Entre ninjas, entre guerreros
(Pequeño capitulo piloto, universo alternativo, algunas actitudes cambiadas levemente)
Puntos a tomar en cuenta:
1. Esto solo es un capitulo piloto para un futuro fic.
2. La trama se desarrolla en un mundo completamente distinto y ajeno a las tramas de ambas franquicias cruzadas, a excepción de varios eventos aleatorios pertenecientes a dichas tramas originales.
3. La habilidad de vuelo no esta y ni estará presente en este capitulo ni en la historia futura.
4. Algunas actitudes están sujetas a ser distintas a las de sus contra partes canónicas.
Renuncia de derechos: Ni Dragon Ball ni Naruto me pertenecen, les pertenecen a Akira Toriyama y a Masashi Koshimoto respectivamente, mas esta historia si tiene toques propios de mi autoría, la cual no se hace con fines de plagio o lucro, es solo una historia hecha por un fan para fans. Enjoy!.
Capitulo Piloto: Carrera ninja.
Las viejas leyendas nos cuentas sobre la fundación de las cinco grandes naciones ninja… Guerras, destrucción, anarquía, desolación, entre todo ese caos de clanes habían tres que sobre salían por encima del resto, siendo que una generación de sus líderes fue la conocida como la "triple amenaza" pues cuando uno de esos ninjas aparecía en el campo de batalla la destrucción le acompañaba, así como el mismo respeto de todo su clan.
Son Yamoshi, Senju Hashirama y Uchiha Madara… Tres leyendas entre los ninjas, tres monstruos en el uso del Ninjutsu, Taijutsu y Genjutsu.
Su poder era tan grande que ningún clan rival se podía oponer a ellos, pero gracia al cielo, Yamoshi y Hashirama tenían un gran corazón, puro y noble que en un momento determinado pudieron unirse a los Uchiha para dar nacimiento a la idea de Hashirama, una aldea ninja en donde hubiera paz, en donde los niños pudieran escapar de todo conflicto y ya no pelearan.
Esa aldea fue conocida más tarde como la "Aldea escondida entre las hojas" siendo sus principales fundadores los monstruos antes descritos, por un lado la gran fuerza brutal, la habilidad innata para las técnicas de alto nivel de chakra, por otro el temible elemento madera, una habilidad de curación temible y cientos de técnicas, así mismo el tan temido Sharingan y las grandes habilidades combativas dieron inicio a la era ninja actual.
Durante sus primero años, Konoha gozo de gran prosperidad y pronto el resto del mundo ninja adopto el sistema militar que el país del fuego había iniciado con la instauración de una aldea exclusivamente ninja que velaba por proteger a la nación. En un principio los tres líderes de los tres clanes más fuertes de Konoha debatieron sobre quien debía ser el primer Hokage, si Hashirama, si Yamoshi o Madara, el primero alegaba que el puesto debía ser dado a Madara para que de este modo los aldeanos y demás personas de la aldea confieran más en los Uchiha, cosa que Yamoshi también aprobaba, siendo que este último era casi un hermano de Hashirama y Tobirama por las altas tradiciones que había entre los clanes Son, Senju y Uzumaki de la tierra del remolino.
Pero… Todo se fue a la basura cuando Madara traiciono a la aldea y se fue para después retar a Hashirama sin impórtale si también tenía que luchar contra Yamoshi, pues de los tres, sin dudas el Son era el más temible de todos, no obstante, la lucha fue diferente, siendo al final la batalla entre Madara y Hashirama siendo vigilados por el líder del clan Son.
-¡Hashiramaaaaa!-
-¡Madaraaaaaa!-
-¡Yamoshiiiiiii!-
-*¡BOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOM!*-
Décadas después: Konoha.
Los rayos del Sol daban en toda la aldea de la hoja, la tranquilidad se comenzaba a respirar después de que amenas unos meses atrás la segunda guerra mundial ninja terminara gracia a la victoria de Konoha sobre la roca y el rayo firmando un armisticio para detener las hostilidades entre las tres grandes naciones ninja.
Por las calles una mujer de complexión delgada y facciones muy femeninas caminaba, siendo que entre sus brazos cargaba un pequeño bulto y a su lado caminaba muy serio y disimulando todo lo que podía el aparente esposa de la mujer. -¡Gine-san! ¡Bardock-san!- les llamaron de repente, haciendo que estos voltearan hacia donde les llamaban.
-¡Es muy lindo! Verdad que es un bebé muy lindo…- una señora le daba mimos al pequeño bebé que la mujer de antes cargaba entre sus brazos, siendo que su padre, un hombre alto, tez bronceada, una cicatriz en forma de equis en una de sus mejillas estaba de brazos cruzados esperando a que su "adorable" esposa dejara de estar jugando con la mujer aquella que los detuvo para ver al nuevo integrante del todo respetado y apreciado clan Son. -¿Y cuál es el nombre de esta preciosura?- preguntaba con una sonrisa cálida la mujer mirando a la otra la cual ladeo su cabeza, pues no habían pensado en un nombre para su segundo hijo.
-No se… Bardock, ¿Qué nombre me dijiste?-
Llamo a su esposo, el cual miraba el cielo azul de la aldea, este portaba el casi traje ninja con su banda de regulación su frente, como todo un Jounin de elite. -Creo que me habías dicho que se llamaría, Goku- sin mirar a su esposa y fingiendo indiferencia el Son mayor revelaban, causando que el pequeño ser que cargaba su esposa riese ante el nombre, pues le había gustado.
-¡Mira, Bardock! Le gusto el nombre…- el hombre de cabellos puntiagudos y que no parecían respetar ninguna lógica se llevo una de sus manos a su rostro, pues no entendía por que se había casado con una mujer como ella, aun que bien lo sabía, a pesar de no ser una ninja de elite como él, eso no quería decir que no se sintiera atraído por la gentileza que solo ella tenía con él y los suyos.
-"Maldita la hora en la que me enamore de ti, Gine… Pero, también gracias a ti soy un poco menos bruto"- pensó ruborizándose un poco el estricto shinobi, siendo que su esposa converso un poco mas con aquella señora que los había detenido para ver al bebé recién nacido, pues apenas y volvían del hospital.
Pasados un par de minutos adiciones, por fin le matrimonio llegaba a su casa, siendo recibidos por un pequeño de cabellera negra como la de su padre y larga que le llegaba mas allá de su cintura. -¡Papá…! ¡Mamá!- les llamo corriendo hacia sus progenitores que abrían la puerta de la casa.
-¿Qué pasa, Raditz? ¿Por qué tanto alboroto?- Gine con cuidado de no soltar a su bebé regaño a su hijo mayor al ver como este saltaba contento. -¡Quiero verlo! ¡Quiero ver a Nii-chan!- contento, el jovencito esperaba a que su madre le permitiera verlo, cosa que la hizo sonreír pues el entusiasmo en su hijo era muy evidente al saber que sería hermano mayor.
-Está bien, solo cálmate o voy a tirar a tu hermano-
Después de entrar por completo a la casa la mujer le permitió ver a Raditz quien era su hermano menor, el cual era idéntico a su padre, Bardock. -Se parece a papá- comento el chico mirando como dormía tranquilo el bebé o mejor dicho Goku bebé.
-¿Cómo te fue en la academia?- Bardock que se acerco a su hijo mayor y a su esposa le preguntaba siendo que el chico le miro momentáneamente. -Apenas hoy nos presentamos, papá… ¡Ya veras, me voy a convertir en el Saiyajin mas fuerte del clan!-
-Eso espero, al ser miembro del clan Son debes serlo-
-Bardock, no lo presiones tanto… Eso de los Saiyajin es solo una leyenda del clan, nosotros solo somos miembros del clan Son, nada más, no tenemos ningún Kekkei-Genkai o algo parecido- Gine le recrimino a su esposo el hecho de que le llenara la cabeza de historias fantásticas sobre el primer líder del clan Son, el cual se contaba tenía un poder tan grande como ningún otro ninja en su tiempo, al cual apodaron como el "Súper Saiyajin" por la extraña línea de sangre que supuestamente el clan tenia.
-Sí, si lo que tu digas…- Sin hacerle mucho caso, el hombre paso a un lado de su esposa tocándole la cabeza para después agitar sus cabellos cosa que la molesto pero hizo reír a su hijo Raditz.
-Nii-chan duerme mucho… ¿Está vivo?- esa nueva pregunta por parte de Raditz llamo la atención de su madre la cual soltó una pequeña risa al escucharlo. -jaja Como eres hijo, ya veras, cuando despierte de seguro no nos dejara dormir, justo como tú cuando estabas así de pequeñito-
Raditz se encogió de hombros pues escuchar aquellas palabras de su madre le avergonzaron…
Después de eso y con cuidado de no tirarlo, Gine se levanto con su pequeño aun en brazos, dando varios pasos hasta llegar a su habitación, en donde le esperaba la cuna que Goku habitaría durante su infancia, solo esperaba que no fuera tan ruidoso y la dejara dormir pues bien recordaba cuando Raditz también era un bebé, la pobre no dormía por cuidarlo siendo que hasta Bardock con todo y mal genio había soportado los lloriqueos de su hijo mayor, así que la amorosa mujer esperaba que su marido también le diera una mano con Goku el cual para su suerte dormía placido.
Le miro con una sonrisa en sus labios, observando la pequeña cara de su bebé… Se sentía tan feliz de por fin conocer a ese pedacito de cielo que estuvo dentro de ella durante nueve meses.
-Serás un gran shinobi, un gran guerrero… Crecerás fuerte, serás fuerte, el más fuerte Son que ha existido y cuando llegue el día encontraras a la niña más hermosa de este mundo y me darán muchos nietos cuando sean grandes jijiji-
La mujer ya pensaba a futuro, pues de verdad sus esperanzas de que la paz reinara durante la infancia de su hijo menor eran totales, pues tanto él como su hermano, Raditz no tenían lo culpa de las complicaciones que se estaban dando.
Años después: A fuera de Konoha.
Un hombre ya mayor caminaba tranquilo por una de las tantas veredas de la aldea, a su lado, un pequeño de aproximadamente unos cinco años de edad también andaba contento, sonriente, su cabello alborotado y en puntas, muy parecido a su padre, solo que sin la mirada casi siempre rígida y una sonrisa presente.
-Ya no estoy en edad para esto…- con un pañuelo se limpiaba el poco sudor que se presento en su frente, siendo que estaba un poco a jorobado, un gran bigote blanco se miraba así como vestido con una ropa muy tradicional.
-Vamos, abuelito… Me dijiste que me acompañarías para ver la estatua de Son Yamoshi- sonriente y sin perder su alegría el bebé había crecido, pues ese pequeño de antes era a hora Goku, el cual estaba contento de por fin ver esa tan importante estatua a la cual casi todos los del clan le rendían tributo y admiración por ser uno de los fundadores de la aldea.
-Bueno hijo… A tu edad es fácil decirlo, pero yo, yo ya estoy muy viejo para caminar tanto jeje- riendo un poco, el abuelo de Goku y padre de Gine le comentaba, cuyo nombre era Gohan o mejor dicho Son Gohan, pues él era ni más ni menos el patriarca del clan Son.
Caminaron un poco más encontrándose con, "El santuario del dragón", Uno de los símbolos más importantes del clan Son, en donde estaban bajo llave grandes secretos de este, entre los cuales descansaba celosamente la leyenda del Kekkei-Genkai igualmente legendario: El Súper Saiyajin.
En frente de la gran estructura con estilo colonial, se alzaba orgullosa la estatua de un hombre el cual en aspecto era un poco parecido al pequeño Goku, solo que su cabello era abundante, así como sus ropas se asemejaban a las que portaban los samuráis, estaba sobre una base ancha y gruesa de piedra en donde se podía ver la leyenda, "En honor al gran dragón… En honor al más grande Son que ha existido, el siempre humilde, poderoso, sabio y noble, Son Yamoshi".
[Nota del autor: Imagínense a Goku con traje samurái y con el mismo cabello del súper Saiyajin 4. Fin de nota.]
-¿Es él? ¿Es Son Yamoshi?- con sus dos orbes negras iluminadas, Goku observaba con asombro cada parte de la estatua la cual tenía en frente de su rostro una de sus manos haciendo un característico sello ninja a la par que en su mano derecha una pequeña esfera de piedra se miraba, la cual llamo la atención del jovencito que voltio hacia atrás para ver a su abuelo que también llegaba. -¿Qué es eso abuelito?-
-¿Hm?-
El abuelo Gohan elevo la mirada, a notar como su segundo nieto le apuntaba algo con una de sus manos, encontrándose con aquella esfera que descansaba en la palma izquierda extendida del antiguo líder Son.
-Ese es el Kekkei-Tota de nuestro clan, hijo…-
-¿Kekke… que cota?- se rasco la cabeza en confusión al escuchar aquellas palabras el pequeño, haciendo reír a su abuelo que le miraba con una tranquila y feliz sonrisa. -Kekkei-Tota… El conocido como "Elemento luz" o "Tengoku" algo así como "estilo celestial". Se dice que Son Yamoshi fue el primer usuario de este elemento, justo como Hashirama fue el primer y único usuario conocido del Mokuton o estilo madera-
Goku escuchaba con especial atención las palabras de su abuelo que se había sentado sobre la pequeña barda que estaba al pie del camino, sin duda necesitaba descansar un poco después de haber caminado tanto.
-Abuelito… Cuéntame más de Son Yamoshi-
El niño se sentó al lado de su abuelo, el cual con gusto atendería a su curiosidad.
-Bueno, ¿Que te puedo contar…?- pensó por unos instantes que contarle a su nieto, a su tan adorado nieto al cual había entrenado arduamente en el Taijutsu o artes marciales, pues el chico tenía unas ansias de aprender a pelear como jamás había visto antes.
-Se dice que Son Yamoshi fue el ninja más fuerte en su tiempo, superando incluso al gran primer Hokage, hubieron quienes incluso creyeron que nuestro clan venia de las estrellas por lo fuertes que eran nuestros guerreros jojojo… Pero, lo cierto era que Yamoshi a pesar de ser extremadamente poderoso, era un ninja gentil, generoso y que solo tenía un ideal, proteger a su pueblo, él junto al primer Hokage y Madara Uchiha fundaron la aldea… Ellos tres eran y tal vez serán los tres ninjas más fuertes que jamás existirán en este mundo-
Goku se había emocionado al saber que su antepasado eran así de fuerte, pues las ganas de llegar a esos niveles era algo sorprendente y que le hacía hervir su sangre de la simple idea de hacerlo, era por eso que entrenaría, entrenaría mucho para convertirse en el Son más fuerte de todos.
-Ya verás abuelito, yo los superare algún día… Seré el más fuerte y peleare contra los ninjas más poderosos del mundo… ¡Hasta ser el ninja más fuerte!-
El abuelo Gohan reía al escuchar el entusiasmo de su nieto, si algo no le faltaba a ese niño era eso mismo, entusiasmo y perseverancia, pues sin importar el reto nunca se echaba hacia atrás a pesar de tener miedo o todo en su contra.
-Confía en tus fuerzas y lo lograras, hijo mío… Tienes la fuerza de tu padre, pero el buen corazón de tu madre, el día en que logres combinar esas dos cosas no dudes que te volverás en el Son más fuerte e incluso podrías a llegar a despertar el mítico Kekkei-Genkai del clan jajaja Aun que creo que ya exagere mucho jojojo-
Soltando aquella nueva risa, el anciano observaba a su nieto, el cual no dejaba de sonreír, pues cuando él decía una cosa la cumpliría sin importar que.
-¡Abuelito…! Te quiero mucho-
-Yo también hijo jojojo… Yo también-
Goku se abrazo de Gohan, también riendo, pues sin dudas el pequeño se la pasaba muy bien cuando estaba con su tan querido abuelo o con el viejo Roshi el sabio del clan, del cual se decía tenía mucho tiempo ya vivo, lo único malo de este último era que no se escapaba de ser un viejo rabo verde, atrevido y mañoso.
Pasado un rato más abuelo y nieto volvían a la gran casa de los padres del pequeño en donde se encontraron con la siempre alegre y contenta madre del joven Son.
-¿En donde andaban jovencito?- de inmediato preguntaba la mujer de cabello negro al ver como su padre y su hijo menor entraban a la casa.
-Fui con mi abuelito a ver la estatua de Yamoshi-sama, mamá-
La mujer soltó un suspiro cansado a la vez que se llevaba sus manos a cada lado de su cintura en un claro gesto molestoso, para después ver a su padre. -¿Papá tu también le van a llenar la cabeza de historias a Goku?-
-No es para que te enojes, hija… No es nada malo que Goku aprenda sobre la historia del clan o ¿Si, lo es?- Gohan argumentaba en su defensa caminando hacia donde su hija estaba cerca de la estufa preparaba cantidades masivas de comida, pues dos bocas "maduras" del Clan eran un verdadero tormento para alimentar, por no decir que el pequeño Goku para solo tener seis años también ya comía mucho una labor endemoniadamente grande para Gine que tenía que estar casi todo el día cocinando.
-Bueno, bueno está bien, papá- resignada la pelinegra se giro, mirando como una cacerola que tenia sobre el fuego comenzaba a dar indicios de que la comida que portaba ya estaría lista.
-Tengo hambre- tocándose su barriga, Goku se sentó en la mesa del centro de la sala de la casa, esperando a que su madre le sirviese de comer, pues la hora de la comida ya estaba próxima.
-A hora que tu padre y tu hermano vuelvan comeremos, ten paciencia-
Y dicho y hecho, la familia no comió hasta que no llegaron Bardock y Raditz el cual ya era como su padre un Jounin, a la edad de 15 años, como era de esperarse de los Son, pues la mayoría de los chicos de esa edad dentro del clan ya eran ninjas de alto nivel.
-Enano jaja- Raditz se burlaba de su hermano menor, al cual alborotaba su cabellera para el disgusto del pequeño que hacia pucheros de molestia pero no decía nada, ya que después de todo estaba acostumbrado a ser molestado por su molesto hermano mayor.
-Raditz, deja a tu hermano en paz- Gine le regaño dándole un pequeño zape en la cabeza, haciendo que este dejara de molestar al pequeño Son el cual sonrió al ver como su madre por fin le paraba los pies a su otro hijo.
-Solo jugamos, ¿Verdad enano?-
-Raditz, has caso a tu madre-
Con voz rígida y un poco amenazante, Bardock hablaba, mirando con detenimiento a su hijo mayor haciendo que se encogiera de hombros resignado ante el también regaño de su estricto padre. -S-si papá, pe-perdón-
-Había sentido la presencia de Gohan, ¿Dónde está?- el Son mayor le pregunto a su esposa que se sentaba a su lado la cual sin dejar de verle se dispuso a responderle. -Bueno, solo vino a dejar a Goku, me dijo que iría a ver a Roshi-sama-
-Ya veo…- fue lo único que respondió el azabache mayor, notando como sus dos hijos comían sin detenerse, siendo que el de inmediato también empezó la tenebrosa empresa de alimentarse, de verdad, esa pobre mujer tenía que aguantar a todos esos tragones, pero les quería mucho, la cual se abrazo al hombro derecho de un distraído Bardock haciéndolo sonrojarse a la par que dejaba de comer por el acto de su esposa. -O-Oye… Su-suéltame, Gine- apenando pedía, pero parecía que su esposa no quería hacerle caso ya que se aferro con más fuerza, haciendo que el Son se apenara aun más.
-jajaja- tanto Raditz como Goku comenzaron a reír al ver la pena de su padre, pues al parecer siempre si tenía una debilidad, a pesar de siempre parecer enojado y gruñón.
La tarde paso rápido, entre risas y momentos familiares, sin saber que los días de paz habían llegado a su final.
Torre Hokage:
-¡No puedo creer que la nube nos traicionara!- gritaba uno de los consejeros de la aldea, siendo que en medio, estaba el actual cuarto Hokage, Hiruzen Sarutobi.
[Nota del autor: Cuarto Hokage, por que el segundo Hokage en este mundo alterno fue Yamoshi, sucedido de Tobirama para después ser Hiruzen. Fin de nota.]
-Sin dudas esta traición desestabiliza el equilibrio de poder en toda la zona… No nos ayuda en nada que la roca y la nube hayan decidido traicionar el tratado de paz hecho después de la primer guerra- a hora una mujer opinaba, siendo la segunda consejera de la aldea.
El Hokage escuchaba el dialogo en silencio, después de años de paz, a hora, ¿La guerra volvería a llamar a las puertas de Konoha? se preguntaba el cuarto, suspirando con fuerza.
-Opino que deberíamos atacar cuanto antes, mis espías en la roca me han hecho saber cuáles son los planes de estos, tenemos a los Uchiha y a los Son, no necesitamos compasión, necesitamos acciones- con molestia la tercer persona en el lugar hablaba, mirando directamente al líder que seguía meditando lo que se aria.
-Dudo mucho que un contraataque nos ayude de mucho- por fin respondió, confundiendo a los otros tres.
-Hiruzen… ¡Debemos actuar o de lo contrario la aldea puede ser atacada!- replicaba aun más molesto que antes el mismo hombre de cabello negro y media cara cubierta por vendas.
-Danzo… ¿Crees que precipitándonos vamos a cambiar lo que se viene? El remolino también nos ha informado que las tropas de Kirigakure traman algo, debemos ser pacientes, preguntarnos cual será el próximo movimiento de las naciones ninja y no atacar de forma apresurada o de lo contrario podríamos empeorar la situación-
Frunciendo el ceño, el hombre aquel al que el Hokage había llamado, Danzo callo en sus reclamos, pues aun que no le gustaría, el líder tenía un poco de verdad en sus palabras, atacar de forma apresurada lo complicaría todo, lo más sensato sería pensar bien el primer movimiento que se aria, esto con el fin de evitar complicaciones que fácilmente se pudieron haber evitado.
-Hablando del remolino, el nuevo "contenedor" del Kyubi llegara en estas semanas- informaba la mujer consejera, haciendo que los demás le mirasen. -Bueno, al menos eso es una buena noticia, lamentablemente Mito-sama ya está muy anciana y que el remolino nos haya cedido a un nuevo contenedor es algo sin dudas excelente- Danzo volvía a tomar la palabra, en una clara opinión sobre lo que les acababan de contar.
-"Después de apenas unos años de paz la guerra vuelve… ¿Qué hubieran hecho ustedes maestros?"- Sarutobi pensaba, recordando al primero, al segundo y al tercer Hokage.
Días después: Terrenos del clan Son.
-¡Feliz cumpleaños!-
Gine, Bardock, Raditz, el abuelo Gohan y el sabio Roshi celebraban el sexto cumpleaños de un contento Goku que reír sin detenerse.
-¡Gracias por el pastel!- el niño prácticamente babeaba al ver el gran aperitivo que tenía en frente, pero lo que más felicidad le daba sin dudas, era que mañana entraría a la academia ninja, estaba impaciente por pulir sus habilidades, su abuelito y su padre le habían entrenado en el Taijutsu, mientras, el gentil sabio, es decir Roshi le habían enseñado varios jutsus.
-Ara, ara, menos plática… Come hijo jeje- Gine le partió un pedazo de pastel, esperando a que su hijo comenzase a degustarlo él cual no desistía en su alegría.
-¡Gracias mamá!-
Todos empezaron a reír al ver como el niño impaciente se llenaba toda la cara de pastel, cosa que era muy, pero muy graciosa.
Bardock miraba en silencio y un poco apartado a su hijo, eran prácticamente idénticos, solo que él era un poco más moreno, sonrió cerrando sus ojos y ladeando su cabeza hacia el suelo, recargado en el borde cercano a la puerta de la casa. -"Crece fuerte, Goku…"- fue el pensamiento del padre que junto a su hijo mayor se irían a la guerra, pues ya les habían informado a todos los Jounin y Chunin que se prepararan, la segunda guerra ninja había comenzado.
Al día siguiente:
Goku se había despedido de su madre y de su abuelo, tanto su padre como su hermano mayor no estaban cosa que le había parecido extraña, pues siempre estaban entrenando un poco en el jardín, cosa que esta vez no era así, a paso lento, el pequeño azabache deambulaba por las calles de la aldea, la cual parecía un poco más solitaria que otras veces, pero bueno, no hizo tanto caso, en vez de eso continuo su caminar hacia la academia ninja, estaba emocionado, ese sería su inicio en su sueño, se convertiría en el ninja más poderoso, viajaría por todo el mundo peleando contra los ninjas más fuertes, ese era su sueño.
Por fin diviso la academia a la distancia, comenzando a correr hacia esta, con una sonrisa en su rostro y el buen corazón que le caracterizaba llegaba por fin a esta, siendo que ya habían varios niños fuera, esperando a que los profesores, los cuales eran Chunin les indicaran que ya podían pasar.
-¿Goku?- se escucho de repente, pues al parecer alguien llamaba a l pequeño Son, el cual se giro encontrándose con una chica un poco más alta que él, pero siendo que esta tenía la misma edad que el muchachito. -¡Cualifla-san!-
-Mira, mira, quien lo diría, el enano del clan ya viene a la academia- la chica se mofo del muchacho, pero este solo se reía ante lo que le habían dicho, cosa que fastidiaba a la niña ya que le encantaba hacerlo molestar, aun que rara era la vez en que lo lograba, detrás de ella, otra niña también se notaba, siendo que esta parecía muy tímida, por no decir que escondía su mirada de todos los que le miraban.
-Kale… Ten más confianza, es nuestro primer día en la academia, no seas asustadiza- de brazos cruzados y denotando una edad mayor a la que realmente tenia, aquella chica de cabellos negros y puntiagudos le decía a la otra chica, que dio un pequeño respingón ante lo que su hermana le había dicho.
-S-si… Caulifla-nee- tímida como siempre la chica agacho su mirada al sentir como Goku le observaba confundido, esa niña siempre era muy tímida, pero bueno, creía que era algo "natural" como así decirlo.
De entre la multitud de niños, se podía ver también a un chico rubio, cabellos un poco largos por no decir que tenía ojos azules como el mismo mar, este estaba tranquilo, esperando a entrar a la academia, no fue hasta que uno de los profesores ninja se acerco a los muchachos, haciendo que estos de forma inmediata también se acercaran a este, hasta aglomerarse alrededor de este.
-Buenas días niños y niñas… Hoy inician sus clases en la academia ninja…- empezaba a comentar, no fue hasta que miro como aquella muchacha que estaba junto a Goku y Kale levantaba la mano en un claro indicio de querer tomar la palabra.
-Oiga… ¿No va a venir, Hokage-sama?- con curiosidad preguntaba la pelinegra, a lo que el Chunin se quedo pensativo por unos instantes para después proceder a responder.
-Lo siento niños, pero Hokage-sama no va a poder venir esta vez para darles la bienvenida a este año escolar-
Caulifla ladeo su cabeza un poco para después murmurar algo que no se logro escuchar.
Aquel chico rubio de antes paso al lado de Goku y sus dos amigas y que al parecer también pertenecían a su clan, este miro de forma momentánea al pequeño Son, y a Caulifla la cual no tenían un humor muy llevadero. -¿Qué estas mirando cabello de cebolla?- la niña le pregunto al oji azul que retrocedió al ver lo agresiva que esa niña había sido con él.
-¡Ey! No peleen niños-
El Chunin le llamo la atención a la Son que solo se cruzo de brazos ante la reprimenda.
-Oye, ¿Por qué Caulifla-san esta tan molesta?- en casi un susurro Goku le pregunto a Kale la cual estaba a su lado. -Nii-san no quiso entrenar con ella en la mañana-
Bueno con aquella respuesta, Goku ya comprendió por que su amiga y se puede decir, prima estaba con esos ánimos.
Después de aquello, todos lentamente fueron entrando a la academia, para posteriormente guiarse a sus respectivos salones, una vez en uno de estos las presentaciones comenzaron, siendo que primero de los tres Son, Goku fue el llamado a presentarse ante la clase, con pena y rascando su nuca el pequeño se encamino hasta quedar en frente de esta, mirando a cada uno de los niños que estaban en el aula, así como que volteo a ver a su profesor que con una sonrisa le pedía que procediera a presentarse.
-Hola, mi nombre es Goku… Pertenezco al clan Son…-
-Muy bien, Goku y cuéntanos, ¿Cuál es tu nindo, tu sueño?-
-¡Mi sueño es ser el ninja más fuerte del mundo y pelear contra los guerreros más poderosos para de ese modo seguir siendo fuerte, muy fuerte!- a hora esbozando una sonrisa confiada el azabache revelaba, haciendo reír un poco a toda la clase, siendo que sus dos primas también reían por lo que este había dicho.
-Primero deberás superarme a mi enano- Caulifla decía para sí misma desde su lugar, teniendo en su rostro una sonrisa retadora, pues tenía una especie de rivalidad con su primo Son.
-Bien, Goku puedes sentarte en tu lugar…- indicándole el profesor, hizo que el pequeño Son caminara hasta la hilera de bancas que estaba compartiendo con Caulifla y Kale. -La niña que está al lado de Goku, por favor preséntese-
Con poso lento, una sonrisa completamente arrogante y una mirada igual de confianzuda, Caulifla llego al frente, mirando a cada uno de los niños y niñas que habían en el recinto.
-Soy Caulifla y también soy del clan Son… ¡Sera mejor que no se metan en mi camino o lo lamentaran…!- apuntando con uno de sus dedos retaba a todos los niños y niñas, estaba claro que estos no la molestarían, pues esa chica ya tenía fama de ser muy agresiva e impulsiva. -¡Mi sueño es ser la más poderosa Hokage que ha existido, seré incluso más poderosa que Son Yamoshi, cuando lo sea me tendrán que llamar "Emperadora Caulifla" y pobre del tonto que se ría!- sin borrar su sonrisa, la Son camino de regreso a su lugar, siendo observaba con un poco de miedo por el resto de chico, entre los cuales se contaba aquel muchacho de antes, rubio y de ojos azules.
Después de eso, Kale también se presento, pero dada su naturaleza tímida le costó enormemente llegado a desmayarse en el proceso, después de esto los demás también lo hicieron, hasta que llego el turno de aquel muchacho rubio, el cual con lentitud llego al lugar en donde se suponía debían ponerse para presentarse ante el resto. -Mi nombre es Namikaze Minato, no pertenezco a ningún clan y mi único sueño es convertirme en un buen ninja y velar por toda la gente de esta aldea- fue breve en su presentación, mirando directamente hacia donde estaban Goku, Caulifla y Kale.
-Ese enano me cae mal- recargada en sus brazos, Caulifla comentaba siguiendo con su mirada al rubio que se había acabado de presentar.
-Pero, Caulifla-san a ti todos te caen mal- comento de forma inocentona Goku ganándose una mirada molesta de la chica, haciéndolo retroceder en su lugar. -Tú cállate-
Luego de eso y que se terminaran las presentaciones las clases comenzaban, siendo que a partir de ese momento la situación parecía normal y tranquila.
Bardock junto a un conjunto de veinte ninjas estaban frente a un hombro robusto, con bigote y una mirada igual o mayor de rígida que la del padre de Goku el cual le observaba de forma directa e ininterrumpida.
-La situación es la siguiente: Creemos que las primeras tropas de la roca penetraran por el país de la lluvia… Una unidad de alta élite debe ir a las fronteras entre la lluvia y la roca para comprobar tal información, de acuerdo a Danzo-sama es de vital importancia evitar que esas fuerzas enemigas penetren en la zona…- miro al Son mayor el cual estaba justo en frente de él. -Bardock tú serás quien lidere la unidad, considerando tu elemento luz podrán derrotarlos rápidamente, claro si las hostilidades son inminentes-
Ante esto el padre de Goku asintió para después ver a su también hijo Raditz el cual estaba entre los demás ninjas, como padre estaba preocupado, pues esa sería su primer misión de rango S, extremadamente peligrosa.
-Bien… ¡Pueden retirarse! ¡Y suerte, por la hoja!-
-¡HAI!-
Dieron un gran grito los ninjas, comenzó a dirigirse hacia su misión, Bardock de inmediato se posiciono por delante de la unidad que estaba conformada por la mitad de ninjas que habían en un principio, Raditz de una gran zancada llego al lado de su progenitor, al cual miro por el rabillo de su ojo derecho pero sin detener sus saltos.
-¿Tienes miedo?- le pregunto de repente el Son mayor a su hijo de larga cabellera, el cual ya presentía por que su padre le había preguntado aquello.
-No, ¿Por qué debería tenerlo, padre?-
-¿Tal vez por que esta es tu primer misión en una guerra?- contra preguntaba, a hora volteando a verle y observar las expresiones de sorpresa que su hijo había puesto.
-Como lo acabo de decir, padre. No, no tengo miedo, somos un clan guerrero, estamos preparados para esto y más- con decisión y determinación hablaba el pelinegro, haciendo sonreír un poco a su tan estricto y riguroso padre.
-Así me gusta, Raditz… Tú y Goku son lo más importante para tu madre y para mí y me llega de orgullo escucharte decir esa palabras, no cabe duda eres un Son en toda regla-
-Gracias papá-
Tras mantener ese breve dialogo de padre e hijo continuaron saltando, pues aun les faltaba bastante para llegar al destino de su misión.
Horas después: Puertas de Konoha.
En las puertas de la aldea, el Hokage con un pergamino en mano leía, observando como una mujer pelirroja con una niña también pelirroja llegaban a las puertas de Konoha.
El Hokage camino a su encuentro, siendo que la niña parecía mortificada, asustada por estar en un lugar que no era su hogar. -Buenas tardes, Hokage-sama- la mujer haciendo una reverencia con todo el respeto posible se presento ganándose un asentimiento del hombre con barba en el mentón.
-Es un gusto tenerlas en la aldea, sean bienvenidas, Uzumaki Hikari, Uzumaki Kushina-
-"¿Por qué me trajeron aquí?"- la niña pelirroja pensaba con clara mortificación, apretando su mano a la de su aparente madre, observando con sus ojos azul oscuro la extraña aldea que se presentaba frente a ella.
Espero les haya gustado este capitulo piloto sobre la "idea original" que tenia sobre un croos entre Dragon Ball y Naruto, su amigo SaiyajinSannin se despide deseándoles lo mejor. Hasta luego.
