Capitulo 1... Obstáculos de la vida
-Harry!... Espera!- El voleteó a mirarla.
-Hola Ginny!- Sonrió- ¿qué te trae por la sala de transformaciones?- Dijo guardando sus útiles. Había sido el último en salir del aula, puesto que ahora, se encontraba vacía. Ron y Hermione, se habían ido a arreglar, según ellos, unos asuntos.
-Nada... Es que ahora me toca a mi. Adoro transformaciones.
-Que suerte tienes!... Gin debo irme, tengo cosas que hacer, y, como supongo que tu hermano no vendrá, no perderé más tiempo. Luego nos vemos
-Oh! De acuerdo... Adios
-Adiós
Harry paso mas de tres horas en la biblioteca. Había estudiado pociones y adivinación y había concluido los tres pergaminos sobre como transformar un objeto sin vida, en uno que si la posea. Suspiró aliviado, juntó sus cosas, y se dirigió a la sala común, para dejar sus útiles, y luego bajar al Gran Comedor.
-Lamento la tardanza- Dijo Harry, a Ginny, mientras se acercaba a la mesa de Gryffindor.
-Descuida!- sonrio esta.
-Ahora bien...- Dijo, cuando estaba por sentarse. Pero se detuvo. Allí estaba ella. Lo miraba, y él a ella.Ella sonrió. …l sintió como su corazón bombeaba rápidamente, la sangre que fluía como lava por sus venas.
-Estas bien Harry?- Le preguntó Ginny, destruyendo así el enlance que hechizaba a harry.
-Si, este... No tengo hambre, y... Acabo de recordar, que me ha quedado una tarea pendiente, así que... emm... luego nos vemos Gin!
-Pero...
…l, tras despedirse con un ademán se retiró.
Tres días pasaron de eso. Harry, quien no había comido nada, a causa de nervios, se preparaba, mentalmente, para un partido contra Ravenclaw.
Estaba subiendo a su escoba, como era desde un año atrás, el era el capitan y detrás se encontraban, a sus espaldas...
-Veras Harry! Hoy ganaremos- Lo alentó Ron.
-Como siempre- Aseguró Ginny montandose en su escoba.
Apenas comenzó el partido Harry se echo a andar, pero cuando la vió se detuvo en el aire. Nunca supo cuanto tiempo pasó, pero parecieron horas. Sin embargo, el sentía que todos se detenían, a excepción de Cho, que la veía con claridad, volar elegantemente, sobre su escoba.
Cuando por fin reaccionó había sido gracias al pitido, proveniente de Hooch, anunciando la finalización del partido.
Una vez en la sala común de Gryffindor...
-Demonios Harry¿Qué te sucede?- Le preguntó Ron.
-Nada... ¿Por qué?
-Acabamos de perder por tu culpa- Dijo Demelza alterada.
-No es su culpa- Lo defendió Ginny.
-Ah no?... Es un idiota!- Repitió Demelza.
-Hey!... Terminemos esto!- Dijo Ginny
-No, Demelza tiene razón.
-¿A que te refieres?- Se alteró Harry.
-A que perdimos por que te perdiste en un par de ojos lidos!...
-Claro que no!
-Claro que si!... Estuviste parado sobre tu escoba observando a Cho como si fuera la snich!...
-Eso no es...
-¿Quieren terminarla!- Se ofuscó Ginny- No vamos a lograr nada así.
-Es verdad- admitió Demelza- El juego ya lo perdimos.
-¿Quieres callarte de una vez!- Le dijo Hermione colérica, quien se encontraba allí observando la discución. Demelza torció los ojos y se retiró refunfuñando- Ginny tiene razón!- Prosigió.
-Ginny!... Demelza tiene razón!... Harry solo es un zoquete solterón!- Se burló Ron- Además de ser un patético idiota que se queda embobado por una melena morocha.
-Ronald!... Discúlpate con él!- Le ordenó Hermione, poniendo los brazos en jarra.
-Herms, creo que equivocaste tu posición. Eres mi novia, no mi madre!- Le gritó y se fue por él retrato de la dama gorda.
Ella, coloradísima, se disculpó con los presentes, y siguió los pasos de Ron.
Harry, que seguía dolido por lo dicho por su amigo, se dejó caer en la butaca más cercana.
-No le hagas caso!- Dijo Ginny también sentándose.
-No, el tiene razón, soy patético.
-Claro que no!... Solo estas enamorado!...
-Ginny?
-mmm?
-Tu has estado enamorada... es decir, perdidamente?
-Si- contestó- mucho tiempo, y aún lo estoy. Por que?
-Por nada, es solo que a veces me siento solo... Si no fuera por ti, estaría tan perdido- Le sonrió, ella también sonrió.
-No es verdad! Ron es tu amigo!. Te aprecia mucho, y lo sabés, solo está algo molesto.
-Si, lo sé... Pero no es por eso que lo digo, es decir... El esta todo el tiempo con Hermione... Y, no me malinterpretes, me alegra que por fin estén unidos, pero... nunca estamos juntos los tres, ya ni siquiera tenemos nuestras charlas de amigos por que vuelve a tempranas horas de la mañana, Merlín sabe por que! ()... No lo culpo, seguramente yo estaría igual.
-¿Y por que no lo estas?... Es decir¿qué te detiene?
-Es que ultimamente he estado tan deprimido- dijo con un dejo de tristeza.
-¿y por que es eso?
-Te lo contaré solo por que eres mi hermanita- Le sonrió- Y por que necesito tus consejos ya que tu, de amor, sabes demasiado.
-¿Por qué crees eso?- Se extraño Ginny.
-Bueno, luego de todos los novios que tuviste, y de todos los corazones que rompiste, algo, debes saber... ¿no?- Dijo entre celos y desesperación.
-No fueron tantos eh!... Solo fueron tres.
-Suficientes para mi... No sabes como te envidio Gin!. Si yo hubiese tenido aun que sea una relación parecida a la que tu tenías con alguno de tus novios, no estaría como ahora.
-No sabes lo que dices!... Cada una de mis relaciones, fue peor que las otras.
-Pero al menos alguien te amo, no fue un simple amor platónico.
-Para que quieres alguien que te ame, si no puedes retribuirle el favor?
-A que te refieres?
-A que yo no ame a ninguno de ellos, si lo intenté, pero no... Harry yo estoy igual o, incluso, peor que tu. Solo que no dejo que la soledad me gane- Sonrió satisfecha.
-Y no se como lo logras!
-Verás, solía ver la soledad como una desgracia, como una desdicha que solo me ocurría a mi.
-Es que es así!... Solo me pasa a mi
-No!... No es así!... La soledad es solo una etapa más de la vida, que todos debemos cruzar, tarde o temprano.
-Eres toda una experta Gin!... Suerte que te tengo de mi lado- Le sonrió.
-No soy experta...
-Claro que si
-Claro que no
-Si!
-No!... Y, de todas formas, no me has contado que es lo que te sucede- La sonrisa de Harry se borró- Solo si lo deseas, yo solo quiero intentar ayudarte.
-Lo sé!- Sonrió- Bueno, he aquí mi problema...
Ginny se acomodó en el sillón como si fueran a contarle un hermoso cuento que valiera la pena, ser escuchado con atención. Pero ni bien Harry abrió la boca para contarle, el retrato de la dama gorda se abrió, y una manada de chicos del primer curso, entraron y se establecieron en diversas butacas, muy cerca de ellos. El alborotó se hizo presente en toda la sala común.
-Menuda suerte!- Farfulló Ginny.
-¿Sabes que?... otro día te cuento Gin!.
-No!... Cuentame!- Le hizo un leve puchero.
-Es que recordé que tengo deberes.
-Pero, pero...
-Lo siento Gin!- Le besó la frente- Me voy, gracias, pero luego hablamos- Se levantó y se fue.
-De acuerdo- Lo saludó de lejos, resoplando.
BUENO... QUE QUIEREN QUE LES DIGA... ES LO QUE HAY, OJALA LES ESTE GUSTANDO Y... PLIS CRITIQUEN!... AMO LAS CRITICAS, Y ME BANCO LO QUE VENGA... JAJA
CUALQUIER COMENTARIO O SUGERENCIA... Pequeña Diabla ...$
