"Ni Naruto ni todos los personajes me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto, solo los tomo prestados para crear mi historia"
.
.
.
.
.
Capítulo uno: Conociéndote.
Era un día nuevo en Konoha, el sol abrazaba las casas de la aldea, los pájaros cantaban, el olor a flores inundaban los sentidos, en fin era el día en que, después de darse ánimos, Naruto iba a declararle su amor a Hinata.
Hinata era una adolescente de 16 años, de tez blanca, pelo negro azulado, ojos blancos redondos y perfectos, su sonrisa era encantadora, sin contar sus dotes no muy comunes entre sus amigas y demás kunoichis, era dulce y comprensiva, una perfecta kunoichi. Era la heredera del Clan Hyuga uno de los clanes más poderosos de Konoha y estaba enamorada de cierto rubio de ojos azules, a quien por su timidez nunca pudo confesarle lo que sentía.
Naruto un joven de 16 años también, era diferente a Hinata en carácter un chico rebelde pero lleno de vida, se esforzaba cada día para conseguir lo que quería, aunque no apostaran mucho por el. Era el contenedor del Kyuubi de nueve colas y pertenecía al Clan Uzumaki, este casi extinto con miembros distribuidos en todo el mundo ninja, enamorado de Hinata, pero creía que ella no estaba interesada en él.
El día comenzaba se dirigió a la torre Hokage, estaba decido en que ese día al fin confesaría todo. Golpeó la puerta, esperó unos segundos y se adentró sin permiso, así era él, siempre haciendo las cosas por impulso, al entrar se encontró con Tsunade sentada en su escritorio y a Shizune con Tonton en brazos.
-Abuela Tsunade, necesito pedirle un favor- E hizo una sonrisa zorruna mientras se llevaba una de las manos a la nuca.
-Shizune puedes retirarte; dime Naruto que quieres ahora. - Habló la rubia Hokage.
-Deseo la misión de ser escolta del comerciante de la arena, junto a Hinata Hyuga.
-Que curioso... - Tsunade estaba intrigada hacia horas Hinata había pedido esa misión junto a Naruto, también Sakura junto a Sasuke. "¿Tanto desean ir a la aldea de la Arena? Debe ser alguna otra cosa… estos jóvenes" - Ya había asignado la misión... - Naruto no la dejo terminar y replico.
-Abuela Tsunade es importante para mí, usted puede cambiar a quien haya asignado para esa misión después de todo usted es la Hokage de la prestigiosa aldea de Konoha - "No puedo creer que este idiota piense que voy a caer con eso, aun así…"-
-¡Naruto eres un idiota! Quieres una misión bueno te daré una, partes en 30 minutos por la entrada a Konoha, tus compañeros te estarán esperando allí ahora ¡Fuera! - Gritó exasperada por aquel rubio.
Naruto salio caminado, ¿Qué había pasado? No le dijo que si o que no.
"No se ni lo que tengo que hacer, mejor será que valla por mis pertenencias."
Con aquel pensamiento se encaminó a su hogar, en busca de sus armas ninjas y su adorado ramen.
Habían tres personas en la entrada de Konoha, tres shinobis esperando partir a su misión, pero el cuarto integrante no aparecía por ningún lado, y aquello estaba resultando demasiado molesto.
-Naruto se esta tardando mucho no creen - Casi en un susurro dijo cierta chica.
-Ese idiota estropeará una simple misión no entiendo porque Tsunade permitió que fuera con nosotros. - Habló el chico de semblante serio y molesto.
-Allá viene. - Dijo una de las kunoichis.
Naruto se iba acercando poco a poco pensaba en porque la abuela Tsunade no quiso contestarle y le asigno otra misión- "Maldita sea mi suerte, una vez que me animo"- pero todo cambio al alzar la mirada y encontrarse con Sasuke, Sakura y ¿Esa era Hinata? - "Abuela Tsunade, siempre envuelta en misterios" - sonrió y fue en busca de sus compañeros, al acercarse mas vio a un hombre junto a ellos.
-Ya estamos todos - dijo Sasuke - podemos irnos.
-S...si Sasuke...
Sasuke y Sakura iba detrás del comerciante, Naruto y Hinata adelante aguardando cierta distancia ya que Hinata al poseer el Byakugan detectaría a cualquier enemigo que intentara atacar, Naruto podía atacar a corta y larga distancia, mientras que Sasuke protegía al ninja médico, era la mejor formación que tenían, además aquel rubio no se hubiese quedado atrás y dejado que Sasuke se quedara con toda la "acción", el también era un ninja, y era de los mejores.
Mientras que Naruto inundaba sus pensamientos en como empezaría aquella charla, en como haría para poder hablarle sin estropearlo todo, sabía que tenía que tener cuidado con las cosas que decía, ya que era muy impulsivo, no sabía medir las palabras, no sabía cuando callarse, no sabía tantas cosas... tomo coraje y trato de hablar, no importaba de que pero quería ir rompiendo el hielo.
-Hinata, ¿Me podrías dar un informe de la misión? - ¿Qué fue eso? Algo muy estúpido.
"El me esta hablando y yo… No se que decir…"
En su cabeza articulaba vocales coherentes para responder a la pregunta, un rubor cubrió sus mejillas y contesto.
-Bueno N…Naruto este no es un comerciante común - respondió casi en un susurro - p…por eso estamos todos, v…veras este comerciante transporta un objeto de valor muy im…importante - Trataba de no tartamudear, quería demostrarle que había crecido que ella también podía ser digna de él… aunque no tuviera el coraje de decirlo - es para el Kazekage Gaara - concluyó.
Sasuke iba callado, caminaba junto a Sakura, no le gustaba la situación, porque eran tantos, sabía que esta misión era rango B, tal vez podría convertirse en rango A, pero aún así, que estuvieran todos... ellos justamente; estaba seguro que algo no andaba bien, bufo molesto pero aun así suponía que tenía que callar, hacía un rato había visto a Naruto hablar con Hinata al no estar cerca de ellos no pudo escuchar nada pero sabia que seguramente ese sería el día…
Después de recorrer gran parte del trayecto de ese día Sasuke decidió hablar.
-¡Alto! El sol esta bajando lo mejor será que busquemos un lugar para descansar, también haremos guardia, nos dividiremos en grupo, la primera guardia la harán Naruto y Hinata, luego los relevaremos Sakura y yo - Al ver como todos asentían, buscaron un lugar en el cual descansar… Seria una larga noche la primera de los tres días que llevaba llegar a la aldea de la Arena. Armaron las tiendas, el mercader dormía solo, Sakura y Hinata por un lado y Sasuke y Naruto por el otro.
Primera Guardia.
Naruto y Hinata estaban en un árbol diferente cada uno, Hinata encendió su Byakugan observó diez kilómetros al norte, al sur, al este y al oeste, pero todo estaba asquerosamente calmado, ni un alma deambulaba en las afueras de Konoha.
-Todo esta tranquilo. Informó.
Naruto solo hacía lo que sabía hacer mejor, alardear de lo gran ninja que es y que algún día sería Hokage el mejor de todos inclusive. Hinata solo sonreía,"Lo sé Naruto, algún día lo serás y allí estaré observándote como siempre lo he hecho" pero sus pensamientos fueron interrumpidos cuando Naruto la dejo sola, trato de buscarlo pero no pudo, no podía abandonar su puesto, pero le preocupaba aquel rubio de ojos celestes que tanto amaba, solo pudo bajar de el árbol y verificar con su Byakugan si todo estaba en orden, de repente sintió que alguien se acercaba desenfundo su kunai y se preparo al girar vio a su rubio parado junto a ella, no supo como ni en que momento la había agarrado de la cintura.
"Naruto me esta sosteniendo y yo… ¿Qué haré?… Estoy tan… tan… confundida"
Fue entonces que el rubio guardo un pequeño papel en su bolsillo y saltó entre los arboles y se perdió. Toco su bolsillo, creyó que tenía que leerlo, pero si era para decirle algo que no quería saber... tal vez ella estaba equivocada, saco un pequeño papel, a simple vista estaba algo arrugado, un poco manchado y escrito, se dispuso a leerlo cuando…
-Hinata. ¿Dónde esta Naruto? - Le preguntó el pelinegro interrumpiéndola.
- Se… ha ido a v...ver otro sector supongo - su voz sonaba apagada
-Bien, puedes ir a descansar Sakura y yo nos encargaremos - "¿Qué le pasaba a esa chica? ¿Acaso Naruto…?"
Se dirigió a su tienda, tal vez todo era su imaginación, se recostó, el sueño no duró mucho en llegar, antes de rendirse ante él, escuchó entre sueños. - "¿Cómo pude ser tan estúpido?" - una y otra vez…
La noche siguió sin problemas al menos para ella; por la mañana todo lo vivido la noche anterior solo había sido otra mala jugada de su imaginación nuevamente, como otras tantas veces.
Seguían su marcha a la aldea de la Arena, Naruto no pudo dormir en toda la noche, tal vez era por no saber como expresar lo que había pasado, ella actuaba como si nada, él empezaba a creer que se había hecho ilusiones sin fundamentos, que la heredera del Clan Hyuga estaba fuera de su alcance, fuera del alcance de un simple contenedor para un demonio que años atrás quiso destruir su aldea… pero otro día había pasado la noche volvía a inundarse en pensamientos, pensamientos en los que el veía mas lejos la posibilidad de estar con su amada, después de todo no estaba a la altura de ella.
Esa noche fue igual a la anterior él solo preguntaba si había movimientos extraños, ella solo negaba con la cabeza. Cuando cada uno se dirigía a la tienda que le correspondía ella puso sus manos en sus bolsillos, saco un papel, ella no lo había imaginado... ¡Ese papel era real! Dentro de su tienda se dispuso a abrirlo y vio una letra algo desprolija pero que lograba entender, el papel decía...
"Hinata:
Seguro que todo es muy confuso para ti como lo es para mi solo quiero que sepas…
.
.
.
.
.
Notas de la autora: Bien este es mi primer Fic, realmente JAMÁS había escrito uno tratare de subir la continuación en estos días, no tardare ya que si alguien lo lee y es igual a mí no le gustara esperar, esto es totalmente NaruHina, supongo que aclarado esto pueden estar tranquilos. Disculpen si no agregue sufijos japoneses como Kun, San, Sama etc, es solo que pensé en que sería mejor así solamente en español.
Ojalá disfruten la lectura así como yo disfrute escribirla, dejen reviews con los que me harían feliz :D.
EDITADO: 28/11/13.
