Escrito para el "Amigo Invisible navideño 2018-2019" del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".

Y mi AI es EsmeraldCullen02 espero que te guste tu regalo.

Encontrándote

Scorpius Malfoy soñaba con encontrar el amor verdadero, un amor tan puro como el de sus padres. Por eso, desde que aprendió a leer, se pasaba la mayor parte de su tiempo en la biblioteca, leyendo historias muggles de amor y romance. ¿Quién diría que el hijo de Draco Malfoy fuera un romántico empedernido?

Desde pequeño sus padres le contaban historias de cómo se daba el amor entre las familias sangre pura, como ellos.

"Todos los magos sangre pura tienen el don de encontrar a su alma gemela. Es como un imán que te atrae irremediablemente hacia esa persona. Es por eso, por lo que a lo largo de nuestra niñez nuestros padres realizan fiestas para socializar y de esta manera encuentres a esa persona especial para ti".

De eso ya habían pasado algunos años y solo con sus amigos había funcionado. El seguía solo, pero su padre le aseguro que en Hogwarts podría encontrar a su alma gemela.

El tiempo paso lento y tortuoso para el gusto de Scorpius, pero su carta por fin llegó. Sin perder mucho tiempo ese mismo día la familia Malfoy salió de compras al Callejón Diagon. A pesar de haber terminado la guerra, el estigma de mortífago hacia ellos seguía presente.

Mientras sus padres esperaban su vestuario para la escuela, el pequeño Scorpius salió de la tienda a dar una vuelta. De repente, algo en su interior se removió. Era como una brújula, que le decía hacia donde debía ir.

Siguiendo su impulso llegó a la tienda de quidditch. Ahí, frente a la vitrina, se encontraba la mejor escoba del mundo mágico. Una fusión entre la saeta de fuego y la nimbus 2001, las cuales tenían una velocidad impresionante.

Mientras observaba a la gente que se iba acercando, un chico despeinado y pegado al cristal llamó su atención. El niño veía la escoba con tanta insistencia que su padre tuvo que regresar por él para seguir con sus compras.

—Es hora de irnos Al.

—Papá me podrías comprar esa escoba, quisiera ser buscador igual que tu desde primero.

—Lo siento hijo, lo mío fue pura suerte. Además, la profesora McGonagall no estaría muy contenta, apenas vas a entrar a primero y los de primero tienen prohibido las escobas.

—Si tu hablas con ella, estoy seguro de que aceptara.

—Lo siento Al, será para la próxima.

Scorpius sintió como su corazón se contrajo por aquel chico, él daría lo que fuera por verlo sonreír. De repente, sintió la necesidad de decir algo, pero una mano en su hombro lo saco de sus pensamientos.

—Scorpius no vuelvas a alejarte así, me tenías preocupado.

—Lo siento padre, solo quería ver las escobas.

Mientas se disculpaba sintió cierta tensión en el aire, al levantar la mirada vio cómo su padre, y el padre del otro chico parecían incómodos. Quiso decir algo, pero su padre lo interrumpió.

—Potter —dijo arrastrando la voz con molestia.

—Malfoy —respondió Harry sin emoción alguna.

Prácticamente esa fue la señal para que ambos tomaran a sus respectivos hijos y se fueran por caminos separados.

«Si se conocen, ¿porque él nunca fue a Malfoy Manor a una de las fiestas?», pensaba Scorpius.

Mientras seguían comprando sus útiles escolares, decidió no decir nada, ya hablaría con su padre sobre lo sucedido aquella mañana.


NA: Primer capitulo de tres. Espero que te agrade Esmerald