecieran algunos obstáculos

-"bastante, ya podías pedirme a mi de quedar, me encantaría charlar contigo."-el rostro de Lightning cambió a uno de extrañeza al notar en su amiga un tono bastante más borde del suyo habitual y... También ¿molesta?

-"si.. Em.. Un día quedamos con todo el equipo, les encantará conocerte."-intentó explicar evitando decir que no quería quedar con ella a solas, aunque Fang ya había notado eso hace tiempo.

-"eso, yo soy la que debe disfrutar de la presencia de Fang a solas."-Vanille enfatizó el "yo" dirigiendo su mirada al rostro de Light que en ese momento se giró evitando sus ojos.

-"ey, que no solo me gusta estar contigo a solas."-en ese momento Claire si la miró a los ojos y pudo ver como en ese momento la morena le guiñó un ojo sonriente mientras se encaminaba a entrar dentro del local a pedir unas copas. No sin antes girarse y terminare diciendo. -"y, Rydgei, intenta no asustarla, "Lightning" no es solo un apodo, corre muy rápido."

Vanille empujó a Fang de golpe, haciendo como que estaba demasiado molesta con lo que acababa de decir, muy borde por su parte, sin embargo la morena simplemente se reía y abrazaba con cariño a la pequeña que empezaba a reír con ella. "Tsk" fue lo único que escapó de los labios de la joven de pelo rosado mientras intentaba controlar el malestar que le había creado esa frase y la acción posterior.

El resto del tiempo casi ni había escuchado lo que le estaba contando su acompañante de hoy, no podía, entre que el tema no le interesaba para nada y sus pensamientos había hecho que el tiempo pasase bastante lento entre respuestas cortas de su parte y la incomodidad que empezada a crecer alrededor de Rydgei que ya no sabía ni que debía hacer. Poco a poco esa incomodidad fue haciendo que el chico se convenciese a si mismo que la cita había acabado hace rato, el rayo había al final le había golpeado y estaba completamente quemado. Al darse cuenta de eso se echó hacia atrás en el asiento y suspiró con fuerza muy cansado.

-"¿qué pasaría?"-preguntó Lightning a pesar de que realmente ya sabía el porque de su malestar, no se estaba comportando nada bien

-"creo que ya es hora de acabar con esta noche, ya es tarde y ambos estamos cansados."-intentó explicarse de manera lógica y se levantó del asiento esperando a que ella se levantase también

-"de acuerdo."-ella se levantó del asiento poniéndose frente a él

En ese momento antes de despedirse completamente Rydgei se paró justo en frente y tras rascarse algo la nuca se aventuró a posar una brazo alrededor de la cintura de la boca y, al ver que no tenía obstáculo alguno, se lanzó directamente a besar sus labios. El beso fue nervioso, y bastante casto, ni siquiera llegó a más que juntarlos, Lightning ni siquiera cerró los ojos pRa disfrutar del momento, no pudo sentir nada de nada y eso la dejó bastante... Decepcionada.

Al separarse las esperanzas del chico quedarón más que destruídas al no ver ninguna reacción en el rostro de la joven que simplemente se separó de él. Sin más preámbulos se despidió de ella y se fue de allí rápidamente, no le apetecía para nada seguir.

Por su parte la joven soldado fue por el lado opuesto y pasó entre el montón de gente que ahora había en el local hasta llegar al baño que, afortunadamente para ella, estaba completamente vacío. Se apoyó en el lavabo observando su rostro, impasible, siempre impasible, como si ninguna emoción se mostrase en él, si, sonreía de vez en cuando, pero para ella ese rostro no mostraba nada, como una máscara, la máscara de Lightning Farron que cubría el inocente rostro que una vez fue el de Claire Farron, pero hacía años que había tapado esa cara cambiándola por una que todo el mundo debía ver, una en la que Serah no vería la tristeza de no tener a sus padres, una en la que sus amigos no verían la tristeza y la duda al rescatar a su hermana de ya ese legado pasado de L'cie pero... Si todo estaba ya tan atrás.. ¿Porque no podía quitarse esa máscara?

Tan absorta estaba en esos pensamientos que no vió la silueta de la morena entrar en el baño y apoyarse en una de las puertas de los lavabos sin dejar de mirar a su amiga, no tenía ninguna expresión de alegría en ese rostro, no al ver que Claire Farron era la que no podía sonreír.

-"¿te importaría abandonar esa cara de tristeza que tienes ahora mismo por favor?."-como siempre esa voz asustó un poco a la chica de pelo rosa que se quedó mirando absorta a su compañera ¿había visto sus tristeza?

-"¿ahora me pides favores Fang?."-evitando pensar en lo que acababa de decir su amiga se acordó de su comportamiento anteriormente su una molestia bastante notable creció en ella

-"vaya, ahora tienes rostro molesto, no acierto ni una."-soltó una risita sin dejar de mirarla

-"¿te crees que después de como te has comportado antes voy a sonreír como si nada?."-la ira en su voz se hizo más notable a medida que veía la tranquilidad en el rostro de Fang

-"simplemente dije una frase que me pareció graciosa, ¿qué tiene de malo? Además... Debería ser yo la que estuviera molesta."-la sonrisa desapareció de sus labios mirando ahora directamente a los ojos azules en los que pudo ver algo de desconcierto

-"¿a qué te refieres?."-hasta en su voz se notaba la duda que la embriagaba

-"cuando te pido un poco de tu presencia escapas como si nada y a ese le permites incluso que te bese. He de decir que me siento muy poco importante."-poco le importó a Fang que eso sonase tan celoso como se notaba

-"Fang... ¿Estás celosa?."-justo en ese momento fue como si su máscara se rompiese momentáneamente. Eso hizo que el valor de La morena creciese y despegándose de la puerta del baño se aventuró a abrazarla con ambos brazos por la cintura. Se quedó mirándola a los ojos observando cada una de las emociones que corrían por ese mar que para ella era un misterio que deseaba conocer, no solo ese, sino todos los misterios que envolvían a la soldado, todas sus dudas, sus tristezas, sus alegrías, quería saberlo todo.

Lightning descubrió en ese momento unos ojos que jamás había visto, no por el color, no por la forma, eran los únicos ojos que se hundían en su interior, es verdad que había visto su verdadero rostro, porque esos ojos veían más allá. Sin quererlo, más bien si poder evitarlo, se quedó mirando esos ojos que en el fondo de su corazón son los que estaba esperando desde hacía tantos años. Sus rostros se fueron acercando más y más, su aliento se fundía con el de la morena, sus labios se secaban sintiendo la necesidad de tocar aquellos que empezaban a reclamar su roce. Los párpados empezaron a cerrarse al tiempo que notaba como el primer roce fue intensificándose cada vez más transformándo un pequeño toque en algo más pasional, las manos de Claire agarraban el lavabo con fuerza, su corazón latía como nunca lo había hecho y un calor recorría su cuerpo desde sus labios y desde lo más hondo de su ser.

Fang por su parte explotó en su interior de emoción, hacía dos años, casi desde que se conocieron que sentía la necesidad de besar esos labios, de tocar ese cuerpo, su mano derecha subió de la cintura hasta la nuca de la joven de pelo rosa, enredó sus dedos en su suave cabello jugando con él al tiempo que pedía con su lengua una entrada en la dulce boca de Lightning.

En ese momento, disfrutando de esa situación como nunca había disfrutado de nada, en el momento en que todo se había reducido a Fang y su roce se dio cuenta, su emoción fue repentinamente cambiada por... Miedo... Un gran miedo brotó en su interior, ese miedo se apoderó de ella y de golpe se separó de sus labios.

Sorprendida por eso Fang volvió a mirarla a los ojos, aunque lo que vio la dejó helada, después de todo eso, después de ese beso, de la alegría, de la emoción, lo único que se encontró en ella, en sus ojos y en su rostro, era miedo.

Después de internarse de nuevo en los ojos de la morena de pronto el miedo se convirtió en tristeza, su corazón se rompió en mil pedazos al ver lo que había hecho con ese miedo, vio el dolor en los ojos de Fang, vio la tristeza y la decepción y, ante eso lo único que pudo hacer, lo único que se le ocurrió hacer, fue escapar, salió corriendo del baño dejando a la nativa de Grand Paals completamente sola.