Hola, este es mi primer fic (si se puede llamar asi) En primer lugar, la historia no es mía, le pertenece a la usuario NaLu1933, la cual elimino al no tener una gran aceptación y me dio el permiso para que yo lo adaptarla. Este fic va a ser el mismo pero con cosas cambiadas por parte mia. Espero que lo disfruten.

Pov Lucy

Mi nombre es Lucy, Lucy Heartfilia, estudio, para mi mala suerte, en el instituto Fairy Tail. Muchos se preguntaran porque digo "para mi mala suerte" Pues…Sufro bullying. No es algo sorprendente el hecho de que soy una nerd, no tengo muchos amigos que digamos…Gracias a eso, y que siempre en las horas libres estoy sola en la biblioteca. Claro, no tengo un aspecto muy de nerd que digamos, para muchas, mi cuerpo es la envidia. Jamás entenderé a las personas. Hay una persona la cual odio con todo mi maldito corazón, mi matón numero 1: Natsu Dragneel. Él fue el que empezó todo esto, él fue el primero que me insulto, el primero que maltrato, el primero que me humillo. Por su maldita culpa todo el instituto me hace bullying. Otra cosa es que muy rara vez sonrió o convivo sanamente con las personas. La razón de ello, perdí a 2 personas muy importantes antes de entrar a Fairy Tail, mi madre Layla Heartfilia y mi mejor amiga, Levy Mcgarden. Murieron en diferentes pero en el mismo año. La primera fue mi madre, murió de cáncer. Y la segunda fue Levy, murió atropellada, no recuerdo exactamente como pasó, ese dia peleamos, pero antes de morir, me regalo una chaqueta negra que siempre atesoro. Gracias a eso mi padre y yo nos decidimos cambiar de ciudad, a Magnolia. Levy y yo siempre quisimos estar aquí y aún más por entrar a Fairy Tail. Lástima que ella jamás pudo conocer Magnolia. Pero agradezco que no tenga que sufrir lo que yo sufro. Solo estoy aquí por ella, por cumplir su voluntad, pero gracias al bullying a veces lo olvido.

La campana sonó, indicando que mi infierno empeoraría. Camine hasta llegar a un salón. A-1. Si, el infierno me esperaba al abrir la puerta. Apenas la abrí, todos voltearon a verme.

Algunos en el aula me miraban maliciosamente mientras me dirigía a mi asiento. Otros apartaban la mirada. Y los que definitivamente odio, los hipócritas que me miran con lastima. Entre ellos destacan Yukino auguria. Alguna vez pensé que era buena persona por ayudarme una vez. Pero la muy puta me traiciono, pero aun así me sigue mirando con lastima pero jamás ayuda.

Juvia Loxar, una chica que igual que yo sufre bullying, por parte de uno de los mejores amigos de Natsu: Gray Fullbuster. No sufre tanto como yo, pero cuando puede también se burla de mí.

Y las hermanas Strauss, en especial la mayor, Mirajane. Las odio con todo mi maldito corazón, gracias a ellas perdí a uno de los pocos amigos que tengo, mi perro Plue. Me engañaron para que fuera con ellas, pero cuando llegue era demasiado tarde. Me inmovilizaron, agarraron a Plue y lo mataron frente a mis ojos, OJO, ellas no fueron las que lo mataron, fue nada más ni nada menos que la persona más cruel de este mundo. Natsu Dragneel y su pandillita

Jamás supe los motivos de porque me engañaron, pero algo de que si estoy segura es que las odio.

Llegue a mi puesto, claro, no sin antes recibir algunas zancadillas en el camino. Me senté, para mi mala suerte el profesor aun no llegaba, peor le miraba el lado bueno, Natsu y su pandillita no habían llegado, pero si su noviecita. Una de las chicas más sexys del instituto, la más puta como le digo yo ya que se ha acostado con medio colegio. Erza Scarlet.

-Hola mi nerd favorita ¿cómo has estado este fin de semana? ¿Acaso te la pasaste encerrada en tu cuarto leyendo?- Se rio Erza junto a sus amiguitas. Simplemente las ignore, y su chiste no daba gracia alguna.

-Vamos, no te hagas la ruda, todos sabemos que solo eres una nerd, llorona y Asocial.- Se rio Jenny, otra de las más putas del instituto.

La puerta se abrió y mis ojos se toparon con la persona que más odio, Natsu Dragneel.

-Vamos chicas, no dejen toda la diversión para ustedes.- Dijo Natsu entrando.

-Llegas tarde, amor.-Dijo Erza para acercarse y darle un beso a Natsu.

Después de lo que pareció ser un siglo, el profesor entro y todos se sentaron en sus puestos.

Las clases pasaron normales, solo uno que otro comentario cuando respondía algo bien, en el recreo siempre los mismos golpes que recibía a diario ¿Por qué no le digo simplemente a los maestros o a mi padre y ya? Se preguntaran, la respuesta es fácil, si lo hago lo más seguro es que mi padre me sacara del instituto, por alguna razón me siento culpable por la muerte de Levy y quiero cumplir su voluntad, aunque tenga que sufrir.

La hora de la salida llego, por fin mi infierno terminaría por hoy o eso pensaba.

Y ahí estaba Natsu y sus perritos falderos, Gray Fullbuster y Jellal Fernandez. Los 3 más fuertes del instituto.

-¿A dónde crees que vas, Heartfilia?-Pregunto el maldito de Natsu.

-A casa.-Respondí fríamente.

-¿Enserio? Pero creo que podrías hacernos un favor.-Hablo Gray.

-¿Qué quieren?- Volví a hablar fríamente, aunque empecé a sentir miedo.

-Danos tus deberes y no saldrás lastimada, bueno, no mucho.-Hablo Jellal.

-Jamás, mejor háganla ustedes, para eso tienen cerebro ¡Oh! Verdad ¡ustedes ni siquiera lo han utilizado en sus 17 años de vida!-Exclame algo enojada, pero luego me arremetí. Natsu me miro con una sonrisa maliciosa mientras se tronaba los nudillos. ¡Mierda! Que dije. Sabía perfectamente que Natsu no sabía lo que era compasión ¿Pero tratar de agredirme físicamente? Era otro nivel.

-Con que eso piensas de nosotros, ya verás.-Dijo Natsu mientras se acercaba, solo cerré fuertemente los ojos esperando el golpe. Peor jamás llego.

-¿Q-que?-Dije al abrir los ojos, Natsu estaba en el suelo, inconsciente. Jellal y Gray no estaban, la única persona con la que me encontré fue un rubio.

-¿Estas bien?-Pregunto el chico mientras volteaba a verme

-Sí, muchas gracias por salvarme. No se cómo podría agradecerte- Respondí con mucha alegría por mi salvador.

-Como se atreve este maldito a tocar a una dama-Dijo furiosos el rubio, señalando a Natsu. Rápidamente cambio su cara por una más preocupada.- Por cierto ¿Cuál es tu nombre?

-Lucy, Lucy Heartfilia y de nuevo, muchas gracias por salvarme.-Volví a agradecer. -¿Y el tuyo?

-Sting, Sting Eucliffe. Mucho gusto. –Me saludo.

-El gusto es mío.-

-Por cierto… ¿soy yo o los conocías? Y si es asi porque querían hacerte daño…-Se preguntó Sting, era verdad lo que decía. Natsu solo me ha torturado desde que llegue. Jamás entendí la razón de ello.

-Desgraciadamente, sí. Él siempre me ha torturado, pero no puedo hacer nada. Soy solo yo contra todos.-Respondí triste y decepcionada.

-¿estudias en Fairy Tail, verdad?-Me pregunto. Yo asentí.-Pues, te tengo la noticia que yo también asistiré allí, me mude hace 2 dias.

-Pues, ahora no serás tú sola contra ellos. Yo te ayudare.- Dijo mientras tomaba mis manos. No podría creerlo, alguien me podría defender al fin.

Como lo dije, el fic no es mio y no tiene mucha diferencia con el original. Espero que este tenga una mejor aceptación que el original.