Hola ¡hola mis queridas seguidoras! Espero todas estén bien ¡bienvenidas a nuestro nuevo proyecto! De la colección "superando mi timidez".
En nuestro inicio de hoy, les presento la sección de Saga de Géminis, como el otro, constará de 12 capítulos, mas la decisión y el epílogo.
Espero les guste.
¡déjenme saber su parecer!¡con un genial REVIEW!.
Saint seya, es propiedad de Masami Kurumada, yo solo, intento aportar algo alos distintos phandons.
Superando mi timidez, caso: Saga de Géminis.
País, Etiopía, ayudante: Mu de Aries.
Ah, que bueno es respirar, cada aliento de aire, es como poesía, como melodía, es tan sublime, tan espectacular, Shaka dice que me estoy volviendo demasiado sentimental, pero, después de haber muerto en la arena, achicharrado una vez mas, me parece que tengo derecho de maravillarme de lo maravilloso que es nuestro mundo maravilloso, como caballero dorado, yo, Saga de Géminis estoy decidido a disfrutar de todo lo que el mundo me ofrece.
Y después de tanto haber esperado, después de tanto haberle dado vueltas por fin, decidí ir en busca de mi amor, creía por todo lo que había pasado, desde los 4 años, que no era seguro para mi, tener chica, además, aunque había conocido a mujeres realmente bellas, ninguna me había llamado realmente la atención, hasta la primera, que me habló sin miedo, sin juzgarme, y si alguna vez, me miró desde arriba, fue para ayudarme, Luna de Lince, al principio, no podía creer que una criatura tan hermosa, tan pura, tan dulce, se hubiera fijado en mi, un monstro, un ser manchado, pero, ya podía creerlo y después de lo que pasó en la arena, quiero vivir al máximo, todos los aspectos que desee experimentar y eso, incluye, el amor de pareja.
Decidido como estaba, me fui a buscar ayuda, no quería ayuda de Alde, lo que pasó con Shaka fue espantoso, ni Milo ¡seguro se burlaba De mi! Y después de haber visto, vendido y distribuido álbunes llamados:de niño a hombre; con todas las imágenes vergonzozas de Aioros, menos quería que eso pasara, ya se había probado que como cazamenteros, éramos demasiado…radicales.
Cuando llegué a casa de Aries, escuché unas risitas y vi a Kiki en la puerta –me gustaba mas. Dijo el adolescente enfurecido.
-cuando mi maestro era soltero. Agregó –algún día, esa salchicha tendría dueña. Dije sin pensar, en una frase típica de Milo, Kiki me miró aterrorizado y salió huyendo, me armé de valor y silbando entré a la casa, ni toda mi experiencia en el campo de batalla, me habría preparado para el incéndio que había en ese sofá, Mu y Kim se besaban, como si no hubiera mañana, la danza de lenguas, debía ser ultrabuena, porque a simple vista, se veía que disfrutaban mucho, vaya que lo hacían, porque Kim aferraba los cabellos de Mu, mientras este, acariciaba su espalda yh sus largos cabellos rosado fosforito, los miré como hipnotizado, queriendo interrumpir, pero, al mismo tiempo, no queriendo hacerlo, me aclaré.
-ejem, ejem. Dije pero nada, taconeé con mi bota, pero nada igual, me aclaré una vez mas, pero nada.
- ¡Mu!. Exclamé con mi voz de hermano mayor, eso nunca fallaba, Mu y Kim jadearon y se soltaron, el cabello de Kim pasando a naranja con mechas blancas, ambos, me miraron con la misma expresión.
-Sa, Sa, Sa ¿Saga?. Preguntaron a coro, fruncí el ceño.
- ¿Qué?¿tengo monos en la cara?. Pregunté malhumorado, ambos se arreglaron y negaron.
-no. dijeron a coro, me alegré de que usualmente, Kim no usara falda, pues, quizás esta, estaría un poco subida, no demasiado, pero si algo, el pantalón, estaba en su sitio, aunque la camisa, estaba un poquito subida por debajo, ella se la arregló.
- ¿en que puedo ayudarte Saga?. Preguntó Mu con su usual cortesía, pero con un filo en la voz, que yo no le conocía.
-verás Mu, me parece que eres el mas indicado para ayudarme, tu sabes, qu e amo a Luna. Dije, Kim me interrumpió, algo que aborrecía.
-no me digas. Dijo irónica, asentí –ya lo dije en las entrevistas. Afirmé, Mu asintió.
-las vimos, continúa. Asentí –quiero conquistarla y ganar su corazón, pedirle que sea mi novia. El asintió. –
Ya pasamos por esto, al menos 2 veces, con Aioros y Shaka ¿estás seguro de que somos buenos consejeros?. Preguntó con calma.
-buenoooooooooo. Comencé a recordar todos los desastres, metidas de pata, insidentes y en suma, todo lo que ocasionamos haciendo de casamenteros.
-al final todos consiguieron novia ¿no?. Pregunté al final, ambos asintieron –así que: tan mal no lo hicimos. Dijo Kim.
-así es, necesito ayuda, por favor, ayúdenme. Pedí, ambos asintieron.
-lo primero que hay que robar, es el itinerario de mi hermana. Dijo la pelinaranja Kim, asentí.
-tengo el candidato ideal. Dije feliz mientras salía de la casa y ellos me seguían muertos de curiosidad.
No, no, no y no. Dijo Antoin en la casa de Camus, junto a la tía Odi –por favor Toin, juro que no te pediré nada. Dije - ¿nada?. Preguntó el indignado.
¿Qué hay de robar la agenda prohibida de Milo para hacer una fiesta de chicas calientes, donde todos se dieron banquete y casi nos matan a todos, ni hablar. Dijo ese ppapanatas malagradecido, Kim me miró fulminadoramente.
-así que: eso fue cosa tuya. Dijo traqueándose los dedos –mirar, mas no tocar. Dije con calma.
-el hecho de que los solteros hayan tocado no fue culpa mía y sacando eso…Toin, no te he pedido nada jamás en tu vida ¿Qué mal puede haber en ayudar a un pobre amigo que solo necesita un inofensivo papelito?. Antoin miró mi cara de cachorro, bien aprendida con mi mamá y mi papá, una cara de cachorro tan convincente, que algunos decían que no era natural.
-no me mires así…huuuuuuuyyyyyyyyyyy ¡de acuerdo!¡vamos antes de que me arrepienta!. La tía Odi estalló en carcajadas, al igual que Kim y Mu.
-te esperamos aquí. Dijeron a coro, asentí.
¿saben? Dan escalofríos cuando hablan así. Dije –totalmente de acuerdo. dijo Antoin, Kim lo miró mal.
Cuando tu lo haces con Honey, nadie dice nada, así que: no te quejes. Le dijo, Antoin le sacó la lengua y nos fuimos.
Fue fácil, hacer que su Ilustrísima se durmiera, o quedara en estado básico de trance, como es correcto decir, me acerqué a la cartelera que tenía en el despacho, donde, tenía los itinerarios de Luna, los horarios de todos y los próximos eventos sociales, le saqué una fotocopia y corrí, de regreso a casa de Acuario, junto a Antoin, claro está.
Veamos. Dijo Kim quitándome el papel -¡oye!. Le gruñí.
-solo voy a hecharle un vistacito. Dijo, comenzó a leer.
-mmm, interesante. Dijo por fin.
- ¿Qué es interesante?. Pregunté –los campos de entrenamiento. Dijo Kim.
-técnicamente, no los deberías ver. Le dijo Antoin.
-tonterías, esto es básico y ya lo se, mira: los países son: Etiopía, Rusia, Chile, Japón, China, Canadá, Finlandia, Argentina,Venezuela, India, Rumania. Asentí.
-vien, entonces, debo ir a Etiopía. Dije feliz.
- ¿y después?. Preguntó Antoin –después…puedo llevarla a pasear por la ciudad ¡me imagino que le gustará!. Exclamé orgullosamente.
-no lo creo. Dijo Mu, lo miré anonadado –lo mas probable, es que conozca la ciudad, no debes intentar impresionarla con lo que tu sabes, debes impresionarla con lo que pueden hacer juntos los 2, aprovechando lo que tu sabes, y lo que ella sabe. Asentí a la par de Kim.
-me parece razonable. Dijo ella por fin –después de todo, no solo estamos nosotros como mensajeros. Añadió.
- ¿Quiénes mas?. Preguntamos M, Antoin y yo.
-todo el que se precie de tener santuario, tiene un mensajero. Dijo ella.
-o sea, todo el mundo. Dijo Antoin –amigo, estás perdido. dijo Mu.
- ¿Por qué?. Pregunté –Luna es muy querida y muy popular en su círculo. Explicó Kim –hasta ha salido con Bud. Agregó como quien no quiere la cosa.
- ¡con Bud!. Exclamamos Antoin, Mu y yo.
-pero, pero ¡si Bud no puede ver una escoba con falda!. Exclamó Antoin –eso lo se yo. Dijo Kim.
-pero el hecho, de que haga eso, solo implica que quiere placer, escuché, que por fin, quiere algo serio. Añadió mi futura cuñada, de lo mas calmada, Bud era divertido, apuesto, sexy, extrovertido y en suma, lo que le gustaba a muchas chicas, asentí.
- ¿y ella que le ha dicho?. Pregunté.
-salen como amigos. Dijo Kim –pero eso no quiere decir, que en un futuro, ella no le de una oportunidad. aSentí, di las gracias y salí corriendo de Acuario, dispuesto, a ir y comprar un pasaje de ayer para hoy.
Llegué al día siguiente a Etiopía y me pareció, un lugar hermoso y exótico, lo segundo que hice, fue ir a isla Andrómeda, al llegar, la vi como siempre, tras firmar el tratado de paz y después del cambio de protector, que a todos, nos seguía molestando, toda tierra aparentemente infértil y demás, se había llenado de vida, ofreciendo verdor y hermosura a cada paso, había que admitirlo, aunque fuera a regañadientes, Julián, estaba enpezando con muy buen pie.
-hola Saga. Me saludó Albiore, como iba sin armadura, se podía ahorrar el "señor" o "santo de géminis", le sonreí.
-hola Albiore ¿la mensajera está por aquí?. Le pregunté.
-si, ahí. Dijo señalando la roca, me acerqué y la vi, tomaba sol con un viquini fuxia de escamas, que no dejaba nada a la imaginación, era preciosa, su cabello plateado parecía un trozo de luz de luna y su piel bronceada, como durazno, me hizo dar un suspiro, di un pasito, pero tan ensimismado estaba, que accidentalmente, tropecé con una roquita y me precipité en caída libre.
- ¡equitación de los gemelos!. . los 2 gemelos en el aire, detubieron mi caída y me regresaron al borde de donde estaba parado, Albioee se reía a mandíbula batida.
- ¡Saga?. Preguntó Luna desde la roca, sentándose, abriendo los ojos y mirándome, sentí lo que Aioros había sentido y como me había burlado de el, con Camus yAntoin, ahora me parecía una estupidezz, saludé.
-holaLunacomoestásmealegrodeverte. Dije, Albiore se rio mas de mi, detallando mi vergüenza, ella llegó en un parpadeo. A donde me encontraba.
-Saga, que bueno verte ¿Qué haces aquí?. Preguntó.
-monumentos a yo ver invitarte te iba a. comencé, Albiore se rió mas y en un impulso, mas propio de Milo que de mi,lo lancé barranco abajo, lo escuché gritar como marico, sonreí con malicia, Luna sopló una burbuja, la cual, resguardó al cretino de Albiore y lo hizo subir, hasta donde estábamos, prudentemente, se alejó de mi, me aclaré.
-yo, venía, a, invitarte, a, ver, la, ciudad,si quieres, cla, cla, claro, claro está. Dije, ella sonrió.
-me encantaría, dame una hora para arreglarme. Me dijo, asentí.
-vo, vo, voy a ir, a mi ho, hot, hote, hotel ¿Dónde te espero?. Le pregunté.
- ¿en cual te quedas?. Preguntó –en jufure kin te. Dije, ella sonrió.
- ¡que casualidad!¡yo me estoy quedando allí!¡vámonos!. exclamó feliz, asentí muerto de alegría, bajamos, ella buscó sus cosas y en un portal dimensional, regresamos a Adis Abeba.
Tras la hora, estaba esperando en el sitio, en el vestíbulo, estaba un poco nervioso, ya que, pensaba de que charlaríamos, no había estado así nunca, me preocupaba quedar mal, cuando escuché unos tacones y ¡mi madre! La vi, una mini falda que solo mostraba sus piernas (como debe ser), una camisa manga larga por los hombros blanca, las botas fuxia como la falda y un bolso cruzado, como le gustaba, de color fuxia, las joyas blancas, su maquillaje, blanco con fuxia, estaba alelado, anonadado, impresionado, eso era verdad, contrario a mis costumbres, me había hecho una cola alta de caballo, tipo samurai, me había puesto una camisa verde agua, el cuello de corte en V y unos pantalones blancos, con botas a juego.
-Saga. Me dijo –Luna. Le dije, como me alegré por primera vez en mi vida, de haber perdido una apuesta con Afrodita, que condujo a mi ropa nueva, que se me veía, según el, la diosa, Honey y Margareth, de muerte lenta.
-estás…estupendo. Nos dijimos a coro, ambos nos reímos –me alegro de verte tan bella. Le dije, se coloreó un poco.
-yo…de verte tan…atractivo. Dijo pasando saliva.
- ¿nos vamos?. Le pregunté, asintió, le ofrecí el brazo y salimos.
¡fue mas fácil de lo que pensaba! Cambiamos datos sobre Axun, como había sido de Egipto antes, mucho antes, sobre las 11 iglesias de lalibela, la fortaleza de Gondar, que era el Camelot africano, la conversación fluía, terminamos en uno de los restaurantes favoritos de ella.
¿Cuánto tiempo te quedas?. Le pregunté –oh, una semana. Me contestó.
-tengo un trabajo súper diligente, ya sabes, que me aseguro de las elecciones de soldado razo, sacerdotes y protectores de criaturas, todos los años se abren cupos y todos, tengo que venir. Explicó como si nada, yo, estaba fascinado.
-si, lo se, pero pensé que disfrutabas mas. dije –y lo hago. Aseguró.
-pero tengo 12 semanas, que son altamente estresantes. Sonreí.
-me alegro, entonces, de estarte haciendo compañía. Dije feliz, cuando escuché como la llamaban.
¡Luna!. Ella se dio la vuelta, yo lo vi y lo odié, era alto, con el cabello fuxia en una cola de caballo, ojos fuxia y una sonrisa socarrona, llevaba una camisa manga ¾ que no hacía esfuerzos por ocultar su musculatura y un brazalete naranja, que observé con interés.
-ah, Saga…el es Aron de Fénix, caballero de lava, del señor Efesto. Dijo Luna un poco incómoda, puesto que, el insulso animal la había abrazado de forma posesiva, como diciendo: "ella es mía"; Luna se lo quitó con elegancia.
-un placer. Dije –igualmente, cariño, te estábamos esperando, llama estaba inquieta. La miré no entendiendo.
-llama…Olivia de llama, es la mensajera del señor Efesto, el tiene 5 caballeros de lava. Explicó Luna.
-se supone que una rata dorada como tu,debería saberlo. Dijo el chocante, lo sabía.
-no sabía cuales eran los nombres, de las inmundas cucarachas escarlata. Dije con acritud.
-chicos… dijo Luna, pero, no le prestamos atención.
-bien, así que…la pretendes. Me dijo Aron con descaro –igual que tu. Le solté rápidamente. Luna estaba mas incómoda.
-chicos, ya. Dijo una vez mas, Aron me retaba, sentía su burla, no estaba dispuesto a permitirlo.
-pon tu reto niño bonito. Dije con altivez, el sonrió.
-vamos a ver ¿Qué tan ágil eres?. Me preguntó, el preparó 2 bastones con llamas y ante la mirada asombrada de todo el mundo, comenzamos a manipularlos.
Dios, que hábil eres. Dijo el asombrado, sonreí, era asombroso haber asombrado a un guerrero de Efestos, que se supone, nacían con una llama bajo el brazo, su sonrisa, que usualmente era arrogante, se puso maliciosa de repente.
Vamos a ver ¿Qué tal te la llevas con el fuego en tu cuerpo?. Abrí los ojos.
- ¿Qué?. Pregunté - ¡Saga cuidado!. Exclamó Luna, justo cuando las llamas, saltaron a mi cabello, a mi camisa y a mi cuerpo, abrí un portal dimensional y salté a su interior, caí en la casa de Acuario, aullando y aullando de dolor, vi a Camus llegar con Zarina y ponerse manos a la obra, me apagó las llamas.
¿Qué pasó?. Me preguntó –exeso de velas en Adis Abeba?. Negué.
Aron de fénix, fue el problema. Camus abrió sus gemas Zafiro.
¿el guardián de Efestos?. Asentí.
-adiós a mi plan de pasear por toda Etiopía. Dije, aún me lamentaba por no poder ir a: Axxun, a la iglesia de Santa María de Sion, a la fortaleza de Gondar, las 11 iglesias… Camus me cortó.
-ya lo se, fui allí el año pasado con Toin. Dijo –hay de mi, ese estúpido cretino ¡me quemó porque lo dejé en ridículo con su elemento!. Exclamé, Camus rió.
-seguro le gusta Luna, por eso lo hizo, pero, mas allá de eso ¿Cómo te fue en la cita?. Me preguntó, puse una expresión soñadora.
-bien, se puso falda…y una mini. Dije feliz - ¡oh!. Fue la exclamación de Camus.
-tu le interesas. Me dijo, me mostró su Iphone, con su perfil de godface, vi la foto de perfil de Luna y el mensaje "tomando ice cofee con pollo a la Broster 2", se veía muy linda, camisa blanca, atada en el cuello y unos pantalones verdes de campana ¡pantalones! Tomé el celular de Camus y me paseé por las fotos, mientras el me decía que iba a hacerme un par de curas, vi fotos con: Ikki, Camus, Afrodita, Belenger, Abel, Aron, Mauricio y Bud y en todas ellas ¡llevaba pantalones! De distintos tipos, pero pantalones al fin.
-soy feliz. Dije justo a tiempo, antes de gritar como un poseso por culpa del dolor.