El Resultado de la ultima guerra.
Cinco años pasaron de la feroz batalla que puso al mundo shinobi en un mar de caos, donde las cinco naciones tuvieron que formarse en alianza para enfrentar a dos de los peores enemigos de la historia. Uno de ellos era Madara Uchiha, nombre que siempre fue respetado entre las aldeas, y que actualmente atemoriza a cualquiera que lo escuche. El otro, Obito Uchiha, al que se lo conoce en las calles de las aldeas, como "el hombre que tocó el poder del dios de la destrucción". No hay ninja que evite el escalofrío de recordar aquella desesperante lucha. Es inevitable. Miles de victimas cayeron en las garras de la muerte, dejando a las aldeas en llantos. Llantos de familiares, amigos, compañeros, maestros, y de toda gente que llevaba en su corazón a todos aquellos que pusieron el alma en cada pelea. Cada tumba lleva el nombre de un héroe, porque pelearon codo con codo, sacrificando sus vidas, para construir el mundo actual.
El Plan Ojo de la Luna, que en aquel entonces era el objetivo de Akatsuki, no pudo darse a cabo porque con la ayuda de Hashirama, Naruto y Sasuke lograron destruir la Luna, para que al abrirse la flor del Dios Árbol, no tuviera donde reflejarse. Arruinados los planes del genjutsu definitivo, sólo quedaban los Uchihas por detener. La alianza logra sellar al edo-tensei de Madara bajo la técnica del sello definitivo, llevada a cabo por los 5 Kages. Además, Obito es derrotado por una táctica perfecta entre los Hokages, Naruto y Sasuke, que con energía natural, pusieron al joven Uchiha en jaque mate. Sin nadie en frente, el Dios Árbol era lo que quedaba.
Y ahi quedó. Como nadie controlaba su voluntad, este poco a poco tomo una actitud pacifica y conservadora. Ya no atacaba ni absorbía el chakra de los demás. La alianza podía darse por vencedora. La lucha había terminado. El Árbol quedó hasta hoy en día como el símbolo del triunfo del bien. Tan alto como la hazaña de la unión de las aldeas, su flor inalcanzable a la vista como por momentos fueron aquellos sueños de paz, pero tan real como resultaron serlos al final.
Una nueva luna.
Solo quedaba una cosa por hacer. Los días brillaban, transmitían armonía y felicidad, pero las noches eran tan oscuras como la tristeza misma. En una de esas noches, en las afueras de Konoha, se encontraba el héroe al que toda la aldea reconocía y estimaba. Estaba él, acostado en el pasto, tranquilo, pero rodeado de un sentimiento nostálgico. Naruto mira al cielo y logra ver una estrella fugaz. A ella le pidió un deseo: quería volver a ver en el mismo cielo que al día brillaba sollozante, una nueva luna, para compartirle la nostalgia, la melancolía, y hasta lo mas lindos sueños que inspiran las estrellas en la noche.
El Kyubi estaba al tanto de este deseo. Le pidió a Naruto un favor: quería encontrarse con Killer Bee y el Hachibi. En otra de las noches oscuras, ambos se encuentran. Habían pasado tres meses desde la guerra. Desde esos días, ambos jinchuurikis mantenían contacto muy seguido.
El hermano del Raikage, observa enseguida a Naruto y se da cuenta de su tristeza. Como no hablaba de eso, el Kyubi es quien abre su boca:
- Bee, Gyuki, tengo algo que contarles..- dijo el Kyubi.
- Puedo sentir que algo perturba a ambos, no solo a Naruto.- expreso el Hachibi.
- Sí, he recordado que tengo un deber que cumplir. Una vez me lo encomendó el viejo, para cuando sucediera esto. Sabes de que hablo..- comento el zorro.
- Ese viejo fue su creador, hablan bien de el, pero yo soy mejor rapeador.. - bromeaba, Killer Bee, sin enterase de lo que sucedía.
- ¡Bee!¡Esto es serio!- le exclamó el pulpo a su portador. -Entiendo lo que me quieres decir, Kurama. ¿Estas seguro que quieres hacerlo?.-
- ¿De qué están hablando?- interrumpió Naruto, que solo había estado escuchando, sin hablar.
- Tengo que contarte una leyenda, Naruto.- dijo el Kyubi con cierta intriga.
- ¿Una leyenda? Será mejor que hables. Jeh!-.
Así, comenzó a contar el zorro la leyenda..
- Ajam! Entonces, me dices que ahora la gente se va a transformar en demonios, van a querer matar a los demás, a comerse entre si y.. ¡Kurama!¿Por qué me cuentas estas historias?- el héroe se notaba asustado por lo que le contó su compañero.
- La noche no me va a ganar, con mi rap la voy a derrotar, yuuuh! - cantaba Bee, algo animado.
- ¡Necio! Falta algo más: Rikudou Sennin estaba al tanto de esto. Por eso, le otorgó, a una de sus creaciones, la habilidad para convertirse en una nueva luna. En caso de que alguien quisiera destruirla, como tu y Sasuke la destruyeron(mira a Naruto como echándole la bronca), ese bijuu tendría la posibilidad de transformarse en otra, para que la humanidad no cayera en la oscuridad.
- ¿Qué? ¿Qué me quieres decir?¡Kurama, sigue hablando!- Naruto estaba muy intrigado.
- Jeh! Lo que Kurama te quiere decir es que existe un método para crear otra luna. Es por eso a lo que ha venido.- habló el pulpo.
- ¡De seguro es broma! ¿Cómo el viejo va a crear algo así que se transforme en una luna?. Madara lo hubiera sabido y lo habría utilizado en su plan.- el de konoha ya dudaba.
- Solo los bijuus sabíamos de esto. Los únicos que quedamos somos Gyuki y yo.- le explicó su compañero.
- Mmm, o sea que..- Naruto transforma su duda en preocupación- ¿quién de ustedes es el que puede lograr la transformación?-
- Kurama. El será la nueva luna.- confesó el Hachibi, dejando shockeado a Naruto.
- ¿Qué me están contando? ¡Kurama se va a transformar en una luna! Quiero saber que clase de broma es esta..- el héroe empezó a preocuparse mucho.
- El viejo me dio esa habilidad, Naruto. Soy el único que puede hacerlo. Pero no puedo hacerlo solo. Primero debo realizar el ritual de la nueva luna. Funciona en dos etapas: inicio del ritual y transformación. Para el inicio, preciso que alguien sacrifique mas que su energía, para lograr empezar con mi transformación..- explicaba el Kyubi.
Naruto había quedado conmocionado por lo que contaban los bijuus. Kurama estaba decidido a transformarse en la nueva luna, para que la oscuridad no se apoderada de los humanos. El acto heroico dejo al de Konoha con una fuerte tristeza, ya que su compañero, con lo que tanto había pasado desde el día que su padre decidió sellarlo en su interior, estaba a punto de despedirse de él. Pero eso no es todo. Como explicaba el zorro, la transformación requería de alguien con mucha energía para poder realizarse.
- Naruto. ¡Kurama no es el único que va a despedirse!- confesó Gyuki.- Como se requiere un nivel de chakra elevado, estoy dispuesto a darle a él, hasta la última gota de mi energía. Kurama no puede gastar de su chakra porque lo necesitará para la transformación, luego de que dé inicio. Pero eso no es todo, el ritual tiene otro costo: deberá sacrificarse una vida como forma de pago. Y no cualquiera, sino la mía. Este poder único que el viejo le otorgó a Kurama, requiere de un cómplice, y ese único cómplice puedo ser yo.
- ¡¿Qué?!- la sorpresa del rubio ya no tenía limites.- ¡Bee! ¿Qué piensas? ¿Vas a dejar que esto ocurra?.-
- Así de duro es su camino, los bijus también tienen su destino, yeeah! - canto Bee.- Ya conozco la leyenda, mis ojos no tienen vendas.. la nueva luna tiene que nacer, sino la oscuridad va a caer.. yahooo! .
Ya nada quedaba por hacer para Naruto. Kurama estaba decidido, como lo estaban Bee y Gyuki. El ritual para transformar el Kyubi en la nueva luna estaba por iniciarse. Kurama utilizaría la energía del Hachibi, y una vez agotado, lo sacrificaría como forma de pago. Así, con su propia energía, llevaría a cabo la transformación. La tristeza rodeó el corazón de Naruto.
Al día siguiente, los jinchuurikis se encontraron cerca del Valle del Fin. Ese lugar se prestaba para la ocasión, porque como dice su nombre, algo estaba por llegar a su final. Kurama y Gyuki estaban a punto de despedirse para siempre. Era el final de una etapa. Los bijuus finalmente iban a salir de sus respectivos portadores para dar inicio al ritual. El interior de los dos ninjas se iba sentir vacío. Los recuerdos se pasaban como flashes por sus cabezas. Sus corazones latían fuerte, un poco por la tristeza, otro poco por nervios a lo que iba a pasar. Se acercaba el momento de la despedida. Los ojos de Naruto empezaban a humedecerse. Esto no lo dejó pasar el Kyubi..
- ¡Oye Naruto! Te he visto llorar muchas veces, pero nunca creí que llorarías por mi. Al principio la pasaste muy mal, por mi culpa. He hecho que fueras rechazado y odiado por muchos. Te he quitado la posibilidad de que seas alguien normal y corriente, y quizás, que tuvieras a tus padres contigo, como los tienen todos. Fui un mal compañero al principio..- contaba el zorro.
- .. pero al final, pudimos entendernos. No te culpes. Quizás no tuvimos el mejor comienzo, es cierto. Pero todo eso fue lo que nos llevó a ser lo que somos ahora: compañeros de equipo, amigos. Soy Naruto Uzumaki, quien tiene a su compañero Kurama. Ya nadie nos odia. La aldea nos estima. Hicimos muchos amigos y logramos tener el cariño de todos. Fue difícil. Pero ahora..-empezaban a caer las lagrimas por el rostro del héroe.
- .. ahora toca separarnos, porque así el destino lo quiso. Hay veces que podemos cambiar nuestros destinos, como a Neji se lo explicaste una vez. Y nosotros pudimos cambiar el nuestro. Demostramos que los humanos y los bijuus pueden llevarse bien, como lo hacían Bee y Gyuki. Pero hay cosas que no cambian, o que no dependen de nosotros. Pero no por eso, el final es triste. Si me voy a despedir, quiero que sea como debe ser: quiero ver esa mirada que siempre tuviste frente a la adversidad. Levanta la frente y muestra esa confianza de que todo va a estar bien. Nos separaremos como amigos y jamas nos olvidaremos de lo que fuimos.- terminó de confesar el Kyubi, mientras preparaba el inicio del ritual.
- ¡Jeh! Kurama, amigo. A veces eres terco, pero tienes razón. No queda mas por hacer. Te transformaras en la nueva luna y allí te veré todas las noches. Recordare cada noche los lindos momentos que pasamos, junto a los de ero-sennin y Neji.- dijo Naruto llorando, pero algo contento porque al fin empezaba a aceptar lo que iba a suceder.
- No esperaba menos de ti, Naruto.- fue lo último que dijo el zorro.
Así, se inicio al ritual mientras Bee y Naruto observaban lo que acontecía. El Hachibi había dado todo su chakra al Kyubi, y con una sonrisa, miraba a Bee mientras comenzaba a desvanecerse lentamente. Kurama comenzaba a transformarse. Como un rayo de luz, el Kyubi partió al cielo, brillando cada vez más y más. Y antes de llegar a la atmósfera y ocupar el espacio de la anterior luna, se escucha en el viento, una voz alegre y familiar que decía: "¡Adiós, Naruto!"..
La armonía de Konoha.
Luego de 5 años, la aldea se recupero por completo desde la invasión de Pein. Todos los ninjas volvieron a sus actividades. Entrenaron duro y la formación continuo mejorando. Naruto, sin Kurama, entrenaba arduamente para volverse más fuerte. Era el héroe de Konoha, al que iban a acudir enseguida. Su compañera, Sakura, logró un gran nivel en el campo de la medicina, y ahora es la encargada del centro médico, junto a su asistente, Shizune. Al igual que Naruto y los demás, consiguió lograr su titulo de jounin. Atrás quedaban los recuerdos de los exámenes chunnin, que en su generación, terminaron con el ataque de Orochimaru.
Como resultado de la guerra, hubieron varias pérdidas en Konoha. En la tumba de los héroes, está grabado el nombre de uno de los ninjas jóvenes que dio su vida para proteger el futuro: Neji Hyuuga. Hinata, junto a sus compañeros, visitan muy seguido su tumba, recordándolo con gratitud. Lamentablemente, se le suma Yamato, que no logró sobrevivir a los experimentos de Kabuto con sus células, para crear zetsus. Además, dio su vida para proteger la información sobre Naruto y el Kyubi. Sus compañeros, como Kakashi, lo recuerdan como un gran ninja. Otra que no esta entre los vivos es Anko. Fue otra víctima de Kabuto. Kurenai, con su niño, le llevan flores y la recuerdan siempre, a la vez que visita a su difunto hombre. Y no hay que olvidarse de Shikaku e Inoichi: padres de excelentes ninjas, que tuvieron la trágica de irse de este mundo, pero con la frente en alto, por llevar la estrategia de la guerra y ser la voz transmisora de la alianza.
Eso trajo algunos cambios. Kurenai ya no pertenece a la linea de capitanes, por lo que toma su lugar Hinata. Luego de hacerse mamá, decidió dedicarse a su hijo, y recomendó en su lugar a la Hyuuga, que luego de la guerra su madurez la hizo tan fuerte como para llevar a cabo el desafió. Además, en lugar de Anko, la que lleva los exámenes chunnin en su segunda etapa, es Ten-Ten. La kunoichi acepto el reto y ahora se encarga de llevar adelante dicha etapa.
Además, los grupos tuvieron ligeras modificaciones. El team 10 sigue teniendo los mismos participantes: Ino, Shikamaru y Chouji. El equipo de Guy, contara con Rock Lee, Kiba y Shino. Pasan a formar un solo grupo por las ausencias de Ten-ten, Hinata, Kurenai y Neji.
¿Y el team 7? Estará conformado por Kakashi, Naruto y Sakura. No estará Sai, ya que decidió tomar el mando de las fuerzas Anbu de Danzou. Volverá a sus raíces, pero sin olvidar lo que vivió cuando formó parte del team 7.
Pero.. ¿y Sasuke? Jeh! El también esta en el team 7. Luego de la guerra, decidió volver a Konoha, explicarle a sus compañeros todo lo sucedido, y les pidió disculpas. Fueron aceptadas. El Uchiha decidió que vivir del pasado no era lo correcto, que si bien tenía un gran amor a su clan, la nueva familia que era Konoha era lo que lo hacía feliz. Ya no se sentía solo. Ya no había rencor. La aldea que le quitó a su hermano ahora es la que lo contiene. El clan Uchiha no iba a ser recordado por el odio, ese que Madara y Obito se encargaron de mostrar al mundo. Sasuke no quería eso. Quiere recuperar el prestigio de su clan, dejando el nombre bien en alto siguiendo el camino del bien.
Y por si fuera poco, tenemos otro retorno en la aldea. Luego de terminada la guerra, con la voluntad de los Hokages, deshizo el edo-tensei y les devolvió la paz en su otra vida. Si, Orochimaru. Está de nuevo en la aldea. Como pago del favor que le hizo sacándola de la muerte, Tsunade le otorgó un laboratorio completo, y le ayudo a reclutar toda la información que poseía en sus guaridas. Ya el Sannin había dejado de lado sus ambiciones malignas. Se dedicaba a experimentar y realizar avances en el campo de la medicina, y las técnicas prohibidas, pero no para uso personal, sino para evitar los riesgos que ellas traen. Toda esa información la brindaba para el bien de la aldea. Era el consejero directo, ademas, de la Hokage.
Si, Tsunade era la Hokage. Naruto todavía no estaba listo. Se preguntarán.. "¿y las demás aldeas?". Tiempo al tiempo. Faltan muchos detalles más. Pero, por ahora, ya puede comenzar la historia..