NOTA: El sexto curso no ha ocurrido como lo ha especificado JK.
Dando tumbos
Capitulo 1-. Nuevas incorporaciones.
Harry se encontraba en la Madriguera. La Madriguera solía ser un lugar muy apacible para pasar las vacaciones, hasta que la convirtieron en la sede central de la Orden del Fénix, y sobre todo, desde que había desaparecido Ron Weasley, el mejor amigo de Harry. Todo había empezado cuando decidieron irse a desmadrar a las Vegas, EEUU. Desde entonces Ron había estado desaparecido en combate junto con su novia Luna Lovegood, durante algo más de un mes; Harry se sentía preocupado, y a la vez culpable, ya que había sido idea suya aquel pequeño viaje por chimenea.
Harry era un chico de 17 años, cabello negro azabache y alborotado que solía ocultar una cicatriz en forma de rayo que tenía en la frente. Esta había sido el fruto de la maldición asesina más poderosa e infalible (Harry fue el único superviviente de esta maldición en la historia) que existe, lanzada por el mago tenebroso del momento, Lord Voldermot. Sus ojos grandes, verdes esmeralda y debajo de unas gafas redondas. Era alto, delgado y con el cuerpo bien formado. Vestía unos vaqueros de color azul oscuro y una camiseta blanca.
- Potter, dice Molly que o bajas a comer o te mete la comida por el culo…
- ¿Pero como voy a comer por el culo?
- ¿Y yo que se? Es lo que ha dicho ella, yo solo soy el pobre mensajero que ha tenido que recorrer una larguísima distancia para poder entregarte el mensaje…
- Draco, solo has tenido que subir dos plantas… ¿ese es tú largísimo viaje?
Harry miró a su interlocutor y pensó todo lo que había cambiado en aquel último año. Draco se había convertido en uno de sus mejores amigos desde que fue a hablar con Dumbledore y le confesó los planes que tenía su padre para él. Ser mortífago. Dumbledore lo protegió (como hacia con todos los que se lo pedía) cuando el padre de Draco lo echó de casa (Draco no había dado explicaciones, cuando se lo preguntaban esbozaba una preciosa sonrisa) y en verano le había mandado ir a la sede de la Orden.
Draco tenía la misma edad que Harry (aunque era un mes mayor), los ojos grises, el cabello rubio platino, la tez pálida. Alto y de cuerpo atlético (NOTA: Para que engañarnos, de la época de Harry es el mejor que está). Vestía muy parecido a Harry, solo que sus pantalones eran negros.
- Bueno, ya bajo.
- ¿Quieres un consejo?- preguntó Draco, pero no esperó contestación-: Déjate de culpar por lo de Ron… yo iba a proponer lo mismo que tú, lo único que yo quería ir al pito de América…
- ¿Te refieres a Florida?
- ¡CLARO! Lo dicen en los Simpsons….- explicó Draco-.
- ¿Ves series muggles?
- Por supuesto.
- Dios tío, cada día me sorprendes más….- se asombró Harry, levantándose, y ambos bajaron a desayunar-.
Cuando Harry llegó a la cocina recibió un enorme abrazo-oso de la señora Weasley. Esta era pelirroja, bajita y rechoncha. Desayunando estaban: Ginny Weasley, Hermione Granger y el señor Weasley.
Ginny, la hija pequeña de los señores Weasley, era pelirroja, de ojos azules, de estatura media, delgada y pecosa. Aquel verano la pequeña de los Weasley se había terminado de desarrollar y ahora lucía un cuerpo perfecto. Ella tenía 16 años.
Hermione era casi dos años mayor que Ginny y ligeramente más alta. Tenía el cabello castaño claro y rizado, los ojos castaños, delgada y curvas suaves.
El señor Weasley, al igual que toda su familia, era pelirrojo, larguirucho y delgado.
Los señores Weasley lucían un semblante de preocupación permanente desde que su hijo había desaparecido.
- Señora Weasley, no puedo respirar- dijo Harry con dificultad-.
- ¡¡OH, Harry! Lo siento…
- No… pasa… nada…
- Mamá, suéltale- aconsejó Ginny-.
La señora Weasley soltó a Harry. Les sirvió el desayuno a Draco y a Harry, que se pusieron a comer encantados.
- Vamos chicos, desayunad deprisa, o no llegaremos al expreso Hogwarts…- comentó el señor Weasley-.
Se abrió ligeramente la puerta de la cocina y se asomó una cabeza pelirroja.
- ¡¡FRED, GEORGE, OS HE DICHO MIL VECES QUE ESTOS JUEGUECITOS NO TIENEN GRACIA!
- Hola mami… soy yo, Ron…- dijo la cabeza perteneciente a Ron Weasley- ¡He vuelto! ¿y a que no sabéis que? ¡¡ME HE CASADO!- Ron, que todavía no había entrado, ocultó la cabeza detrás de la puerta, porque su madre le lanzó un jarrón. Tras unos segundos volvió ha abrir la puerta-: ¿Has acabado o quieres seguir tirándome cosas?- la señora Weasley volvió a lanzarle otra cosa, en esta ocasión el desayuno de Ginny, y Ron volvió ha cerrar la puerta antes de que le diera-.
- ¿Puedo entrar ya?- dijo una voz femenina desde fuera-.
- Espérate un momento….- contestó Ron-.
- Es que me aburro…
- Ronald Bilius Weasley, ¿con quién demonios te has casado?- preguntó la señora Weasley-.
- Y lo más importante- intervino el señor Weasley con picardía-, ¿está buena?- la señora Weasley lo fulminó con la mirada-.
- ¡¡CONMIGO!- exclamó la cabeza de Luna Lovegood asomándose por el hueco que tenía abierto Ron-.
Ron y Luna entraron cuando vieron que la señora Weasley estaba más calmada.
- Pues si está buena- comentó, como quien habla del tiempo, el señor Weasley y Ron sonrió orgulloso-.
Ron era un chico de 17 años, alto, delgado, con buen cuerpo, pecoso y, como no, pelirrojo. Él iba con Luna, agarrados de la mano, y ella era rubia, bastante más baja que Ron (Ron era el más alto de toda la habitación). Delgada, de ojos azules claros y muy grandes y esbelta.
- Me voy ha hacer el baúl… ¡adiós!- dijo Ron después de un gran abrazo por parte de su madre, dejando a Luna sola en la cocina, y esta estaba intentando meter su baúl en la casa-.
- ¿QUÉ CLASE DE HOMBRES SOIS?- exclamó molesta la señora Weasley- ¡¡AYUDAD A LA POBRE CHICA!- Harry y Draco se dieron por aludidos e intentaron meterlo en la cocina, pero no pudieron.
- ¿Y si usáis una varita?- sugirió Hermione-.
- ¡¡CLARO!- exclamaron Harry y Draco sacándolas a la vez-.
- Yo soy menor- se disculpó Luna-.
- ¡¡BIENVENIDA A LA FAMILIA!- gritó Ginny, dejando de mirar su desayuno perdido, abrazando a su amiga y nueva cuñada, Luna Weasley-.
- ¡¡OH, Luna! Ven a mis brazos- ordenó la señora Weasley-. Pero… ¿cómo os habéis casado? Eso es de irresponsables... ¡¡a vuestra edad, digo!
- Molly, cariño, nosotros nos casamos a su edad- la señora Weasley dejó de abrazar a Luna y fulminó con la mirada a su marido. Después siguió con su charla-.
Harry, Draco, Hermione y Ginny se sintieron culpables pues la idea de que se casaran había sido suya.
- Hala, ya he hecho el baúl. ¡VAMONOS! ¿para que has metido el baúl?- preguntó Ron entrando de nuevo en la cocina- ¡con lo que pesa nos va ha costar un huevo sacarlo!- él llevaba el suyo con la varita.
- Oye Luna ¿Qué llevas en el baúl?- preguntó con curiosidad Draco-.
- Todos los amuletos que me ha metido mi padre. –contestó Luna-.
- ¿Cómo se ha tomado la feliz noticia?- inquirió el señor Weasley-.
- Muy bien. Lo que no entiendo- dijo mirando a Ron- ¿Por qué no has cogido los amuletos que te ofreció a ti?
- Luna, yo no creo en la magia- contestó fríamente-.
- Ron, eres un mago- intervino Draco-.
- ¡OH! ¿De verdad? ¿desde cuando?
- Desde siempre.
- ¡¡No me gusta que juguéis a decir bobadas sin mí!-se enfadó de broma Ginny-.
- ¡¡tengo un coche del ministerio! ¡¡os llevo!
- ¿Esa chatarra de color rosa chillón?- preguntó Ron enojado-: yo no me monto ahí ni de coña- informó-.
- ¡RON!
- Mamá, soy mayor de edad, me he casado, próximamente me mudaré con ella y haré la típica vida de casado, hasta que tienes hijos: follar como locos. Así que puedo hablar como quiera. ¿no te aparece?
- ¡Ron! No le hables así a tú madre- ordenó escandalizada Luna-.
Al cabo de media hora todos se encontraban en el andén 9 y ¾, ha excepción de Draco, que para guardar las formas se había bajado dos manzanas atrás.
Tras despedirse de los señores Weasley, los chicos subieron al tren, dividiéndose en dos: Ron y Hermione fueron al vagón de prefectos, y los otros tres buscaron un vagón. Los premios anuales de aquel año eran: Hermione y Draco.
Poco después de encontrar un compartimiento vacío llegó Neville Longbottom. Este era un chico de la edad de Harry. Alto, fornido, guapetón. De cabello castaño y ojos del mismo color.
- Guau, Neville ¡Cuánto has cambiado!- exclamó Ginny-, ¿luego quedamos?- preguntó bromeando-.
- Ja,ja,ja deja de putearme, Ginny.
- ¡Vale!- aceptó la chica, mientras que Neville se sentaba-.
- ¿Llevas una alianza, Luna?
- Si. ¡¡ME HE CASADO CON RON!- informó felizmente-.
- Enhorabuena.
- Disculpad- un chico, más o menos, de la misma edad que Harry y Neville, de cabello castaño oscuro, ojos azul verdoso, alto y de cuerpo atlético, entró en el compartimiento-. ¿Puedo sentarme?
- Están ocupados…
- Ah, bueno, vale… de todas formas gracias…
- Oye, ¿cuál es tú nombre?- preguntó Harry al chaval cuando se iba a ir-.
- Elijah, Elijah Williams…- se presentó-. ¿y vosotros sois…?
- Neville Longbottom, Ginny Weasley, Luna Lo.. Weasley y Harry Potter- presentó Harry-.
- Oh, encantado- dijo Elijah marchándose-.
- Bueno- dijo Neville entonces-. Yo sólo he venido a saludaros. Me tengo que ir… he quedado- comentó esbozando una tímida sonrisa-.
- ¿Has quedado?- preguntó Ginny haciéndose la ofendida-. ¿con quién?
- Con Lavender…
- Joder, lo podías haberlo dicho antes, si ves a Elijah dile que hay un sitio libre- le pidió Harry-.
- OK- aceptó Neville antes de irse-.
- ¿Neville con Lavender? Increíble- murmuró Harry-.
- Está como un tren- replicó Luna-. Es normal.
- ¡¡Oye! Tú estas casada- la regañó Ginny-.
- ¿y qué? ¡le puedo mirar! Además no esta Ron y me aburro.
- ¿Podéis dejar de hablar de chicos?- masculló Harry-.
- ¿Te molesta que no hablemos de ti?
- ¡¡PUES SÍ!- refunfuñó el único chico que había-.
- ¿Hola?- dijo una voz femenina desde la puerta-. ¿Puedo pasar? Es que este compartimiento es el único que queda medianamente libre, este y el de mi hermano… pero no me gustan sus amiguitos, me miran raro… y se supone que yo no estoy aquí… ¡¡es una sorpresa!- era una muchacha rubia, de ojos azul claro (más claros que los de Luna), de estatura media, delgada y de perfectas curvas.
- Claro- respondió Ginny-. Toma asiento.
- Gracias.-sonrió la chica-. Por cierto soy Jade.
- Harry.
- Ginny.
- Luna.
La puerta se abrió por cuarta vez y Ron entró disparado hacia Luna, con la que se empezó a enrollar. Detrás de él venía Hermione.
- Hola- saludó Hermione y miró a Jade con una ceja alzada.
- Ella es Jade- se apresuró a presentar Ginny-.
- Encantada, soy Hermione, y ese es Ron, ¿verdad Ron?- Ron y Luna habían pasado de "enrollarse" a "meterse mano descaradamente", por lo que pasaban de todo el mundo-.
- Venga. Yo me piro. Esto está petado- comunicó Ginny, mientras salía-.
- ¡CHICOS! Está muy bien que os queráis mucho, pero ¡parad ya!- gritó Herms-.
- Esto…- empezó Ron-.
- Es que queremos que estéis presentes en la concepción de nuestro primer hijo- explicó alegremente Luna-.
- ¡¡POR FAVOR!- pidió Harry-: iros a concebir al baño.
- Vale, vale… ya nos vamos, ¿en serio queremos que estén presentes?- le preguntó incrédulo Ron a Luna cuando se iban-.
El resto del viaje Harry y Herms se lo pasaron hablando con Jade. Ron y Luna desaparecidos. Y Ginny con… ¿Dónde coño se había metido Ginny?
Ginny se había ido al vagón de los chicos de 7º-Slytherin, en el que sabía que estaba Draco.
Al entrar en él, sin llamar ni nada, se sorprendió al ver a Elijah Williams entre ellos.
- ¡¡Hola chicos!- saludó alegremente Ginny al entrar-.
La cara de los Slytherin allí presentes era un cuadro, y empeoró aún más cuándo la pelirroja tomó asiento encima de las piernas de Draco.
- ¿Qué coño haces, Weasley?- exclamó "enfadado" Draco-.
- Me siento, creía que era obvio. Por cierto, Malfoy, tienes unos amigos un poco... maleducados… hola- les dijo ofreciéndoles su mano para saludarse. Ante ese gesto Draco sonrió disimuladamente, y sus compañeros, pusieron peor cara, a excepción de Elijah, que la estrechó alegremente-. Mirad, se hace así- les explicó Ginny cogiendo la mano de Crabbe y estrechándola con fuerza ante la expresión de asombro de este-. Venga, ahora tú Blaise.
Vicent Crabbe era fornido, con pelo cortado a lo tazón y grandes brazos de gorila y Blaise Zabini era un chico negro de gran estatura, grandes pómulos y ojos muy inclinados.
- Muy bien chicos, en la próxima clase estudiaremos como no se nos debe caer la baba.
- ¿No estás tomando el pelo, Weasley?- preguntó ofendido Blaise-, ¿y quién te crees que eres para llamarme por mi nombre de pila?
- Ginny Weasley. Encantada- dijo ofreciéndole, de nuevo, la mano-.
- Estás loca- afirmó Blaise estrechándole la mano, mientras que Crabbe miraba con cara de atontado la mano que Ginny le había tocado-.
- OH, calla, calla, que me sonrojo…
- Weasley, hay sitio de sobra, no hace falta que te me sientes encima...- comentó el rubio-.
- Estoy muy cómoda aquí… por cierto, llamadme Ginny. ¿Quién creéis que va ser el nuevo profesor de DCAO?
- Un mortífago- contestó Draco, todos le miraron con incredibilidad-.
- Explícate- ordenó Blaise-.
- En primero, mortífago, segundo y tercero, buenos, en cuarto, otro mortífago, en quinto y sexto, bueno…
- Ejem, ejem…- llamó la atención Ginny-. Yo no calificaría a Umbridge como buena.
- Bueno da igual. Por regla general, este año toca mortífago.
En el Gran Comedor:
Todos los alumnos acababan de llegar al Gran Comedor y esperaban impacientes que acabara la selección de los nuevos alumnos. Cuando parecía que todo había acabado, Dumbledore se levantó y dijo unas palabras.
- Por motivo de un doble traslado hemos recibido a dos nuevos estudiantes. Demos la bienvenida a…- se abrieron las puertas del Gran Comedor y entraron Elijah y Jade.
- Malfoy- hubo un extraño silencio-, Jade- llamó la profesora McGonagall. La chica se acercó al taburete y se puso el sombrero seleccionador. Harry, al enterarse del apellido de la chica, fulminó a Draco con la mirada preguntándose de cómo su amigo no le había contado que tenía una hermana.
- ¡¡GRYFFINDOR!- gritó el sombrero seleccionador. Jade se fue hacia donde Harry-.
- Williams, Elijah- Hermione giró bruscamente la cabeza y miró al chico diciendo, silenciosamente, el nombre del chaval-.
- ¡¡SLYTHERIN!- comunicó el sombrero después de que se lo hubiera puesto.
Elijah se fue hacia Draco.
- Bien, después de esta repentina selección, ¡¡qué comience el banquete!- exclamó Dumbledore -.
En ese instante Draco se levantó de la mesa y caminó hacia su hermana.
- ¿Por qué no nos dijiste que eras hermana de Malfoy?- preguntó extrañado Harry-.
- No me lo preguntasteis. Además, aunque me apellide igual, puedo ser su prima….
- Cierto- musitó Harry pensativo-. No lo preguntamos.
- ¿Qué coño haces aquí?- le preguntó Draco a Jade cuando llegó junto la mesa de Gryffindor -.
Jade se levantó, colocó sus manos en el cuello de Draco y comenzó a besarle por toda la cara (mejillas, barbilla, nariz y frente).
- ¡Que guapo estas! ¡Cuánto has crecido! ¡No te puedes imaginar cuanto te he echado de menos!- exclamó entre beso y beso -.
- Y yo a ti, pequeñaja- la besó en la frente y después la abrazó -.
- Eres un cabrón – le insultó separándose bruscamente de él-. No me has escrito en todo el verano. Soy tu hermanita y me tienes abandonada.
- Venga Jade no te pongas melodramática y dime qué haces aquí- repitió Draco-.
- Estudiar, Draco, estudiar. ¿Qué voy a hacer sino?
- Se supone que estudias, estudias en Beauxtons.
- Me fui y como te quiero tanto, decidí venirme a tu colegio… Además en Dustrang no me admiten.
- ¡OH! Que considerada- comentó sarcásticamente Draco-.
- Ya hablaremos tú y yo- le susurró Harry a Draco-.
- Bueno, yo me vuelvo antes de que me quiten la comida, los de Slytherin son unos gorrones- explicó Draco-. Que os cunda- se despidió volviendo a su "queridísima" mesa-.
Al acabar la cena, y al acabar el discurso de Dumbledore, los alumnos empezaron a irse a sus respectivas salas comunes. Hermione se levantó mientras no dejaba de mirar, con incredibilidad a la mesa de Slytherin. Y desde esta un chico, Elijah, la miraba a ella directamente. El chico comenzó andar a andar hacia ella mientras que esta corría hacia él, hasta fundirse en un abrazo mutuo.
- Te quiero…- susurró Hermione, y dándose cuenta de su error añadió-: fraternalmente hablando, claro.
- Me lo imaginaba- corroboró Elijah-.
- Hermione- llamó la voz de Harry desde la espalda de esta-. Hay que llevar a los enanos a la sala común.
- ¡¡Harry no son enanos!
- Eso es lo que dice Ron, y como está ocupado- explicó Harry señalando a Ron que se besaba apasionadamente con Luna-.
- Tienes razón. Hasta luego Elijah, tenemos mucho de lo que hablar- Hermione le dio un beso en la mejilla y corrió hacia los de primero-.
- ¡¡Weasley!- llamó Draco, claramente, a Ginny. Él venía junto con sus "amigos" de Slytherin -.
- ¿Qué Malfoy?- replicó Ginny mirándoles-.
- Han decidido adoptarte….
- Yo ya tengo familia- recordó Ginny-.
- Eso significa que te dejan estar con nosotros…
- ¡OH! Que gran honor- ironizó Ginny-. Espera un momento, eso significa… ¿qué tú también me adoptas?
- Por eso me gusta tanto- explicó Blaise- es encantadoramente divertida…
- Me temo que sí… - ignoró Draco a Blaise-.
AL DÍA SIGUIENTE
Después de las clases Draco y Ginny paseaban por un pasillo, en el que se encontraron a Harry, Jade, Ron y Luna.
- Hei, chicos- dijo la voz de Hermione detrás de Draco y Ginny-. Hola- esta venía hablando con Elijah-. Que coincidencia que nos hallamos encontrado todos aquí…
- De coincidencia nada- replicó Harry-, os estábamos buscando.
- OH.
De la nada apareció un cúmulo de luz blanca alargado y estrecho. En ella pudieron distinguir unas sombras.
- ¡¡PAPÁ!- dijo una voz masculina desde el cúmulo de energía-.
Buenas! Somos las Twins Sisters y aquí os dejamos nuestro primer capitulo de nuestro primer fic escrito a ordenador, que ha sido el primero que hemos colgado…. Esperemos que os guste J
FDO: Holly & Sam
DEJEN REVIEWS.
Posdata: Bueno, y el titulo es provisional… Aceptamos sugerencias para cambiarlo… muchas gracias
8/IV/2006
