Le excitaba correr de él, cuando llamaba su nombre lentamente con ese enojo típico encendía algo en él que no podía describir.
Mientras que Shizuo sentía lo mismo. Desde que sentía su olor su corazón empezaba a latir mas rápido y su cabeza solo se llenaba de un pensamiento "Izaya. Izaya. Izaya."
Y entonces se lanzaban a la persecución.
Solo fue un día en que las hormonas de ambos parecieron mas alborotadas por la presencia del otro junto con par de bromas indebidas y un toqueteo coqueto que consiguieron dar un paso mas. Aunque no en la dirección que habían planeado, no hacía un futuro sin tener que ver a quien odiaban cada día. Fue todo lo contrario. Pero eso no significaba que fuera precisamente malo ¿no?.
Y fue por esa noche decidieron sustituir golpes y dolor por besos y placer. Y sin que ninguno de los dos se imaginaran eso fue mas excitante que cualquier pelea. Cuando terminaron se vistieron sin hablar y se marcharon. Solo era una vez y no volvería a pasar. Al menos había sido lo que ambos habían pensado.
"Fue tu idea, todo esto es tu culpa." dijo Shizuo sentado en la cama con sus manos sobre la cara sintiéndose totalmente degradado al haberse acostado por quinta vez con su enemigo de toda la vida.
"Tu aceptaste, tu también tienes la culpa." recalcó Izaya poniéndose la camiseta para luego dejar el departamento del rubio sin siquiera despedirse.
Bueno como ser el primero no tiene ninguna mención de parafilia, pero bueno... Desde este si siguen las basadas en parafilias aunque no es nada muy random. ¡Celebrando por la segunda temporada!
