Jack aspiró el aire frío, el cual revolvía sus cabellos oscuros. Se acercaba el invierno. Suspiró y continuó su camino. Mirando al suelo de la calle, apenas se daba cuenta del movimiento del mundo a su alrededor. Tan sólo se perdía en sus propios pensamientos. Pero, de pronto, una voz lo sacó de su ensoñamiento. Una dulce y joven voz femenina que cantaba una canción infantil. Miró hacia los lados, tratando de ver de donde provenía. Se adentró en el jardín de la casa y entonces, la localizó. Miró con curiosidad a la chiquilla que ante él se plantaba con una amplia sonrisa. Poseía un hermoso pelo dorado que sin duda sería la envidia de las demás niñas de la escuela. Pero no fue eso lo que llamó la atención de Jack. Lo único en lo que podía fijarse el chico era en aquellos hermosos ojos verdes que le miraban llenos de ilusión y alegría. Ella le tendió una mano, contenta, y él la aceptó, con una extraña sonrisa.
-¡Hola! ¿Quieres ser mi amigo?- Dijo ella mirándole esperanzada. Jack asintió levemente con la cabeza. Realmente quería ser su amigo.
-Soy Jack.- Dijo él, sonriéndole de vuelta. Ella parecía completamente feliz de tenerle como amigo. Jack sonrió, sintiéndose feliz de poder tener a esa chica como amiga.
Y así pasaron los meses. Entre canciones, cuentos y bromas. Mientras tanto, el invierno llegaba a su fin y aunque no lo dijera, Rapunzel temía el fin de aquel invierno. Había logrado tener una amistad muy sólida en muy poco tiempo, pero sin embargo, Jack todavía no se explicaba porque esa chica tenía que permanecer encerrada en su casa. Hasta que un día la vio saliendo por la ventana. JAck corrió hacia ella, olvidando su maleta y el chaquetón.
-¡Cuidado!- Gritó, pensando que se había caído. Ella dirigió una mirada a él y le instó que guardara silencio. El chico la miró y esperó pacientemente hasta que llegara hasta él.
-Me voy a ir.- Dijo ella, con las mejillas sonrosadas de la carrera.
-¿Cómo? - Dijo él, sorprendido. Ella rio suavemente y Jack abrió la boca sorprendido. No era del tipo que hacía eso. Ella echó una mirada hacia atrás para ver si su madre se acercaba.
-Pero...Tú madre se enfadará.- Dijo este. Ella se encogió de hombros. No parecía importarle. Fue entonces cuando una mujer de oscuro y rizado pelo se acercó corriendo y agarró a Rapunzel. Jack gimió levemente. No quería que le arrebataran a su amiga. Rapunzel se resistió, pero cuando vio que no había salida se dio por vencida. Miró a Jack con una mirada cargada de tristeza.
Esa fue la última vez que la volvió a ver.
*En este prólogo, tienen supuestamente unos 6-7 años no más.
Dejen reviews si les gustó y espero subir el siguiente capítulo pronto ^^