Su cuerpo se estremecía, el miedo poco a poco se hizo más presente, no tan solo en su rostro si no que comenzó a propagarse en su piel erizándole los cabellos de la nuca, se sentía atrapada en una horrible pesadilla, de esas en las que corres con todas tus fuerzas, pero a pesar de tus vanos intentos de sobrevivir, no avanzas lo suficiente para escapar de lo que te aterra hasta dejarte sin aliento, corría lo más rápido que su cuerpo le permitía, la adrenalina la mantenía de pie, pues su mente, debido al miedo, la abandono desde hace mucho, sentía a su atacante tras ella, no podía evitarlo, él la iba a alcanzar, no faltaba mucho, estaba a tan solo unos metros de ella, una rayo de esperanza cruzo por su mente cuando vio que, doblando en la esquina, tal vez podría perderlo si tomaba otra dirección antes de que la alcanzara, sus pulmones trabajan al máximo de su capacidad llevando rápidamente el aire a su sangre, su corazón latía violentamente contra su pecho mientras sentía un ardor en su garganta debido al constante jadeo, llego doblando a aquella esquina con la felicidad de que pudo evitar que la atrapara, ahora su mayor prioridad era encontrar un lugar para esconderse de su agresor, él se lo había advertido, insegura al no saber si la había alcanzado o no, escucho un disparo, sus
nervios se crisparon ante el alarmante sonido paralizándola, pero fue sacada de su trance cuando una mano tiro de ella llevándola hacia un callejón, su miedo se intensifico al pensar de que, aquel hombre que la seguía sin perder rastro de ella, la habría encontrado, se sintió perdida, no tenía escapatoria, su última esperanza se desvaneció, sintiendo su final cerca decidió afrontarlo, sus piernas flaquearon y su cuerpo, poco a poco se deslizo contra la pared que le sirvió de apoyo, con manos temblorosas logró tomas sus rodillas para hundir su cabeza entre ellas tratando de controlar el intenso dolor de su pecho.
Era un día típico en la vida de Finn Hudson, estaba sentado su sillón viendo ESPN como lo hacía siempre, después de volver del trabajo, de repente sintió la necesidad de salir afuera, era como si algún imán invisible tirara de el hacia algún lugar. Bajo por el elevador y salió por la puerta directo a la calle comenzó a caminar un poco y fue en ese momento cuando la vio por primera vez, una morena de cabellos ondulados corría como si su vida dependiera de ello, parecía asustada, Se escucho un disparo, lo único que paso por su mente en ese instante fue Ella no! y corrió a salvarla, le tomo la mano y la metió en el callejón para poder perder al sujeto del disparo la chica lloraba profundamente y se sentó contra la pared del callejón agarrando con firmeza sus piernas colocando la cabeza en sus pequeñas rodillas, quería abrazarla pero pensó que se asustaría si lo hacía.-Todo estará bien, te lo prometo .Mi nombre es Finn Hudson pensó que si le decía su nombre no le tendría miedo o algo así, su madre siempre le dijo que tenía que ser amable con las chicas. -A continuación se sentó contra la pared del callejón justo al lado de ella-Rachel Berry le dijo entre sollozos. Podía ver el miedo en sus ojos color chocolate, esta chica realmente estaba asustaba su cuerpo temblaba, le rompía el corazón no poder hacer nada para reconfortarla –Porque te escapabas?- soltó de repente no le importa si parecía grosero o imprudente la curiosidad lo estaba matando-no quiero hablar de eso ahora, te importa?-sus ojos imploraban, realmente algo malo le había sucedido- está bien de qué quieres hablar?-Tal vez no era la pregunta correcta para ese momento pero quería que le hablara, solo quería escuchar su dulce voz de nuevo, no contesto seguía llorando, pensó que estaría en shock o algo así, no quería hablar de el porque su vida simplemente apestaba, sin embargo le pareció importante que se sintiera segura, como que supiera que no le haría daño y que confiara en el, por lo que empezó a decir cosas al azar sobre mí mismo -emm... tengo 24 ,soy maestro en un preescolar, me gusta tocar la batería, vivo en un apartamento aquí al lado, mido 1.95,no quedamos en silencio pero este no era incomodo, luego ella comenzó a llorar con más intensidad, esta vez se atrevió a pasarle una mano por la espalda…
Salte un poco al sentir su cercanía, una electricidad se apodero de mi con su toque, no sabia porque me sentía segura con Finn, pero lo hacia. Pensé que no debía experimentar este sentimiento luego de lo que le había sucedido, temblé un poco al recordarlo- estas bien?Me pregunto, solo asentí, parecía que las palabras nunca podrían salir de mi y cuando salían parecían lejanas y fuera de lugar, mi garganta estaba seca, las lagrimas nunca paraban, no podía sacar las imágenes de los hechos recientes de mi mente-quieres comer algo se esta haciendo un poco tarde y esta haciendo frio – me saco de mis propios pensamientos lo mire con los ojos sumergidos en el dolor de los acontecimientos pasados – a tu casa? Las palabras por fin salieron de mi , no reconocí la vos áspera que se escuchaba esa definitivamente no parecía mi voz, lo mire por primera vez y me di cuenta de que era muy hermoso tenia el cabello despeinado color café , unos ojos color avellana, sus piernas eran muy largas por supuesto el había dicho que media 1.95, su pregunta me confundió realmente no me esperaba que me invitara, - creo que tienes que comer algo para que te sientas mejor además esta haciendo frio, no voy a hacerte daño, solo quiero que te sientas mejor –sonrió después de decir esto, era una media sonrisa perfecta, se preocupaba por mi, nunca antes alguien se había preocupado así por ella, bueno excepto sus padres pero ellos no la querían mas, me despoje rápido de este ultimo pensamiento, necesitaba sentirme mejor y no hundirme mas en el dolor por lo que me pareció una buena idea ir a comer con finn, después de todo el estaba siendo muy amable y me había salvado -esta bien,-Cool ,vamos , se levanto y me tendió su mano para ayudarme a levantarme.
Entramos por la puerta principal del vestíbulo, era un muy lindo departamento, Finn me agarraba de la mano , y se sentía escalofriantemente bien, como si un calor me invadiera con su rose, me di cuenta que nos dirigíamos al elevador, hice un mohín en protesta-Que sucede me pregunto-Tengo claustrofobia Finn, me asustan los lugares pequeños, mire hacia abajo no me gustaba mostrarme vulnerable, sabia que debía estar sonriendo, lo que hizo me desconcertó ya que pensé que se reiría, me agarro con mas fuerza la mano, sin llegar a lastimarme, y comenzó a frotar el dorso de mi mano con el pulgar, lo cual sentía increíble y dijo-Yo te protejo, no te asustes , me sonrió con una media sonrisa que por alguna extraña razón me reconfortaba pero igual seguía asustada, tome una gran respiración antes de entrar al ascensor, el viaje por el elevador fue rápido y sin ningún incidente, Finn estuvo acariciando el dorso de mi mano todo el camino, eso me calmo, el abrió la puerta del apartamento a oscuras, prendió las luces dejando ver un hermoso living de paredes color canela, con un juego de sillones naturales y un televisor bastante grande en frente, estaba muy bonito decorado -ven vamos a la cocina, nos sentamos en la barra que había en la cocina - que quieres de comer, tienes hambre o que? –Si tengo mucha hambre de hecho, que me ofreces? No me había dado cuenta de cuan hambrienta estaba hasta que lo menciono -emm...Se rasco la parte posterior de la cabeza, puedo hacer pasta- Pasta esta perfecto es mi favorito-Entonces vas a decirme que te paso? Quería decirle, pero simplemente no podía poner mis recuerdos en orden, había muchos flashes de los sucedido algunos tan horribles que no quería recordarlos, en este momento no necesitaba revivir lo sucedido, necesitaba olvidarlo para que las imágenes de los acontecimientos recientes me dejaran en paz -estas realmente curioso no? no podía creer todavía lo que me había sucedido, sabia que tenia que contárselo para liberarme de la carga, me embargo un sentimiento de desesperación me abrace a si misma esperando que desapareciera, el noto mi reacción, eso me avergonzó un poco, las lagrimas fluían por mi cara- Solo si me cuentas podre ayudarte y comprenderte, asentí ya que no me creía capaz de hablar, Finn que ya había puesto a descongelar la salsa y la pasta se estaba hirviendo, se sentó a mi lado para escuchar mi relato, pero yo simplemente no pude, recordar era como revivir, las lagrimas comenzaron a salir con mas intensidad, un nudo en la garganta no me permitía hablar, sentí que Finn me abrazaba y me pasaba una mano por la espalda, eso me reconfortaba algo, pero el dolor ya se había desatado con mas furia haciendo mas daño, mis lagrimas dejaban un rastro húmedo por la camiseta de Finn ya que mi cabeza estaba apoyada en su pecho-todo va a estar bien, no te preocupes, si te pone mal no hace falta que me cuentes, yo quería contarle pero no tenia la fuerza para hacerlo, no en ese momento, me beso la cabeza lo que causo que se me erizaran los pelos- debo ir a ver la pasta, paso por delante de mis ojos para revolver la hoya que emanaba vapores por el hervor-la comida esta lista anuncio, hice un intento por sonreír, me seque las lagrimas que habían quedado en mi cara y me pare-Te ayudo a poner la mesa , el me sonrió- el comedor esta por aquí, señalo una puerta del lado derecho de la cocina, y así pusimos la mesa en silencio y luego nos sentamos en la mesa y empezamos a come- cuantos años tienes Rachel? Las imágenes iban apareciendo cada vez con menor frecuencia a medida que pasaba mas tiempo con el -23 dije con indiferencia y seguí comiendo, estar con Finn era muy fácil ya que nunca había silencios incómodos ni nada.
Terminaron la cena Finn no quería que se valla, el quería que se quede para siempre, porque todo se sentía tan bien a su alrededor. Estábamos lavando los platos Finn lavaba y yo secaba, no quería irme, La estaba pasando bien, por momentos hacia que me olvidara de lo que me había sucedido, tampoco que tuviera donde irme, no quería volver al lugar donde todo había empezado, no sola por lo menos -en que piensas me pregunto, no hacia falta que le pregunte el sabia ella estaba asustada podía ver el miedo en sus ojos, no espero a que le respondiera tiro fuerte de mi en un abrazo de oso y me susurro al oído- todo va estar bien, te lo prometo , no voy a dejar que nada malo te pase nunca mas, yo te voy a proteger, me acunaba en sus brazos mientras yo lloraba en su pecho- estoy muy asustada Finn, mis padres no me hablan desde hace años están enojados con migo porque vine aquí a New York, yo no tengo a donde ir estoy muy sola, no tengo amigos y Jesse dijo que lo lamentaría…el me hará daño de nuevo… mi voz era entrecortada por lo sollozos que ahora eran mas fuertes – puedes quedarte aquí si quieres yo tengo una pieza de mas puedes dormir ahí, después de todo yo tampoco quiero que andes por ahí sola… así que si quieres… nos sentamos en las banquetas de la cocina ya familiar, me seque las lagrimas, agradecí que no preguntara por Jesse no quería hablar sobre el, tenia que pensar con claridad sabia que esperaba mi repuesta, me estaba invitando a vivir con el? El chico mas hermoso del mundo quería vivir con migo –Finn no puedo aceptar eso, es muy amable de tu parte, pero no quiero molestar ni nada…además que pensaría tu novia si una extraña viene a vivir con su novio–No seria una carga, además los amigos se quedan en la casa de los amigos cierto? Y ellos se ayudan entre si, enserio estoy preocupado por ti y solo quiero ayudarte y no tengo novia, sonrió, pensó que de esa manera mostraría que enserio quería que se quedara –Esta bien me quedo, pero no pienso quedarme aquí gratis te ayudare con la renta, note la emoción de su rostro aunque trato de ocultarlo, no podía evitar sentirme bien cuando dijo que no tenia novia, poco a poco el dolor se iba desvaneciendo y los recuerdos se iban callando, realmente me hacia bien estar con Finn y no podía imaginar otra persona con la que quisiera estar en este momento -Te encantara vivir aquí, mañana podemos ir por tus cosas y todo, sonreí como una tonta embobada por sus ojos, simplemente no podía dejar de mirarlo son tan hermosos, hasta que logre decir -Gracias Finn-no tienes que agradecerme me dijo –No, si que tengo, eres tan amable, nadie nunca hubiera hecho algo así por mi enserio gracias-no hay de que, te mostrare tu habitación me dijo caminamos por un corredor de paredes blancas que tenían colgados unos cuadros muy bonitos , había 4 puertas, 2 de cada lado, esta es mi habitación señalo, era la primera puerta a la derecha -este es el baño dijo y me mostró la primera puerta a la izquierda y esta seria tu nueva habitación, avanzamos hasta la segunda puerta hacia la derecha, abrió la puerta, la habitación era bastante grande, con una cama grande en el medio con, las paredes eran naturales casi blancas al frente de la cama en la pared había un televisor led con repisas al costado el placar estaba ubicado a la par de la puerta , y en la otra esquina de la habitación había un tocador que tenia cajones también, y por supuesto a un costado de la cama había una mesita de noche-Es muy bonita dije y en realidad lo era no era solo una cortesía-Tu casa es muy linda añadí-Gracias, iré a traerte unas sabanas limpias ya que la cama no esta tendida y una remera mía para que duermas, no podía dejar de mirar sus ojos color avellana era tan perfecto así que balbucee una repuesta rápida-si… eso estaría genial, debo haber quedado como una tonta, me dirigí hacia la ventana solo para distraerme un poco.
