Los personajes de Candy Candy son propiedad de Kyoko Mizuki y Yumiko Igarashi y TOEI Animation Co., 1976. Usados en este fic sin fines de lucro.
*Capitulo 1: Dejando atrás los recuerdos
Después de los funerales de Anthony, en la Mansión Lakewood se respiraba un ambiente de tristeza y melancolía. Todos sufrieron mucho por la pérdida del infortunado joven y desde ese momento la vida de todos se vio afectada drásticamente.
Candy decidió abandonar la Mansión y se dirigió al Hogar de Pony. La chica quería sanar sus heridas y pensó que sería mejor hacerlo alejada del lugar donde había tantos recuerdos de Anthony.A Stear y Archie les tomó por sorpresa la decisión de Candy, pero decidieron respetar su decisión. Ellos también tendrían que darle un nuevo giro a sus vidas y elegir el nuevo camino a seguir.
Ambos se encontraban en la terraza charlando, ya habían pasado unos días desde la partida de la chica
-¿No crees que deberíamos ir a buscar a Candy?, ya hace días que se fue...- decía preocupado Archie
-Pienso que es mejor darle tiempo, todo es muy reciente...- decía Stear mientras se puso de pie y se dirigió a la barandilla mirando al Rosedal
-Es que...me preocupo mucho por ella Stear- y bajando la mirada agregó -También la extraño...-
Stear volteó a mirar a su hermano. Sabía que Archie sentía algo especial por la pequeña y aunque no se lo había dicho abiertamente, conocía perfectamente a su hermano; definitivamente a Archie le gustaba Candy.
-Todos la extrañamos pero hay que darle tiempo a que olvide lo del accidente- agregó con seriedad Stear
-Pero...¿Crees que Candy alguna vez pueda olvidar a Anthony?- y miró a su hermano de frente
El mayor de los Cornwell no supo que responder, lo que Candy sintió por Anthony era muy especial y sabía que la chica no olvidaría tan fácil el cariño que su primo y ella compartieron.
Miró a su hermano con seriedad y sabiendo que necesitaba apoyo le dijo
-El tiempo es el mejor remedio en estos casos...- y se giró a mirar al jardín -Sólo Candy decidirá eso...pero, olvidar a alguien como Anthony no será cosa fácil...él era muy especial...- y miraba las rosas con tristeza
-Anthony...no se si yo podré olvidarlo...- agregó Archie melancólicamente
-Debemos ser fuertes y seguir adelante Archie...no podemos quedarnos aquí por siempre lamentando su muerte...-
-Tienes razón...-
Y ambos hermanos meditaban que aún cuando estaban de duelo por la pérdida de Anthony, pronto tendrían que decidir que es lo que harían con sus vidas. Y curiosamente, la Tia Abuela pronto decidiría por ellos.
La Sra. Elroy estaba muy triste por la pérdida de su sobrino favorito. Llevó consigo el duelo por días y se confinó en su habitación. La melancolía que sufría no la dejaba pensar en nada más que en Anthony, pero la matriarca sabía que no podía seguir así por mucho. Ahora que Anthony no estaba, tendría que decidir que haría con los demás sobrinos y con Candy.
No había tomado de muy buena gana la decisión de la chica en dejar súbitamente la Mansión y dirigirse al Hogar, pero entendió que la muchacha estaba dolida y que visitar el lugar donde se crió le ayudaría a sanar su tristeza. Le daría tiempo para eso, pero la haría volver pronto ya que ahora era parte de la familia y su lugar era al lado de los Ardley.
Fue después de las Navidades que la Tia Abuela mandó llamar a George. El fiel asistente del Sr. Williams llegó a la mansión para recibir instrucciones de la anciana y esa mañana se entrevistó con ella
-George,te he mandado llamar porque he tomado una decisión con respecto a Candy y los otros chicos- dijo seriamente sentada detrás del gran escritorio -Como esta casa está llena de los recuerdos de Anthony, he decidido que todos nos mudemos a Chicago...-
-Como usted diga Sra. Elroy...¿Para cuándo planean mudarse?- preguntó seriamente
-Pienso hacerlo después del Año Nuevo...Te mande llamar porque quiero que vayas al Hogar de Pony y lleves a Candy a nuestra Residencia en Chicago, yo iré con Stear y Archie-
-Así se hará, pero...¿y si la Srita. Candy se niega?- George sabía que existía esa posibilidad
-Le dirás que es una orden del Abuelo Williams- dijo secamente
-Entiendo. No se preocupe, saldré de inmediato y llevaré a la Srita. Candy a Chicago como me lo ordena- se levantó saliendo del lugar.
La Tia Abuela sabía que Candy era obstinada, rebelde y que tal vez hasta se rehusaría a ir a Chicago. Pero confiaba que George sabría convencerla. Se levantó y mando llamar a sus sobrinos, era el momento de que también ellos supieran lo de la mudanza a Chicago.
Los dos hermanos entraron confundidos al salón donde estaba la Tia Abuela ya que no sabían el porqué de esta reunión, pero conocían bien a su Tia y sospecharon que algo planeaba la matriarca.
Al entrar la encontraron mirando hacia el jardín y al verlos se dirigió de nuevo tras el escritorio, los dos jóvenes se sentaron frente a ella...
-Los he mandado llamar porque quiero que sepan que nos mudaremos a Chicago-
-¿Cómo...Chicago Tia?- preguntó Archie
-Así es, es hora de que comiencen sus estudios...por lo que he decidido que todos iremos a nuestra residencia allá para que empiecen a asistir al colegio- agregó la anciana
- Pero, ¿Y qué pasará con este lugar?- preguntó Stear
-Esta mansión se cerrará y quedará al cuidado de los sirvientes, toda la familia irá con nosotros...incluidos los Leegan-
-¿Qué pasará con Candy?...- preguntó nerviosamente Archie
-Candice vendrá también con nosotros, es momento de que ella también comience sus estudios-
Ambos hermanos respiraron aliviados y aún cuando la Tia Abuela le desagradaba Candy, la había tomado en cuenta como miembro de la familia. Mientras los tres estuvieran juntos no importaba si estuvieran ahí o en otra ciudad. Stear y Archie habían hecho una promesa junto con Anthony de cuidar a la pequeña y querían cumplirla. Además, el que todos vivieran en una ciudad alejados de los tristes recuerdos los animó grandemente.
Sin decir más, se comenzaron los preparativos para mudarse a la gran Residencia que los Ardley tenían en Chicago.
Mientras tanto, George arribó al Hogar de Pony. El mayordomo sabía que tenía que convencer a la pequeña de venir con él a Chicago. Al llegar se entrevistó con Candy...
-¿La Tia Abuela quiere que vuelva a Lakewood con usted George?- preguntó con tristeza Candy
-No Srita. Candy, usted vendrá conmigo a Chicago-
-¿Chicago?-
-Si, ahí vivirá con ella en la Residencia de los Ardley-
-Pero...yo no quiero vivir más con ella...quiero quedarme aquí en el Hogar- le decía la chica como en una súplica
-Usted es miembro de los Ardley y por lo tanto es su deber estar con ellos-
-Yo ya no quiero ser parte de la familia...- dijo Candy con lágrimas en los ojos y bajando la mirada
-Al Sr. Anthony no le gustaría ver esto...- agregó el hombre con tacto
-¿Anthony?-
-Si...el Sr. Anthony escribió al Sr. Williams porque quería que usted tuviera un hogar y una familia, ahora que él ya no está, usted no puede negarse a cumplir su deseo...-
Candy lo miró fijamente, George había tocado su punto vulnerable y en donde ella no podía argumentar nada más. Recordó que Anthony le había dicho que la quería ver feliz...también recordó todo lo que el chico y sus primos hicieron por convencer al Abuelo Williams para que la adoptaran y fuera parte de la familia.
Ellos le habían dado un hogar a Candy y ella sintió que no podía dejar a un lado todo y refugiarse para siempre en el Hogar de Pony. Era el momento de que ella siguiera con su destino superando el dolor de la pérdida y mirando hacia adelante.
-Tiene razón George...- agregó después de unos minutos- pero...¿Stear y Archie, vendrán ellos también?-
-El Sr. Archie y el Sr. Stear también se mudarán a Chicago con usted y la Tia Abuela-
Candy respiró aliviada. No importaba donde estuviera, mientras Stear y Archie estuvieran con ella, sería feliz.
-Prepararé todo y podremos partir por la tarde- concluyó Candy
-Me alegra oír eso Señorita...cuando esté lista nos dirigiremos a la estación de tren para salir de inmediato- agregó George más que aliviado...finalmente, la había convencido de ir con él.
Candy se despidió de los niños, de la Srita Pony y la Hermana María. Les aseguró que los visitaría pronto. Las dos madres de Candy se alegraban por la decisión de la pequeña, era mejor para ella continuar con los Ardley y recibir la mejor educación. La habían visto sumida en la tristeza y estaban muy preocupadas. Pero ahora, este nuevo cambio sería bueno para la chica y aunque la extrañarían, sabían que era lo mejor.
Ambos subieron al auto y Candy vio como el Hogar de Pony iba alejándose. Iría a una nueva ciudad, esto le daba miedo, pero se consoló al saber que no estaría sola...sus primos estarían ahí esperándola con los brazos abiertos. Había perdido a su adorado Anthony, pero aún tenía a sus queridos Archie y Stear!
