En guerra avisada no muere gente. Así que desde ahora les aviso esto es un fic cien x ciento yaoi. Además tiene Mpreg=Embarazo Masculino y violencia.
Así que no me vengan después con comentarios del tipo, que asco dos hombres juntos o es una monstruosidad los hombres no pueden quedar preñados, ect por que ya están advertido de que todo eso estará en este fic, así que si no te gusta nada de esto ni te molestes en leerlo ahórrate un disgusto y dale a tu botoncito de atrás y sal de aquí ^^
Ahora si después de las pertinentes advertencias quieres seguir leyendo.. Bienvenido ^^
Aclaro que los personajes sond e Tite sama y cada capitulo es un oneshot aparte con su final aunque todos se relacionan^^
La Victoria
Aun recuerdo lo mucho que luche por evitar esto, aun recuerdo como empezó y como no pude hacer nada por impedirlo. A veces el amor es el sentimiento más impropio e inoportuno que pueda existir, de eso si estoy seguro.
Pero para que puedan entender tal vez deba explicarlo.
La primera vez que lo vi casi me mato a mí, y a dos de mis mejores amigos entre otros, pero sobrevivimos y luego de eso él se hizo una contaste en mi vida. Aizen Sousuke se hizo alguien que estaba presente en todas las acciones que tomábamos y aun más cuando secuestro a una de mis mejores amigas, Orihime Inoue.
Cuando la secuestro, yo acompañado de mis compañeros y amigos, Ishida Uryu, Yasutora Sado, Renji Abarai y Rukia Kuchiki nos dirigimos a hueco mundo a rescatarla.
No fue fácil, fue una dura batalla y pudo decir con orgullo que no nos dimos por vencidos pero fue inútil, total y completamente inútil, Orihime, nuestra quería Orihime fue asesinada ante nuestros ojos con una facilidad escalofriante aun recuerdo ese momento, yo estaba en el suelo, podía escuchar el llanto de Nell y vi con impotencia como el cero lanzado por Ulquiorra atravesaba el escudo de Orihime y la destruía. Me levante inundado por la rabia pero ni con toda la fuerza de mi hollow interno pude vencer a Ulquiorra, en algún momento perdí la conciencia esperando que el Espada me diera el golpe de gracia, pero ese golpe nunca llego, por que cuando volví a despertar supe con horror cuanto había pasado.
Karakura... Karakura había caído y una parte importante de los dirigentes del sereitei también, Aizen había conseguido su llave había destruido a la familia real y ahora era el rey de los cielos como siempre quiso ser.
Aun recuerdo la sonrisa burlona de un recuperado Grimmjow al darme la noticia, Karakura, mis amigos, mi familia.... Todo había sido destruido. Llore, llore como el adolecente que era, de impotencia y tristeza, creyendo a todos mis amigos muertos, a mi familia y a todo cuanto había conocido.
Grimmjow bufo con fastidio al verme llorar, pero algo de alivio me dio.
-No todos tus amigos shinigamis están muertos, algunos están vivos-me dijo de pronto antes de irse y dejarme con esa incertidumbre y; porque no decirlo, también una pequeña esperanza.
Pase las horas solo en mi encierro, acostado en un sofá; único mueble de esa pequeña habitación, sin entender por qué estaba vivo o que sería de mi ahí solo, además de mi sofá había una pequeña bañera y un váter donde asearme y hacer mis necesidades básicas respectivamente. La única luz que entraba ahí entraba por una ventana de barrotes demasiado alta, pero al menos era capaz de saber cuando amanecía y cuando anochecía. Tenía hambre, llevaba una semana ahí sin comida, tal vez mis captores olvidaban que soy humano o tal vez me querían matar de hambre, todo era posible.
Pero entonces apareció Ulquiorra con su fría, imperturbable y hermosa presencia en mi habitación, quise abalanzarme sobre él, matarlo a golpes, pero estaba demasiado débil y con un solo movimiento de su mano me redujo contra el sofá. En su otra mano traía un set de ropa que puso en el sofá junto a mí.
-Vístete, vendré por ti en una hora, si no estás listo no veras a tus hermanas ni a tu padre y estos morirán.-me dijo como quien hablaba del tiempo que hacia afuera, con absoluta indiferencia. Salió como había entrado.
No deseaba hacerlo, no deseaba obedecer, pero oírlo decir que podría ver a mis hermanas y a mi padre me hizo pensar en la posibilidad de que estuvieran con vida, así que apretando los dientes me vestí, si estaban con vida yo quería, no, yo necesitaba verlos. Me mire a mi mismo con desagrado. Llevaba un kimono completamente blanco de bordes negros, muy parecido a la vestimenta de los arrancar, solo que más elegante y en cierto sentido delicada.
Ulquiorra volvió por mi tal y como había dicho una hora después, asintió al verme vestido y me indico con un gesto de su mano que lo siguiera.
-No cometas ninguna estupidez o recuerda que serán tus hermanas y tu padre quienes lo pagaran.
Me advirtió fríamente mientras caminaba frente a mí, sin más opción lo seguí hasta un enorme comedor donde me detuve impresionado ante lo que veía.
Toshiro, Toshiro Hitsugaya estaba vivo, ese cabello blanco, ese pequeño cuerpo eran imposibles de confundir, vestía una túnica de estilo griega blanca, con unas sandalias doradas, pero lo que me hizo estremecerme era la cadena de oro en su cuello, como las pequeñas manitos estaban sobre esta tratando de impedir que lo estrangulaban mientras tiraban de él, intentándolo obligar a arrodillarse en el suelo.
-Ichimaru Taicho por favor... lo lastima-la voz angustiada pero también conocida me hizo desviar la mirada y vi a Kira Izuru de rodillas en el suelo, vestía exactamente igual que Hitsugaya, pero su cadena no estaba tensada pues nadie la jalaba, entonces levante mi vista hacia quien tenía ambas cadenas en su mano y note a Gin Ichimaru con su escalofriante e inmutable sonrisa. Me moví por instinto a impedir el abuso de éste con Toshiro en el momento en que el más joven de los albinos caía de rodillas al suelo por un fuerte tirón de Ichimaru; que casi lo dejo sin aire asiéndolo toser. Vi a Kira pasarle un brazo mirando con temor a Gin pero queriendo que parara de hacerle daño al testarudo de Toshiro. Pero no pude dar ni siquiera dos pasos cuando sentí la mano de Ulquiorra en mi hombro.
-Por aquí.
Me ordeno y; pensando en mis hermanas y en mi padre, me obligué a desviar la mirada de la escena ante mis ojos y seguir a Ulquiorra, caminamos un rato mas por el inmenso palacio hasta llegar ante unas enormes puertas, Ulquiorra llamo a estas antes de abrirla y cuando entramos me vi en un enorme despacho, era elegante, repleto de libros, una sala circular, con un hermoso juego de sala donde bien te podías sentar a leer y relajarte, en el centro y un poco mas apartado un escritorio, con dos elegante sillas al frente y una atrás, pero no me fije en eso, mi vista estaba fija en el hombre que yacía sentado en uno de los sofás con un libro, pero sobre todo en otro hombre vestido con un kimono blanco similar al mío, pero con su largo cabello negro suelto cayendo sobre sus hombros y su cabeza recostada sobre las rodillas del hombre que leía el libro, pero sus ojos, los ojos del pelinegro yacían sin vida fijos en ningún lugar en concreto.
-Byakuya- murmuró asombrado, pero este ni siquiera me miro, ni dio señal alguna de haberme oído.
-El no te escucha ni te entiende, es mi muñequita-me explicó el hombre castaño que estaba leyendo dejando el libro a un lado y enredando sus dedos en los cabellos de Byakuya suavemente. No había visto más que una vez en mi vida en persona a ese castaño pero sabía de sobra quien era, una vez era suficiente para no olvidarlo jamás. Aizen Sousuke.
-Que le has hecho a Byakuya? A mis amigos? A mi familia?-le pregunto furioso. Aizen se levanto calmadamente mientras Byakuya quedaba sentado igual que antes pero ahora con su cabeza erguida mirando a la nada.
-hmmm digamos que Kuchiki Byakuya es demasiado orgulloso así que me vi obligado a utilizar algunos trucos para poderlo someter a mí, una pena que haya muerto Kuchiki Rukia tal vez la hubiese podido utilizarla a ella para conseguir lo mismo que pienso conseguir de ti-me dijo acercándoseme.
-de que hablas?-le pregunto confundido y por qué no, algo asustado, retrocediendo por puro instinto.
-hmmm como te abras dado cuenta gane Ichigo, soy el rey de los cielos y como tal quiero los mejores consortes para mi, los más hermosos y también fuertes, y esos son tu y Byakuya-me dijo mientras yo lo miraba alucinado-por eso deje a tu familia viva, tu serás un muy obediente consorte si quieres que ellos vivan-me aseguro y yo no podía creer que esto me estaba pasando a mí, solo tengo 15 años, a punto de cumplir 16. Pero y si era verdad? Y si Yuzu, Karin y papa estaban con vida? Y si su vida dependía de mi?
-demuéstramelo, muéstrame que están vivos, hasta que no lo hagas no te creeré, quiero verlos en persona.-le dijo con firmeza. El sonrió con una sonrisa que me hizo estremecer y asintió.
-Ulquiorra-lo llamo y este se acercó-lleva a Ichigo a ver a su familia-le indico extendiendo su mano y acariciando mi mejilla, me estremecí de miedo sin poderlo evitar el poder de Aizen era abrumador, pero él no hizo nada mas, retiro su mano e hizo un gesto a Ulquiorra que me hizo un gesto para que lo siguiera.
***
(Desde este punto ya la historia no se narra de la perspectiva personal de Ichigo)
***
Ulquiorra Cifer cuarto espada a las órdenes de Aizen y fiel a este guio a Ichigo Kurosaki en silencio podía sentir al pelinaranja ansioso mientras lo seguía, pero se tomo su tiempo calmado mientras lo guiaba a los aposentos privados donde permanecía recluida la familia de Kurosaki.
Abrió la puerta, de lo que era un autentico departamento privado no muy grande pero si cómodo, tenía una pequeña piscina, un comedor, una salita iluminada por el sol que entraba por las ventanas con barrotes y dos puertas, una daba al cuarto de las niñas y otra al cuarto del padre de Ichigo. Ichigo miro a la cocina y se extraño al ver ahí a Ryuken Ishida, al que reconoció como el siempre serio padre de Ishida. Este dejo la sartén a un lado apagando la hornilla al verlo.
-Isshin.-lo llamo. Isshin salió del cuarto de sus hijas con Karin y Yuzu y sus ojos se iluminaron al ver a su hijo. Karin y Yuzu ya se habían lanzado sobre él y Isshin los siguió. Ulquiorra salió silenciosamente dándole a Ichigo unos momentos con su familia.
Ryuken fue el que noto la salida de Ulquiorra y entonces se acercó a prisa a Ichigo.
-Y Uryu?-le pregunto-donde esta? Está bien?-pregunto angustiado. Ichigo no tenía ni idea no había podido preguntar pero esperaba estuviera bien y sin saber si estaba asiendo bien asintió.
-no sé donde está ahora, pero está bien-le aseguro a Ryuken que asintió con un suspiro aliviado.-como están? Y que haces tú aquí?-pregunto Ichigo extrañado lo primero a su familia lo ultimo a Ryuken.
-Nosotros estamos bien Ichigo-nii -le dijo Yuzu cariñosamente. Karin asintió.
-Si nos trajeron aquí y aquí hemos estado encerrados desde entonces, pero no está mal, en el cuarto ahí muñecas para Yuzu y juegos de video para mi.-le dijo Karin valiente como siempre. Ichigo asintió con algo de alivio al entender que Aizen había tratado bien a su familia y miro a su padre.
-Niñas vuelvan a la habitación a jugar, Ryuken les tendrá en unos momentos el desayuno-les pidió Isshin raro en el de forma seria y las niñas asintieron yendo a su habitación pero no antes de besar a Ichigo.
-Padre que hace Ryuken aquí? De eso Aizen no me había dicho nada.-dijo Ichigo confundido-aunque claro me alegro siga con vida-añadió rápidamente.
-Porque está aquí es que sigue con vida-le dijo Isshin con un suspiro. Y ante la cara de confusión de Ichigo se explicó-lo iban a matar, por eso dije que era mi pareja, pensaron que era no se una especie de padrastro de ti y las niñas, los espadas lo dejaron con vida y lo trajeron con nosotros.
-Son amantes?-exclamo Ichigo al borde del desmayo, Isshin le pego.
-No idiota, solo fingimos serlo-le dijo Isshin y Ryuken asintió.-pero y tu hijo? Pensamos que algo malo te había pasado y....
Pero Isshin no pudo seguir hablando y antes de que Ichigo pudiera hacerlo entro Ulquiorra de vuelta.
-Se te acabo el tiempo Ichigo, vamos que Aizen sama te espera-le indico el indiferente espada. Ichigo suspiro y le sonrió débilmente a su padre.
-Ya te explicaré luego, adiós papa-le dijo con un suspiro y se levanto dispuesto a seguir a Ulquiorra. Volvieron con Aizen.
-Que dices Ichigo?-le pregunto Aizen sentando de nuevo en el sofá acariciando los cabellos de Byakuya, nada más verlo.- serás mi obediente consorte? No puedes quejarte e tratado bien a mi futura familia política.
-No soy gay-protesto Ichigo débilmente-pero no tengo opción verdad?
-Claro que la tienes puedes negarte...
-Pero mataras a mi familia si lo hago verdad?-Aizen asintió. -entonces no tengo opción-dijo amargamente-aceptare.
Aizen sonrió satisfecho.
-Una muy buena decisión. Ven acércate-le indico, Ichigo lo hizo con cautela, Aizen puso un cojín en el suelo, justo al otro lado de la pierna sobre la que Byakuya estaba recostado.-siéntate.-le indico al pelinaranja.
-Antes quiero hacerte algunas preguntas...-protesto Ichigo. Aizen estiró la mano y le apretó la muñeca de tal forma que le arrancó una mueca de dolor a Ichigo mientras su impresionante reiatsu lo obligaba a obedecer.
-Házmelas sentado-sonrió Aizen cuando Ichigo al fin estuvo sentado tensamente de la misma forma que Byakuya solo que él no recostaba su cabeza en las piernas de Aizen si no que lo miraba a la cara-adelante-lo alentó Aizen a preguntar.
-Primera, que le hiciste a Byakuya?
-A bueno para eso fue de ayuda Mayuri Kurotsuchi- sonrió Aizen-le dimos una pequeña droga que inhibe su voluntad y sus capacidades, como te dije antes Byakuya es un muñequito que obedece mi voluntad.
Ichigo lo miro con asco.
-Para que quieres tenerlo así, ese no es el verdadero Byakuya.
-hmmm, me gusta así al menos hasta que sea mío por su propia palabra y firma después de que se haya casado conmigo le dejare de dar esa droga-le dijo acariciándole los cabellos de nueva cuenta a Byakuya-Byakuya es un noble de creencias firmes una vez casado conmigo aunque no lo desee me obedecerá- sonrió.
-Estás loco-le dijo Ichigo con desprecio. Aizen lo ignoro.
-Eso era todo lo que querías preguntar?-Ichigo negó-bien adelante pues sigue mientras aun estoy de humor para responderte.
-Que hiciste con mis amigos?
-Cuales?-pregunto Aizen con curiosidad-no todos están vivos-añadió.
-Toshiro-comenzó, al menos a él lo había visto con vida no estaba preparado para escuchar que tal vez Renji, Uryu o Chad hubieran muerto como Orihime y Rukia.
-Oh el pequeño capitán Hitsugaya-sonrió Aizen con crueldad-pues yo sinceramente deseaba matarlo, ese pequeño me hizo algunas bajas en mi equipo, pero bueno Gin ha sido mi buena y fiel mano derecha así que cuando me pidió que le cediera la vida de Hitsugaya y la de Izuru Kira, su antiguo teniente, se las cedí, después de todo también son hermosos y serán unos buenos consortes para él, aunque algo pedófilo su gusto por Hitsugaya-sonrió divertido. Ichigo lo miro con desagrado, pobre Toshiro ahora se explicaba la escena de antes.
-Uryu?-preguntó al fin con temor a la respuesta.
-El Quincy?-preguntó Aizen, Ichigo asintió mirándolo mal, sabía que Aizen sabia perfectamente quien era Uryu, Aizen sonrió-pues veras Mayuri nunca ha estado muy cuerdo en cuanto le ofrecí mejores condiciones de trabajos para sus locos experimentos que las que tenía en la sociedad de alma se paso a mi bando, y se me hacía necesario después de la muerte de Sayel a sus propias manos, me pidió como regalo a tu pequeño amigo Quincy y pues se lo di.
Ichigo palideció ante esa información.
-Ese loco lo disecara y desmembrará para investigarlo-dijo pálido. Aizen rio y negó con la cabeza.
-No lo creo, cuando lo último que escuche cuando me aleje del laboratorio de Mayuri después de dopar a Byakuya, fueron los gritos de tu amigo mientras Mayuri se lo cogía sobre la mesa de su laboratorio, Mayuri hace mucho estudio a los Quincy, tu amigo no le interesa para estudiarlo... no de la forma que tú crees, más bien creo que lo quiere estudiar en su dormitorio mientras le calienta la cama-rio Aizen y Ichigo sintió nauseas al recordar al feo capitán enmascarado, claro que el nunca había visto a Mayuri sin la máscara en realidad el capitán de la doceava división tenía un buen cuerpo y no estaba nada mal sin esa fea mascara.
-Eres asqueroso y un...-Aizen detuvo a Ichigo con un solo gesto de su mano.
-Siguiente pregunta-le dijo tranquilamente.
-Renji?-pregunto esta vez.
-hmmm Abarai, dio demasiados problemas-le dijo Aizen y por un momento Ichigo tembló al pensar que recibiría el anuncio de la muerte del pelirrojo-yo sinceramente estaba arto de su desafío y dispuesto a matarlo, pero Grimmjow se ofreció a entrenarlo, el lo tiene, aunque ni idea de cómo está en sus manos-sonrió Aizen-pero está vivo... aun-le aseguro y Ichigo se estremeció.
-Chad?-pregunto Ichigo y se estremeció al escuchar la risa de Aizen.
-Yasutora siempre supe que su poder tenía mucho en parecido con el de hollow, así que le pedí a Mayuri que hiciera algunos experimentos con el.... A resultado ser un excelente espada, su estilo de lucha me recuerda un poco a Noitora pero es mucho más tranquilo-sonrió divertido viendo la mirada de espanto de Ichigo.
-No que le has hecho, Chado nunca nos traicionaría-aseguro con firmeza.
-Para Yasutora ustedes no existen, él no es capaz de recordarlos ni remotamente-le aseguro Aizen, disfrutando la mirada de desesperación de Ichigo que negaba sosteniéndose la cabeza.
-Maldito-susurró Ichigo con tristeza.
-Eso es todo?-pregunto Aizen sin inmutarse.
-Quienes más? Cuantos más?-pregunto sin ser capaz de hacer preguntas más concreta temía las respuestas.
-Uhmm déjame ver el viejo Yamamoto está muerto, era demasiado peligroso. Uruhara Kisuke y Yoruichi son inteligentes en cuanto ganamos y les ofrecimos entre trabajar con nosotros o morir se pasaron a nuestro bando y como regalo de buena voluntad les cedí un ayudante, amante, acompañante o como lo quieras ver a cada uno, Kisuke se quedo con Shinji Hirako y Yoruichi se quedo con Soi Fong, aunque realmente creo que los pidieron a ellos para salvarlos de otra forma estarían muertos, Hirako es tan rencoroso-suspiro Aizen asiéndose el inocente-y Soi Fong tan voluntariosa-añadió-pero Kisuke y Yoruichi los llevan bastante bien, los controlan y los mantienen vivos, aun así los mantengo vigilados no me pienso arriesgar a una traición.- añadió -Shunsui Kyoraku, se molesto demasiado por la muerte de Nanao así que lo tuve que matar, fue un golpe fuerte para Ukitake, creo que eran amantes, por que se puso muy mal con su muerte, un amigo no debería tomárselo tan a pecho, se puso bastante enfermo pero ya está más estable, no completamente recuperado, siempre ha sido muy enfermizo pero está vivo, creo que fascinó a Stark, mi espada no sé si lo recuerdes pero es uno de mis espadas principales, pasa bastante tiempo cuidándolo, aunque supongo que su extrema y delicada salud hace a Ukitake Jushiro alguien hermoso-dijo Aizen pensativo-hmmm Kenpachi, el también está vivo, también es un buen arrancar pero el si recuerda dos cosas aunque un poco distorsionada, por mucho que tratamos no pudimos extraerle los recuerdos de Yachiru así que los alteramos, la cree su hija, se quedo con ella y con Nell bajo su cuidado, fue útil cambiar sus recuerdos están buen espada... no, es mejor espada que Chad, después de todo es el quinto espada, el se quedo con Yumichika le parece hermosa y le encanta su pasión por pelear, es divertida la desesperación de Yumichika por hacer recordar a su ex capitán, algo que nunca sucederá, pues esos recuerdos le fueron extraídos. -le conto divertido-Ikaku está muerto-le dijo recordando ese detalle-Stark es ahora el primer espada, Hallibel la segunda, Ulquiorra es la tercera, Grimmjow la cuarta, Zaraki Kenpachi es la quita espada y Chad es la sesta-le enumero, Ichigo sintió dolor ante el hecho de recordar que Chad era un espada ahora.- Matsumoto, hmmm se mantiene calladita y obediente a nosotros su instinto materno por Hitsugaya es fuerte y la hace obedecer. Hinamori, mi fiel Hinamori es de mucha ayuda organizando las cosas por aquí, en cuanto me vio me siguió ciegamente-sonrió complacido.- Unohana, la pacífica y siempre recta Retsu Unohana, a ella no le interesan las batallas quien gana o quien pierde en realidad a ella solo le interesa curar y salvar vidas así que la nombre jefa del equipo médico, su teniente sigue con ella a su lado fiel a Unohana siempre.... Uhmm se que Hanatarou Yamada es tu amigo el también está con ellas en el equipo médico, casi todo el cuarto escuadrón se unió al escuadrón medico y hubo pocas bajas de ellos en la batalla. Del quinto, mi antiguo escuadrón también casi todos me siguieron, pocas bajas. Komamaru... Tousen me pidió que no lo matara, permanece en una celda como en la que tú estabas y Tousen lo atiende en persona a él y a Hisagi Shuhei y creo que ese es todo el resumen-se encogió Aizen de brazos y rio ante la cara de horror de Ichigo-anda, anda quita esa cara que no es para tanto-le dijo tomándolo de la barbilla, Ichigo tenía los ojos abiertos de horror y de mas horror se llenaron cuando Aizen se acercó a su rostro.
-Los Vizard?-pregunto con miedo tratando de alejarse de la mano de Aizen, pero Aizen le impidió alejarse aun sosteniendo su barbilla con una mano.
-Hay unos pocos con vida encerrados, tengo esperanzas de que se pasen a nuestro bando cuando Kisuke logre convencer a Hirako, que es lo mejor para hacerse entender a los suyos, los Vizard pueden ser bastante útiles, son lo bastante parecidos a los arrancar.
-Quienes están con vida?
-Hmmm, Hiyori, Kensei, Lisa, rose, Rabu y Machiro. Bueno y obviamente Hirako que esta con Kisuke-le enumero. Ichigo suspiro, casi todos los Vizard pensó con alivio pero no pudo pensar mucho más porque sus labios fueron invadidos de repente por los de Aizen asiéndolo abrir sus ojos con horror mientras trataba instintivamente de escapar sin éxito.
Y así, así comenzó el infierno de Ichigo, así comenzó su nueva vida.
Fin.
