Disclaimer: Naruto no me pertenece, pertenece a Masashi Kishimoto, Karatsu es el personaje que he creado para este Fic, así que espero que disfruten con la historia, y si no lo hacen diganmelo ya que todavía estoy empezando y necesito experiencia; comenzamos.

A veces hay cosas que las palabras no pueden expresar

Prologo

El demonio de las 7 colas

Hace miles de años los demonios caminaban libres por el mundo matando cuando querían a los humanos, solo unos pocos podían oponérseles, eran los ninjas.

Sin embargo de entre todos los demonios nueve de ellos destacaron especialmente por su inmenso poder, eran los bijuus, su increíble crueldad y fuerza los hacían terribles guerreros y eran temidos por todos los países.

El más poderoso de los nueve bijuus era el invencible Kyuubi no Kitsune, cuya sed de destrucción era tan grande que se decía que le hacia imposible de ser derrotado, tal era su poder que había conseguido autoproclamarse rey de los demonios.

A sus ordenes estaban infinidad de demonios, pero el más leal de todos era el bijuu de las 7 colas, el poderoso Karatsu no Wolf, su poder no era tan grande como el de su señor, pero lo que realmente aterrorizaba a sus enemigo no era su fuerza sino su gran inteligencia.

Karatsu era el más inteligente de todos los bijuus, lo cual le había permitido conseguir todo el poder que ahora poseía, se decía que tal era su inteligencia que podía predecir cualquier movimiento por parte del enemigo incluso antes de que este pensara en él.

Pero lo más irónico, fue que su poder, su inteligencia, aquello que mas atesoraba fue la causa de su caída. Ya que Kyuubi temiendo que su siervo le traicionara decidió sellarle en un cuerpo humano.

Y así Karatsu se convirtió en un Jirinchi, pero usando su inteligencia consiguió expulsar el alma humana del cuerpo en el que había sido sellado, y entonces juró vengarse de aquel que antaño fue su señor y acabar con él.

Pero a pesar de su gran poder e inteligencia, sabía que no podría vencerle encerrado en el cuerpo de un humano, por eso, con el paso del tiempo, decidió que primero obtendría todas las técnicas ninja que pudiera para así poder acabar con él.

Conforme los años pasaban sus conocimientos del mundo humano y sus técnicas ninjas fueron aumentando progresivamente, pero cuanto más aprendía de los humanos más humano se hacía, hasta que llegado el momento cayo presa de sus emociones humanas, se enamoró.

Se casó y tubo varios hijos, se podía decir que su vida había alcanzado una relativa felicidad, sin embargo le duró bien poco ya que a los pocos meses más bijuus fueron sellados en humanos, y a él y a las personas que amaba se les empezó a considera como armas, o peor como enemigos que merecían morir.

Cuando una noche Karatsu regreso al lugar donde vivía con su clan, se quedo paralizado al encontrárselo en llamas, cuando se acercó a ver que había sucedido encontró los cadáveres de sus seres queridos esparcidos por todo el lugar y una gran cantidad de personas llevando armas ensangrentadas.

Y entonces lo vio, tan claro como si lo hubiera presenciado. Vio a sus seres queridos siendo asesinados por aquellos que ahora le dirigían miradas de puro odio.

Fue entonces cuando Karatsu, un ser que jamás había cedido totalmente a las emociones por considerarlas inútiles e incluso peligrosas, se dejo embargar totalmente por ellas, llenándose de odio, ira y dolor.

Las gentes se lanzaron al ataque contra él gritando maldiciones, pero cuando estaban a punto de tocarle, éste desapareció en una explosión de humo negro, antes de que se quisieran dar cuenta, éste había aparecido a sus espaldas.

Pero esta vez no se lanzaron contra él, estaban paralizados de terror, los ojos de aquel ser, que ahora se hallaba ante ellos, no mostraban sentimiento alguno y de su cuerpo salían como una especie vapores tóxicos, de repente empezaron a salir más y más vapores hasta que su cuerpo quedó completamente cubierto por ellos.

A la mañana siguiente, no quedaba nadie vivo en el lugar, sólo una inmensa cantidad de cadáveres ensangrentados, a unos pocos kilómetros, un ser se movía oculto entre las sombras, era Karatsu, pero a pesar de las penurias por las cuales había pasado su cara y su mirada no mostraban dolor, en realidad no mostraban emoción alguna, su rostro se había quedado congelada en una mueca de absoluta seriedad.

Para Karatsu ya no quedaba nada por lo que vivir, a pesar de que había conseguido saber que algunos de sus descendientes habían conseguido huir, decidió que era mejor no acercarse a ellos, ya que si la gente descubría que eran sus descendientes los matarían sin piedad.

Por eso se alejó de las ciudades humanas entrando solo en ellas para adquirir nuevos conocimientos y técnicas. Con el paso del tiempo solo una idea perduraba en su mente tras la muerte de aquellos que alguna vez le habían importado, y cada vez repercutía con más fuerza en su cabeza, lo único que le quedaba, aquello por lo cual desde un principio había luchado: "La Venganza".

Notas del autor: Este es mi primer Fic, espero que les guste, díganme su opinión para que así pueda mejorarlo, o adaptarlo.