Prefacio
¿De qué modo te amo? Elizabeth Barrett Browning
¿De qué modo te amo? Deja que cuente las formas:
Te amo desde el hondo abismo hasta la región más alta
que mi alma pueda alcanzar, cuando persigo en vano
las fronteras del Ser y la Gracia.Te amo en el calmo instante de cada día,
con el sol y la tenue luz de la lámpara.
Te amo en libertad, como se aspira al Bien;
Te amo con pureza, como se alcanza la Gloria.Te amo con la pasión que antes puse
en mis viejos lamentos, con mi fe de niña.
Te amo con la ternura que creí perder
cuando mis santos se desvanecieron.
Te amo con cada frágil aliento,
con cada sonrisa y con cada lágrima de mi ser;
y si Dios así lo desea,
tras la muerte te amaré aún más.
Esta es una historia de amor, pero también es una historia triste. Porque así debe ser, la vida no puede ser solo felicidad, así como tampoco puede ser todo tristeza. Sí fuéramos siempre felices, ¿Cómo sabríamos que estamos felices? Para amar la luz debemos conocer la oscuridad, para valorar el agua debemos pasar sed, para saber que hemos amado nos tienen que romper el corazón…
Bienvenido a una tragicómica historia de amor.
