Bueno aqui yo les e de traer mi seria tercer fic pero vamos a suponer que es el segundo xD bueno primero que nada e de decir que este fic ya estaba publicado en otro sitio el mismo que mi anterior fic de Naruto pero no lo termine por ciertos asuntillos, e de mencionar qe este es el mejor fic que pude hacer hasta ahora asi que espero que lo disfruten y e de agradecer a dos amigas ya que pues ellas pidieron que publicara el fic, la dulce Belle buena amiga jeje ^^ yy la amable Linda que agradesco mucho el agradecimiento de su capi anterior asi que esto es para distraer a las dos un rato jeje bueno sin mas ni menos eso era todo me olvidare de la nota de ultimo de momento que tengo prisilla jeje peeero e de mencionar que e de pausar un momento mi otro fic de Naruto sorry for that pero lo continuare lo aseguro.

Nota:tristemente los personajes de Naruto no son mios asi que bueno ni modo xD

Capitulo 1 Negocios.

Era un día lunes por la mañana en la hermosa ciudad de Tokio Japón, el día que la mayoría odiaba por el simple hecho de existir y otros solo lo odiaban por ser el día mas tedioso y cansado de la semana donde para los que trabajaban el trabajo y los pendientes estaban a tope.
Sobre todo para uno de los empresarios más ricos y exitosos de Japón….

—Tsk….Odio los Lunes…—se quejo un chico pelirrojo vestido de un traje negro muy formal, mientras caminaba a un elevador donde indico el piso veintitrés donde tenía que bajar.

El elevador solo subía muy muy lento parecía que realmente ese día no acabaría, el chico pelirrojo solo movía su pie con algo de fastidio mientras esperaba a su destino, hasta que por fin la puerta de dicho elevador se abrió en el piso veintitrés.

El chico solo camino a paso lento con sus manos en sus bolsillos y una expresión un tanto seria y de molestia por la recepción hasta llegar a donde se encontraba la recepcionista.

—Buenos días señor Sabaku No, hoy seria un día pesado. ¿Quiere que le diga los pendientes de hoy?—saludo la recepcionista muy amablemente, una chica de pelo café oscuro y ojos color chocolate con el cabello amarado en dos chonguitos.

—hm…buenos días TenTen…si es lunes lo se, pero al grano. ¿Qué pendientes hay para hoy?—cuestiono el chico con su misma seriedad.

—bueno señor, según esta agenda hoy tiene una reunión con el empresario de la otra compañía de vuelos y amigo suyo, una junta con otro de los empresarios a la misma hora con los dos y los currículos y chicas para el siguiente puesto para su secretaria.—informo la chica de chonguitos con algo de pesadez.

—Tsk…maldición…—maldijo por lo bajo el chico—me pregunto cuales solo me querrán rondar y cuales si tendrán cerebro…—fue lo ultimo que dijo sarcásticamente el pelirrojo para después solo partir camino a su oficina que era la que estaba al fondo de ese pasillo la mas grande y amplia.

Si el era rico muy y poderoso, muy apuesto y por supuesto lo tenia todo, dese auto caro y un celular de marca fina igual que su ropa hasta una casa muy grande y un montón de chicas a sus pies y su nombre era…

—hm… "Sabaku No Gaara, uno de los mas guapos y exitosos hombres de negocio por su gran compañía Alas de Suna para viajes."—leyó en alto el chico pelirrojo e una revista que estaba sobre su escritorio de Magazine, que tenia por titulo "Los Diez Empresarios mas Jóvenes, Guapos y Exitosos de Hoy".

Sabaku No Gaara, ese era su nombre, un hombre de negocios bastante rico y exitoso, de unos veintitrés años de edad muy joven para ser así de rico pero muy listo también, de un cabello rojo fuego y unos ojos verdes agua marina espectaculares, algo serio y frió junto con una vestimenta muy formal de traje negro que lo hacia verse aun mas irresistible ante las chicas, sinceramente muy sexy en todo el sentido de la palabra.

toc, toc …se oyó a alguien tocar la puerta de aquella oficina.

—Adelante…—dio el permiso el pelirrojo para que pasaran.

—Siento interrumpir señor Sabaku No, pero ya están llegando mas chicas para solicitar el puesto de secretaria..—informo TenTen con un tono algo bajo en su voz sosteniendo una agenda negra en sus manos.

—hm…buen día para que mi única secretaria renunciara…¿me podrías ayudar con eso TenTen? No estoy muy seguro de tener el tiempo y la paciencia de atender a todas esas chicas…—pidió Gaara con un cierto tono de fastidio en su voz mirando por las enormes ventanas de cristal de su oficina.

—Claro señor no hay problema pero…Hay dos cosas que quería comentarle sobre eso…—comenzó a mirar la chica de los chonguitos al suelo tratando de ver si podía ayudar a una de sus mejores amigas a conseguir trabajo.

—Claro…¿Qué ocurre?—pregunto Gaara algo serio.

—Pues…lo que pasa es que tengo una amiga que le interesa el puesto y necesita realmente un trabajo y me gustaría saber si hay alguna posibilidad de….

—¿De que le de el trabajo?—completo la frase el pelirrojo arqueando la ceja un poco.

—Pues si, usted vera es que ella vive sola y no tiene padres ni hermanos ni nada que se le perezca y bueno realmente necesita el…—fue interrumpida la chica por Gaara.

—Esta bien…—cedió Gaara con mucha facilidad muy tranquilo.

—¡De verdad! ¡Muchas Gracias señor!—agradecía TenTen muy feliz hasta que de nuevo Gaara interrumpió.

—Pero…tendrás que traerla aquí a las dos e la tarde, dile que venga y le haré unas cuantas preguntas para decidir lo…—informo Gaara con la misma seriedad.

—ou…etto…de…de acuerdo, y bueno cambiando de tema un poco, los otros dos empresarios llegaran en unos veinte minutos para su junta señor..—informo de nuevo TenTen algo tensa.

—Kso…se que este será un día muy largo…—maldijo Gaara por lo bajo algo fastidiado mientras tomaba asiento en su silla y se recargaba en su escritorio.

—Creo que no fue buen momento para que leidi Tsunade renunciara ¿Verdad señor?.—reía un poco la chica de ojos chocolate viendo la expresión de su jefe.

—eeeeh—suspiro el pelirrojo—Tiene todo el derecho lleva años trabajando aquí y manteniendo la empresa , realmente si no fuera por todo lo que hizo por mi yo no estaría donde estoy ahora…—recordaba el chico con un tono casi indetectable de alegría y tristeza en su voz.

—Ella es una gran persona…—comento TenTen muy alegremente.

—hm…si..lo es…bueno te puedes retirar TenTen.

—Si, Gracias señor, compromiso.—se dispuso a salir la chica del lugar dejando al Sabaku No pensando un poco.

—Tsk…son solo las diez y ya hay una fila entera de chicas en la calle…—decía para si el pelirrojo levantándose de su silla y viendo de nuevo por la ventana hacia la calle, donde había una fila enorme de chicas para el puesto de su próxima secretaria.

Mientras la chica de ojos chocolates caminaba de nuevo por la recepción a su puesto de trabajo mientras sacaba su celular, un Sony Ericson, y marcaba un numero algo desesperada.

—¡Maldición, mas vale que contestes el teléfono!—amenazaba TenTen a alguien mientras seguía sonando el tono de espera.

—mmm….¿si…diga?—contesto de el otro lado de la línea una chica y por lo visto estaba aun dormida.

—¡Maldición Matsuri, despierta ya!—grito TenTen desde su teléfono a todo pulmón algo enojada.

—¡TneTen! ¡yo Gome san!—se disculpo la chica del otro lado de la línea mientras daba un pequeño brinco en su cama sentándose en ella.

—¡Maldición Matsuri! ¡creí que había quedado claro que te levantarías Temprano!, ¡ahora hazme el favor de levantarte de tu cama bañarte y cambiarte!—gritaba eufórica TenTen bastante molesta ya que su amiga tenia la mala costumbre de levantarse tarde y llegar tarde a todo.

—¿por..por qué?—cuestiono la chica aun medio dormida tratando de despertar mejor, comenzando a tallarse los ojos.

—Por que tienes una entrevista con mi jefe, hoy a las dos de la tarde.—informaba TenTen apresurando aun mas a la chica.

—¿es…estás hablando enserio, TenTen?.

—Claro que si, el Señor Sabaku No cedió, ahora ¡Muévete!—grito de nuevo TenTen.

—¡si, si claro!, ¿a que hora dijiste?—cuestiono la chica aun sin poder creerlo.

—a las dos de la tarde, pero por lo que mas queras esta vez se puntual por primera vez en tu vida por que mi jefe odia la in puntualidad menciono la chica de los chonguitos para después solo colgar su teléfono y volver a su labor.

Mientras la chica del otro lado de la line, mas precisamente en su departamento colgó el teléfono algo apurada y emocionada.

—mmmm…¿Qué me pongo?, ¡No tengo ni idea de que ponerme!—gritaba la chica le cabello castaño por lo que se veía, mientras iba a su armario y comenzaba a sacar ropa lanzando la donde cayera buscando algo adecuado que ponerse.

Matsuri ese era su nombre, una dulce chica de unos veintitrés años de edad de pelo castaño claro muy lindo, que le llegaba a la altura de los hombros, una figura para presumir y unos ojos de color negro como la noche que reflejaban una alegría y felicidad inmensa, realmente una chica muy dulce, algo torpe pero muy tierna con una cara como de niña pequeña que causaba bastante ternura pero a la vez muy linda en todo aspecto.

—¡Perfecto!—exclamo la castaña encontrando el conjunto perfecto dejándolo en su cama para después solo partir a bañarse lo antes posible.

Mientras en el elevador de la gran empresa Alas sonde todo parecía estar muy movido se encontraban dos chicos bastante apuestos vestidos muy formalmente de traje, o por lo menos uno de ellos ya que el otro parecía tener un saco y corbata pero mal arreglada y algo aflojada discutiendo con el otro chico.

—Tsk…vamos Baka muévete…estas invadiendo mi espacio personal.—empujaba un chico de pelo negro algo serio por lo que se veía.

—¡ah! Cállate y muévete del otro lado Dobe. ¡No estas tan ancho como para no dejarme espacio!—alego el otro chico rubio de un aspecto mas alegre por lo que se veía.

—Cierra la boca y camina Baka que ya llegamos—ordeno el chico de pelo negro sacando al rubio del elevador a empujones.

—¡ah, ya deja de empujarme ya voy!—reclamo de nuevo el rubio algo fastidiado de los empujones.

—Hm…Dobe…—volvió a insultar el azabache deteniéndose en el puesto de la recepcionista.

—Tsk, buenos días TenTen ¿ podrías decirle a Gaara que ya estamos aquí?—saludo el chico rubio muy alegremente con una sonrisa mientras se recargaba en el escritorio de la recepcionista.

— buenos días señores, y bueno claro que si denme un momento..—saludo TenTen del mismo modo riendo un poco mientras tomaba el teléfono y marcaba un botón.

—¿si bueno?, a señor Sabaku no, los otros dos empresarios ya llegaron a la hora acordada ¿Les digo que pasen a su oficina?—se escuchaba la conversación de TenTen asintiendo con la cabeza mientras decía cosas como aja y de acuerdo hasta que colgó el teléfono después de unos minutos.

—hm…TenTen realmente no hay necesidad de tanta formalidad si ya nos conoces…—comento el chico de pelo negro muy serio pero normal.

—bueno la formalidad es parte de mi trabajo ya que no me queda otra opción y bueno en cuanto al señor Sabaku No….dijo que pasaran a su oficina..—respondió TenTen muy amablemente dejando pasar a los dos chicos.

—jeje muchas gracias TenTen y bueno no formalices tanto.—aconsejo el chico rubio despidiéndose con la mano mientras se dirigía a la oficina de el pelirrojo.

—hm…bien, ahora toca la puerta Dobe…—ordeno el azabache con mucha autoridad.

—tsk!….lo hago porque lo requiero no porque me lo mandas Baka…—respondió en un tono muy indignado el rubio mientras tocaba la puerta.

—Adelante…—se escucho la voz del chico pelirrojo del otro lado de la puerta dando permiso de entrar, mientras los dos chicos se limitaban a entrar.

—Hm….Naruto y Sasuke Uchiha …una sorpresa verlos por aquí….¿y bien que requieren?—saludaba muy serio Gaara viendo entrar a los dos nombrados ofreciéndoles asiento.

—hm…Gaara…te traemos una pequeña propuesta e inversión de negocios si así lo queras ver, que te hará mas rico de lo que ya eres a tu y por supuesto que a nosotros también…—tomo asiento el nombrado Sasuke Uchiha comenzando a explicar.

Un hombre de negocios con cierto poder y fortuna también, de unos veintitrés amos , de un cabello color negro como el carbón y ojos del mismo color, tez blanca y bastante apuesto con un traje negro de igual forma y con un carácter bastante serio frio e indiferente.

—si y bueno tal vez te interese..—se escucho ahora hablar al rubio llamado Naruto.

Un hombre de negocios igual que Sabaku No Gaara, encargado de la otra parte de la compañía de Alas que se hacía llamar Alas de Konoha se podría decir que el segundo jefe de la empresa.
Naruto Uzumaki ese era su nombre completo de la misma edad que Gaara y Sasuke , de cabello rubio y unos ojos color azul cielo bastante brillantes que tenían mucha alegría, con tres marcas en cada lado de sus mejillas parecidas a bigotes y de un carácter muy alegre y algo hiperactivo pero igual de apuesto.

—hm…no lo se convénzanme y podremos hablar mas a fondo de el tema…—dudaba un poco el pelirrojo apoyando sus brazos en su escritorio.

—bien, mira la idea es esta…yo podría actualizar mas tus aviones, tu entiendes con mas tecnología pero igual de seguros y claro yo me encargaría de parte de los gastos y revisiones de los aviones para crear mas fama a la compañía y novedad..—explicaba Sasuke serio como siempre.

—y bueno yo me encargaría de la otra parte de los costos y podría mover algunos contactos, ya sabes podría hacer que Alas de Suna y Konoha se extienda mucho mas y que sea reconocida mundial mente, pero eso requiere algo de tiempo y mucho efectivo…—explico también Naruto con seriedad algo raro en el.

—ya veo…pero no lo se…es cuestión de hacer mas inversiones en algo que nos beneficie y realmente no se que tan seguras estén en estos días…—dudo de nuevo el pelirrojo cruzándose de brazos.

—Mira Gaara tu piénsalo te doy de aquí a am…no lo se el miércoles, además es una buena forma de agrandar el negocio primero se empieza con calidad y bueno ero sennin estoy muy seguro de que estaría feliz con esto.—se rascaba un poco la cabeza Naruto diciendo eso muy feliz.

—¿Y eso de que me sirve?, claro a menos de que quite esa maldita regla de que todas las secretarias y chicas de la empresa tengan la falda cinco dedos arriba de la rodilla.—Respondió Gaara con mucha seriedad.

—hm…si esa regla de el muy pervertido solo la hizo para el y para colmo nosotros ya no la podemos quitar…—se pudo de acuerdo el azabache con la misma expresión de seriedad que Gaara.

—lo se maldito pervertido… Pero cambiando de tema, Oe Gaara, ¿estas buscando nueva novia? Por que si es así te tomara un buen rato—rio Naruto un poco al notar la inmensa fila de chicas de afuera al llegar.

—hm…Baka…no, ya sabes que no tengo novia y que probablemente no tendré, es para el puesto de mi nueva secretaria…—explico Gaara con mucha tranquilidad.

—¿Cómo que nueva secretaria?, ¿¡La abuela renuncio!?—grito Naruto a todo pulmón muy sorprendido al escuchar aquello.

—hm…si..apenas fue el viernes que renuncio y bueno necesito a alguien mas para que me ayude.—explico de nuevo Gaara con el seño fruncido por los gritos del rubio.

—¿¡Pero por que!?—se quejo Naruto al mismo tiempo que preguntaba.

—eeeh….—suspiro el pelirrojo—Naruto…ella ya trabajo mucho tiempo con nosotros y nos ayudo demasiado , tiene derecho a renunciar.—fue lo único que dijo Gaara aun sin perder la postura.

—…..supongo que tienes razón….ella nos ayudo demasiado….—recordaba Naruto con algo de tristeza y alegría.

—asi es…

—¡bien entonces con mayor razón hay que levantar mas la empresa!—grito el rubio con mas ánimos que antes.

—hm…pero ya no grites…—llamo la atención Sasuke.—¿y bueno ya candidata para tu secretaria, Gaara?.

—La verdad es que….no, realmente ni e empezado a buscar.—contesto con mucha sinceridad Gaara con algo de molestia en su tono de voz.

—hm…ya veo…mira yo también necesito una nueva secretaria para mi empresa asi que si tu mismo entrevistas a esas chicas , busca una que se acomode a lo que yo requiero, tómalo como un favor.—pidió Sasuke recargándose en el respaldo de su silla.

—…lo que te acomode…de acuerdo…—repitió Gaara dispuesto a ayudar a Sasuke.

—hm…bueno gracias Gaara, pero creo que ya es momento de irnos tengo unos trabajos pendientes y ya que ya negociamos nos retiramos.—se levanto de su silla Sasuke acomodándose un poco el saco.

—si, yo también tengo algunos pendientes así queeeee…—se escucho a Naruto alargar un poco la última palabra sintiendo una vibración en su pecho.—tsk…mi celular, un momento disculpen…—se disculpo Naruto con los os chicos sacando su celular del bolsillo interno de su saco para después contestar, un celular algo caro era al parecer una Black Berry cuatro.

—¿si diga?—contesto el rubio su teléfono sorprendiéndose un poco al oir la voz al otro lado del teléfono.

—¿Naruto?—se escucho una voz familiar para el rubio del otro lado de el teléfono dejándolo un momento petrificado.