Hola a todos, bueno pues esta historia nació hoy que termine de leer el 6to libro una ves mas, es un final alternativo, la historia se cambia apartir de "La torre alcanzada por el rayo" y espero que les guste, despues de este cap vendran otros para el final del libro desde mi loca imaginacion, disfrutenlo y dejen muchos reviews, claro este es mi primer fic de Harry espero que les guste!
Disclaimer: Todos los personajes y la historia son propiedad de WB y JK Rowling, esto esta hecho sin fines de lucro..
Y que hubiera pasado si...
27
La torre alcanzada por el rayo.
-Hazlo, Draco, o apartate para que lo haga uno de nosotros...- gritó la mujer, pero en ese preciso instante la puerta de la azotease abrió una vz más y apareció Snape, varita en mano; recorrió la escena con sus negros ojos paseando la mirada desde Dumbledore, desplomado contra el parapleto, hasta el grupo formado por los cuatro mortífagos, entre ellos el iracundo hombre lobo, y Malfoy.
-Tenemos un problema, Snape -dijo el contrahecho Amycus, con la mirada y la varita fijas en Dumbledore-. El chico no se atreve a...
Pero alguien más había pronunciado el nombre de Snape con un hilo de voz.
-Severus...
Nada de lo que Harry había visto u oído esa noche la había asustado tanto como ese sonido. Por primera vez, Dumbledore hablaba con tono suplicante.
Snape no dijo, pero avanzó unos pasos y aparto con brusquedad a Malfoy de su camino. Los mortífagos se retiraron sin decir palabra. Hasta el hombre lobo parecia intimidado.
Snape, cuyas afiladas facciones mostraban repulsión y odio, le lanzó una mirada de odio al anciano.
-Por favor... Severus...
Snape levantó la varita y apuntó directamente a Dumbledore.
-¡Avada Kedavra!
Un rayo de luz verde salió de la punta de la varita y justo cuando alcanzaba el pecho del director giró 90 grados saliendo disparado hacia el vacio y despues se extingió en la oscuridad.
-No puedo- Snape tenia ahora la varita en la misma direccion hacía donde se habia desviado la maldicion asesina y en su rostro se dibujó una expresión de dolor como jamas habia visto Harry. Lo que ocurrió despues fue tan rapido, Snape se desplomó indefenso y victima de lo que parecia una terrible maldicion, Dumbledore que habia estado debil pareció haberse recuperado en milésimas de segundos y se dirigió hacia el hombre ya con la varita en la mano, comenzó a realizar complicadisimos movimientos con esta, que al instante comenzó a dispararan pequeños hilos de todos colores que se enrredaban en Snape y desaparecian, los mortífagos miraban esto atónitos, tanto como Harry, hasta que pareció que Amycus salió de su sopresa y levanto la varita, sin embargo, fue lo que mas pudo hacer pues Dumbledore le petrificó antes de que este pudiera pronunciar cualquier maldicion. Sin que Harry se diera cuenta, pues su sorpresa por el ataque habia hecho desviar su atencion, Snape se encontraba rodeado de lo que parecia una jaula dorada, los pequeños hilos se conectaban entre ellos y se moldeaban a la figura del profesor, que tenia una expresion de total concentración y susurraba palabras ininteligibles para Harry. Con otro movimiento de su varita, Dumbledore aprisionó a Greyback y Alecto en lo que Harry reconoció como cuerdas antiaparición, aunque aquello no tenia mucho caso, y despues se dirigió a Malfoy.
-Irás afuera y ordenarás retirada, dirás que cumpliste tu misión y despues correrás, saldrás del castillo y te dirigirás a la cabaña de Hagrid, dile que yo te he mandado y pidele que te oculte, procura que nadie te vea llegar allá, Hagrid podrá defenderte en caso de que lo hagan pero una maldición asesina es demasiado para él- ordenó el anciano con renovadas fuerzas, de pronto había tomado el control total de la situacion una vez más, como lo que era, el mago más poderoso. Malfoy abrió la boca para presentar resistencia a las ordenes que se le habian asigando, pero Dumbledore fue mas rápido. -Lo harás, por que como ya te lo he comprabado, tu bando no es este que ha perdido la batalla esta noche- dijo señalando los cuerpos de Amycus, Greyback y Alecto con la varita, - la maldad no ha sido consumada en ti, Draco, ahora vete y date prisa, me temo que aun estoy muy debil para enfrentarme a tantos oponentes, y he gastado muchas energias en hacer esto, apresurate- terminó mirando a Snape en su prision de oro. Draco parecia suspendido en el aire, su rostro se encontraba más blanquecino que nunca, susurró en leve lo siento y salió corriendo hacia la escalera de caracol, donde más abajo se libraba una tremenda batalla.
-Veo que siempre creerá en las segundas oportunidades- dijo Snape con un hilo de voz, se dirijia al director que lo miraba por encima de sus gafas de media luna, pero no ebosaba ni una sola sonrisa, su rostro se encontraba de lo mas serio.
-La ultima vez que lo hice... no me defraudaron...
-No pude hacerlo, el muchacho no podrá sin usted- Harry supo que Snape hablaba de él, aunque no impregnará todo su odio en sus palabras, como solía hacerlo, -Dios sabe que el chico no es un gran mago- sonrió
-Lo es Severus, lo es... Igual que su padre y su madre, el poder de un mago no se mide con la magia de su varita, si no con la de su corazón- el anciano le devolvió la sonrisa, -me alegro que por fin hayas hecho justicia a la causa- terminó
-Solo digale que el destino de los magos esta en sus manos, tiene que ser fuerte- Harry conmosionado, no acabada de entender todo eso, Snape ¿hablando de esa manera de él, aquello no acababa de gustarle, nada tenía sentido, y que era aquella jaula dorada?.
-Creo que no será necesario Severus, ¿estas listo?
-Lo estoy-
-Recuerda que para una mente bien organizada la muerte es solo la siguiente gran aventura, y no me cabe la menor duda, Severus, que la tuya es una de las mejores- alentó Dumbledore, hizo un pronunciado movimiento con la varita y los hilos que componían la jaula comenzaron a separarse y desaparecer.
Cuando el ultimo az de luz dorada desapareció, Snape cayó pesadamente en el suelo. Harry supo entonces, sin que nadie se lo explicará, que Snape había muerto.
Dumbledore se levantó del suelo cansinamente y aun tambaleandose un poco dijo -Me alegro Harry, que tuvieras la ocasion de ver la mejor faceta del profesor Snape, un gran mago- y la paralización de Harry cesó al toque de la varita del director.
