Hola amigos de fanfiction, vengo a presentarles este fic que se me ha formulado en la mente hace poco mientras pensaba en mis proyectos de Fics que podría hacer y justo me llego la idea de escribir un crossover de Hellsing e Ikkitousen (este último no tiene muchos crossovers, por lo menos en español)
Espero que les guste.
Disclaimmer: Los personajes de Hellsing e Ikkitousen no me pertenecen. (Hellsing pertenece a Kota Hirano. Ikkitousen pertenece Yuji Shiozaki)
Capítulo 1: Nueva vida.
-Al juez eterno encomiendo el alma mía, solo él puede juzgarme y perdonarme esta oración de mis pasos cuida, pero la sombra de mi muerte me seguirá-decía sus últimas palabras aquel heroico paladín de Iscariote-Amen…-pronuncio antes de desaparecer. Alexander Anderson había muerto.
De repente ante la vista de Heinkel, Yumie y los demás presentes Walter Dornez (ahora rejuvenecido por Millenium) aterrizo y se burló del guerrero fallecido mientras profanaba lo que quedaba de él, aplastando sus restos como si se tratara de un cigarrillo.
Yumie intento vengar esa acción y se lanzó a atacar al ex mayordomo de Hellsing, pero ella termino siendo la asesinada.
Heinkel trato de vengar a su amiga pero cuando iba a atacar a Walter, Hans Günsche le disparo en la mejilla. Para Yumie esto fue lo último que vio, muriendo llena de tristeza pensando que Wolfe había muerto.
Luego de esos acontecimientos Walter C. Dornez también murió en el zeppelín de Millenium cuando este se destruía. Fumando su último cigarrillo.
Ahora Alexander Anderson sentía como si estuviera cayendo en un vacío ¿Cómo? ¿Qué acaso su cuerpo no había desaparecido? ¿Acaso así se sentía la muerte?
Finalmente sintió un poco de aire a su alrededor y noto que se encontraba en caída libre hacia un edificio. Rápidamente reacciono y gracias a sus capacidades sobrehumanas logro caer de pie sobre el edificio.
Anderson estaba confundido ¿Por qué se encontraba en medio de una ciudad? La verdad que no lo sabía, solo noto que esta era una ciudad japonesa.
-"Esto es muy extraño"-pensó el Iscariote cuando vio que algo caía al igual que él hace unos minutos-Acaso no es…-Anderson se fijó bien en quien estaba cayendo y se dio cuenta de que era Yumie. Sin perder tiempo el rubio extendió sus brazos y atrapo a la monja.
-¿Pa-padre Anderson? ¿Qué hace usted aquí?-pregunto desorientada Yumie mientras Alexander la bajaba de sus brazos-Y mejor dicho ¿Qué lugar es este?-pregunto mirando a su alrededor.
-No lo sé, hace poco caí aquí-respondió el de lentes-Por cierto ¿Qué paso en la batalla contra Millenium y Hellsing?
-Pues… en realidad no lo sé, me mataron poco después de que usted desapareciera-respondió la joven pelinegra.
-¿Quién te mato?-Anderson pregunto pero entonces vieron que alguien o algo caía en dirección hacia ellos.
Sin embargo antes de que los Iscariote pudieran realizar algún movimiento, vieron como una especie de hilos o alambres se tejían formando una red, donde cayó la figura.
-¿Eh?-Alexander miro un poco incrédulo al recién llegado, vestía las mismas ropas que el mayordomo de los Hellsing.
-¡Tu!-Yumie reconoció de inmediato al joven y pretendió atacarlo, pero Anderson la detuvo.
-¿Qué sucede Yumie?-pregunto Anderson que tenía su mano puesta en el hombro de la monja.
-¡Él es el que me mato! ¡Este despreciable traidor es Walter Dornez!-dijo ella con furia.
-¿Él es Walter?-pregunto incrédulo el líder de la sección XIII.
-¿Uh? ¿Qué paso?-pregunto levantándose el joven de alrededor de 14 años-¿Ustedes? ¿Qué no estaban muertos? o mejor dicho ¿Qué acaso yo no debería estarlo?
-Pues veo que estas en la misma situación que nosotros-dijo de forma pacífica Anderson.
-¿Padre Anderson, por qué esta tan tranquilo? ¿No deberíamos estar luchando con él?-pregunto confundida Yumie.
-De nada nos serviría pelear, es mejor que trabajemos juntos para saber en dónde nos encontramos-dijo aun tranquilo el sacerdote.
-Por esta vez concuerdo, católico-dijo Walter-Pero esta alianza solo durara un tiempo.
-Lo sé, ahora mejor pongámonos en marcha-sugirió Anderson, los otros dos asintieron y comenzaron a desplazarse por las terrazas de los edificios.
En medio del camino Walter les conto de lo ocurrido en la batalla.
-Vaya, así que Millenium fue derrotado-dijo Yumie pensativa mientras continuaba la marcha.
-No puedo creerlo, Alucard derrotado por semejante estupidez-Anderson parecía tener un poco de rabia y decepción en su rostro.
-Sí, y como les dije antes ahora debería estar muerto. Pero me encuentro aquí corriendo junto con ustedes-concluyo Walter.
-Aun no entiendo ¿Qué lugar es este?-decía el paladín mientras miraba distintos carteles.
-Esperen, este lugar… ya sé dónde nos encontramos-dijo Yumie deteniéndose al igual que sus acompañantes-Es mi tierra natal, nos encontramos en Tokio.
-Imposible, esta ciudad tiene una tecnología un poco más avanzada que la de nuestra era-dijo Walter negando un poco con la cabeza.
-Hmm… puede ser que nos encontremos en el futuro-pensó Anderson en voz alta dejando con una gota de sudor a Walter y Yumie.
-Es imposible-dijo el mayordomo pensativo-Aunque podría ser o también puede significar que estemos en otro mundo.
-Espera, ya lo tengo, mi comunicador de la sección XIII-dijo Anderson sacando el comunicador-Con esto sabremos si estamos en nuestro mundo.
Anderson hablo por el comunicador pero solo se oía la estática.
-Eso responde nuestra duda, ya no nos encontramos en nuestro mundo ni en el futuro-dijo Dornez cuando de repente noto a dos figuras moviéndose por otra terraza.
Ambas figuras eran rápidas y parecían chocar de a ratos.
Los tres miraron con más atención y notaron que se trataba de dos chicas peleando.
Una vestía un uniforme de colegiala y la otra un vestido de color azul, y llevaba un arco.
-"Definitivamente esto no ocurre en nuestro mundo"-pensó dando un leve suspiro Yumie-¿Deberíamos interferir?-pregunto a Anderson.
-No, lo mejor es permanecer como espectadores-respondió el rubio.
-Sí, lo último que nos falta es meternos en una pelea innecesaria-añadió el pelinegro sacando un cigarrillo.
De repente la chica de vestido azul lanzo un flechazo hacia su rival con una increíble potencia, pero la otra chica lo esquivo y huyo.
La joven del arco trato de perseguirla pero noto la presencia de Anderson, Walter y Yumie. Así que decidió huir.
Los tres espectadores pudieron ver bien a la chica, era increíblemente joven y se movía a una velocidad sorprendente.
-De acuerdo, continuemos-dijo Anderson emprendiendo otra vez su camino por los edificios seguido por Walter y Yumie.
-Eso fue extraño-dijo Walter con miles de dudas en su cabeza.
-¿Qué cree que debamos hacer, padre Anderson?-pregunto Yumie.
-Creo que tendremos que buscar un lugar para pasar la noche-sugirió el sacerdote.
-Cierto, pero ¿Tienen dinero?-pregunto Walter haciendo que los Iscariote bajaran la cabeza con decepción.
-No mucho, unos pocos Euros solamente-respondió Alexander-Y algunos se abran dañado en la batalla.
-Perfecto, ahora estamos en un mundo desconocido y sin dinero-suspiro Walter.
Luego los tres decidieron bajar a las calles para buscar algún lugar donde quedarse con su poco dinero, pero hasta entonces no tenían suerte.
Ya se encontraban deambulando por las calles de esa ciudad sin rumbo fijo.
Aunque para su suerte cuando pasaron cerca de un orfanato, donde una monja que se encontraba en la entrada noto al trio de vagabundos.
-Disculpe padre, lo noto un tanto perdido ¿Tiene algún lugar donde quedarse? -les pregunta acercándose la monja de alrededor de unos 30 años.
-No, acabamos de llegar a esta ciudad y no tenemos lugar donde quedarnos-respondió Anderson.
-Ya veo ¿No les gustaría pasar la noche aquí? nos sobran habitaciones-dijo la monja.
-¿En serio? Se lo agradezco mucho ¿Enserio no hay problema?-pregunto Alexander.
-Para nada, ahora entren que comienza a hacer frio-dijo con una sonrisa la católica.
-Por cierto, olvide presentarme, soy Alexander Anderson-se presentó el hombre de lentes-Y ellos son Yumie Takagi y Walter Dornez.
-Es un placer conocerlos, soy la hermana Ayane Misaki-dijo la monja presentándose.
Los tres entraron en el orfanato y la monja los guio hacia sus habitaciones.
-Bueno, pueden quedarse aquí en estas dos habitaciones-dijo Ayane a Anderson y Walter señalando dos puertas de los cuartos. Luego le hablo a Yumie-tu puedes quedarte en este cuarto de enfrente así los tres estarán cerca.
-Muchas gracias-agradeció Anderson abriendo la puerta de su habitación.
-De nada, por cierto, si tienen frio hay más frazadas en los armarios-dijo Ayane con una sonrisa-Y si me buscan por alguna duda, mi cuarto está doblando el pasillo, cerca del final del otro-explico antes de comenzar a retirarse-buenas noches.
-Buenas noches y gracias de nuevo-despidió Yumie.
-Bueno creo que nosotros también debemos descansar-dijo Anderson.
Walter tan solo entro a su habitación sin decir nada, mientras que Yumie despidió al sacerdote y se fue a dormir.
Sin embargo en esa noche lo que menos hicieron fue dormir, los tres estaban sin poder conciliar el sueño debido a las dudas que llegaban a sus cabezas.
Igualmente Yumie fue la primera en quedarse dormida, Anderson y Walter estuvieron despiertos un buen rato pero después también cedieron ante el cansancio.
¿Qué les deparara ahora? ¿Lograran acostumbrarse a la vida en ese mundo? ¿Trataran de volver? No se pierdan el próximo capítulo…
Jeje, lo corto ahí para dejarlos en suspenso. Bueno, para los que se preguntan por qué quise hacer un fic de Hellsing con Ikkitousen les diré que tenía la idea hace algunos días pero tenía ideas para otros fics (como un crossover de Sekirei con Devil May Cry o un multi crossover de Rosario + Vampire con DMC, Hellsing y algún otro anime) pero tendrá que esperar al menos hasta que termina Dreamer Colision o Kodomo no Devils.
Espero que les haya gustado esta mezcla de capitulo y prólogo, si es así exprésenlo en los reviews (y si no les gusto, también). Saludos.
