Los personajes de esta historia no son míos pertenecen a la gran Rumiko Takahashi, que nos dejó con trauma emocional por no terminar la historia. Yo solo tomé prestado sus personajes sin fines de lucro, solo para entretención.

-Los personajes hablan-

- "los personales piensan"-

La gota que rebalsó el vaso

-¡Aléjate de mí!

-¡Akane espera! ¡No me dejes hablando solo! ¡Te estoy hablando, maldita sea! ¡Tienes que escucharme, no es lo que parece! ¡Fue un mal entendido!.

Una furiosa peliazul se giró bruscamente quedando cara a cara con su prometido- ¡¿Un mal entendido?! ¡¿Ver como besabas a Ukyo es un mal entendido?!. Puedo ser ingenua Ranma, pero no soy tonta…Además que mi vista está perfectamente, ¡Y los vi!- Las lágrimas luchaban por salir de sus hermosos y expresivos ojos de color chocolate, pero no quería desmoronarse enfrente de su prometido, enfrente del hombre que amaba con locura.

-Akane, por favor, déjame explicarte- El joven se pasaba las manos por su cabello intentando con ese gesto de nerviosismo y desesperación encontrar las palabras exactas para explicar lo ocurrido- Yo no la besé, estaba desprevenido, ella simplemente se acercó a mí y me besó, cuando reaccioné la alejé sin contemplaciones. Sé que pareció que yo la besaba pero no es cierto- No reconocería que tenía la guardia baja pensando en la bella imagen que presenció la noche pasada, cuando por esconderse de la molesta amazona entró por la ventana de la habitación de su prometida, y la encontró ahí durmiendo en su cama con solo una delgada y larga blusa, que por la posición estaba enrollada en su cintura, dejando al descubierto sus torneadas piernas y su tentador trasero.

Estuvo varios minutos parado al borde de la cama contemplándola, luchando con el deseo de despertarla y reclamarla como su mujer. El tiempo no había pasado en vano, ya no eran esos niños que discutían por todo sin motivo, sus cuerpos y mentes habían cambiado, ya con 20 años eran otros los intereses y necesidades. Las constantes peleas habían desaparecido, reemplazándolas por discusiones donde los celos predominaban, por ambas partes. Él reconocía su vuelco sumamente posesivo con su prometida, la vigilaba y cuidaba de todo y de todos, y ella también contribuía a sus quejas cuando alguna mujer se les acercaba. Aunque ambos eran conscientes de que se celaban mutuamente, no han dado el gran paso de reconocer lo que sienten. Sin embargo, curiosamente sus cuerpos si se pronunciaban, ya no era sencillo estar en la misma habitación sin que se generara esa tensión sexual, era un llamado primitivo, que ambos intentaban ignorar, pero que algún día su autocontrol no respetaría.

-Déjalo, está discusión me agota, tú siempre negarás los hechos. Quiero ir a mi habitación a descansar.-

-Akane-

-Basta, solo déjame en paz- Se volteó subiendo las escaleras camino a su recámara, no miró atrás, si lo hubiese hecho se habría percatado de cómo un acongojado ojiazul intentaba expresar con su mirada lo que su corazón sentía.

-Maldición- Apoyándose en la pared luchaba por encontrar la fortaleza que en esos momentos le faltaba-"¿Por qué no me cree? Ukyo fue quien me besó, yo ni me percaté. Mucho menos sentí algo, su beso no me provocó nada…Soy un imbécil, ¿cómo no me imaginé que algo así podría pasar, y los dioses se confabulan contra mí, justo en ese momento tenía que estar cerca Akane…mi amor, mi terca marimacho…jamás besaría a otra mujer que no fueras tú, si supieras como anhelo tocar esos labios llenos, tan tentadores, me imagino que deben ser suaves y adictivos…no sabes las inmensas ganas que tengo de ti… si solo fuera capaz de confesar lo que siento…"

-¿Ran-chan?- La chica de la espátula lo observaba a la distancia. Escuchar su cariñoso apodo lo sobresaltó y a la vez enfureció.

-¿Qué quieres Ukyo? ¿ Y qué haces aquí?. No has sido invitada para entrar en la residencia Tendo- La habitual amabilidad hacia su amiga de la infancia se esfumó de sus palabras para ser reemplazada por un tono adusto.

-Yo..yo necesito…explicarte lo que pasó en el patio de la universidad- Los jóvenes más famosos de Nerima habían continuado sus estudios después de finalizar la preparatoria. Ranma se decidió a estudiar educación física, más bien era la única alternativa que tenía, ya que nunca fue muy aplicado con los estudios, y optó por esa carrera por la gran cantidad de clases prácticas que poseía, e internamente quería estar más preparado para dirigir el dojo algún día. En cambio su prometida, quien si era buena estudiante, ingresó a la carrera de kinesiología, ya que deseaba combinar sus gustos por las artes marciales con el área médica. Muchos de sus amigos también asistían a la misma universidad como Hiroshi, Daisuke, Yuka, Sayuri, e incluso Ukyo, cada uno en distintas carreras, pero habían tenido cursos juntos y se veían frecuentemente.

-¿Qué me vas a explicar?, ¿Qué me besaste sin mi consentimiento, aún sabiendo que no siento lo mismo por ti?...Ya lo habíamos conversado, pensé que habíamos aclarado nuestra relación, fui claro en decirte que solo podíamos ser amigos U-chan- Al final de su discurso fue logrando serenarse.

-Lo sé…solo que yo necesitaba saber que era poder besarte…sé bien que yo no soy la elegida, y que tu amas a Akane…pero solo deseaba…Olvídalo, lamento lo que pasó…- Se abrazó a si misma para no demostrar debilidad, pero ese ligero movimiento le provocó un dolor intenso en su costado, cosa que fue percibida por el ojiazul.

-¿Qué tienes? ¿U-chan, qué ocurre?- Preguntó preocupado.

-Nada olvídalo…solo es un pequeño malestar…regalo de la amazona loca. Digamos que presenció nuestro beso, es decir mi beso- Se rectificó de inmediato ante la cara de molestia del muchacho- Y como siempre quiso vengarse y nos enfrentamos en una pelea, creo que debes estar pendiente de ella, puede intentar desquitarse contigo también-Bajó su mirada apenada ante la situación.

-Está bien, estaré atento- Un incómodo silencio se instauró en el lugar, que fue roto por el joven Saotome- Es mejor que te vayas, no quiero más problemas Ukyo. Hablamos otro día-

-Entiendo, nos vemos Ran-chan-


-Shampoo odiar con todo el corazón- Algunos platos eran estrellados contra la pared, ante la atenta mirada de la anciana Cologne, quien no hacía nada para evitarlo. Solo escuchaba los descargos de su nieta, evaluando la situación. Cuando la muchacha se calmó y sentó bruscamente en el suelo, la vieja amazona decidió hablar.

-Según lo que entiendo de tu ataque de ira…Es que tu prometido estaba besándose con la cocinera, que el beso fue breve, y que él salió detrás de la joven Tendo cuando se percató que ella presenció el hecho. Momento en el cual tú atacaste a Ukyo ¿verdad?- Ante su pregunta solo obtuvo un resoplido de afirmación.

-Si es así no veo el problema- Quitándole importancia al asunto, comenzó a preparar la cena.

-¡Como decir eso abuela¡ ¡Airen probar los labios de otra mujer¡ ¡Shampoo ser la única digna de ese honor¡-

-Mi queridísima nieta, ya me estoy cansando de esta situación. Te voy a explicar algo y quiero que me prestes atención para que lo entiendas- Mirando intensamente a la aludida continuo con sus palabras- Mi fututo yerno es un hombre complejo, pero simple a la vez. En estos años lo he aprendido a conocer mejor, él es tímido aunque pueda enfrentarse ante los mayores peligros, es un hombre fuerte pero necesita a una compañera de temperamento fuerte que lo guie, pero a la vez que sea dulce y tierna. No le gustan las mujeres atrevidas, que se exhiban ante los demás, ante esto es muy celoso y territorial. ¿Me entiendes verdad?. Por eso la cocinera no es una amenaza…quien realmente es peligrosa es Akane Tendo-

-Pero…pero chica violenta no tener los encantos de Shampoo- Acentúo sus dichos levantándose del suelo para indicar sus atributos físicos-

Con un suspiro cansado la matriarca se armó de paciencia para intentar explicarse mejor- Si pusieras atención a lo que digo, te habrías percatado que no mencioné belleza física. Para tu Ranma eso no es primordial, o si no ya estarías casada…Hazme caso y preocúpate de la menor de los Tendo-

-Pero abuelita, yo intentar alejar a chica violenta de mi amado airen en varias ocasiones, pero nada funcionar- Se quejaba la bella amazona.

- Es secreto es convertirla en algo que Ranma deteste, o mejor aún en alguien en quien no confíe y que deshonre a la familia-

-¡Ayudar a Shampoo por favor¡-

-Tienes suerte de tenerme querida nieta, he estado preparando algo para ti- Se subió a un taburete para alcanzar una repisa, de donde extrajo dos diminutos frasco del interior- Los conseguí en el mercado, es algo sumamente difícil de obtener, pocos en el mundo saben de esta pócima milenaria. Este recipiente rojo contiene el brebaje que te ayudará, está formulado a base de hierbas y algunos ingredientes secretos, provoca en quien lo beba la liberación de sus inhibiciones y que aumente su nivel hormonal, más específicamente su apetito sexual. Aunque su grado de efectividad es variable según la persona- La joven la miraba encantada, ideando su propio plan en su cabeza.

-Entonces tener que darlo a mi airen para que sea cariñoso con Shampoo-

-No, esta pócima tiene efecto solo en mujeres...Si decides usarlo tendrás que dárselo a Akane, como ves es poco volumen, solo son un par de gotas. Esto generará que la muchacha libere sus instintos más básicos, y busque compañía masculina, lo que enfurecerá a Ranma, y si tienes suerte él romperá el compromiso impuesto por sus padres, por insinuarse y estar con otro hombre. Nadie perdonaría una afrenta de esa magnitud…Existe el riesgo que Akane logre seducir a mi futuro yerno, por eso debes pensar muy bien si te arriesgas al plan.

-Eso no pasar, mi airen no encontrar atractiva a chica violenta- Dijo muy convencida.

-Una nunca sabe...-

-No preocupar por eso, confiar en Shampoo. Lo que no entender es por qué dar antídoto-

-El antídoto vuelve a la persona a la normalidad, sin recordar nada de lo ocurrido después de beber la pócima. Si ella no recuerda lo que hace, se sentirá ofendida por las acusaciones en su contra, queriendo romper también el compromiso.

-¡Abuelita ser un genio¡Con esto lograr separarlos¡


Haber llorado tanto tiempo solo logró que sus ojos dolieran, pero no consiguió calmar su corazón. Recordar lo ocurrido traía más tristeza y desazón. Quién diría que un día aparentemente normal se convertiría en algo tan espantoso, la imagen no se borraba de su mente, ver como su prometido besaba a la castaña le dolió demasiado. Aunque técnicamente solo fue un contacto de labios muy breve, el saber que había sucedido, la enfurecía y entristecía a la vez.-"¿Por qué tuvo que pasar aquello? Que no daría yo por poder besarlo, por saber a que saber sus besos…pero no fui yo quien lo supo…¡Malditos¡…¿Por qué ….yo no puedo ser…tan lindas como ellas?...Tiene tantas prometidas y admiradoras…¿Quién soy yo para competir?...nada no soy nada…soy tan corriente, simple…aunque mi cuerpo ya no es de la niña de 16 años, no puedo compararme con ellas…Ranma…Ranma…me gustaría tanto creerte, y pensar que tú no la besaste…que fue un beso robado…pero…pero tú siempre estás en guardia, tus instintos y reflejos de artista marcial te hubiesen permitido esquivarla…pero eso no ocurrió…No quiero pensar más, necesito recuperarme…necesito descansar, será mejor dormir quiero que este día finalice pronto"-

Acomodándose en su cama la bella joven de ojos achocolatados se rindió a los brazos de morfeo.

Varias horas después, se observa una figura curvilínea entrar a la habitación de la menor de los Tendo, se acerca sigilosamente a la muchacha tendida en el colchón, verificando que estuviese dormida, para luego abrirle ligeramente los labios, y depositar varias gotas en su boca.


Sé que no he finalizado ninguna historia, pero es que tengo esta idea en la cabeza hace mucho tiempo, y necesito plasmarla en un papel. Espero que sea de su agrado.

Besos enormes.

Alisson.