Shirogami: Hola! les traigo un fanfic muy random hecho como hace 5 meses que se me olvido publicar... jeje
Lal-Sensei: Te dije que lo publicaras antes!
Shirogami: Perdón.. pero nunca me acordaste xd
Lal-Sensei: Mentirosa!
Shirogami: Mentirosa!, no vuelvas más nunca más, a mi lado (8)
Lal-Sense: Bueno ignorando a esta loca...aquí esta el fic... espero que les guste
Shirogami: disclaimer, ningún personaje nos pertenece, si no estaría casada con Prussia.
Lal-Sensei: Y yo con Doitsu.
Shirogami: Disfrútenlo n.n
Cambio de Sexo
-Mmmnn… me pesa el pecho…- dijo un chileno despertándose. Al terminar de estirarse como de costumbre se toca el pecho y siente algo… distinto.
-¡Manu! He venido a verte boludo- dijo Martín entrando de golpe en la pieza- Traje chocola…- No pudo terminar la oración porque vio que en la cama donde debería estar su amigo había una joven castaña con el pijama de su amigo- Perdón, no sabía que estabas en eso- agrego saliendo de la habitación rojo pensando en lo que su amigo había hecho con ella.
-¿Qué wea?- se preguntó el chileno, notando que su voz era menos grave- Mi voz…- se levantó alterado a verse en el espejo más cercano, y vio que no solo su voz había cambiado-Mi cabello… mi… mi todo… ¿CTM que pasó?- exclamó al ver su cuerpo convertido al de una mujer, se sintió extraño en un principio, pero luego pensó en todas las bromas que podía hacerle a sus hermanos.
-¡Ma… Martín!- llamó la ahora castaña.
-¿Sí?- apareció el argentino. Pero en ese momento la chica se abalanzó sobre él.
-A la mierda las bromas- pensó, y lo comenzó a zamarrear- ¡¿Qué wea me hiciste tincho culiao?! ¿¡Por qué te gusta hacer esa malda'!?
-N…No sé de qué hablas- dijo el rubio, pero notó su sobrenombre- Manu… ¿boludo eres tú?
-Noooo… soy Perú, obviamente soy yo aweonao- dijo molesta la dama.
-Ca…calmate, yo no hice nada- dijo excusándose.
-¿Y si no fuiste tú quien mierda fue?- preguntó alterada la chilena.
-N…Ni idea…- dijo el latino.
El tiempo pasó… pero no lograron comprender la situación, pronto se encontraron el resto de sus hermanos en la misma casa, sin embargo no reconocieron al chileno.
-Uy… Argentina tiene novia nueva- dijo Perú.
-Mmm… me recuerda a alguien- dijo el boliviano.
-No es mi novia boludos- dijo el Argentino- Es su hermano… Es el Manu
-Manu… ¿te cambiaste de sexo?- preguntó el peruano.
-No idiota… algo me pasó…
-Te pasa por no darme mar…- agregó Bolivia.
-Ah?- A esto el chileno lo miró con mirada asesina, de alguna forma asustaba más en ese cuerpo de mujer.
-Ahh! Es todo- exclamó el Argentino- tenemos reunión hoy… vamos chile- dijo tomándole la mano a la castaña y caminando, a esto la chica se sonrojó y se sintió incomoda.
-Martín… espera- dijo.
-¿Qué?- entonces la vio avergonzada, seguía en pijama y definitivamente no tenía ropa de mujer en su armario-Ehh…- el argentino no pudo evitar sonrojarse por la ternura que la chica provocaba.
-Jajaja… hay amor en el aire- dijeron los otros dos que contemplaban la escena.
-Cállense culiaos de mierda- dijo la chilena- ¿cómo quieren que vaya?… sigo en pijama- aclaró.
Luego de un tiempo buscando ropa para la chilena, se fueron a la reunión. Entonces vieron que no había sido solamente el Manu.
-¡Romano!- Exclamó una chica.
-Hyaa… aléjate de mí…
-Ese es… ¿España?- se preguntaron los latinos.
-Ah… chicos- los miró con sus ojos verdes- ¿Chile? ¿Eres tú?
-Si… veo que te pasó lo mismo…- comentó.
-Si…- comentó la chica- es extraño…
-Es extraño tener estas- dijo la chilena tocando sus pechos.
-Jajajaja… al menos no somos las únicas- comentó el español/la- Mira… esa peli blanca es Prussia…
-Sigo siendo asombrosa… kesesese- rio la prusa.
-Cierra la boca- le tocó la cabeza un chico castaño claro y ojos verdes a la prusa.
-¿Hungría?- Se preguntaron todos menos Prusia.
-Si… ¿alguien sabe lo que pasó?- preguntó la húngara, pero todos negaron con la cabeza.
-Hon Hon Hon… mon dieu, ver tanta belleza reunida me hace feliz- dijo el francés.
-¿De qué hablas Francis? Somos nosotros- dijo el español- soy España.
-¿España?- dijo el francés sorprendido.
-Sí- afirmó el español- esta es chile- señaló a la chilena- ella Prusia y el chico es Hungría- aclaró.
-Ya veo…- dijo desilusionado- Chile-chan… ¿me dejas medirte?- preguntó Francia con cara de pervertido y haciendo gestos con sus manos.
-Está bien- respondió la chilena sorpresivamente, pero cuando el francés estaba a solo dos centímetros de los pechos de la chica, un rubio interfirió.
-No toques a mi hermano pervertido- exclamó Martín poniéndose entre ambos.
Finalmente todos llegaron, para variar, el gringo llegaba tarde de nuevo, todos empezaron a quejarse, pero en eso.
-¡Lamento la demora!- resonó una voz femenina en el lugar, el gringo ahora era gringa, usaba una falda verde y su típica chaqueta con el número 50 atrás.
Todos quedaron sorprendidos. Pero la chica actuaba como si nada- me demoré porque no tenía ropa de mujer- comentó riéndose como de costumbre.
Mientras reía la estadounidense la puerta se abrió nuevamente, el inglés llegaba tarde, era raro… muy raro, siempre era el primero en llegar.
-Lo sien…- Miró la atmosfera- ustedes… the bloody hell… ¿qué pasa aquí?
-No lo sé… -dijo la rubia- amanecimos así- dijo hablando por todos.
-¿No será obra del señor?- se preguntó Hungría, quien una vez lo vio y le pidió que golpeara a Francia.
-No lo creo…-dijeron los otros.
-No creo que esto sea tan malo…- dijo la chilena pensando- tal vez nos ayude actuar como el sexo opuesto…
-Es posible…- concuerda la española.
Mientras comentaban Francia notó que su amigo de peleas estaba algo nervioso.
-Oí Angleterre- susurró el francés- ¿Te pasa algo?
-N…no… nada- dijo el inglés poniéndose aún más nervioso.
-¿No tendrás algo que ver verdad?- preguntó el Francés.
-N…no, ¿Qué te hace pensar eso?- preguntó el ojiverde.
-Pues tartamudeas y sudas…- contestó simplemente el de cabello largo.
-¡Que no tengo nada que ver! Bloody Frog!- Exclamó exasperado el británico. Pero en ese momento todos voltearon a mirarlo, entonces la gringa se paró a su lado y le tomó el hombro, a lo que Arthur dio un salto.
-Fuiste tú ¿verdad?…- preguntó sonriendo.
-…-El inglés sudó frío al ver como los demás lo miraban.
-¡Fuiste tú!- acusó la chilena- ¡Dinos como revertirlo maldita sea!
-N…no lo puedo revertir aún- dijo el inglés- no tengo mis materiales.
-Entonces vamos a tu casa a solucionarlo- dijo la estadounidense con un tono animado.
-¡Esperen ahí!- gritó el Alemán- estamos en plena reunión, no pueden irse así como así…
-Alemania tiene razón- dijo el argentino.
-No es que le encuentres razón- dijo el peruano- solo quieres seguir viendo a chile como mujer- comentó con mirada picara.
-Claro que no- se sonrojó el rubio.
-Todos sabemos que sientes algo por chile…- dijo el boliviano- no es un secreto.
-¡No es eso!- dijo el argentino aún más rojo.
-Vamos Martín- la chilena lo abrazó por atrás, pegando sus pechos a la espalda de este- sé que no puedes resistirte.
-Y…Yo…- pero el rojo le ganó y se desmayó.
-Creo que lo mataste…- comentó Miguel.
*Le Timeskip traído a ustedes por France-nii-chan*
-Dice el libro que deben actuar como el sexo opuesto o…- dijo el inglés mirando su libro- tomar una pócima, que de seguro no tiene buen sabor…
-La pócima- dijeron todos al unísono.
-No soporto más el peso…- se quejó la chilena.
-Ok… denme un par de horas- dijo el inglés- Y otra cosa… no toquen nada, muchas cosas aquí contienen magia…
Las horas pasaron, y los países hechizados no podían estar más aburridos. Chile estaba sentada en el sofá, Hungría peleando con Prusia, USA comiendo una hamburguesa y España durmiendo siesta.
-¡Me aburro!- exclamó la chilena, pero en ese momento apareció Arthur.
-Bien, ya era hora- dijo la estadounidense, causando que el inglés se enfadara.
-Da gracias que ahora eres mujer…- susurró para sí mismo el británico.
-Deben tomarse un vaso de esta poción- dijo, la poción se veía asquerosa, todos lo hicieron.
-No me siento diferente- dijo el español.
-Sí, su efecto se dará cuando despierten en la mañana- dijo el rubio.
-Entendido- dijeron.
*Otro Timeskip traído a ustedes por Chibi Romano*
-Hmmmmnnn- se estiró un castaño- Ya es de mañana- dijo, corriendo al espejo más cercano, viendo su reflejo- Bien conchetumare, volví a ser yo.
-¿Chile?- dijo argentina viendo que su amigo había vuelto a la normalidad- ya volviste…- dijo.
-Jajaja, si- dijo- pero debo admitir que extrañaré a mis niñas- dijo tocándose el lugar donde estaban sus senos anteriormente.
-No digas esas cosas, che- dijo el argentino.
Todos volvieron a la normalidad.
*Final extra traído a ustedes por Awesome Prusia*
-Me pregunto si alguien nota que sigo siendo una chica- dijo una rubia con dos coletas.
-¿Quién eres?- preguntó un osito.
-Soy tu dueño… Canadá- suspiró.
