Se que aun no acabo el otro fic, pero tengo este desde hace algunos días y quise publicarlo para ver como le va n.n espero le den una oportunidad
los personajes de Naruto no me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto
la historia es de mi propiedad
UN DÍA COMO CUALQUIER OTRO
En las afueras de Konoha dos ninjas perseguían a otro por entre el espeso bosque del país del fuego.
la luz de la tarde se colaba entre las espesas copas de los arboles mientras saltaban uno a uno en la carrera que llevaban a cabo, llegando a un claro los tres ninjas se miraron de frente; uno de ellos era rubio, el cabello alborotado le daba un aire travieso, su rostro reflejaba la madures de un joven de 18 o 19 años, sus ojos azules brillaban con la luz y en las mejillas dos líneas se dibujaban, vestía una sudadera negra con rayas naranjas a los costados con una playera blanca debajo de esta y un pantalón negro con las típicas sandalias shinobi del mismo color; su compañera era una hermosa mujer de la misma edad de tez blanca con unos brillantes ojos negros ocultos detrás de unos anteojos rojos su cabello lacio de igual color lo llevaba suelto hasta la cintura, vestía un short blanco con una playera tres cuartos blanca con orilla roja y sobre esta un chaleco negro largo por detrás sostenido por un delgado obi negro en la cintura, en el cual llevaba sujeta su katana, calzaba unas botas ninja negras que llegaban por debajo de la rodilla. Ella era alrededor de 20cm más baja que su compañero.
Ambos tenían como misión capturar a un traidor, al cual habían alcanzado por fin, este era un hombre de unos 45 años alto de cabello castaño lacio atado en una coleta baja, sus ojos de igual color reflejaban algo de cansancio por la huida, vestía un pantalón azul claro y sobre este una túnica blanca ocultaba lo demás, al encontrarse acorralado por dos shinobi de alto rango saco un kunai para defenderse.
– No lo hagas, no tienes oportunidad - hablo la joven mujer a su oponente
– peleare todo lo que pueda - contesto el hombre con aire cansado
– si es lo que quieres – el joven rubio sonrió y fue dispuesto a atacar a su contrincante
– Boruto, las ordenes son…
– lo sé – bufo Boruto – solo capturarlo, no te preocupes – le sonrió – no lo matare
– siempre eres tan impulsivo que ya no sé qué pensar de ti – ella hizo una mueca de fastidio
– no me des sermones Sarada y has tu trabajo
– no sé porque sigo siendo compañera tuya – ella tomo posición de pelea al lado de su compañero
– porque todos dicen que hacemos buen equipo – el joven contesto como si nada y sin darse cuenta el hombre que perseguían tomo iniciativa de la distracción de ambos
– se escapa de nuevo¡ – grito Sarada
– ¡demonios! – se quejó el rubio y ambos comenzaron a correr detrás del traidor
– detente, ¡no llegaras lejos! – grito Boruto mientras corrían
– tiene refuerzos – varios hombres rodearon a ambos jóvenes y estos detuvieron su persecución
– ¿más traidores? – se preguntó el joven al ver que todos iban enmascarados
– no lo se
– estamos rodeados
– lo dices como si eso fuera problema – sonrió el rubio y la joven entendió lo que quería decir solo con la mirada
– ve por él, yo detendré a estos – ella ataco a sus enemigos mientras el joven emprendía de nuevo carrera para ir a buscar al hombre que se había escapado
La joven mujer se detuvo por un momento mientras veía la espalda de su compañero desaparecer por entre los árboles, cuando ya no pudo verlo más volteo a ver a los hombres que la rodeaban, eran alrededor de unos 10 o talvez 12 hombres al parecer mayores que ella debido a la compleción que tenían.
Sonrió al ver que ni uno de ellos parecía moverse para atacarla
– vaya, vaya un montón de ninjas renegados sobre una damisela en peligro – dijo ella con falsa debilidad
– sabemos que no eres una damisela – contesto unos de los hombres moviendo la cabeza
– por supuesto que lo saben – chillo ella
– hija de Uchiha Sasuke y Uchiha Sakura, dos de los mejores ninjas en la historia de Konoha, Samsara – recito con desagrado uno de los hombres
– así que entonces si son ninjas renegados de Konoha – ella cruzo los brazos y torció una mueca al puro estilo de los Uchiha
– nunca confirmamos eso, eres conocida en toda región shinobi – se defendió el hombre que había hablado con anterioridad
– claro, pero solo en Konoha me llegan a decir Samsara, ahora… – tomo nuevamente posición de batalla – ¿quién será el primero? – sonrió – No se preocupen, tenemos órdenes de no matarlos
Mientras tanto Boruto había perdido la pista del hombre a quien perseguían desde un inicio, se detuvo por un momento en la rama de un alto árbol para sentir el chakra a su alrededor.
– es rápido para ser un anciano… – cerro los ojos para concentrarse mejor – demonios, por culpa de Sarada lo perdí de vista
– deberías estar más atento – escucho una voz tras de sí y sintió un kunai pasar por una de sus mejillas
– itai! Por poco – se quejó al ver que el kunai le había rasgado un poco la mejilla
– veo que aun distraído tienes buenos reflejos, no por nada eres el hijo del séptimo – el hombre apareció delante de el
– tengo nombre dattebasa – se quejó el rubio, no le gustaba que solo lo miraran como el hijo del séptimo
– claro… Uzumaki Boruto
– así está mejor – sonrió de forma zorruna
– jajajaja sigues siendo el bufón de siempre
– y tu hombre muerto – frunció la mirada y tomo pose de batalla
– pensé que tus ordenes eran solo capturarme
– puedo decir que fue solo un accidente – sonrió
– claro, pero sé que eres de los que nunca matarían a un hombre – cruzo los brazos despreocupadamente – tienes los principios de la generación de tu padre bien arraigados
– Hmp – bufo
– y veo que algunas costumbres de tu maestro también
– deja de parlotear y deja capturarte por las buenas
– y si no lo hago
– pagaras las consecuencias de tus decisiones
una gran ventisca de arena se levantó en el lugar, desde donde Sarada se encontraba atando los cuerpos de los hombres inconscientes a un árbol, logro mirar que la polvareda se elevaba cuando de repente una gran explosión se escuchó desde el lugar de la batalla.
Pudo sentir que los refuerzos se acercaban mas asi que dejo el lugar y corrió hacia el lugar donde se encontraba su compañero. Al llegar pudo ver a su compañero de pie frente al cuerpo inconsciente de su contrincante.
– Boruto! Escuche una explosión – dijo una vez llegando al lado del rubio
– Sarada, te tardaste demasiado – le reprendió sin mirarla
– bueno, yo pelee contra 10 ninjas y tarde los mismo que tú que solo peleaste contra un viejo cansado
– de hecho… – dijo el – no pelee contra el
– que?
Por razones personales he decidido mover mis fics a mi blog, para leer el cap completo les pido lo lean alli n.n
la dirección esta en mi perfil
gracias por su comprencion
