Beteado por sirem, mil gracias preciosa.
Escrito para el Foro Drarry.
Los personajes no me pertencen.
¿Ser el esclavo de alguien más? Realmente no importaba, porque es lo que toda tu vida habías sido. Nadie te lo diría, naturalmente; no había razón lógica para decirle al pobre Harry que toda su vida lo habían estado usando como si fuera una simple herramienta.
Por eso, cuando él comenzó con el juego, no opusiste resistencia alguna, porque no era nada nuevo, como descubrirías más tarde. No, estabas acostumbrado a ello, definitivamente.
En la oscuridad, sientes cómo él te despoja de tu ropa sin siquiera preguntarte o dirigirte una mirada.
Te hubieras sorprendido de lo que él quería hacer, de no ser por el hecho de que era deliciosamente perturbador y enfermamente habitual.
Lo que nadie te había dicho con palabras, él lo había hecho con un simple acto.
Él lleva tus manos hacia atrás y de una forma suave y delicada las ata. Después, te amordaza.
Después de todo, nunca has tenido oportunidad de decidir cómo manejar tu vida, nunca has podido expresar lo que quieres. Él solo hace palpable ese hecho.
"¿Ves Potter? Te dije que te gustaría." Lo oyes decir al tiempo que él dirige una lasciva mirada a tu miembro.
Siempre que lo recordabas te sentías enfermo, sucio, asqueroso. Cómo te podía gustar aquello. Sin embargo, cada ocasión había una queda voz en tu mente que respondía que era por la costumbre, que al ser lo único conocido te hacía sentir cómodo.
No es que la voz ayudara a tranquilizarte, pero sí que era efectiva para dejar de pensar en ello.
Pronto, sientes su boca en tu entrepierna. Chupa, muerde, lame. Y tú quieres gritar, pedir más. Pero no puedes, ni siquiera puedes gemir.
¿Libertad? Ja, qué buen chiste. Sería lindo conocer su significado. Sin embargo, ¿cómo enfrentarse a ello si nunca te has preparado para hacerlo?
"¡Ey Potter! ¿Qué opinas si hoy no hay lubricante?" Lo oyes preguntar mientras te da un par de nalgadas y acerca su polla a tu entrada. "Cierto, por un momento olvidé que tú no puedes decidir."
Nunca antes te había quedado tu papel tan claro como en ese momento. Nunca nadie lo había explicado mejor.
"Eres un esclavo Potter, un simple esclavo. Y eres mío." Susurra junto a tu oreja, mientras lame tu lóbulo.
Y, por alguna extraña razón, el hecho de que alguien te lo diga directamente te excita demasiado.
No, nunca había importado el nombre que te habían dado, después de todo, la diferencia entre héroe y esclavo no existía, no en tu caso cuanto menos.
"No, tú no decides. Solo eres un esclavo."
Gracias por leer, comentarios y sugerencias son bienvenidos.
