Los personajes no me pertenecen a mi si no a la señora JK Rowling, claro excepto los que no conoscan
Saliendo del hospital iba una joven de aproximadamente 19 años, iba con una sonrisa en labios, caminaba con mucha prisa por que había quedado con su novio de comer en un restaurante cerca, porque le había mandado una lechuza donde le decía que le tenía una noticia muy importante que darle y ella también tenía una noticia que sabía que haría feliz a su novio.
El nombre de la chica, Lily Evans era medimaga, y trabajaba en San Mungo, cabello rojo largo hasta la cintura, ojos verdes esmeralda, alta, figura esbelta y muy hermosa, era muy buena en su trabajo y muy querida por sus compañeros de trabajo en especial por el director del hospital que estaba completamente enamorado de ella. Su novio era James Potter, era auror, jugaba quidditch en sus ratos libres, por lo cual tenía un cuerpo de infarto, con músculos muy marcados, su cabello lo más característico de él alborotado y de color negro azabache, sus ojos de color café como chocolate derretido, muy atractivo y popular en su trabajo, aunque también llamaba la atención donde quiera que fuera.
Por lo visto ese día iba a ser un día de noticias ya que a pesar que no pasaban de las 2 de la tarde ya había recibido 2 noticias una la más importante de toda su vida y la más hermosa que alguien habría de recibir.
***flash back***
Llevaba días sintiendo se un poco mal, pero no había querido preocupar a su novio así que decidió ir primero al doctor y hacerse unos análisis para ver que tenia, y ahí iba, caminando despacio al consultorio de sus amigo y colega y jefe ya que era el director del hospital.
- Buenos días doctora Evans, el doctor Sanders la está esperando- dijo con una sonrisa la recepcionista.
- Muchas gracias Ann- dijo la pelirroja correspondiendo a la sonrisa, y caminando a la puerta.
- Hola Mike buenos días, ¿como estas? Ya te traje los resultados de mis exámenes.
- Si Lily, siéntate, estoy bien gracias y tu como te has sentido- dijo el abriendo el sobre que le había dado ella.
- Pues igual con muchas nauseas en la mañana y ya pero pues es solo cuando me levanto y uno que otro mareo durante el día pero nada del otro mundo aparte de eso.
- Qué bueno, por cierto hoy recibí un fax de Sídney Australia
- ¿Enserio? Y ¿que decía?
- Que necesitaban un director para el nuevo hospital que van a abrir y pues me dijeron que si había en el hospital alguien con la capacidad de dirigir el hospital
- Órale o sea que vas a irte para allá Que vamos a hacer sin un jefe como tu ¿eh? Y ¿cuando te vas? - dijo Lily con una sonrisa en labios
- Espera Lily, nadie dijo que yo me iba a ir, decía que si había ALGUIEN en el hospital, y pues bueno estaba pensando que quizás a ti te gustaría el puesto, mira no te estoy presionando, que te parece si vas a casa y lo piensas y lo platicas con tu novio y mañana me dices si aceptas o no el puesto ¿ok?- dijo el doctor mirando con una sonrisa el papel de su mano que confirmaban sus sospechas - y respecto a tus exámenes solo tengo que decir que no hay nada malo en ti solo que tienes los síntomas normales de un embarazo, felicidades pelirroja.- dijo levantándose para abrazar a la chica.
Lily todavía estaba en shock aunque tenía una sonrisa en labios, embarazada ¿ella?, de… ¿james?, reacciono cuando sintió el abrazo de su colega y casi se pone a saltar - no puedo creerlo, te juro que no me había pasado por la cabeza ese resultado, gracias Mike, y respecto a la propuesta solo te prometo que lo pensare y la comentare con James pero no te aseguro nada-.
***fin del flash back****
Más tarde le llego la lechuza donde le decía james que tenían que hablar en el restaurante al cual se dirigía en esos momentos. Miro su reloj las 2 en punto quizás ya hubiese llegado o quizás ¿no? Solo le quedaba dar la vuelta a la esquina y lo sabría antes de entrar ya que si había llegado lo vería por el gran vidrio que tenía el lugar. Y al dar la vuelta lo vio, sentado en una mesa pero no solo, estaba con una chica que había visto un día cuando fue con él a su trabajo no se acordaba como se llamaba pero eso era lo menos que le importaba, ahí estaba el besándola y ella sentada en sus piernas revolviéndole su cabello.
Se quedo parada viendo la escena, y una lagrimas se resbalaron de sus ojos, y sus manos se fueron directo a su vientre acariciándolo.
- No te preocupes mi bebe vamos a salir a delante, no necesitamos de él para nada, y por lo visto iba a terminar nuestra relación por irse con esa- para esto ya iba de regreso para el hospital, pero decidió quedarse un momento en el parque cercano. - no creo que le importáramos mucho, creo que voy a aceptar el trabajo que me ofreció Mike y así podremos empezar una nueva vida.- se seco las lagrimas y siguió su camino al hospital.
Se dirigió a la oficina del director.
- Hola Ann ¿esta Mike dentro?
- Si doctora pase.
- Hola Mike ya regrese y ya te tengo una respuesta - cerro los ojos y vio otra vez la escena, suspiro, para no dejar escapar lagrimas - acepto el trabajo en donde sea.
- Lily ¿estas bien?, quiero decir, te ves mal ¿sucedió algo? ahora vete a casa y ya mañana me dices, no tomes así una decisión no importa lo que haya pasado.
- No Mike ya tome mi decisión, me voy a ir ¿ok? Me voy a mi casa pero a recoger mis cosas, esta bien que me vaya mañana para allá
- Si pero no hay por que apresurar… - la frase se quedo en el aire al ver la mirada fría de la pelirroja - avisare que llegaras mañana allá voy a reservar un lugar en el translador de las 10 de la mañana.
- Si esta bien muchas gracias Mike, por cierto no quiero que nadie sepa donde estoy y te agradecería que guardaras el secreto y otra cosa el lugar en el transbordador resérvalo con el nombre de Chantal Brooke.
Lily se fue a su casa, y recogió sus cosas con algunos hechizos, acomodo todo, lo minimizo, y los guardo en su bolsa, se fue a un hotel en el mundo muggle donde se registro con el nombre de Chantal Brooke.
James estaba preocupado, Lily no había llegado a la cita a la hora de la comida, justo el día que se había decidido en pedirle matrimonio, cosa que no se había llevada a cabo por que ella no había llegado.
Sirius su mejor amigo de todo el mundo, un joven alto de cabello ligeramente largo, de porte atlético, muy, muy pero muy guapo, de unos hermosos ojos grises, le dijo que no se preocupara que quizá había tenido mucho trabajo que no había podido salir a comer, sin embargo, aunque parecía una razón lógica, James no la acepto ya que cuando eso sucedía ella le avisaba. Así que decidió ir a buscarla al día siguiente acompañado de Sirius.
Cuando llegaron al hospital la enfermera de turno no les supo dar razón y les dijo que el director del hospital no se encontraba, así que se fueron al departamento que rentaba Lily, del cual James tenía llaves, entraron y oh sorpresa estaba vació.
-pero que…- dijo un James aturdido entrando al departamento.
-…..- entrando después de su amigo- que paso acá, por que no está la pelirroja- dijo Sirius que estaba igual que su amigo.
- ¿puedo ayudarles en algo señores?- dijo una voz de mujer desde la puerta- ah buenos días señor Potter.
- buenos días señora Hicks- dijo James dirigiéndose a la mujer reconociéndola como la casera de Lily (en realidad ex casera pero bueno)- vine a buscar a Lily pero su departamento está vacío.
- pues la señorita Evans ayer me dijo que iba a desocupar la habitación y en la noche me entrego las llaves y se despidió.
-no, no puede ser- se decía James a cada palabra dicho por la señora, no podía crees que su Lily se hubiese ido y el no por enterado, lo había dejado y no había dicho nada-¿le dijo a donde?
La mujer solo negó con la cabeza, Sirius reaccionando antes que su amigo lo tomo de los hombros y se despidió de la señora se desaparecieron de ahí y se fueron a casa.
James no cavia todavía en la noticia, estaba ido y no tenia cabeza para nada, en esta solo estaba el por qué Lily se había ido asi sin avisar, si decirle por que se iba, alguna razón, excusa o lo que sea, y el la amaba y ella también a él, cuantas veces había hablado de formar una familia, sus hijos, y ellos dos, ¿donde estaban esos planes?, donde estaba todo lo que habían platicado tantas veces cuando todavía estaban en Hogwarts
Lo mismo pensaba Lily, sentada en la estación de transbordadores, esperando la salida del suyo, cuantas promesas y ninguna cumplida, pero no se iba a dejar caer por algo asi, claro que le dolia, era humana, sin embargo ya había alguien mas en su vida alguien igual o incluso podría llegar a ser mas importante que James, su hijo, su bebe, y el ahora necesitaba de ella y ella de el asi que por el y por ella misma no se iba a dejar caer, tenia que estar bien para su bebe por que el sería muy feliz.
-pasajeros del translador de las 10 AM con destino a Sídney favor de pasar por la puerta 3.
Lily se levanto y vio a Mike que la había ido a despedir que la miraba con tristeza y preocupación, no había mencionado la ausencia de James ahí asi que supuso que era la razón por la cual la pelirroja había hecho lo que había hecho, cuando oyo el anuncio se levanto y le dio un gran abrazo y le acaricio el cabello y le dio un beso en la cabeza, después se separaron.
-cuidate mucho ¿si? Cualquier cosa que necesites, sabes dónde voy a estar, cuídate y cuida a tu bebe
-si muchas gracias por todo Mike, perdóname por lo que voy a hacer pero es necesario para que no me encuentre y no me haga mas daño. -separo enfrente de el saco su varita y lo apunto, luego dijo claro y fuerte- obliviate- un destello salió de la varita y ella agarro su bolsa y se fue, dejando a Mike todavía en transe, quien ya no la alcanzo a ver cruzar la puerta.
A las 10 en punto partió el transbordador y Lily con el, dejando toda su vida, y su dolor ahí con la esperanza de poder rehacer su vida al lado de su hijo que en unos meses nacería, eso era su bebe una esperanza, y como había decidido cambiar de nombre el nunca la ubicaría
Llegando con una nueva historia ya la tenia pero no la habia publicado aqui, espero que sea de su agrado
AMY
